Litost
Sentir frio... eso fue suficiente para saber que me esperaba al abrir los ojos.
Estaba en el mismo sillón en el que me había quedado dormido la noche anterior, pero el lugar en el que me encontraba era diferente, el frio me lo demostraba.
No, no abriría los ojos, me niego a hacerlo.
Abrace mis piernas a mi pecho y cerré mis ojos aun con más fuerza, esperando que fuese una pesadilla pero...a quien engañaba esto no era una pesadilla.
Baje los pies lentamente del sillón donde me encontraba, aun sin abrir mis ojos, sintiendo el frio piso.
-No sabia... yo realmente no sabia que me dejarías así- dije con tristeza, mientras abría los ojos y miraba lo que se encontraba a mi alrededor.
Era el mismo cuarto en el que había dormido la noche anterior, todo estaba ahí, la diferencia era el frio... el vacio que había en mi...
Corrí hacia la puerta de salida, trate de abrirla, la golpee, patee, me puse de rodillas, llore, grite y desgarre mi garganta pidiendo auxilio, piedad, tu perdón, perdón por haberlo amado más que a mi mismo... pero no funciono.
Me levante derrotado.
-En realidad... pretendía no saber que me dejarías, pero no creí que fuera tan rápido- dije al caminar lentamente por el cuarto, en una esquina los marcos de nuestras fotos estaban tirados.
Los marcos estaban puestos boca abajo, levante uno por uno, poniéndolos de nuevo en su lugar... cerrando los puños al notar que nuestras fotos habían desaparecido.
-¿Realmente no dejaste nada para mí? – grite frustrado aunque sabía que nadie me escuchaba.
Dormir.
Despertar.
Y vivir en la monotonía de esperar algo que no llegaría.
Los días, se volvieron semanas... semanas que se convirtieron en meses y estos a la vez en años.
Seguía en el mismo lugar, tan miserable, sin poder salir de estas cuatro paredes.
Viviendo de recuerdos.
Llorando por ellos.
Mire mi reflejo en el espejo, mi mirada dulce la que él tanto amaba, había desaparecido, ahora era una mirada triste y dura.
-No podías permitir que los lamentos y las lágrimas permanecieran en ti ¿Verdad? – dije a mi reflejo.
-No, él no podía – una voz conocida respondió mi pregunta.
Gire rápidamente, un cuerpo se materializo en el sillón que me había traído aquí, no era difícil adivinar quién era...
Él estaba sentado ahí, en ese sillón, viendo en la dirección en donde yo me encontraba, mirando sin mirar, sonreí al verlo... él se veía diferente.
-Has cambiado... Jongin - pronuncie su nombre tan dolorosamente, sintiendo como si una espina se clavara en mi.
Una luz me cegó, la puerta que se había cerrado, tiempo atrás de pronto se abrió, dejándome ver mas allá de esas cuatro paredes.
Jongin se levanto elegantemente del sillón y camino hacia ella. Mi instinto apareció y fui detrás de él.
Al salir de aquel cuarto, me encontré en un hermoso jardín...un jardín que conocía a la perfección, Jongin siguió caminando hacia el final del jardín donde se encontraba aquella cabaña donde habíamos creado tantos recuerdos.
Mire de nuevo hacia atrás donde estaba el cuarto que me había albergado por tanto tiempo... estaba desapareciendo.
-Creí que seria feliz si salía de ese frio lugar- dije al viento dándome cuenta que a veces las cosas que mas anhelas no son como las esperabas.
Jongin seguía caminando ignorando mi presencia a pesar de que le llamaba.
No me importo, mi corazón latía fuerte, solo de ver su espalda, sentir su olor y mirar la perfección de su mirada.
-¿Sabes cuánto he extrañado ver tu rostro al despertar? – él no contesto. - ¿Sabes cuanto he esperado por ti?- esta vez trate de tocarlo pero ¿Por qué se sentía tan inalcanzable?
Cruzamos el jardín... Jongin paro sus pasos frente a la puerta de esa cabaña.
Toco tres veces y ese hombre de sonrisa falsa apareció.
Él no menciono una sola palabra, sonrio tomando la mano de Jongin, quien se quedó callado y lo siguió dejando un poco abierta la puerta... lo suficiente para dejarme entrar.
Camine detrás de ellos hasta llegar a la misma habitación de la que había salido, la diferencia... el vacio, él, él chico de mirada desalmada y sonrisa falsa lo habia llenado con algo más.
Mire hacia la esquina donde estaban los marcos vacíos... él, ese secuestrador tenia las fotos.
Jongin no dejaba de mirarlo, mientras él giraba a su alrededor jugando con su cabello, mordiendo sus labios rosados en forma de corazón, seguía siendo hermoso lo notaba mientras se desvestía, su piel pálida comenzaba a relucir en su torso desnudo y Jongin no lo perdía ni un segundo.
Jongin lo detuvo tomando su cintura con fuerza y miro al suelo, su mirada era vacia, mientras el hombre de piel palida seguía sonriendo seduciendo con esos carnosos labios rosas.
Él poso sus manos en el pecho de Jongin, empujándolo para que cayera en la cama que se encontraba detrás de ellos.
Quise acercarme para detener lo que sucedía, pero algo en mi no me permitía hacerlo, yo solo podia estar en la esquina donde se encontraban los recuerdos.
Él puso una rodilla a cada lado de la cadera de Jongin y empezó a desabotonar uno a uno los botones de su camisa.
No entendia ¿Por qué duele tanto?
Las manos de Jongin bajaron los pantalones del otro, la penúltima prenda que cubria el cuerpo del otro dejando ver provocativa ropa interior negra.
-¿Qué haces? tu no usarías ese tipo de ropa- dije apretando los puños, él secuestrador me escucho pero fingió no hacerlo.
Observando los besos apasionados, las risitas que él lanzaba, él miraba a Jongin con deseo enterrando sus uñas en su espalda mientras Jongin besaba su cuello.
-No sigas por favor no lo hagas- grite con desesperación, pero él ignoraba mis palabras.
Yo solo podia observarlos mientras las lagrimas caían por mis mejillas.
Las posiciones habían cambiado ahora era Jongin quien estaba arriba de él hombre de piel palida y labios en forma de corazón, los besos y las caricias de pronto cesaron. Sus sonrisa desapareció al notar que por sus mejillas escurrían lagrimas que no eran suyas, sino de Jongin.
Jongin estaba llorando, tapando su rostro, gritando desgarradoramente "Kyungsoo, Kyungsoo" sin cesar, "Kyungsoo" mi nombre... nuestro nombre.
"Kyungsoo" Jongin lo abrazo con fuerza, aferrándose a ese hombre... ese hombre que me había encerrado en este cuarto.
"¿Por qué haces esto?" pregunto con dolor mientras tomaba su rostro entre sus manos con ¿amor?, él no respondió pero yo lo hice en su lugar.
-Tu dijiste que no nos buscarías por amor- mis lagrimas caian fuertemente, recordando la razón por la que la persona que tenia Jongin apresado entre sus brazos me habia encerrado en un cuarto frio.
"¿Yo te hice esto?" Jongin miro hacia donde yo estaba, por un segundo crei que él podia verme pero seria absurdo, yo solo era los sentimientos que Kyungsoo quería desaparecer.
"¿Podriamos volver a ser como antes?" más que una pregunta era una súplica,
"Responde, por favor"
-No – ambos contestamos de manera unisonara.
Jongin, miro a Kyungsoo con dolor y me pregunte quien se sentía peor, se miraron por segundos que parecían eternos en los cuales finalmente, Jongin se levanto aun con lagrimas en los ojos y empezo a vestirse, su mirada seguía vacia.
Yo quien lo habia amado estaba frente a él, pero no lo noto, mi cuerpo estaba congelado, era incapaz de alejarme de Jongin.
-Ahhhhh- grite al sentir como Jongin a travesaba mi cuerpo causándome un fuerte dolor en el pecho, caí de rodillas y toque en la fuente de dolor, al ver mis manos note que en ellas habia sangre.
-No volveré, lo siento- dijo Jongin en la puerta, sin mirar hacia atrás.
Ese hombre, aquel del que habia sido parte, me miraba con tristeza mientras una lagrima caia por su rostro.
-Lo siento- me dijo a secas mientras me veía desvanecer– tenía que matarte para dejarlo ir...
El hombre del que habia sido parte se empezó a vestir y salió de la habitación sin mirar atrás como lo habia hecho Jongin.
Dejándome solo...
Mis ojos pesaban cada vez más, sentí unos brazos que rodeaban mi cuerpo, un poco de calor en medio de tanto frio, mire a la persona que lo hacía, él también lloraba, su pecho también sangraba.
-Al parecer moriremos juntos, Kyungsoo- dijo en tono burlón, y yo reí tristemente, mire en sus ojos los restos de un amor que estaba por desaparecer.
-Esperabaque no lo supieras... Jongin.
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Espero lo disfrutaran, esto es un oneshot que encontre entre carpetas, lo publique hace años, pero lo vuelvo a subir jajajajaja, si alguien tiene dudas, quienes mueren son los sentimientos del Kaisoo del uno por el otro, mientras Kyungsoo y Jongin siguen sus vidas.
En cuanto al nombre del oneshot, internet nos dice que Lítost es una palabra checa que no tiene traducción, es una mezcla de tristeza, autocompasión, nostalgia, humillación.
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