Todos los Soldados Arcanos están reunidos en la plaza central del campo de entrenamiento en espera de los superiores y sus instrucciones. Jena junto a los demás, incluyendo a los nuevos, Denathal, Vidia y Won.

La primera en aproximarse a la llegada de Lizari, es Vidia que sale casi corriendo a recibirla.

—¡Lizariii, te estaba esperando! —dice Vidia emocionada.

—¿En serio? —responde Lizari con ternura—. Dime, ¿para que soy buena, preciosura?

—Pues, quiero aprender a usar el arco, ¿me enseñarás?

—Claro que sí. —Le responde mientras caminan hacia donde están los demás, encontrándose con los ojos ámbar que la cautivan.

Denathal no ha quitado su mirada de Lizari, ama la conexión que tiene con su hermana, dándole así, más motivos para querer cuidarla siempre.

—Llegaste, ranita —dice Renfaz alegremente.

—Te estábamos esperando, Liza —menciona Vía

Tián pasa por un lado, haciendo que Lizari se distraiga un momento.

—Chicos, ¿dónde está Tyreesa?

—Pues... —titubea Jena

—Liza, no sabemos nada de ella desde ayer... —menciona Vía.

—¡Y porque no han ido a buscarla!, tengo un presentimiento muy feo —insiste Lizari, preocupada por Tyreesa.

—Calma, no creo que sea tan débil, además no es fácil para ella saber que su padre es el traidor —menciona Clarisa a la ligera.

Lizari no dice más, pero su corazón le dice que no está bien. Jena se acerca y coloca una mano en su hombro derecho.

—Lizari, calma... no va a ocurrir nada. Solo son preocupaciones en vano —dice Jena.

La joven trata de no indagar mas. En ese momento llegan los comandantes de los guerreros, sacerdotes y cazadores, y ahora la nueva comandante de los magos, Diana Brillavientos. 

—Antes que nada, les queremos presentar oficialmente a la Comandante de los Magos, Diana Brillavientos, quien ahora estará a cargo de todos ustedes, los magos arcanos —dice Albany.

—Muchas gracias por la oportunidad, seguiremos avanzando y mejorando juntos —menciona Diana.

Todos miran satisfechos ante la decisión que era mas que obvia. 

—Esta vez tenemos un entrenamiento que postergamos hace unos días, todos síganme —indica la comandante de los Cazadores, quien avanza primero seguido de los demás comandantes y los Soldados Arcanos.

El trayecto de la comandante los guía hasta el campo de lucha, donde los jóvenes se acomodan en las gradas del campo de los guerreros arcanos, en las que también hay asistencia de aldeanos y algunos soldados antiguos; mientras que los superiores se dirigen al centro del lugar.

El campo esta adornado con banderines correspondiente a las clases y al Claro Este, donde ondea la bandera con flor de lis, elemento característico del reino. Un enorme portal en medio del campo, llamando la atención de todos los presentes.

—Como verán, estamos en el campo de lucha de los honorables guerreros —menciona Albany—. Los entrenamientos de hoy, serán por sus grupos ya asignados. 

—Muchachos, pondrán en practica sus habilidades en conjunto, su destreza a la hora de resolver acertijos y de trabajar en equipo. Recuerden que es muy importante su conexión y compatibilidad a la hora del combate —indica el comandante de los guerreros.

—Así a su vez, deben trabajar la paciencia, la calma en momentos de tensión es necesaria, porque en cada batalla la tendrán, así como la imprudencia al actuar sin pensar, deben ser pasivos, calmados. Es fundamental en cada uno de nosotros poseer estas y mas virtudes para lograr tener la victoria —agrega Greta, la comandante de los sacerdotes.

Los jóvenes están atentos a cada consejo y palabra de sus superiores.

—Para añadir y dar paso lo siguiente. Lo que se avecina no es un juego, no es algo que deban tomar a la ligera, deben pensar muy bien en cada movimiento porque cualquier error que tengamos, dará paso a que nuestros enemigos lo aprovechen —menciona Diana, la comandante de los magos—. Cada grupo cuenta con un usuario de cada clase, para que puedan manejar mejor la situación en la que se enfrentan, es por eso que hoy tendremos un entrenamiento por grupos, donde resolverán situaciones y pondrán a prueba su capacidad de razonar.

—La competencia consiste en ingresar a un portal donde encontrarán un laberinto circular que los conducirá a más portales. Estos portales los llevarán a dimensiones en las que deberán obtener tres fragmentos para armar una llave que abrirá una de las puertas que deberán elegir —menciona Albany, mientras unos magos crean una ilusión de una llave en forma de rombo de color verde esmeralda—. Es importante destacar que estas puertas contienen desafíos que deberán enfrentar. Recuerden que la clave está en trabajar en equipo y aplicar todo lo que han aprendido hasta ahora.

Los soldados arcanos están contentos por lo que experimentaran, saben que todo esto tendrá su recompensa y además de ello, experiencia para su puesto como soldados del lugar. 

—Esten muy atentos a todo su alrededor, porque pueden haber infinidades de obstáculos y complicaciones, analicen bien pero sobre todo, sean agiles y rápidos para actuar. Deberán completar este laberinto antes de que el reloj de arena termine. —Sonia explica y prosigue—. Cada decisión que tomen, debe ser por unanimidad, si hay problemas de equipo o por alguna razón se pelean, automáticamente estarán fuera y serán regresados al campo.

La mayoría de los soldados observan de reojo al joven Tián, ya que conocen exactamente como es su compañero. 

Lizari siente mucha alegría, es algo que había escuchado anteriormente de los antiguos soldados y en lo que quería participar. 

—¿Tienen alguna pregunta? —cuestiona Albany.

Via alza la mano

—Comandante, ¿podremos usar nuestras habilidades arcanas?

—Claro que si, joven sacerdotisa. Van a exponer sus habilidades cuando sea necesario.

—Comandante, para estar seguros ¿habrá algún peligro como en el calabozo?

—Es probable, así que tengan mucho cuidado, por eso les decimos que estén atentos —responde la general 

—Muy bien jóvenes, aproxímense todos los grupos al campo de batalla —ordena la comandante Diana.

—Vidia, quédate aquí mientras voy al portal. No hagas travesuras. —Le pide Denathal a su hermana.

La pequeña Venthyr afirma, expectante de lo que están por vivir su hermano y sus amigos.

Los jóvenes bajan del estrado hasta el campo de forma ordenada y por sus grupos. 

—El tiempo para entrar al portal... —dice la comandante Greta, tomando pausa.

Todos están atentos a la voz de inicio.

—empieza... ¡¡Ahora!!

Corren para entrar al portal, antes de eso consiguen escuchar:

—Se me olvidaba decirles, que solo hay cuatro llaves, ¡ups... lo siento! —avisa el comandante Vargaz con una ligera sonrisa macabra.

Los chicos traspasan el portal que los lleva a la entrada del laberinto circular. Caminan hacia la entrada como todos los demás mientras analizan la situación.

—El comandante Vargaz dijo que solo hay cuatro llaves... —menciona Won a los demás.

—A nosotros nos falta Tireesa, va a ser muy rudo sin ella —dice Lizari mientras camina al lado de su amiga Jena.

Denathal va pensativo y vigilando a todo lugar. Llegan a un camino con tres veredas lo cual los hace dudar un poco de cual elegir.

—¿Ahora que dirección deberíamos tomar? —dice el príncipe, mientras se aproxima a los chicos.

—Pienso lo mismo —dice Daener.

—No creo que haya una decisión errada, déjenme ir primero y regreso rápido, solo esperen un momento —dice Denathal, mientras en voz baja conjura Colonia Millar, invocando y convirtiéndose en murciélagos.

 —¡Vaya! ¿El podía hacer eso? Nunca lo había mostrado.

—Aun quedan muchas cosas que te sorprenderán mas —afirma Won.

Los chicos quedan boquiabiertos ante las habilidades del joven venthyr, comprenden lo poderoso que es el mago. Lo que los incentiva a seguir entrenando y volverse aun mas poderosos.