Asintió. Yami había logrado solucionar el malentendido entre padres e hijos. Ahora solo había un problema... Su parte de la familia...

- Aoki~

- ...¿Um~? - Contestó cabeceando.

- Te tocan~ los simples~. Yo~ me encargo~ del resto~

El peli-celeste observó a su madre con pereza.

- ...Um~... - Murmuró tras suspirar - Suerte~. No les golpees~ mucho~

- Um~... No prometo~ nada~. Bye-by~ - Se despidió marchándose.

Bostezó mirando a su al rededor.

- ...Que~ pereza~ - Se quejó viendo pasar a una castaña con un gato en brazos.

~¤~

Shion y Akai:

Se levantó y la tomó del brazo.

- ¡! - Akai se giró hacia él con algo de sorpresa, pero cuando lo vio estaba algo decepcionada.

- Sí~, sí~. Sé~ que no~ soy Shion~

La castaña apretó al gatito entre sus brazos al escuchar ese nombre.

- Um~... No~ se lo~ has dicho~

Negó.

- Um~... Ya~ todo cuadra~

- "Dijo que no le gustaba... No podía decirselo..." - Leyó escrito en una libreta en la mano de la chica.

- Um~... Supongo~ que es normal~ que una madre~ tema decirle~ a su marido~ que quiere criar~ a un niño~ con él~ cuando dijo~ que no lo quería~.

- ¡! - Agachó la cabeza mientras escribía con un claro sonrojo - "No estamos casados. Solo somos amigos"

- Eso~ no se lo digas~ a mamá~ o la tía~ o empezarán~ a organizar una boda~...

Akai solo asintió.

- Um~... - Se estaba aburriendo de todo eso - ¿Y si~ está celoso~ porque le prestas~ más atención~ al pequeño~ que a él~?

- ... - Se quedó unos instantes pensando hasta que decidió escribir algo - "...¿Debería hablar con él?"

Aoki se encogió de hombros como respuesta.

- Haz~ lo que quieras~

La castaña asintió decidida.

- "Gracias. Eres un buen hermano" - Escribió con una sonrisa.

- U-Um~... - Apartó la mirada - Vete~ de una vez~ a encontrarte~ con tu príncipe gato~

Cuando volvió a mirar en su dirección Akai ya estaba corriendo en busca de Shion. Esperaba que decidiera ser padre, así tendría algo de lo que reirse de él.

Caminó con pereza hasta ver a Ikusu acostada en el suelo tristemente.

~¤~

Evan e Ikusu:

Se acercó a la rubia, la cual se encontraba sola en esos momentos.

Al verlo ni siquiera se movió. Podía notarse a kilómetros lo deprimida que estaba.

- Um~... - Acarició su cabeza sin recibir respuesta.

Suspiró y sacó algo de su bolsillo.

Ikusu se tapó las orejas al verlo. Era un pequeño silbato especialmente creado para ella y su padre que Aika le había dado antes.

Aoki se lo llevó a los labios y sopló.

No salía ningún ruido de este, al menos que él escuchara. Pero la expresión de alerta de Ikusu le decía que sí.

- Grrrr... - Escuchó un gruñido diferente a su espalda.

- Um~... - Se giró a verle, Yuuto parecía estar buscando a alguien - No está~ - Respondió haciendo que su atención se centrara en él.

A su lado, Ikusu había vuelto a la posición que tenía antes de que se acercara a ella.

- ... - Yuuto solo la observaba en silencio.

- Deberías disculparte~. A no ser~ que la quieras perder~...

El medio-lobo frunció el ceño. Se notaba que estaba molesto pero no podía amenazarle. No mientras tuviera la apariencia de su madre gracias a las ilusiones.

- Um~... Está bien~. Estoy segura~ de que Ikusu~ será muy feliz~ con Evan~. Quizá tengan~ su propia~ camada de hijos~ Jijiji~

- ¡Ggrrrr! - Gruñó furioso.

Sin embargo al notar la inocente mirada de su hija se detuvo. Toda su vida la había protegido tanto que jamás había dejado que conociera a otras personas, ni si quiera el cómo se había hecho ella.

Yuuto dejó escapar el aire en un suspiro.

- ...Se... Sentir... - Habló con una voz algo grave del desuso.

- ¡Gah! - Exclamó felizmente ella saltando sobre él para empezar a frotar sus mejillas entre si.

- Um~... Yuuto~

Él lo miró aún con su cachorro encima.

- Aún tienes~ que dar~ otra discúlpa~

- ¡! ¡Grr! - Apretó sus dientes de nuevo.

Ikusu se alejó un poco de él con las orejas bajas de nuevo.

El medio-lobo la observó a ella y después a Aoki antes de asentir.

El peli-celeste se alejó al ver como todo volvía a ser como costumbre entre ellos.

- Por poco~... - Suspiró aliviado haciendo desaparecer la ilusión.

Justo en ese momento una de sus primas pasó a su lado buscando algo o a alguien. Ya tenía su siguiente trabajo...

~¤~

Kasumi y Hitomi:

- Um~... Está~ en el tejado~ - Dijo de la nada.

Ella pareció haberle oído ya que se giró rápidamente a verle.

- ¿C-Cómo sabes que...? - Preguntó con un pequeño sonrojo.

- ¿Um~?... Era obvio~

Kasumi se sonrojó más.

- Gracias por la ayuda - Agradeció apunto de marcharse.

- Um~... Deberías estar~ más atenta~ a lo que te dicen~

- ¿A qué te refieres?

- ¿Quién sabe~? Preguntale a ella~

Kasumi asintió aún sin entender nada y se alejó hacia las escaleras.

Aoki bostezó y movió un poco su cabeza esquivando unas tijeras que se habían clavado en la pared a unos centímetros de él.

Genial, ahora tendría que solucionar dos problemas en lugar de uno...

~¤~

Ethan y Yashiro:

Esperó a que el lobo pasara a su lado. Cuando lo hizo, solo tuvo que ponerle la zancadilla para que saliera rodando al igual que el uke del brócoli ¿Cómo se supone había podido escapar tanto tiempo de esos dos?

Tras eso Lechuga Yuno apareció frente a él y segundos después de la pasiva de su hermana traga dulces.

- Por ayudarnos a atrapar a Nico dejaré pasar que acabas de hacerle daño a Kencchi - Se acercó hacia él con su sonrisa de yandere - Pero solo por esta vez...

- Um~... - Contestó monótono, conocía a lolis que daban más miedo que él.

- M-Me duele la cabeza... - Dijo Kenneth acariciando su nuca mareado.

- Eso te pasa por idiota - Le contestó su hermano.

- ...Ethy es cruel...

- ¿Oh~?... Sí que lo es - Secundó Yashiro acercandose a ellos con una sonrisa - No por nada dejó a su novia sola en fin de año.

El de ojos rojos desvió su mirada al piso con culpabilidad.

- ...Tú sabes el por qué

- Oh~... Y te perdono - Dijo haciendo que la mirara con sorpresa - ¿Oh~?... ¿Por qué me miras así? Eres uke no entiendes mucho de esas cosas.

- N-No lo soy - Negó sonrojado.

- Te equivocas~. Aparte Revolt me explicó que había sucedido cuando se lo pregunté. Solo seguía de su parte para molestarte~ - Soltó una risita haciendo que la cara de Ethan hiciera una mezcla entre avergonzado y molesto - ¿Oh~?... ¿Vas a castigarme~? - Preguntó con una sonrisa que intentaba ser inocente aunque fuera todo lo contrario.

El demonio solo se alejó a paso rápido con las orejas rojas. La albina dejó escapar una risita antes de ir tras su novio.

Aoki sabía que ella podía encargarse de sus problemas sola y más si se trataba de su uke. Ahora quedaba la parte más difícil...

~¤~

Souta y Kenneth:

La lechuga tenía rodeado a su sonrojado uke con un brazo mientras que amenazaba al lobo, ahora humano de nuevo, con las mismas tijeras que había esquivado antes Aoki.

- Kenneth... ¿Nico te hizo algo? - Preguntó intentando matar al peli-naranja con la mirada.

- Solo estabamos b-buscando al resto - Contestó Nico con las manos en alto.

- ¿Te he preguntado a ti?

- ... -

- ¿Kenneth?

- ¡D-Dice la verdad! ¡Estaba ayudandole a-a buscar a la banda!

- ¿De verdad?... ¿No mientes para protegerle?

Kenneth tembló asustado ante la mirada del vampiro.

- Um~... Toma~ - Dijo pasándole su cámara al peli-verde.

- ¿? - Le miraron los tres con curiosidad.

- Dale al play~

Era un vídeo donde se podía ver cuando Kenneth le ofrecía su ayuda a Nico para buscar a sus amigos.

- Solo tengo una pregunta más... ¿Qué hacíais cuando llegué?

Los tres se quedaron en silencio.

- Y-Yo... - Empezó a decir Nico.

- Le explicaba~ a Kenneth-san~ cómo ser romántico~ con la persona~ que te gusta~

Este le miró con cara de haber comprendido todo.

- ¿In-Intentabas ayudarme?

- ...Claro - Contestó tratando de sonreir.

- Gracias - Agradeció con una gran sonrisa.

Aoki observó como vampiro y hombre lobo se miraban seriamente entre si.

- ...Nico, siento haberte perseguido ¿Amigos? - Preguntó ofreciendole su mano sonriendo.

- ...¿Cuándo dejamos de serlo? - Respondió devolviendole el gesto.

Se marchó dejándolos. Ya solo quedaban dos...

~¤~

Sya y Sayumi:

Ambas no se encontraban muy lejos de donde estaba él.

- ¿Um~?... ¿La loli~ al fin~ le dijo~ lo que sentía~ a...? - Un arma apuntandole al cuello no le permitió seguir.

- Termina esa frase y te dejo sin garganta Jishishishi~

- Meowp~... - Tragó nervioso - ¿Um~?... ¿Frase~? ¿Qué frase~?

Sya solo rió.

- ¿De qué te ríes plebeya?

- Sya solo pensaba que Sayumi-sama se lleva bien con su hermano.

Se miraron entre ellos. Era cierto que pasaban mucho tiempo juntos por sus bromas y persecuciones aparte de que tenían una relación idéntica a la de sus padres y, quieras o no, de alguna manera lograban entenderse bastante bien.

- Jamás - Contestaron a la vez y apartaron la mirada.

Estaba claro que no lo iban a admitir en voz alta.

- El príncipe caído~ estaba buscandote~

- Jishishishi~ No lo llames así o te cortaré en cachitos

- ¿Um~?... Creía~ que estabas enfadada~ con él~

- ... ... ...Eso no es algo en lo que un plebeyo deba meterse.

- Um~... Como quieras~. Solo espero~ que le digas~ que no amenace~ a tu amiga~

Sya la miró emocionada.

- ¡¿Amiga?! ¡¿Sayumi-sama considera a Sya su amiga?!

Sayumi le dio la espalda para que no pudiera ver su sonrojo.

- ¡Y-Yo n-no he dicho e-eso!

- Te ama~ en secreto~ - Dijo y salió corriendo lo más rápido que pudo.

- ¡¡¡V-Vuelve aquí maldito p-plebeyo!!! ¡¡¡Te serviré d-de aperitivo!!! - La escuchó gritar mientras huía.

Ahora solo le faltaba lo más complicado...

~¤~

Kane y Seishirou:

Subió hacia las habitaciones sabiendo que le encontraría allí.

Antes de abrir se planteó que le diría. Ellos no solían hablar mucho que se diga y el chico era demasiado tsundere para aceptar que se había equivocado con facilidad.

- ¿? - El movimiento del pestillo hizo que saliera de sus pensamientos.

- ...¿Qué haces tú aquí? - Inquirió mirándole con odio.

- Me obligan~ a hacer~ que te disculpes~ - Contestó simplemente.

- ...No lo haré.

- Um~... ¿Ni aunque~ haya estado llorando~?

El más bajo apretó los puños y agachó la cabeza.

- ¡N-No me impor...! - La frase quedó interrumpida por un tambaleo.

Aoki logró atraparlo antes de que cayera. Se había desmayado.

Lo cargó para dejarlo en su cama y volvió a cerrar la puerta.

Ya todo cuadraba. Estaba aún más arisco con Olaf que de costumbre porque no quería que se enfermara por su culpa.

- Vivo rodeado~ de tsunderes~... - Murmuró con desinterés observandole.

Ahora la pregunta era si se lo decía a Olaf. Él era capaz tanto de empeorarlo como de mejorarlo.

Fuera como fuera sería divertido. Iría que robarselo a su padre durante un rato...

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- ¡Seishi-chan! - Exclamó Kane entrando corriendo a la habitación.

- D-Deja de hacer tanto ruido... - Se quejó el pelirrojo sin abrir los ojos.

- Seishi-chan... ¿Por qué no me dijiste que no te encontrabas bien? ¡Podría haberte cuidado!

Seishirou abrió los ojos con pesadez para mirarlo. Aoki tenía razón, había estado llorando por su culpa.

- No hace falta. Estoy bien... Puedes volver con Ain-senpai...

Asintió.

- Iré. Pero solo cuando Seishi-chan esté mejor.

- ¡! - El nombrado sintió que sus mejillas se calentaban, pero ya no sabía si se trataba de la fiebre o por el tonto de Kane.

- Seishi-chan, hoy he vuelto a ver a mi padre ¡Tienes que ponerte bien para que puedas conocerlo! ¡Seguro que le agradas! - Dijo con una sonrisa.

Seishirou lo miró sorprendido y sonrió por un instante. Hasta que se dio cuenta de algo.

- ...Deberías estar con él... Hacía demasiado que no lo veías...

-

Seishi-chan... - Tomó su mano.

- ... -

- Te quiero. Dejame hacer esto, por favor - Pidió suplicante.

Antes de que pudiera darse cuenta unas lágrimas caían por las mejillas del menor.

- ¿S-Seishi-chan? - Le llamó preocupado.

- Gracias... Kane... - Sonrió mientras sus ojos se cerraban.

- ¡¿S-Seishi-chan?!

- ...Solo~ está durmiendo~ por la medicina~ que le he dado~ - Dijo Aoki entrando.

- ¡Gracias por todo lo que has hecho por mí y mis hermanos!

- U-Um~... - Desvió la mirada ruborizado - No~ lo hice~ por que quisiera~ - Se giró y caminó hacia la puerta - Cuida~ de él~. Aunque~ no lo parezca~ que quiere mucho~

- ¡Lo haré! ¡Cuidaré a Seishi-chan siempre! - Exclamó mientras veía como el peli-celeste se marchaba.

~¤~

Aika sonrió por un instante al ver a Aoki durmiendo en las escaleras.

Aún no entendía como él era el único sin sentir nada por nadie ¿Quizá era asexual?... Ahora que lo pensaba a ella también le decían mucho eso hace uno años... Puede que sí que fueran una copia idéntica el uno del otro después de todo~

Apartó esos pensamientos de su cabeza. Ahora tenía que centrarse en cumplir su misión.