Draco sentía como su corazón se encogía del dolor al verla llorar. Juraba internamente que la persona que había provocado su angustia pagaría y muy caro.

- ¿Qué te pasó linda? -preguntó en un tono suave

April sintió como un leve rubor se situaba en sus pálidas mejillas.

- He peleado con Harry -respondió - Me dijo cosas horribles y yo igual -mordió su labio inferior para contener lo mejor posible sus sollozos

La ira iba acumulándose en el cuerpo de Draco y comenzaba a desear poder golpear a Potter.

- ¡Ese maldito! -exclamó furioso - ¡¿Cómo se atreve a insultarte?! No tiene derecho -bramó

- Déjalo así Draco, no tiene importancia -trató de restarle importancia

- ¡Por supuesto que la tiene! -exclamó

- No quiero empeorar la situación -murmuró - Jamás pensé que diría esto pero gracias por escucharme Draco -besó la mejilla del rubio y se marchó sonrojada dejando al chico igual o más rojo que un tomate.

Harry llegó al Gran Comedor demasiado furioso. Se sentó en la mesa de Gryffindor junto a sus dos mejores amigos que lo miraban interrogantes.

- ¿Sigues molesto por lo que pasó en la clase de Snape? -preguntó Hermione al verlo tan molesto

-No -respondió secamente mientras miraba de reojo la mesa de Slytherin

- ¿Qué ocurrió? -preguntó Ron

- Peleé con April muy mal -respondió

- Eso no me lo esperaba -dijo Hermione

- Yo si -acotó Ron y sus amigos lo quedaron mirando - ¿Qué? Es normal, nunca un Gryffindor se llevará bien con alguien de la casa enemiga por tanto tiempo -se llevó un muslo de pollo a la boca

- Gracias Ron eres muy alentador -masculló algo molesto mirando la mesa de Slytherin

- Deja de mirar hacia la mesa de Slytherin Harry -murmuró una Hermione cansina - No está -dijo

- Tampoco está Malfoy, que coincidencia -dijo Ron con la boca llena

A Harry le dio un revoltijo desagradable en el estómago al pensar que ellos estarían juntos en su Sala Común.

El Gran Comedor se sumió en unos murmullos. Los tres amigos llevaron sus miradas y vieron entrar a April junto a Malfoy que tenía una enorme sonrisa arrogante en su rostro.

- Estos dos terminan juntos -dijo Ron

Harry solo lo miró de mala manera.

Alumnos de quinto curso de Slytherin y Gryffindor, esperaban en el salón de Defensa contra las Artes Oscuras por su nueva profesora.

El bullicio que había en el aula se apagó con una falsa tos «Ejem, Ejem» y fue cuando la profesora Dolores Umbridge se hizo presente. April dio un bufido molesta y Draco, que estaba sentado junto a ella, emitió una risita casi inaudible. Él sabía cuánto detestaba a Umbridge y su fanatismo por el rosa.

- ¡Buenas tardes a todos! -exclamó con una falsa sonrisa y solo algunos, incluida April por obligación, devolvieron el saludo - Así no se saluda a una profesora, queridos. Me gustaría oír «Buenas tardes profesora Umbridge» Empecemos de nuevo, ¡Buenas tardes! -elevó su agudo tono de voz más de lo normal

Los alumnos devolvieron el saludo requerido y Umbridge sonrió satisfecha.

- Ahora, guarden sus varitas y saquen sus plumas por favor -dijo y todos se miraron confundidos ¿Acaso no usarían magia?

Umbridge dio unos pequeños golpes con su varita en el pizarrón y de inmediato en éste apareció escrito «Defensa contra las Artes Oscuras: regreso a los principios básicos»

- Bien, el Ministerio ha considerado que el estudio de esta asignatura ha sido muy irregular, por lo cual hemos diseñado un curso completamente estructurado, que está basado en la teoría y por supuesto el Ministerio lo aprueba -sonrió haciendo que su boca se ensanche - Quiero que abran su ejemplar de Teoría de la magia defensiva en la página número cinco y lean el capítulo uno -tomó asiento mientras los alumnos mascullaban un «Si profesora Umbridge»

- Esta clase es una reverenda mierda -masculló April molesta, Draco rió - No es gracioso Malfoy -lo fulminó con la mirada

- Ya, lo siento pero es que tienes razón esta clase es una mierda -mordió su labio para evitar liberar una risa involuntaria

- Mis queridos April y Draco que sea muy amiga de sus padres no significa que no les llame la atención en clase -dijo Umbridge con un falso tono dulce

Los prefectos de Slytherin asintieron fingiendo que lo sentían y continuaron leyendo el capítulo en silencio.

April observó que Hermione Granger levantaba la mano, intentando llamar la atención de la profesora, que recién dejó de ignorar a la prefecta de Gryffindor cuando todo el curso la miraba.

- ¿Alguna consulta querida? -preguntó la profesora

- Si, es acerca de los objetivos del curso -dijo

- ¿Tu nombre? -preguntó Umbridge

-Hermione Granger -respondió

- Querida, los objetivos del curso están bastantes claros si los lees -sonrió falsamente

- No dice nada acerca de la práctica de hechizos defensivos -dijo y el aula quedó en completo silencio

- Granger, en mi clase no pasará nada que requiera la práctica de dichos hechizos, no serás atacada aquí -la miró fijamente

- Pero si podemos ser atacados fuera de Hogwarts -habló Harry

- Para hablar en mi clase se levanta la mano señor Potter -lo regañó

Harry levantó la mano de mala gana y habló.

- ¿De qué nos va a servir esto? -preguntó de manera tajante - No solo es necesario la teoría, debemos practicar los hechizos, la teoría no nos servirá en la vida real -masculló

- Esto es el colegio no la vida real Potter -respondió algo molesta la profesora

- ¿No tiene que prepararnos para lo que nos espera fuera de Hogwarts? -preguntó

- Nada lo espera fuera del colegio.

- No? -insistió - ¿Acaso no le suena Lord Voldemort? -enarcó una ceja y April sintió un leve estremecimiento al escuchar aquel nombre

- Diez puntos menos para Gryffindor Potter, y todos sabemos que cierto mago tenebroso no ha resucitado -comenzó Umbridge a hablar, April solo quería irse. Escuchar hablar de Voldemort para ella era lo mismo que le lanzaran un Crucio

- ¡Él ha vuelto! -gritó Harry muy molesto -Yo luché contra él ―bramó

- ¡Basta! -exclamó Umbridge - Está castigado Potter.

April se dirigía a su Sala Común completamente agotada. Quería descansar un poco ya que hoy le tocaba patrullar junto a Draco.

Se sentó en el sofá de cuero negro que se encontraba frente a la elegante chimenea y cerró los ojos.

Sintió como el sofá se hundía por el peso de alguien más. Abrió sus ojos y vio a Malfoy mirándola fijamente. Se sonrojó levemente.

- ¿Debemos ir a patrullar ahora? -preguntó somnolienta

- No, eso es en un rato - acomodó un mechón de cabello de la joven - Siento si te desperté, te veías muy linda durmiendo -dijo y April sintió que algo en su estómago comenzaba a surgir mientras se sonrojaba nuevamente.

Perdonen si quedó feo :c