Cuarenta y cinco.

Después de que decidimos que volveríamos a Corea, pasó una semana más en la que arreglamos ciertas cosas. Yo había decidido comprar un apartamento, no iba a volver al otro y anteriormente MinGi y Jen habían ido a sacar mis cosas. Quería tener todo listo para cuando llegara, por lo que Jin y su hermano me ayudaron a conseguir uno. Todo estaba programado para que cuando ya estuviera en Seúl firmara los papeles e inmediatamente me lo entregarían. Seguiríamos viviendo en la casa, pero también me gustaba tener mi propio espacio y más que empezaría las clases en la universidad, aprovechando que el nuevo período iniciaría pronto.

Ellie estaba triste porque nos íbamos, y feliz al mismo tiempo porque nos iríamos mucho mejor de como habíamos llegado. Tratamos de convencerla de irse con nosotras pero sería muy difícil para ella comenzar en un país completamente distinto, pero quedamos en que iría de visita.

El día llegó, sentía mucha nostalgia al igual que EunBi. Ellie y DaMi nos acompañaron al aeropuerto, nos despedimos entre lágrimas y prometiendo que volveríamos en algún momento, aunque DaMi prometió que nos iría a ver.

Nos iríamos de Brasil muy agradecidas con esas dos personas por lo que nos enseñaron, por como nos ayudaron a levantarnos, y con el país por supuesto ya que, por mi parte, siempre lo he considerado mi sitio de escape a pesar de que lo que pude haber pasado hace unos años.

Aterrizamos en Seúl a las diez de la mañana, fue un vuelo un poco agotador y más por las escalas que hicimos pero por fin habíamos llegado. Se supone que JungKook y Jin nos esperarían, eran los únicos enterados de nuestro regreso. EunBi y yo recogimos nuestras maletas, y caminamos hacia la salida.

No tardamos mucho en divisar a los chicos, Monie casi salió corriendo al ver a JungKook y se le subió encima como un koala, éste la recibió muy contento, algunas personas los veían pero ellos estaban ajenos a esto.

Jin me abrazó muy fuerte y me sentí muy bien al tenerlo cerca de nuevo, lo había extrañado muchísimo.

–Me hizo tanta falta tu actitud de mierda, Cassie. –Susurró en medio del abrazo, ocasionando que riera y la inquietud que se había instalado en mi pecho se disipara un poco.

–Lo sé.

Nos separamos y él me observó sonriente.

–Te queda muy bien ese color. –Señaló.

–Gracias, quise probar algo nuevo. –Pasé la mano por los mechones de mi cabello.

Había decidido teñirlo de un castaño claro casi llegando al rubio. Fue idea de Monie ya que ella se lo había teñido, y pensó que sería bueno que yo lo hiciera también. Decían que los cambios eran buenos, yo quería creer en eso.

Nos acercamos a EunBi y JungKook, ella ya se le había quitado de encima y aún así no dejaban de abrazarse. Verlos hizo que algo dentro de mi se removiera, hubiese sido lindo que otra persona también estuviese aquí.

Los cuatro fuimos a comer algo, ya que nosotras teníamos hambre, la comida del avión no nos llenó para nada y EunBi terminó por comerse mis dulces. Luego fuimos a casa para descansar, allí estaban las chicas les habíamos seguido pagando a pesar de que no estuvimos, como al resto.

Descansé unas horas porque me tocaba ir a ver mi nuevo apartamento y quizás llevaría algunas cosas para quedarme en la noche de una vez. Monie y JungKook pasarían el día juntos, ellos tenían que hablar de muchas cosas. Al parecer Jeon le había pedido a Monie que fuera su novia, cuando aún estábamos en Brasil, ella no me había dado tantos detalles del asunto porque quedaron en que lo hablarían cuando regresáramos. Ella lo quería mucho y JungKook estaba enamorado, merecían intentarlo.







Ya había firmado los papeles, el apartamento me gustó, aunque Jin ya me había enviado fotos de éste. Me gustaba la zona, era segura y no estaban tan lejos de casa.

Él me acompañó y ahora me llevaba de nuevo a casa ya que tenía algo que hacer.

–¿Vas a ir a hablar con él, entonces?

–Si, necesito verlo hoy, ya acordamos donde nos encontraríamos –dije, mientras miraba los mensajes en mi celular– no pensé que respondería.

–Todo saldrá bien.

–Espero –suspiré– ¿vas a quedarte conmigo en el apartamento?

–Si quieres, así me cuentas como te fue.

–En realidad necesito contarte muchas cosas, Jinnie.

–¿De como te fue en Brasil?

–Si... y otras cosas.

Yo no le había comentado nada de lo que había pasado en el tiempo que estuve allá, nuestras conversaciones por videollamada no eran tanto sobre mi. Y también quería hablarle sobre los abusos de Anna y lo que ocasionó la muerte de mi padre en aquél tiempo, él era mi mejor amigo y merecía saber sobre esa etapa de mi vida. No me afectaba hablar de ello ahora.

Ya en casa, me arreglé rápidamente no quería llegar tarde.
Me subí al Jeep para ir a mi destino, había extrañado tanto conducir a mi bebé.

Llegué a la cafetería y me di cuenta que él ya me esperaba en una de las mesas de afuera, me sentía algo nerviosa, pero traté de mantener la calma.

YoonGi quitó la vista de su teléfono en cuanto estuve frente a él y simplemente asintió para acomodarse en su silla, así que me senté. Podía leer en su expresión, que estaba intrigado de saber el por qué le había pedido vernos.

–Soy todo oídos, Won. Pedí dos malteadas de chocolate, por cierto, ¿está bien?

–Si, si me gusta el chocolate –sonreí–¿Cómo estás?

–Bien, no me quejo –respondió despreocupado– ¿y tú?

–Bien –me mordí el labio con nerviosismo– sé que estarás preguntándote el por qué te pedí que vinieras y te lo agradezco de hecho, pensé que no lo harías.

Frunció el ceño.

–¿Por qué no lo haría?

–Ya sabes... por lo que pasó. –Respondí, un poco incómoda.

Él soltó una exhalación profunda.

–Yo puedo entender el por qué te fuiste, estabas pasando por algo muy difícil –no me miraba con lástima y estaba bien porque no quería que lo hiciera– no te negaré que me sentí enojado contigo un tiempo, tu forma de irte no fue la mejor, quizás muy impulsiva, además supongo que tuviste razones para no comunicarte, pero no te juzgo... ya estás aquí, así que dime.

Impulsiva. Era gracioso que lo mencionara porque DaMi y yo hablamos de eso tantas veces, era algo que tenía que controlar: mi impulsividad. Yo hacía muchas cosas por impulso, que varias veces me había llevado a cometer errores, como el de ahora. Era necesario que aprendiera a pensar las cosas primero antes de tomar cualquier decisión al verme bajo presión y de ahora en adelante trataría de aplicar eso en mi vida.

–Lo siento –hice una mueca– Yo necesitaba verte para hablar sobre JiMin, siento que contigo puedo hablar mejor de esto –asintió– YoonGi, él me odia ¿verdad?

El rubio se tomó su tiempo para responder, en eso un chico nos trajo las bebidas y ambos le agradecimos.

–Realmente, no lo sé. Te voy a ser completamente sincero, JiMin en el tiempo que no estuviste sufrió mucho por ti, lloró por ti, su ánimo y actitud cambió porque tu ya no estabas, se culpó por muchas cosas... luego llegó JeongYun a su vida y creo que lo ha ayudado, pero no habla de ti.

Mi inseguridad sobre si hablar con él aumentó, suspiré pasándome los dedos por la frente.

–¿Tú lo amas?

No esperé que hiciera esa pregunta, me tomó desprevenida. Me miraba atentamente, quizás tratando de descifrar si en algún momento dudaba.

–Si –admití por primera vez en voz alta, junté mis manos sobre la superficie de la mesa y lo miré– sé que es difícil de creer debido a lo que hice pero... quiero hablar con él y explicarle, aunque también tengo un embrollo en la cabeza porque él está con alguien y no quisiera irrumpir en su vida de nuevo.

–En realidad no sé si él y JeongYun tengan una relación. –¿Cómo era que no lo sabían? Me desesperaba no saber con seguridad si él había decidido seguir con su vida y estar con alguien más. –Cassie, sé que tienes miedo de verlo pero él merece una disculpa.

Y lo sabía, pero mierda... El miedo me hacía una cobarde.

–¿Te digo algo? Llegué a sentirme atraído por ti hace un tiempo. –Abrí los ojos impresionada. ¿Por qué decía eso ahora? –No te emociones, ahora estoy con Shua.

Reí, ante su tono de falsa arrogancia. Hizo que me relajara pero aún seguía muy curiosa por saber.

–¿Por qué me lo dices? Nunca lo imaginé, Min.

–Te lo digo porque lo que me atraía de ti era lo segura que eras, así algo te afectara no lo demostrabas, tu forma de ser directa, si querías algo lo conseguías y sigo admirando eso de ti... Lo que trato de decir es que recupera eso de la antigua Cassie, sé que no eres la misma, sé que a raíz de lo que pasó tus perspectivas cambiaron –bajé la mirada, YoonGi tenía una buena capacidad de analizar a las personas– pienso que, si lo quieres entonces habla con él y explícale, si de verdad lo amas sé sincera y creo que podrá perdonarte.

–¿Por qué me alientas a que lo haga? Es decir es tu amigo y yo... lo he lastimado en varias ocasiones.

–Porque tú y JiMin tenían algo especial, creo que todos podíamos verlo, yo estoy consciente de como sucedieron las cosas en un principio, tu supuesta venganza contra HyunJin –bajé la cabeza, sintiendo vergüenza– terminaste enamorada de él y quien sabe quizás ya sentías algo desde antes, pero tu orgullo no te lo dejaba ver. Lo entiendo porque yo era como tú, le rehuía al amor y mírame, enamorado de una chica de pelo verde y tatuada –alcé la mirada para encontrarlo sonriendo y yo imité su gesto– el punto es que ustedes tenían una conexión que se notaba a simple vista, parecían entenderse bien, no eran solo dos personas pasando el rato y ya, y tu lo sabías en el fondo ¿o me equivoco?

Negué.

–Tú y él pasaron por momentos difíciles juntos y no cualquiera es capaz de apoyar a otro estando roto, sin embargo lo hicieron mutuamente... Por esto creo que deberías intentar arreglarlo.

–Pero yo lo dejé y... –Mi voz tembló por el nudo que se había formado en mi garganta.

–Eso ya no importa, Cassie, lo que importa ahora es que quieres recuperar a JiMin y no desaproveches la oportunidad de hacerlo. Todos cometemos errores, lo importante es reconocerlo... Ustedes de verdad merecen estar juntos después de tantos problemas y malos momentos.

Me quedé pensando en sus palabras y controlando las ganas de llorar. Él al ver esto cambió de tema en un segundo y comenzó a hablarme de lo que había estado haciendo y de como le iba con Shua.

–Tengo una duda –dije cuando ambos llegamos frente a mi auto, ya habíamos terminado con nuestras bebidas y decidimos irnos– ¿Por qué nunca me dijiste que yo te atraía de cierta forma?

–Porque tu solo me veías como un simple amigo o compañero de clases, además Nam te había pedido salir y no sé... –se encogió de hombros– no quería problemas entre nosotros, después me di cuenta del interés de JiMin en ti, pero en eso comencé a pasar tiempo con Shua y entendí que lo que sentía por ti era atracción sin más.

–Ella te tiene loco. –Me burlé, recordando el como hablaba de Shua, su expresión entera cambiaba sin darse cuenta. Y me alegraba por él, desde que me acompañó a la tienda de tatuajes aquella vez y vi su interacción, estaba segura de que ellos terminarían en algo.

–Si. –Se rascó la nuca, luciendo apenado de repente.

YoonGi era como yo, no era muy expresivo con las personas en general pero se notaba que era otro cuando estaba con ella.

Sonreí y lo abracé a lo que él me correspondió.

–Gracias, Min.

–Dime que harás lo correcto.

–Lo haré, tenlo por seguro.

Al día siguiente iría a hablar con JiMin, aún sentía miedo pero YoonGi me había dicho lo que necesitaba escuchar para poder reordenar mis ideas y tratar de solucionar lo que había hecho.

Sólo esperaba que las cosas salieran bien y pudiéramos darnos otra oportunidad.
















~~~~~~~~~~~

Ahora si, en el capítulo que viene lo que tanto han esperado (me incluyo)...^^

Yoongi apoyando #Parssie desde tiempos inmemorables xd

Espero les haya gustado, gracias por leer💜

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top