Etéreo: algo delicado y perfecto pero a la vez sutil y sublime 

Soobin andaba pensando, no tenía otra cama para que Beomgyu durmiese, así que decidió dormir en el sofá y que Beomgyu dormiría en su cama

-toma, pedí comida hoy- Soobin sonrió entregándole a Beomgyu un taper de plástico donde venía la comida que había comprado

-¿e-ésto es para mi?- nunca lo habían tratado tan bien

-claro que si, ten- le entregó unos palillos

-no sé cómo agradecerle, Amo- Soobin era tan amable como ninguno de sus anteriores dueños

-no tienes que hacerlo- acarició los cabellos de Beomgyu -¿cuándo es tu cumpleaños? Dijiste que estaba cerca-

-en tres días- normalmente sus anteriores dueños no hacían nada por su cumpleaños, así que ya estaba acostumbrado

-oh...- no sabía que regalo comprarle, obviamente, no lo conocía

-gracias por la comida una vez más, Amo- para él era demasiada, solía comer una cuarta parte de eso

-no lo agradezcas, solo come- se sentó a su lado empezando a comer junto con Beomgyu

No pasaron ni 5 minutos hasta que Beomgyu paró, sentía que si comía más, algo malo pasaría

-¿ya no tienes hambre?- pero si Beomgyu estaba demasiado delgado

-n-no es eso...- claro que tenía hambre, pero también tenía miedo

-hey, puedes comer un poco más, no te voy a hacer nada- su sonrisa lo tranquilizó un poco

Beomgyu sonrió levemente y comió un poco más, casi acabando el plato

-e-estoy lleno... perdone por no acabarlo, lo siento, pero--

-no te disculpes- nuevamente esa sonrisa -guardaré la comida que no terminaste y cuando tengas hambre puedes comerlo-

-muchas gracias- antes no pasaba ni un día sin ser golpeado, ahora alguien se la pasaba sonriendole para que no tenga miedo, se sentía tan afortunado

-tranquilo- se levantó y fue a guardar los tapers aún con comida, se paró a un lado de Beomgyu -ya es hora de dormir, mañana tengo clases algo temprano, así que no te asustes si no estoy cuando despiertes ¿si?-

-está bien- su voz era tenue y suave, tan cohibida, se levantó de donde estaba pues Soobin dijo "hora de dormir" así que simplemente se sentó en el suelo y se hizo bolita recostándose en este, se volvió a transformar en ese pequeño gatito café e intentó conciliar el sueño

-¿qué haces?- Soobin se dirigió a donde Beomgyu estaba y lo levantó en brazos, lo dejó en la cama, cubierto por las sábanas que yacían en esta

Beomgyu abrió sus ojitos y volvió a su forma humana -dijo usted que era hora de dormir-

-así es, vuelve a ponerte esto, yo dormiré en el sofá hasta conseguir otra cama para ti- revolvió sus cabellos mientras le entregaba la ropa que antes llevaba

-¿está seguro? No tiene que hacer esto, estoy realmente bi--

-estoy seguro- una sonrisa más es lo que ofreció antes de decir "buenas noches" y salir de aquella habitación dejando una pequeña luz de noche encendida

-gracias- era tan bueno que no parecía real

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Soobin despertó algo confundido, no parecía que el estuviese durmiendo en el sofá como anoche, se sentía mullido y además parecía que tenía una almohada y de paso se sentía mas cálido de lo normal y no el frío que sentía cada mañana, sentía un delgado cuerpo entre sus brazos, entonces recordó a ese jovencito que se alojaba en su casa por protección

Abrió sus ojos y vio a Beomgyu descansando plácidamente entre sus brazos, se preguntó

¿Cómo alguien le puede hacer daño a alguien tan etéreo?

Pero los pensamientos acerca de eso desaparecieron por la insaciante duda del cómo había llegado ahí, se supone que durmió en el sofá

-Buen día, Amo- Beomgyu se separó del cuerpo de Soobin, para que así su mayor tuviera "espacio personal"

-Buenos días... Beomgyu.. ¿me puedes decir cómo llegué aquí?- 

-¿no lo recuerda? usted se levantó del sofá a eso de las 2 de la mañana y se vino a dormir aquí diciendo que tenía frío, yo le dije que puedo dormir en el sofá pero usted no me dejó, se aferró a mi, me dio miedo, me recordó a mis anteriores Amos cuando intentaban hacerme algo y se acostaban a mi lado- su rostro era algo neutral, pero sus palabras eran las que demostraban todos esos recuerdos tan traumáticos que tenía 

-lo siento, por favor discúlpame, no quise hacerlo, tampoco quise que me tengas miedo y mucho menos que recuerdes a tus anteriores Amos, realmente lo siento- se sentía terrible ¿cómo pudo hacerle eso? se supone que lo está protegiendo, no que le causara mas problemas

-pare de disculparse, yo soy el que debería estar haciéndolo, después de todo usted es mi nuevo Amo y tengo que hacer lo que usted me ordene-

-¿qué? no- Soobin estaba preocupado por la forma de pensar del jovencito delante suyo -no siempre tienes que hacerme caso, solo cuando tú quieras, no soy tu Amo, soy tu... tu amigo-

-desde niño  se me prohibió tener amigos, así que usted es mi Amo- 

-no tienes que hacer caso a todo lo que te digan, también eres una persona, también tienes opinión y sentimientos, tienes derecho a expresar ambos, no pares de hacerlo aunque otros tapen tu boca, dime lo que te gusta, lo que no te gusta, tu color favorito, tu música favorita, qué estilo de vestir es el que te gusta más, quiero saber-

Soobin se sorprendió que cuando vio el rostro de Beomgyu éste estaba lleno de lágrimas corriendo por sus mejillas

-D-Dios... no quería hacerte llorar, lo lamento- limpió sus lágrimas con la manga de la sudadera que llevaba

-lo lamento.. ¿se me permite llorar?- temblaba levemente aunque las lágrimas no paraban

-claro que si- estaba dispuesto a golpear miles de veces a las personas que lo dañaron para que Beomgyu piense que tiene que pedir permiso para todo y no se considera a si mismo como una persona con derecho a voto y palabra -no tienes que preguntarlo, llora mientras tengas una buena razón para hacerlo- suspiró sin saber qué hacer

Sonrió una vez más, Beomgyu no pensó que una simple sonrisa pueda calmarlo tan fácilmente, pero al parecer si era posible

-ahora ¿puedes decirme las cosas que te gustan?- de alguna manera las lágrimas en los ojos de Beomgyu volvieron, tan rápido como se fueron

-no las tengo... no sé exactamente qué es lo que me gusta y que no me gusta, no lo sé, lo siento- miraba los ojos de Soobin aunque sus propios ojos no paraban de llorar

-no tienes que disculparte ¿si?- acarició el cabello de Beomfyu -todo está bien a partir de ahora, descubriremos las cosas que te gustan y las que no te gustan, tenemos mucho tiempo para eso- lo abrazó suavemente -no tienes que sentirte asustado a mi lado, nunca te voy a hacer nada malo, así que no me tengas miedo-

Beomgyu pudo haberle creido, pero sus anteriores Amos decían lo mismo y rompían la promesa uno o dos días después

-gracias- fué lo único que dijo, ilucionarse es malo, demasiado y es aún peor cuando tienes un pasado como el de Beomgyu

-no hay de qué- le sonrió nuevamente, como si le estuviera diciendo a Beomgyu que puede confiar en él, como si le estuviera pidiendo que confíe

Le devolvió la sonrisa, un tanto cohibido por el miedo de que todo esto no séa real y séa solo producto de su imaginación, como muchos de sus sueños

Pero al ver los ojos de Soobin... se sentía no tan asustado, sentía que podía intentar ser él mismo sin que nadie le regañase por eso

Sentía que podía tener un poco, un poquito, un gramo de esperanzas de tener la oportunidad de ser feliz, de sonreir sin miedo

Cami~