008

009

"HIKE"



El día siguiente, mientras Harper intentaba recoger algo del caos en su habitación, Kitty se acercó a ella con una sonrisa que ya reconocía como el inicio de alguna idea que implicaba convencerla de algo.

-Harper, ¿quieres ir conmigo a una caminata? Es del club de aire libre.

Harper arqueó una ceja y la miró con desconfianza.

-¿Caminata? ¿Por qué querría hacer algo tan... extenuante?

Kitty rodó los ojos y se dejó caer en la cama de Harper, apartando un par de libros desordenados.

-Porque es al aire libre. Es una oportunidad de salir de esta habitación y olvidar por un rato a nuestra encantadora compañera.

Harper suspiró, mirando alrededor del caos que las rodeaba.

-No sé, Kitty... no estoy muy segura de que caminar todo el día me vaya a ayudar.

Kitty puso cara de súplica, exagerando el dramatismo como siempre hacía.

-Por favor. ¡Será divertido! Piensa en ello como una distracción. Además, Q está organizándolo, así que seguro todo estará bien preparado.

Harper la miró con los brazos cruzados, tratando de resistir, pero Kitty amplió su sonrisa y puso sus manos juntas en un gesto de súplica.

-Harper, por favor. Me muero por salir un rato y respirar aire fresco...

Finalmente, Harper suspiró y se dejó caer en una silla.

-Está bien, iré. Pero si es aburrido, te juro que te voy a hacer pagar por esto.

Kitty saltó de alegría y le dio un abrazo rápido.

-¡Sabía que dirías que sí! Gracias, Harper, no te vas a arrepentir.

-Espero que no -murmuró Harper, pero no pudo evitar sonreír al verla tan entusiasmada.

La mañana había comenzado fresca y soleada, y el club del Aire Libre estaba listo para emprender su caminata. Harper se estiró, observando a los otros miembros mientras se preparaban, algunos haciendo pequeños movimientos para calentar. Q estaba de pie frente al grupo, hablando con una sonrisa amplia como si estuviera en su elemento.

-La primera regla del Club del Aire Libre es... hablar sobre el Club del Aire Libre -dijo, bromeando con un tono juguetón, para captar la atención de todos-. No es que estemos aburridos, pero ayudaría mucho ahora que algunos participantes se fueron este verano.

La mayoría de los chicos se rieron, mientras otros continuaban estirando. A continuación, Q les lanzó una mirada significativa.

-Y, por favor, recuerden la segunda regla: ¡calentamiento! No quiero que alguien se queje de tener agujetas después, ¿vale?

Mientras Q organizaba a los demás, Harper se preparaba mentalmente para caminar, un tanto indecisa, aún pensando si realmente quería estar allí. Entonces, escuchó una risa detrás de ella.

-¿Qué tenemos aquí? -dijo una voz sarcástica que la hizo volverse rápidamente. Harper suspiró con molestia.

Minho estaba allí, sonriendo con una expresión relajada mientras se acercaba al grupo. Su mirada se detuvo brevemente en Harper, y él inclinó la cabeza con una sonrisa ladeada.

-Vaya, Harper... ¿quién diría que te vería aquí? -comentó en tono burlón, sus ojos brillando con diversión.

Harper hizo una mueca, molestándose al notar lo relajado que se veía él. De manera casi involuntaria, su rostro se iluminó con una expresión de incomodidad mientras sus pensamientos luchaban por no dejar escapar una respuesta menos cortés.

-¿Qué haces aquí? -murmuró Harper, apenas por lo bajo, a propósito para que no la escucharan. Lo último que quería era compartir más tiempo con él.

-Oh, solo vine a unirme al Club del Aire Libre... parece divertido, ¿no? -dijo Minho, manteniendo su tono juguetón. Luego, echó una mirada a los demás participantes, pero sus ojos regresaron a Harper rápidamente.

Kitty, que estaba cerca y ya había escuchado lo suficiente de la conversación, no pudo evitar intervenir.

-No sigas burlándote, Minho, no te hace ver más interesante -dijo Kitty con una sonrisa cansada.

Minho la miró por un momento, antes de responder sin cambiar su actitud:

-¿A mí? ¡Lo siento, Kitty! ¿Estás protegiendo a Harper? Interesante... ya lo veré.

Harper, claramente sintiendo cómo la incomodidad llenaba el aire, masculló para sí misma.

-¿Podríamos caminar ya y dejar de tener esta pequeña charla?

Q se acercó al grupo, tomando la iniciativa, mientras Minho se reía suavemente al ver la incomodidad de Harper.

-¿Listos para caminar o estamos todos ocupados lanzando comentarios sarcásticos? -dijo Q, alzando las manos como si tratara de restarle tensión al ambiente.

Harper suspiró y se unió al grupo de caminantes, lanzando una última mirada hacia Minho que seguía observándola con diversión. Sabía que la caminata se haría más larga de lo que quería, pero al menos podía escapar de la incomodidad momentáneamente.

Durante la caminata, el grupo avanzaba por el sendero rodeado de árboles, y Harper trataba de concentrarse en el paisaje y olvidarse de las tensiones de la mañana. Mientras ella avanzaba, notó que Maddison caminaba justo detrás de Minho, lo que, por un momento, la tranquilizó. Al menos tenía algo de espacio para sí misma.

Pero, como de costumbre, Minho no tardó en empezar a hacer comentarios.

-Harper, ¿estás segura de que te encuentras bien? Te ves un poco incómoda... ¿la caminata no es lo tuyo? -dijo, sonriendo mientras caminaba al lado de ella, casi tropezando con los pasos que ella daba. Aunque estaba detrás de Maddison, se las arreglaba para estar cerca de ella, como si fuera un perro persiguiéndola.

Harper solo soltó un suspiro y apretó la mandíbula, ignorando su presencia. Maddison seguía atrás, metida en una conversación con alguien del grupo, mientras Minho se mantenía a una distancia que solo él consideraba aceptable.

-Vamos, ¿no me vas a responder? -dijo Minho, moviéndose un poco hacia un lado para ponerse justo en el campo de visión de Harper, burlón-. Solo digo, tal vez me perdí en la caminata, y pensé que como conoces el recorrido, podrías ser mi guía. O mejor aún, podríamos ver quién es más rápido subiendo esa colina -añadió, con tono competitivo pero juguetón.

Harper no pudo evitar mirar hacia adelante, y observó que la subida a la colina estaba por delante, lo que claramente indicaba que la conversación con Minho sería aún más larga.

-¿Esa es tu idea de una conversación agradable? -respondió Harper, eligiendo ignorar las provocaciones. Quería simplemente llegar al final de la caminata sin más interrupciones de él.

-Bueno, si te molesto tanto, tal vez podamos cambiar el tema -dijo Minho, con una risa bajo. Observó cómo Harper no reaccionaba y su mirada cambió brevemente hacia Maddison que seguía unos pasos atrás. Aparentemente, encontrar a alguien más para distraerla parecía ser parte de su plan.

No obstante, a pesar de sus intentos de molestarla, Harper logró mantener la calma. Desvió la mirada hacia Kitty, que estaba un poco más adelante, caminando despreocupada y conversando animadamente con algunos del grupo.

Sabía que Maddison estaba allí, detrás de Minho, pero el chico seguía tan determinado en acercarse a ella que Harper ya no podía evitar mostrar signos de frustración. Cada paso hacia la colina se sentía como un recordatorio de que probablemente, Minho jamás dejaría de buscar la forma de hacerle perder la paciencia.

Minho, reconociendo que ella no estaba cayendo en su juego, simplemente se rio para sí mismo, disfrutando de su pequeña victoria. No tardó en recordar que estaba con un grupo de estudiantes que se preparaban para lo que él pensaba que era un desafío divertido, y de paso, tal vez también disfrutaría un poco haciendo a Harper retroceder.

Pero Harper, por su parte, finalmente no le dio más poder. Siguió caminando, lo más rápido posible, deseando que la caminata llegara a su fin pronto.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top