Holis a todos! Espero que disfruten esto :3

Muchas gracias por leer!

Kimetsu no Yaiba no es mio :3

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Capitulo 3

Bien, Douma estaba vivo unica y exclusivamente porque se habia ganado una especie de afecto de parte de Muichiro y sin bien anteriormente le abria valido verga los afectos que cualquiera pueda tener con otros, con el niño habian cosas que se cambiaban y reglas que se rompian.

Aunque Douma si deberia morir, le habia dado ese condenado abanido de que no se queria desprender. Alli iba de nuevo, luchando una batalla perdida contra el abanico condenado - Muichiro, no te digo que lo botes, solo guardalo que puede estorbarte en tu uso de la espada

Umm... No veo que me estorbe y podria serme util! - chirrio el menor tomando el objeto de su cintura, junto a el estaba la vaina y la espada que le habia conseguido para que se defendiera.

Y en que podria serte util un abanico a ti Muichiro? - pregunto ya con frustracion.

Ummm... Douma-nii-sama me mostro su arte demoniaco de sangre y bueno... Es super fuerte! Y usa abanicos - agrego al ultimo como su fuera lo mas importante de todo - y creo que... Un abanico podria serme tan util como una espada!

Kokushibo habria seguido discutiendo sobre el asunto pero su cerebro sufrio una especie de cortocircuito al escuchar el "Nii-sama" al final del nombre de aquel idiota - ... Porque llamas a la segunda luna creciente de forma tan... Familiar?

De Nakime podria aceptarlo, la mujer siempre se quedaba con el niño cuando el estaba ocupado. Douma no tenia vela en este entierro, su tiempo con Muichiro habia sido un terrible error que no se repetira - bueno... El fue... no amable, el no es eso pero... Me cuido y fue divertido y... Me gusto estar con el

Kokushibo no queria, pero mira que los celos podian molestarle (No recuerden su historia con los celos haganle el favor) - no te lo he dicho pero... Yo tambien te llamo de forma especial en mi cabeza y bueno... Yo
.. Solo no se si te gustaria que te llame asi

Ver de pronto a Muichiro extrañamente nervioso y timido le causo una sensacion extraña en su interior, ademas de curiosidad por supuesto - si no me lo dices no puedes saber si me gusta o no

Bueno...  A veces en mi cabeza te llamo... Koku-tou-sama - murmuro en voz baja el menor, aunque de vez en cuando subia la mirada para ver con esperanza al mas grande - digo tu... Me creaste y yo... No se porque pero lo hiciste y eso te hace como un papa... O no?

Solo que Kokushibo habia entrado en un shock peor que antes, sus ojos muy abiertos solo miraban al espacio con una mirada extrañamente ida. No podia creerlo, nunca habia esperado ser llamado de nuevo asi el... No lo merecia, no luego de todo lo que habia hecho, no despues de que habia abandonado a su familia... No de Muichiro al que le habia robado su vida, le habia transformado contra su voluntad y ahora estaba jugando con el esta parodia... Como si mereciera ser querido por este.

Lastima que su mutismo haya sido malinterpretado por el pequeño niño que agacho la mirada con decepcion, primero dio un paso hacia atras... Luego otro hasta que dio la vuelta y salio corriendo sintiendose mal por el rechazo, ya sabia el que haberle llamado asi era un error, la Primera Luna Creciente era demasiado genial como para que un demonio recien nacido como el le llamara de forma tan familiar... Ya bastante que le dejara llamarle con un diminutivo de su nombre.

Kime-nee-sama! - chillo queriendo irse de alli y acurrucarse contra la mujer, escucho el sonido del Biwa y se dejo llevar sin problemas.

Mientras Kokushibo solo habia alcanzado a reaccionar minutos despues de que el menor se habia ido, ya era muy tarde para alcanzarlo y se maldijo por el tiempo que le tomo reaccionar. Si antes se sentia indigno de ser llamado asi ahora se sentia indigno e idiota, era obvio que el menor pensaria que era su culpa, que no le gusto o algo tan idiota como eso.

... Nada tan alejado de la realidad, Kokushibo mas bien se sentia alagado e indigno del afecto... Ahora tocaba convencer al menor de ello.

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Paso algo? - pregunto la mujer luego de un rato, el niño solo habia llegado y se habia acurrucado contra ella sin decir nada.

Muichiro aun no dijo nada, no era que se encontrara llorando o algo por el estilo, no, para nada, ese no era su estilo la verdad... El solo estaba pensando, debia de haber una forma de demostrarle a Kokushibo que era alguien digno, que no solo era un mocoso demonio que habia tomado por alli para protegerlo, como una mascota.

El tambien podia pelear y defenderse, aunque eso debia de demostrarselo. Pero como podria....? - mujer del Biwa, enviame de regreso a...

La mirada de Muichiro se ilumino, alli estaba una posible respuesta.... Akaza, la Luna Creciente tercera seguro no era tan genial como Kokushibo, pero tenia que tener una fuerza importante como para tener el puesto que tenia... Fuerza que necesitaba como para pretender estar con Kokushibo para siempre - tu! Necesito tu ayuda!

Eh? - primero fue una mirada de sorpresa, como se notaba que no habia notado la presencia del niño junto a la mujer, luego llego el ceño fruncido - tu eres el mocoso de la otra vez, a mi ni me molestes

Oye! No, de verdad necesito ayuda tuya! - chillo apurado y saltando para mirar con una mirada brillante al otro, siempre parecia funcionar con Kokushibo - porfavorrrr!

Una gotita aparecio detras de la cabeza del pelirosa que nada mas estaba aqui de paso y ahora quien sabe en que desastre iban a meterlo - y porque rayos iba a ayudarte en algo yo?

Maldito codigo moral personal el que se cargaba, ese mocoso primero era un niño y segundo parecia tan femenino que parecia chica... Y el era incapaz de lastimar a una mujer - porque soy el protegido de Kokushibo, el... Algo de Douma y porque soy Muichiro - gruño no queriendo para nada estar rogando... Aunque si queria y necesitaba ayuda.

Una ceja rosa fue levantada en una expresion de artazgo - Esas no son razones validas para mi mocoso

Y porque quiero ser fuerte, muy fuerte, me ayudas a ser fuerte? - agrego el menor enojado y haciendo pucheros ya.

Voy a probar que tan fuerte eres primero y si pasas la prueba considerare entrenarte - Muichiro solo sonrio y asintio, la verdad le valia poco la expresion malvada del otro, el dolor no le importaba con tal de conseguir lo que queria.

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Tiempo despues....

Tres semanas, tres semanas y contando que no sabia nada de Muichiro. Kokushibo estaba volviendose loco, ya habia volteado y destrozado dos poblados enteros que estaban cerca de donde Muichiro y el habian estado por ultima vez, todo sin encontrar al niño.

Lo que si encontro fue una jodida partida de cazadores, todos habiendo llegado a este lugar gracias a sus matanzas anteriores. Con un jodido Hashira a la cabeza, cosa que le hizo tentarse a matarlos a todos pero se controlo... Y si Muichiro aparecia? No queria encuentros de el con los Hashira's.

Y la gota que derramo el vaso, habia sido enviado a una mision que le tomo dos dias, dos jodidos dias perdidos donde pudo haber encontrado al menor. Ahora estaba de regreso y despues de informar a su maestro fue con Nakime para que la mujer le transportara de regreso a donde estaba antes de toda esta perdida de tiempo - porque Muichiro vino tan afectado hace semanas?

La pregunta lanzada hacia el justo cuando solo iba a pedir transporte le descoloco, pero mas rapido que inmediatamente se encontraba preguntando de vuelta - cuando viste a Muichiro?

Hace un par de semanas me llamo y yo lo traje, parecia extraño y luego Akaza-dono aparecio, no pude escuchar bien la conversa pero Muichiro se fue con el y desde entonces no lo he vuelto a ver - respondio aquella sin entender nada - ha sucedido algo entre Muichiro y usted?

Kokushibo no respondio, solo giro sobre sus talones ya arto de que las Lunas Crecientes se robaran a su.... A Muichiro, ya verian ambos bastardos, les iba a sacar el relleno a punta de madrazos. Estaban muertos, muy muertos ambos! Kokushibo hacia siglos que no se enojaba ante nada, pero ahora mismo de sentia mortalmente furioso.

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Lastima que encontrar a Akaza se habia hecho imposible, no habia encontrado ni rastro de el! Y ahora habia una llamada extraña de su maestro, que se iba a celebrar un evento especial en el Castillo Infinito y tenian que estar presentes todas las lunas, esto era una molestia... Y una ventaja a la vez, veria a Akaza de frente para golpearle hasta que le diga donde rayos estaba Muichiro.

Pronto habia sido transportado al Castillo Infinito y miro a unos ridiculamente alegres Akaza y Douma en un palco elegante, sentados como un par de duques y frente a ellos habia otra poltrona que suponia era suya. Cosa que ignoro a favor de lanzar su intencion de matar contra los dos idiotas que se tensaron levemente antes de girar la cabeza hacia donde estaba.

Oohh! Kokushibo-dono! Un placer volver a verle, me alegra mucho verlo con buena salud! - la ceja de Kokushibo temblo ante la voz molesta de Douma.

Porque estas enojado ahora? - gruño Akaza, momento... Se detuvo alli, ambos no estaba buscando matarse (bueno Akaza haciendo el ridiculo mientras Douma se reia de su desgracia) y parecia extrañamente juntos, como si ambos supieran algo que el no.

Volvio a mirar el lugar, observo que debajo de todo parecia haber una arena y sintio una especie de presentimiento, como si lo que sucederia a continuacion no le iba a gustar para nada - ustedes dos, se puede saber que es todo esto? Para que nos convo...

Se detuvo cuando sintio la presencia de su maestro aparecer, mas arriba de ellos en su lugar privado y selecto. Por primera vez sus palabras no entraron en su cabeza, no le importaron mas que el "Duelo Sangriento" y sus participantes "Kaigaku, el Ex Demon Slayer" contra "Muichiro, El Ex Hashira Mist".

Su corazon iba a colapzar, mas aun cuando miro al niño demonio alli, luciendo mas bien aburrido y desinteresado. Vestido con algo parecido a su propio Kimono de combate, solo que las mangas iban degradas a verde agua como las puntas de sus mechones y en su espalda tenia el Kanji para niebla en un verde fluorescente.

En su cintura la vaina de una espada que le dio una sensacion extraña y junto a ella el insufrible abanico que... No, momento, este no era dorado, si era el mismo abanico que el habia dado el idiota aquel pero... Algo habia cambiado en el, algo extraño que no podia ubicar en este momento.

Volteo a mirar levemente a Akaza y Douma, al instante sintio un escalofrio, ambos idiotas lucian una sonrisa tan satisfecha que era imposible toda esta situacion de mierda no fuera totalmente su culpa (y en su interior se aterro porque Douma y Akaza estaban juntos en algo, Muichiro hacia milagros o tragedias dependiendo del punto de vista que tengan).

Tristemente su maestro estaba alli y no podia hacer una escena, solo podia sentar y ver con estres. No podia interrumpir, esta era una ceremonia casi sagrada para ellos y tenia que ver hasta el final sea cual sea el resultado (y despues matar a Kaigaku, vale verga si a penas se volvian a llenar los espacios de las Lunas Crecientes con su presencia).

El desastre comenzo y el podia sentir cada bello de su cuerpo erizado del nerviosismo, cosa que se incremento al ver que ninguno de los dos se movia. Kaigaku fue el primero en amargarse de la situacion y gruñir contra el otro - oi! Piensas hacer algo ahora mismo o es que estas demasiado asustado para eso!?

Asustado yo? Para nada, es que si comienzo yo no te dejare hacer nada... Por lo que estoy siendo amable en dejarte llegar hasta mi - Kokushibo iba a palmearse la frente, porque Muichiro tenia que ser tan... Frustrante en momentos como estos?

Y si lo que queria era hacer enojar al otro pues funciono, porque Kaigaku libero su espada y cargo contra el menor con pura furia en su rostro. Muichiro aun ni se movio, demonios ni se inmuto mientras Kokushibo estaba que saltaba a destrozar al tipo sin importarle las consecuencias. Kaigaku ya estaba a no mas de un par de metros cuando con calma, casi con condecendencia el mas pequeño llevo su mano al mango de su espada.

Arte Demoniaco Sangriento: Espada de Niebla

Kokushibo solo pudo parpadear con sus seis ojos en cuanto escucho el murmullo que retumbo en toda la sala, fue como una onda de poder que se expandio por todo el lugar y en el momento justo una espada que parecia ser una replica exacta de su antigua espada nichirin estaba deteniendo la del mayor con facilidad.

Sintio que el aire que estaba reteniendo salia de sus pulmones mientras comenzaba a relajarse, quizas estaba siendo idiota y Muichiro podria con esto... Mejor quedaba disfrutarlo y luego medio matar a los dos idiotas detras suyo, porque esta era su idea, estaba seguro.

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Awww hasta aqui llegue!

Muchas gracias por leer :3