10. Hambre Y Sueño.
La noche termino de manera apresurada para el grupo de las chicas y el chico, al llegar al departamento todo estaba en silencio y aquel grupo agotado, caminaron tanto por aquella catedral y aún así no la vieron completamente, cada quien fue a su habitación despidiéndose muy agotados. Aquella noche el sueño pudo ganar a todos perdiéndose en lo cálido de sus camas incluso a Rachel quien siempre esperaba a su editor.
Por otro lado, la noche de Arthur fue ardida sin dudas, aquel bar fue casi un lugar perfecto donde pasar todo su tiempo, el detalle de que sirvieran café en el bar lo volvió más increíble de lo que ya era y no fue hasta las dos de la mañana que decidió volver al departamento, no por estar agotado o aburrido, solo ya no soportaba las voces de personas hablando mientras él estaba editando. Eran alrededor de las tres o cuatro de la mañana, el silencio no podía ser más aturdidor de lo que ya era el aire de la noche que lo envolvía en un frío muy despreciable. Las calles tenían aún personas pero no de manera tan abundante como un día cualquiera, al llegar al departamento todo solo fue como si la palabra "Nada" Se edificara, silencio completo, ni siquiera un aroma cálido, nada, todo estaba completamente opaco y en silencioso. Sin prender las luces de la sala camino por esta utilizando sus pies como guía llegando a su sofá, no quería molestar en las habitaciones con la luz de ese lugar. Dejo su bolso aún lado del sofá y se estiró con gran pereza, al sentarse en el sofá sintió algo duro como una esfera entre sus nalgas, cuando se levantó aquello escucho muchos golpes y patadas.
-¿Qué pasa? ¿Qué pasa?, ¿Dónde estoy mierda?.-
Sin saberlo Arthur se había sentado sobre la cara de Isaac quien estaba acostado en el sofá de Arthur, Arthur camino hasta la cocina y prendió la luz, utilizando esta luz ya que no daría tan fuerte al pasillo de los dormitorios.
-Ah, eres tú. Maldición me asustaste... Ufff. - Isaac parecía haberse dormido muy profundamente -¿Qué hora es?.-
-Faltan un par de horas para que amanezca, ¿Qué haces en mí sofá?.-
-Rachel dijo "Hasta que no llegue Arth no duermes conmigo", y me dejó en el sofá. Tengo unas ganas insanas de divorciarme en este momento, bueno. Y ¿dónde estuviste?.-
-En un bar cualquiera, termine todo el trabajo que Rachel me dejo, estoy agotado.-
Arthur se dio vuelta mirando hacia la cocina y reviso en la nevera.
-¿Vas a amanecer o hoy si dormirás?.-
Al escuchar esto Arthur miro a Isaac quién se reclino en el sofá con una sonrisa engreida.
-No se te escapa nada, ¿verdad?.-
- Claro que no, si no fuera así yo no habría pertenecido a la policía.-
-¿Cuántos putos trabajos has tenido?-Una mirada victoriosa de Isaac fue más que suficiente para callarlo -Si, claro que muchos. No, hoy no voy a dormir.- Esto último lo dijo casi cual gran suspiro.
-Rachel se va a enojar si amaneces despierto.-
Arthur apago la luz de la cocina y camino hasta el sofá sentándose junto a Isaac ya más calmado.
-Lo se, ella no lo notará, tranquilo... No me gusta dormir.-
-Es normal que no te guste, me disculpo, soy el culpable de ese trauma.-
-De ese y muchos otros más.-
Una risa algo calmada creció entre ambos,la noche estaba tan silenciosa, ellos estaban hombro con hombro casi como dos amigos ebrios sentados en un banco de la calle bebiendo alcohol.
-Sabes que Foster te patearia en la cara hasta que te duermas si te viera así. ¿No?.-
- Y por eso agradezco que él ya este muerto.-
-Si, si, como digas.- Arthur sintió un leve pinchazo en su brazo por lo cual se movió un poco reposandose en el borde del sofá -Ya duérmete un rato.-
-Eres un hijo de, puta. Tu vas a matarme un día de estos.-
-Por ahora serás como mi ganado, te mantendré vivo aún si es obligado. Yo voy a morir primero que tú, no lo olvides, alumno idiota.-
-(Caí en el sofá casi dormido, pude ver como él se inyectó un poco de lo mismo recostandose en mi hombro)-
-No apegarte a la vida, no buscar la muerte y no mirar a los lados. Parece un maldito credo todo lo que te enseñamos.-
-Ustedes son la peor escoria conocida.-
Isaac reía de gran manera pausada siendo seguido por Arthur, no estaba enojado, solo algo aturdido por aquella droga.
-Me alegro. Buen noche Arth.-
-Igual.-
Isaac callo dormido en las piernas de Arthur y este mismo se quedó dormido recostado completamente en el sofá, ni siquiera Isaac sabía que era aquella droga, solo sabía que dormía y era muy rápida.
No podía creer esto, que te despierten es malo, pero despertar con dolor de cabeza es peor, detesto dormir tan bien y amanecer de esta manera. Maldición. El olor en la habitación cada vez me habría más el apetito, se me estaba haciendo agua la boca, camine al baño algo mareada y me lave los dientes apresurada, ni siquiera un dolor de cabeza me impediría saber que es ese olor.
-Apaga esa luz.- La luz del baño le estaba dando en el rostro a Stefany , sinceramente pensé en dejarla encendida solo para molestarla, pero la apagué ya sin ánimos de discutir.
Al salir de la habitación casi me desmayo de lo encantador que era el olor, ¿qué podría ser?. Ví a Rachel en la cocina y no pude evitar recordar a mi madre, ella hace de todo muy rapido, vi que Rachel me miró directamente y me saludo con su mano, era tan linda con su delantal... Podría volverme bisexual por ella.
-Buen día Elizabeth, ¿qué tal dormiste?.-
-Bien, creo... Me duele un poco la cabeza y. ¿Qué es eso que huele tan bien?.-
-Oh, hice un poco de lasaña, en un rato estará lista... ¿Quieres una pastilla para tu dolor?.-
Camine un poco hasta la cocina y note que en el sofá estaban Arthur y Isaac dormidos en una posición algo... "Poco natural".
-No, n~no. ¿Qué le pasó a estos dos?.-
Pude ver que Rachel rio un poco y se acercó a mi mirando a los dos bobos en el sofá.
-Arthur llegó muy tarde y Isaac lo espero... Debí haber preparado una sopa o algo para Arthur, tal vez se enferme.-
-Creo que sería norma... Auch.- Sentí un gran pinchazo en mi brazo y me aleje de Rachel un poco, ella tenía una pequeña jeringa en su mano - ¿Qué coño...?. -
Un gran peso se hizo sobre mi y un enorme sueño se apoderó de mis párpados, todo se puso algo borroso de un segundo a otro.
-Duerme tranquila princesa, el dolor de cabeza ya se te pasará. Bien, ya se que es esto que tenía Isaac.-
Poco más fue lo que alcance a oír, sentí como ella me atajo con sus manos y me dejó en el suelo, todo se había desaparecido y solo pude soñar que estaba comiendo una gran hamburguesa con mucha carne... Yo solo tenía hambre... Nadie de ellos parece ser normal.
______________
Gracias por leer.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top