-¿Aun me amas?- logro preguntar a través de sus suaves sollozos

--¿Alguna ves me has amado? o solo fui parte del trato con mi madre--

no hubo momento mas doloroso en mi vida, le estaba rompiendo el corazón a pedazos al único amor de mi vida, pero había hecho una promesa y no podía romperla, y con todo el dolor de mi alma tuve que mentir..

-¡Jamas te eh amado y jamas lo haré, esto solo era parte del plan, t-tu no significas nada para mi!-

Tuve que voltear y ocultar mi rostro, si la seguía viendo llorar no podría seguir  y me derrumbaría a su lado, pero por el bien de ambas debía seguir, con todas mis fuerzas dije mis ultimas palabras 

-Lo siento Sun-

Y me fui de ahí como una cobarde, como lo que soy, una basura, mi celular vibro y con furia abrí el mensaje sabia de quien era y me odiaba totalmente por haber caído en sus garras.

--Bien hecho!, ahora debes irte---

 No aguante mas y corrí al auto para soltar toda la rabia contenida sobre el volante, era un día lluvioso así que mis quejidos y llanto se confundían con la lluvia, que había hecho, había perdido al amor de mi vida y todo por mis estupideces, pero ya no había vuelta atrás, era mejor así, ella estaría bien y yo, yo viviría tan solo por verla feliz, me había asegurado de eso, todo estaría bien eso me lo había prometido el..

-¡Abuelo, no sabes cuanto te odio!- y me odio a mi misma por no saber protegerte, --"Sun perdóname, perdóname".--

*4 horas después*

-"Pasajeros con destino a Roma, vuelo 422, favor de abordar  en el anden # 4"-

--¿Así que te iras eh? y no hay nada que pueda evitarlo--

-Lo siento tanto Whasa, se que te dejare atrás y lo lamento, ademas la única persona que realmente podría detenerme, debe odiarme con todas sus fuerzas en este momento, así que no!, no hay poder humano que me detenga aquí, volveré a visitarte y tu me visitaras, jamas perderemos contacto, lo prometo-

-S-solo por favor cuídate Byul e intenta comenzar de nuevo y ser feliz, se que sera difícil, pero no hay peor intento que el que no se hace no, ademas ya no tienes nada que perder.-

-Tienes razón yo ya eh perdido todo, tratare por lo menos de vivir. me tengo que ir-

Me detuve para darle un abrazo y un beso, las lagrimas ya cubrían las mejillas de ambas, esto iba a ser mas difícil de lo que pensé, así que lo hice rápido, me aleje de ella y me subí al avión, con destino a un lugar que sin ella no seria vida, pero por lo menos me mantendría ocupada.

-somos muy jóvenes aun, ella aprenderé a amar a alguien mas y yo seré feliz por ella.-

El avión despegaba, así que cerré los ojos y me deje consumir por el sueño.