Harry miraba a su amiga preocupado, estaba completamente pálida.

― ¿Qué ocurre? ―preguntó

― Es una carta de mis padres ―respondió ― Umbridge nos ha delatado Harry ―lo miró asustada

― Maldita cara de sapo ―masculló molesto ― Anda ábrela, no sabrás si Umbridge te delató si no la lees ―la animó

─ Tienes razón ―suspiró mientras abría aquel sobre amarillento. Desdobló aquel pergamino que estaba doblado en dos partes y la legible letra de su madre apareció en su visión

«Hija:

Te escribo esta carta para decirte que Dolores me ha informado acerca de tus comportamientos en clase. Señorita cuando llegues a casa tendremos una conversación muy seria al respecto.

¿Qué es eso de que estás peleándote como un asqueroso muggle? April perteneces a una de las mejores familias del mundo mágico, la pureza de tu sangre es un honor y tú la estás manchando peleándote como un inservible muggle, pero estás perdonada porque fue para defender a Draco, espero que Severus haya tomado medidas al respecto. Dolores también me notificó que faltaste a su clase por quedarte con Draco, no te reprocharé nada cariño, digo todos lo hemos hecho en nuestra hermosa etapa de estudiantes. Por último me alegra demasiado saber que estés saliendo con Draco, Lucius y Cissy están igual de felices y orgullosos que tu padre y yo.

Nos vemos en navidad cariño y compórtate. Tu padre y yo te amamos.

Emma Rowle de Gallagher.»

― ¿Qué dice? ―preguntó Harry impaciente

― Solo me regañó por lo del partido de Quidditch y me felicitó por estar con Draco, la vieja no nos delató, algo querrá ―murmuró ― Como sea Potter, debo ir a mi Sala Común responderle la carta a mi madre o si no se enfadará ―se levantó del suelo ― Nos vemos luego ―sonrió y comenzó a caminar rumbo al castillo

El mes de Diciembre llegó junto a miles de deberes, mucho frío y nieve. April se encontraba en la Sala Común haciendo la redacción que Snape pidió para su próxima clase.

― Apri eres una buena persona, por favor te lo ruego ―dijo Blaise tironeando infantilmente la túnica de la chica

― Por última vez Zabini ―suspiró cansinamente ― ¡No te haré la puta redacción! ―exclamó ― Ya bastante tengo con la mía que no pienso hacer la tuya ―escribía furiosamente el pergamino

― ¡Pero ayudaste a Draco! ―chilló ― Eso es injusto, seguro que lo ayudaste porque él es rubio albino y yo negro carbón ―dijo indignado y April comenzó a reírse

― ¡Draco hizo su redacción él solo! ―exclamó entre risas

― Pero...

― Ya Zabini deja de mendigar y haz tu tarea tú solo habló Draco que estaba con la vista fija en su tarea de Transformaciones

Theo entró a la sala común a paso apresurado.

― ¿Ya se enteraron lo que pasó? ―preguntó

― Si, April no me quiere hacer la redacción de Pociones ―dijo Blaise y Theo lo miró confundido

― No, iba a decir que Potter y los Weasley se fueron del castillo ―dijo Theo mientras se sentaba en uno de los sofás

― ¡¿Qué?! ―exclamó April con tono de sorpresa

― Si, según escuché de dos de Gryffindor atacaron al Weasley padre en el Ministerio y que Potter lo vio en un sueño ―relató Theo con la vista en la chimenea

― Me estás robando mi lugar como la chusma del grupo ―se burló Blaise

― Que te ayude el calamar gigante con tu redacción de Pociones entonces ―dijo Theo algo molesto

― ¡Era una bromita no te enojes mi bello y buen Theo! ―exclamó el moreno aferrándose al castaño

― ¡Suéltame Blaise! ―se quejó el castaño

April miró su pergamino nerviosa, sabía quién estaba detrás de todo esto y el solo pensarlo hacía que su piel se estremeciera completamente.

¡Hola! Acá un nuevo capítulo, quería agradecerles por todos sus votos y comentarios la verdad que me hacen muy feliz y me motivan a seguir escribiendo, las amo xx