El portal se abre, y Lincoln sale al nuevo lugar, pero para su mala suerte, estaba en el sitio menos indicado: la mansión del profesor Charles Xavier, la escuela para mutantes. Lincoln reconoce el lugar de inmediato. Sabía que Juggernaut, el hermano de Charles Xavier, había sido asesinado por él en una pelea anterior. Cuando Lincoln llegó a la ciudad, su intención inicial fue pedir ayuda a los mutantes para investigar más sobre los simbiontes y el Anti-Venom, deseando entender el origen de estas criaturas. Quería saber si los simbiontes representarían una amenaza para la humanidad y si su propio simbionte sería capaz de enfrentarlos en caso de un ataque masivo.

Sin embargo, nunca recibió respuesta de ninguno de los mutantes que buscó, ni siquiera del más inteligente de ellos. Todo cambió el día que mató a Juggernaut. A pesar de saber en qué clase de monstruo se había convertido su hermano, el profesor Xavier aún lo quería, y Lincoln decidió mantenerse lo más alejado posible del profesor para evitar un conflicto.

Pero ahora las circunstancias eran diferentes. Los superhéroes estaban en grave peligro debido al ataque del Duende Verde, y aunque la mansión parecía no estar bajo ataque en ese momento, sabía que los robots no tardarían en llegar. Sin tiempo que perder, corrió hacia la mansión y abrió las puertas. Justo cuando lo hacía, su sentido "simbio-arácnido" se activó, alertándolo del peligro. Antes de que pudiera reaccionar, fue lanzado fuera de la mansión por una figura que se movía a una velocidad increíble.

Antes de darse cuenta, Lincoln fue llevado varios metros lejos de la mansión. Sin embargo, utilizando las garras de su simbionte, se aferró al suelo, reduciendo la velocidad del velocista hasta que ambos cayeron al suelo. Quicksilver se levantó rápidamente e intentó llevarse a Lincoln de nuevo, pero esta vez Anti-Venom lo atrapó, levantándolo del suelo para evitar que escapara. Quicksilver intentó zafarse, pero al encontrarse suspendido a pocos pies del suelo, comprendió que no tenía escapatoria. Cuando finalmente reconoció a Lincoln, dejó de luchar.

Anti-Venom, al darse cuenta de que Quicksilver se había calmado, lo soltó y transformó su simbionte en un traje de Spider-Man.

Anti-Venom (AV): ¿Por qué me atacas, maldito idiota? -dijo con enojo.

Quicksilver: Lo lamento, no sabía que eras tú... pensé que eras uno de esos estúpidos duende-bots.

AV: ¿Ya estuvieron aquí? -preguntó alarmado.

Quicksilver: Sí... todo pasó muy rápido.

Lincoln, aún sorprendido por lo que acababa de suceder, miró a Quicksilver con preocupación.

AV: ¿Qué demonios pasó aquí? ¿Dónde están todos los mutantes? -preguntó, tratando de ocultar la angustia en su voz.

Quicksilver bajó la mirada por un momento antes de responder.

Quicksilver: No estaba en la mansión cuando todo pasó. Estaba en el centro de la ciudad, ocupado con otra misión. Escuché sobre los Duende Bots, los robots del Duende Verde, causando caos. Corrí lo más rápido que pude para llegar aquí, pero... ya era demasiado tarde.

AV: ¿Qué viste cuando llegaste?

Quicksilver: -continuó con un tono más sombrío- Lo último que vi fue a Logan... se lo llevaban. No pude hacer nada. Todo pasó tan rápido.

Lincoln sintió una mezcla de rabia y desesperación al escuchar eso. Wolverine era uno de los pocos mutantes que podía resistir casi cualquier cosa, y si lo habían capturado, eso solo significaba que las cosas eran mucho peores de lo que imaginaba.

AV: Esto no es bueno... si se llevaron a Logan, entonces nadie está a salvo. Tenemos que encontrar a los demás antes de que sea demasiado tarde.

Quicksilver asintió, su habitual arrogancia reemplazada por una seriedad que rara vez mostraba.

Quicksilver: Tienes razón. Pero necesitamos un plan. No podemos simplemente lanzarnos contra ellos sin saber a qué nos enfrentamos.

AV: -reflexionando- Necesitamos más información. Primero, debemos asegurarnos de que la mansión esté segura y buscar cualquier pista que los otros hayan dejado. Después de eso, encontraremos a Logan y al resto.

Quicksilver: ¡Bien! No tenemos tiempo que perder.

Lincoln apenas tuvo tiempo de procesar la situación antes de que un sonido metálico reverberara por el aire. El suelo bajo sus pies vibró, y el cielo se oscureció cuando una escuadra de Duende Bots descendió en picado sobre ellos. Los ojos de los robots brillaban en un rojo intenso, y sus bocas mecánicas se abrieron en sonrisas malvadas mientras se preparaban para atacar.

Lincoln sintió cómo el simbionte Anti-Venom reaccionaba de inmediato, cubriéndolo en una armadura blanca con detalles negros, adaptándose para protegerlo del inminente ataque. Su sentido arácnido simbiote potenciado le alertó de los disparos de energía que venían hacia él. Con la velocidad que le proporcionaba el simbionte, Lincoln se movió ágilmente, evitando los rayos, y respondió con una ráfaga de telarañas que brotaron de sus manos. Estas telarañas no eran comunes; cargadas con energía curativa, desestabilizaban los sistemas electrónicos de los Duende Bots, dejándolos inoperativos al contacto.

Quicksilver se lanzó a la batalla, convirtiéndose en un borrón de velocidad mientras golpeaba a los Duende Bots uno tras otro. Sin embargo, la cantidad de enemigos era abrumadora, y por cada robot que caía, más aparecían.

Lincoln, usando las habilidades regenerativas y purificadoras de Anti-Venom, permitió que el simbionte absorbiera parte de la energía de los ataques entrantes, neutralizando los venenos y toxinas que los Duende Bots pudieran haber lanzado. Con un movimiento fluido, Anti-Venom expandió sus tentáculos blancos, golpeando a los robots y descargando ráfagas de energía curativa. Estos ataques no solo dañaban a los robots, sino que los desmantelaban desde adentro, sobrecargando sus sistemas y dejándolos inutilizados en el suelo.

AV: ¡Tenemos que salir de aquí antes de que destruyan la mansión! -exclamó Lincoln mientras continuaba disparando telarañas cargadas de energía purificadora, atrapando a varios Duende Bots y desintegrando sus sistemas de soporte.

Quicksilver esquivó hábilmente un rayo de energía, regresando a tiempo para mirar a Lincoln con preocupación.

Quicksilver: ¡Son demasiados! ¡No podemos seguir aquí! -gritó mientras desarmaba a un robot con un golpe rápido, dejando caer sus componentes al suelo.

Lincoln sabía que Quicksilver tenía razón. Usando su habilidad para generar campos de energía purificadora, Anti-Venom creó una barrera temporal alrededor de ellos, absorbiendo los ataques entrantes mientras Lincoln intentaba contactar a Doctor Strange. La presión de los Duende Bots era implacable, y el campo comenzaba a mostrar signos de desgaste.

AV: ¡Necesitamos llegar a un lugar seguro para llamar a Strange! -dijo Lincoln mientras lanzaba otra descarga de energía curativa, derribando a un grupo de robots que intentaban rodearlos.

Quicksilver estaba en constante movimiento, desorientando a los Duende Bots con su velocidad, pero incluso él comenzaba a sentir el desgaste de la batalla. Sabía que no podían seguir así mucho tiempo.

Quicksilver: ¡Esto no va a durar mucho más! ¡Haz esa llamada ya! -gritó mientras un robot volaba en pedazos detrás de él.

En ese instante, un Duende Bot que había logrado evadir los ataques de Anti-Venom se lanzó a toda velocidad hacia Quicksilver, extendiendo sus garras metálicas para capturarlo. Quicksilver estaba demasiado ocupado esquivando los ataques de otros robots para darse cuenta del peligro inminente que se cernía sobre él.

Justo cuando el Duende Bot estaba a punto de atrapar a Quicksilver, una cuchilla en forma de media luna atravesó el aire con una velocidad mortal, destrozando la cabeza del robot en un solo golpe. Chispas volaron cuando el metal se partió, y el cuerpo inerte del robot cayó pesadamente al suelo, ya sin vida. La cuchilla, brillando bajo la luz de la luna, voló de regreso hacia su dueño con un silbido agudo, encontrando su camino de regreso a la mano de un hombre envuelto en sombras.

Lincoln y Quicksilver se volvieron sorprendidos para ver quién había intervenido en el último segundo. De entre las sombras, un imponente hombre envuelto en un traje blanco y dorado emergió con una mirada decidida en su rostro. Su capa ondeaba con el viento, y en su mano firme sostenía la cuchilla en forma de media luna que acababa de salvar a Quicksilver.

Era Moon Knight.

Moon Knight: Parece que llegué justo a tiempo. -dijo con voz firme mientras observaba el campo de batalla con ojos entrenados, preparados para cualquier otro ataque.

Lincoln, aún cubierto por el simbionte de Anti-Venom, asintió con alivio.

AV: Gracias por la ayuda. Las cosas se estaban poniendo un poco complicadas. -dijo, aunque su tono mostraba que estaba preparado para seguir luchando.

Moon Knight no perdió tiempo. Con un movimiento rápido, arrojó otra cuchilla en forma de media luna hacia un grupo de Duende Bots que intentaban rodearlos, destruyéndolos con precisión letal.

Moon Knight: No hay problema. Pero no podemos quedarnos aquí. Esos robots siguen viniendo, y tenemos que ponernos a salvo. ¿Qué está pasando aquí? -preguntó mientras preparaba otra cuchilla en caso de que los Duende Bots volvieran a atacar.

Quicksilver, aún algo impresionado por la aparición de Moon Knight, se recuperó rápidamente.

Quicksilver: El Duende Verde ha lanzado un ataque masivo. Ha secuestrado a varios héroes, y estos robots están por todas partes. Estamos tratando de contactar a Doctor Strange para que nos saque de aquí.

Moon Knight asintió, sus ojos bajo la máscara centelleando con determinación.

Moon Knight: Entonces no hay tiempo que perder. Voy a ayudar a mantener a raya a estos robots mientras haces esa llamada. No te preocupes, Anti-Venom. No dejaré que se acerquen a ninguno de ustedes.

Con eso, Moon Knight se lanzó de nuevo a la batalla, sus movimientos rápidos y letales. Cada cuchilla que lanzaba encontraba su objetivo con precisión, destrozando a los Duende Bots antes de que pudieran siquiera acercarse.

Lincoln sabía que el tiempo estaba en su contra. Mientras el dispositivo enviaba la señal a Doctor Strange, los Duende Bots se acercaban cada vez más, sus ojos brillando con una malevolencia artificial. Moon Knight y Quicksilver estaban listos para enfrentarse a la oleada, pero Lincoln no podía quedarse sin hacer nada. Sabiendo que pronto llegarían más enemigos, los tres se prepararon lo mejor que pudieron con lo que tenían a la mano.

Moon Knight, siempre preparado para lo peor, sacó un par de cuchillas adicionales de su cinturón y las sostuvo firmemente en sus manos. Su capa ondeaba ligeramente mientras escaneaba el área, buscando el próximo movimiento del enemigo.

Quicksilver, por su parte, ajustó los vendajes que llevaba en sus brazos y piernas. Aunque su velocidad era su mayor arma, sabía que en esta situación, necesitaría más que velocidad. Su mente corría tan rápido como sus pies, planeando cómo podría usar cada segundo a su favor, especialmente mientras el dispositivo seguía enviando la señal.

Lincoln, cubierto en el blanco y negro del simbionte Anti-Venom, sintió la adrenalina recorrer su cuerpo. Anti-Venom le otorgaba una serie de habilidades que podría utilizar para defenderse y proteger a los demás. Sentía cómo el simbionte se movía sobre su piel, listo para responder a cualquier amenaza. Preparó sus poderes: podría usar las cuchillas y los proyectiles de su simbionte, y su fuerza sobrehumana podría ayudar a mantener a raya a los robots. Además, su capacidad para purificar la corrupción de otros simbiontes sería crucial si alguno de los Duende Bots resultara estar infectado.

Los tres héroes se alinearon, listos para lo que vendría. Lincoln lanzó una mirada rápida a Moon Knight y Quicksilver.

Lincoln: No sabemos cuántos más vendrán, pero tenemos que resistir. El mensaje a Strange ya está en camino, pero no sabemos cuánto tardará. Así que... no se contengan.

Moon Knight asintió con una mirada decidida.

Moon Knight: No es mi estilo contenerme. Vamos a hacer que cada uno de estos robots desee no haber sido activado.

Quicksilver sonrió de medio lado.

Quicksilver: Les daremos algo de qué hablar en su central. Estos robots ni sabrán qué los golpeó.

Los Duende Bots ya estaban cerca, y el primero de ellos lanzó un rayo de energía directo hacia Lincoln. Pero Anti-Venom reaccionó en un instante, su cuerpo se movió con una velocidad instintiva, y una cuchilla simbiota salió disparada de su brazo, cortando el rayo por la mitad y desintegrando el robot de un solo golpe.

Moon Knight lanzó sus cuchillas en un amplio arco, impactando en los puntos débiles de varios robots, que estallaron en chispas y fuego. Su precisión era letal, y cada movimiento estaba calculado para maximizar el daño.

Quicksilver se movió como un rayo entre los robots, sus manos y pies golpeando con una velocidad casi imperceptible. Tomaba partes de los robots y las usaba como armas improvisadas, golpeando con tal fuerza que los cuerpos de los Duende Bots se destrozaban en pedazos.

Los tres héroes luchaban con una coordinación casi perfecta, aprovechando cada instante para reducir la cantidad de enemigos mientras esperaban la llegada del portal. Lincoln, en particular, usaba sus habilidades de Anti-Venom para mantener el equilibrio en la batalla, sanando rápidamente cualquier herida que pudieran sufrir sus aliados y destruyendo con precisión a los Duende Bots que se acercaban demasiado.

Los minutos se sentían como horas, pero los tres resistieron, sabiendo que debían mantenerse firmes hasta que Strange respondiera. La determinación en los ojos de cada uno no flaqueó, y el campo de batalla se llenó de restos de Duende Bots destruidos.

Al cruzar las puertas del salón comedor del castillo de Doctor Doom, los tres héroes se encontraron con un banquete sorprendentemente elaborado. Mesas largas y elegantes estaban cubiertas con una variedad de manjares, desde exquisitos cortes de carne hasta una impresionante selección de pasteles y frutas. El ambiente del comedor era lujoso, con candelabros que iluminaban el espacio y un tapiz adornado con símbolos antiguos en las paredes.

Lincoln, aún con la adrenalina del combate fluyendo en su cuerpo, no pudo evitar que su estómago gruñera. La presencia de tanta comida era un alivio bienvenido. Sin pensarlo dos veces, se dirigió rápidamente a la mesa, comenzando a servirse con avidez. Agarró una montaña de comida y comenzó a comer con rapidez, casi como si no hubiera probado bocado en días.

Doctor Doom, que estaba observando con una mezcla de sorpresa y desdén desde el otro lado de la sala, no pudo evitar comentar.

Doctor Doom: ¿Eres un glotón, Anti-Venom? ¿No has aprendido nada de la etiqueta adecuada para comer en mi presencia?

Anti-Venom, con la boca llena pero claramente complacido, levantó la mirada y respondió sin dejar de masticar.

Anti-Venom: No es que me guste actuar como un glotón, pero el Anti-Venom tiene un metabolismo que necesita mucho más combustible que el de una persona normal. Mi cuerpo quema energía a una velocidad increíble. Necesito comer aproximadamente diez veces lo que pesaría el mismo Hulk solo para mantenerme.

Doctor Doom levantó una ceja, claramente asombrado por la respuesta.

Doctor Doom: ¿Diez veces lo que pesa Hulk? Eso es... considerable. ¿Cómo es que has llegado a necesitar tal cantidad de alimento?

Anti-Venom se inclinó un poco hacia adelante, tomando un pedazo de carne antes de continuar.

Anti-Venom: El simbionte en mi interior no solo aumenta mi fuerza y habilidades, también acelera mi metabolismo. Así que comer es parte de la rutina para mantener mi energía. No es exactamente elegante, pero es necesario.

Moon Knight, al ver la situación, se acercó a la mesa con una actitud más reservada, eligiendo algo de comida con una precisión calculada. Miró a Doctor Doom mientras se acomodaba en una silla cercana.

Moon Knight: No te preocupes por la etiqueta, Doom. Si lo que dicen sobre el simbionte es cierto, dudo que haya mucho que podamos hacer para cambiar su apetito.

Quicksilver, mientras tanto, se acercó a la mesa con un platillo en la mano, observando a Anti-Venom con una sonrisa irónica.

Quicksilver: Bueno, mientras Anti-Venom se da un festín, deberíamos aprovechar para planear nuestro próximo movimiento. No tenemos mucho tiempo antes de que el Duende Verde nos encuentre o haga otro movimiento.

Doctor Doom se acomodó en su trono de hierro, observando con una mezcla de curiosidad y desdén mientras Anti-Venom, Moon Knight y Quicksilver disfrutaban del banquete. Aunque el ambiente era de opulencia, Doom parecía más interesado en la situación que en la comida misma.

Se inclinó hacia adelante, mirando a sus invitados con una seriedad calculada.

Doctor Doom: Bien, mientras ustedes se alimentan, permítanme explicar la situación. Hace unas horas, tanto héroes como villanos han sido secuestrados por el Duende Verde y sus máquinas. Este ataque no fue solo un movimiento contra los héroes, sino una táctica para crear caos en todo el mundo. Los secuestrados incluyen a varios de los héroes más poderosos, así como a los villanos más temidos, como Carnage.

Anti-Venom dejó de comer un momento, su rostro se tornó serio al escuchar los nombres mencionados. Su preocupación era evidente. Sabía que el Duende Verde no era un adversario cualquiera, pero la mención de Carnage aumentaba la gravedad de la situación.

Anti-Venom: ¿Qué pasa con Venom? ¿Sabemos algo de él?

Doctor Doom se inclinó ligeramente hacia adelante, un destello de interés en sus ojos.

Doctor Doom: No hay evidencia concreta que sugiera que Venom haya sido capturado por el Duende Verde. Hasta el momento, los informes indican que Venom no estaba entre los secuestrados. Sin embargo, eso no significa que esté a salvo o que no tenga sus propios problemas.

Moon Knight, observando con detenimiento la situación y con una mirada inquisitiva, decidió intervenir en la conversación. Su voz era firme, con un tono que denotaba tanto curiosidad como una pizca de escepticismo.

Moon Knight: Doctor Doom, tú eres un villano de renombre y uno de los más poderosos en el mundo. ¿Cómo es que has logrado evitar ser capturado por los Duende Bots? Si han estado secuestrando a héroes y villanos por igual, me resulta sorprendente que no hayas sido uno de los primeros en caer.

Doctor Doom lo miró con una mezcla de sorpresa y respeto. Se volvió hacia la mesa y tomó un vaso de vino, bebiendo un sorbo antes de responder.

Doctor Doom: Es una pregunta válida. Mi evasión no se debe únicamente a mi habilidad o a mi poder, sino a una combinación de estrategia y precaución. Los Duende Bots pueden ser efectivos, pero también son predecibles. Mi conocimiento avanzado de la tecnología y mis habilidades para ocultarme han jugado un papel crucial en evitar su detección. Además, he tomado medidas preventivas para asegurarme de que mis movimientos no puedan ser rastreados fácilmente.

Anti-Venom miró a Doctor Doom con una mezcla de curiosidad y desafío, su voz cargada con una insinuación de franqueza.

Anti-Venom: Doctor Doom, tienes un impresionante conocimiento y habilidades que sin duda te han ayudado a evitar ser capturado. Pero, en algún momento, ¿no te sientes superado por alguien? ¿Hay ocasiones en las que no te creas superior a los demás, especialmente considerando que en el pasado, Reed Richards te ha humillado en más de una ocasión?

Doctor Doom lo miró con una ceja levantada, su rostro enmascarado por una expresión que combinaba sorpresa con una ligera indignación. A pesar de su actitud habitual de superioridad, la pregunta de Anti-Venom parecía haberlo tocado en un punto sensible.

Doctor Doom: ¿Reed Richards? No es ningún secreto que he tenido mis diferencias con él. Richards y yo hemos estado en oposición en más de una ocasión, y, ciertamente, ha habido momentos en los que sus acciones han sido frustrantes. Sin embargo, eso no significa que me sienta inferior a él o a nadie más. La verdadera medida de alguien no se basa en sus victorias o derrotas contra un individuo específico, sino en su capacidad para adaptarse, aprender y superar los desafíos que se presentan.

Anti-Venom asintió lentamente, su mirada nunca apartándose de Doom. La respuesta de Doom era la típica combinación de orgullo y pragmatismo que él solía mostrar.

Anti-Venom: Entonces, ¿es tu enfoque hacia la tecnología y la evasión más un reflejo de tu necesidad de evitar ser superado que de una verdadera estrategia de supervivencia?

Doctor Doom se recostó en su trono, su postura relajándose ligeramente mientras consideraba la pregunta.

Doctor Doom: Mi enfoque hacia la tecnología y la evasión no es simplemente una cuestión de evitar ser superado; es una cuestión de asegurar mi dominio en un mundo que constantemente está cambiando y evolucionando. La tecnología y la estrategia son herramientas que utilizo para mantener mi posición. Mi objetivo siempre ha sido ser el mejor, no solo en términos de poder, sino en mi capacidad para anticipar y reaccionar ante los desafíos. La humillación de cualquier adversario, incluso Richards, es una motivación para perfeccionar mi enfoque y adaptarme continuamente.

Moon Knight, que había estado observando la conversación con interés, intervino.

Moon Knight: Entonces, si entendemos correctamente, tus habilidades para evitar la captura y tu capacidad para manejar situaciones como esta son una extensión de tu deseo de mantener tu supremacía y control, en lugar de un simple mecanismo de supervivencia.

Doctor Doom asintió con una ligera sonrisa.

Anti-Venom se inclinó ligeramente hacia adelante, su mirada inquisitiva no apartándose de Doctor Doom. La pregunta que tenía en mente era crucial para entender por qué había sido seleccionado y no los demás héroes y villanos.

Anti-Venom: Doctor Doom, ¿cómo lograste encontrarnos para abrir el portal? Además, ¿por qué decidiste traer solo a nosotros y no al resto de los héroes y villanos? ¿Hay alguna razón específica para eso?

Doctor Doom se acomodó en su trono, su expresión mostraba una mezcla de satisfacción y seriedad. Su mirada se centró en Anti-Venom, evaluando el interés genuino en la respuesta.

Doctor Doom: La razón por la que te encontré a ti y a los demás en lugar de a todos los héroes y villanos se debe a una combinación de estrategia y prioridades. Mi tecnología de localización es avanzada, pero también requiere de un enfoque selectivo para ser efectiva. Sabía que Norman Osborn, el Duende Verde, tenía un interés particular en ti, Anti-Venom. Tu relación con él y tu papel en la resistencia contra los simbiontes te convierten en una pieza clave en este rompecabezas.

Anti-Venom frunció el ceño, asimilando la implicación en las palabras de Doom.

Anti-Venom: ¿Entonces mi presencia aquí era una prioridad para ti porque sabes que el Duende Verde tiene un interés especial en mí?

Doctor Doom asintió lentamente, una leve sonrisa apareciendo en sus labios.

Doctor Doom: Exactamente. Norman Osborn ha demostrado ser un adversario formidable, y su obsesión con los simbiontes y contigo es algo que no se puede ignorar. Sabía que si podía ofrecerte la oportunidad de actuar y de enfrentar directamente al Duende Verde, aumentaría nuestras posibilidades de éxito. En cuanto al resto de los héroes y villanos, mi enfoque fue seleccionar a aquellos que podrían proporcionar una ventaja inmediata en la situación actual. La capacidad para coordinar y ejecutar operaciones en circunstancias críticas es esencial.

Moon Knight, que había estado escuchando atentamente, asintió con comprensión.

Moon Knight: Así que, nuestra presencia aquí no solo es una cuestión de oportunidad, sino de estrategia calculada. La prioridad es asegurar que Anti-Venom tenga la mejor oportunidad posible de enfrentarse a su enemigo y de rescatar a los secuestrados.

Doctor Doom se levantó de su trono, su postura erguida y autoritaria.

Doctor Doom: Precisamente. La elección de los miembros del equipo y el enfoque en Anti-Venom no son meras coincidencias. Cada uno de ustedes tiene un papel crucial en la misión, y nuestra colaboración debe ser precisa y eficiente. La amenaza del Duende Verde es grave y requiere una respuesta que esté a la altura de la situación.

Anti-Venom asintió, comprendiendo el papel que iba a desempeñar en la misión. Aunque su relación con Doctor Doom era complicada, en ese momento, sus objetivos estaban alineados. La batalla contra el Duende Verde no solo era una cuestión de supervivencia, sino también de justicia y de proteger a los que habían sido secuestrados. La tensión en la sala estaba palpable, y el grupo sabía que debían tomar decisiones cruciales rápidamente.

Doctor Doom se inclinó hacia adelante, sus ojos brillando con una mezcla de curiosidad y determinación.

Doctor Doom: Considera esto, Anti-Venom. La tecnología y los recursos que poseo podrían ser útiles para maximizar el potencial del simbionte. Permíteme tener acceso al simbionte y podríamos obtener una ventaja significativa contra el Duende Verde.

Anti-Venom frunció el ceño, sintiendo la presión de la propuesta. Sabía que la oferta de Doom no era una simple sugerencia; estaba basada en la confianza en su propia tecnología y habilidades. Sin embargo, tenía sus reservas.

Anti-Venom: No puedo hacer eso. El simbionte y yo hemos estado juntos durante años. Es un simbionte artificial y ha desarrollado una conexión única conmigo. Se ha adaptado a mí de una manera que nadie más podría replicar. Si alguien más intentara usarlo, el simbionte no podría ser controlado adecuadamente y eso podría poner en riesgo a todos.

Doctor Doom levantó una ceja, su expresión una mezcla de sorpresa y desdén ante la firmeza de la respuesta de Anti-Venom. Sin embargo, no parecía dispuesto a aceptar la negativa sin más. A medida que Anti-Venom se mantenía firme en su decisión, Doom tomó una acción inesperada.

Con un movimiento preciso y calculado, Doctor Doom activó un mecanismo oculto en la silla en la que estaba sentado Anti-Venom. Los brazos de la silla comenzaron a moverse de manera automatizada, extendiéndose hacia Anti-Venom con la intención de inmovilizarlo.

Anti-Venom percibió el cambio en el entorno casi de inmediato, su instinto de supervivencia alertado por el peligro. Se levantó de un salto, justo a tiempo para evitar quedar atrapado por los brazos mecánicos que se extendían hacia él. La silla, ahora parcialmente desplegada en una trampa, dejó en claro las intenciones de Doom.

Anti-Venom: ¡¿Qué demonios estás haciendo, Doom?!

Doctor Doom mantuvo una mirada fría y calculadora, sin mostrar remordimiento por su acción.

Doctor Doom: No tengo intención de perder esta oportunidad. El simbionte es un recurso valioso y, si bien comprendo tu lealtad, debo asegurarme de que podamos utilizarlo para enfrentar la amenaza del Duende Verde. No permitiré que mi plan se vea obstaculizado por consideraciones sentimentales.

Anti-Venom se preparó para reaccionar, sintiendo el pulso de la traición y el peligro inminente. El simbionte se cubrió alrededor de su cuerpo, sus garras extendiéndose en un brillo líquido y amenazante que parecía pulsar con cada respiración. La tensión en la sala era palpable, con Moon Knight y Quicksilver observando con gran preocupación, listos para intervenir si la situación se salía de control.

De repente, un nuevo portal se abrió con un resplandor vibrante, y a través de él pasaron Doctor Strange, la Antorcha Humana y Miss Marvel. La llegada de estos héroes trajo un alivio momentáneo, aunque también agregó una nueva capa de complejidad a la situación. Doctor Strange, con su aura mística, se movió rápidamente hacia el centro de la sala, mientras Antorcha Humana y Miss Marvel se posicionaron a su lado, evaluando la escena con rapidez.

Doctor Strange miró a Anti-Venom, luego a Doctor Doom, y finalmente a los otros miembros del grupo. La expresión en su rostro mostraba una mezcla de determinación y frustración.

Doctor Strange: Lo siento por la demora. Asegurarnos de que todos los héroes y villanos pudieran ser transportados no fue tarea fácil. ¿Cuál es la situación?

Antorcha Humana y Miss Marvel intercambiaron miradas con Moon Knight y Quicksilver, observando la tensión en la sala y la evidente fricción entre Anti-Venom y Doctor Doom. Antorcha Humana se acercó a Anti-Venom, reconociendo la presión que debía estar sintiendo.

Antorcha Humana: Parece que ha habido un malentendido. ¿Todo bien aquí?

Anti-Venom se mantuvo firme, su voz cargada de tensión.

Anti-Venom: Doctor Doom intentó tomar el simbionte por la fuerza. Estábamos en medio de una discusión sobre cómo colaborar, y él decidió que la única solución era intentar capturarme.

Doctor Doom alzó una mano en un gesto de desdén.

Doctor Doom: Mi intención no era otra que asegurar que el simbionte fuera utilizado para el bien mayor. Pero veo que el malentendido fue inevitable. Ahora, debemos centrarnos en la amenaza del Duende Verde.

Miss Marvel dio un paso adelante, tratando de mediar en la situación.

Miss Marvel: Entiendo que hay tensiones, pero lo más importante ahora es detener al Duende Verde y rescatar a los secuestrados. Todos tenemos habilidades que pueden contribuir a la causa.

Doctor Doom se inclinó ligeramente hacia adelante, ajustando su capa mientras hablaba con los recién llegados luego de que la situación por fin se había calmado un poco. Su tono era de formalidad calculada, con una mezcla de autoridad y diplomacia.

Doctor Doom: Como ya se ha mencionado a los otros tres, la situación es crítica. Los héroes y villanos han sido secuestrados por el Duende Verde y sus Duende Bots, incluyendo a algunos de los más poderosos como Carnage. El Duende Verde tiene un interés particular en Anti-Venom, lo que explica mi intervención.

Mientras tanto, Lincoln se mantenía alejado de la mesa, utilizando las extremidades de su simbionte para recoger comida. Sus movimientos eran precisos, con el simbionte extendiéndose para tomar varios platos al mismo tiempo. Se dirigió hacia donde Miss Marvel estaba sentada, ofreciéndole algunos bocados de comida.

Anti-Venom: (a Miss Marvel) No confío en Doom para nada. Es un jugador peligroso, y sus motivaciones son siempre cuestionables.

Miss Marvel miró a Anti-Venom con una mezcla de sorpresa y empatía. Aunque estaba cerca de él, su expresión mostraba un ligero nerviosismo.

Miss Marvel: ¿Por qué no confías en él? (pausa) Todos sabemos que Doom tiene una reputación complicada, pero ahora estamos en una situación que requiere cooperación.

Anti-Venom: (suspira) Doom es conocido por su ambición y su falta de escrúpulos. Nunca se puede estar seguro de cuándo está planeando algo. Y aún así, tenemos que trabajar con él por ahora.

Miss Marvel asintió, comprendiendo parcialmente la desconfianza de Anti-Venom.

Mientras Lincoln y Miss Marvel comían, la conversación giró en torno a los eventos recientes y las intrigas del momento. Lincoln notó que Miss Marvel estaba visiblemente nerviosa. Sus manos jugaban con la comida, y sus miradas a menudo se dirigían hacia Anti-Venom, quien se mantenía en su forma intimidante.

Anti-Venom: (mirando a Miss Marvel con preocupación) ¿Te encuentras bien? Pareces algo inquieta.

Miss Marvel: (mirando a Anti-Venom, un poco ruborizada) Es solo... tu aspecto es bastante aterrador. He escuchado muchas historias sobre el simbionte, y ver a Anti-Venom en persona es diferente a lo que esperaba.

Anti-Venom: (con una expresión comprensiva) Es comprensible. El simbionte puede causar inquietud, especialmente si solo has oído rumores sobre él.

Lincoln Loud: (sonriendo mientras el simbionte se disuelve y vuelve a su forma humana) Entiendo. Permíteme hacer algo para ayudarte a sentirte más cómoda..... Soy Lincoln Loud por cierto.

Miss Marvel se sorprendió al ver el aspecto real de Lincoln. El joven albino, de su misma edad, le ofreció una cálida sonrisa que contrastaba con la imagen temible que había proyectado como Anti-Venom. La revelación del verdadero rostro de Lincoln hizo que Miss Marvel se sintiera más a gusto y confiada.

Miss Marvel: (sonriendo mientras se quita el antifaz) Wow, no me esperaba esto. Eres más joven de lo que pensaba. Yo también puedo mostrarte quién soy.

Lincoln Loud: (mirando con interés) Claro, adelante.

Miss Marvel se quitó el antifaz, revelando su rostro y la identidad de Kamala Khan. La joven heroína tenía una expresión amigable y genuina, y Lincoln pudo ver en ella la misma determinación y coraje que había admirado en Anti-Venom.

Kamala Khan: (sonriendo) Soy Kamala, pero puedes llamarme Miss Marvel. Es un placer conocerte, Lincoln.

Lincoln Loud: (con una sonrisa sincera) El placer es mío, Kamala. Me alegra que podamos conocernos sin las barreras de las máscaras.

Kamala Khan: (asintiendo) Sí, a veces es importante conocernos realmente para poder trabajar mejor juntos. Gracias por confiar en mí.

Lincoln Loud: (mirando a Kamala con aprecio) No hay de qué. En tiempos como estos, es fundamental que confiemos unos en otros.

La conversación entre Lincoln y Kamala se volvió más relajada mientras compartían sus experiencias y preocupaciones. La atmósfera en la sala de Doctor Doom se aligeró, y el grupo empezó a sentirse más unido en su misión. Doctor Doom terminó de hablar y el grupo comenzó a prepararse para lo que venía.

Poco después de que Doom terminara de hablar, Doctor Strange levantó la vista desde donde estaba sentado al final de la mesa. Con un gesto calmado, pidió a Lincoln y Kamala que se acercaran.

Doctor Strange: (inclinándose ligeramente hacia adelante) Lincoln, Kamala, por favor, acérquense un momento.

Lincoln Loud: (mirando a Kamala) Vamos a ver qué quiere.

Kamala Khan: (asintiendo) De acuerdo.

Ambos se acercaron a Doctor Strange, quien parecía concentrado y serio. Su expresión mostraba la preocupación de alguien que ha estado lidiando con grandes fuerzas y amenazas.

Doctor Strange: (mirándolos con atención) He estado utilizando mi hechicería para investigar la situación actual. Tras un análisis exhaustivo, puedo confirmar que ustedes, junto con Doctor Doom, somos los últimos héroes y villano en este conflicto. Los Duende Bots han logrado capturar a la mayoría de los demás, y las fuerzas del Duende Verde han hecho un trabajo eficaz en neutralizar a los que no han sido capturados.

Lincoln, visiblemente asustado y preocupado, se acercó a Doctor Strange con pasos rápidos, apartándolo suavemente de la mesa. Su mente estaba en un torbellino, y su rostro mostraba una mezcla de ansiedad y determinación.

Lincoln Loud: (mirando a Strange con urgencia) Doctor Strange, necesito saber si lo que dijiste es verdad. Si somos los últimos, entonces... entonces mi hermana Leni, que no he visto en tres años, también debe haber sido secuestrada. Tenía al simbionte Scream. ¿Cómo puedo saber si ella está bien?

Doctor Strange: (consería) Permíteme ver lo que puedo hacer para localizarla. Necesitaré algo que me ayude a encontrarla.

Lincoln rápidamente sacó de su bolsillo una foto de su familia, donde se veía a Leni y a sus otras hermanas junto a él, en una escena más feliz y tranquila. Le entregó la foto a Doctor Strange, quien la estudió con atención antes de hacer un gesto para abrir un portal.

Doctor Strange: (murmurando mientras conjura) Esto debería darnos una pista de su ubicación.

El portal se abrió ante ellos, revelando el interior de un bunker cuidadosamente diseñado. Dentro, la familia de Lincoln estaba resguardada, pero algo era evidente: Leni y Lynn no estaban allí. Lincoln sintió una punzada de desesperación al ver la ausencia de sus hermanas.

Doctor Strange: (observando la escena y haciendo un gesto para cerrar el portal) Lamentablemente, no están aquí. Pero con más magia, puedo rastrear sus señales. Ellas están en camino hacia aquí.

Lincoln asintió, aliviado pero aún preocupado, mientras Doctor Strange intensificaba sus hechizos. El mago concentró su energía, escaneando las ubicaciones posibles con su habilidad mágica. Finalmente, su rostro mostró una mezcla de confirmación y alivio.

Doctor Strange: (mirando a Lincoln con seriedad) Leni y Lynn están en el camino más rápido hacia Nueva York. Llegarán en aproximadamente dos horas. Estoy a punto de ir a buscarlas para asegurarme de que lleguen a salvo.

Lincoln Loud: (urgente) Doctor Strange, por favor, ve por ellas de inmediato. Mientras tanto, ¿hay algo más que pueda hacer?

Doctor Strange: (asintiendo) En efecto. Necesitas ir con Miss Marvel para ayudar a los civiles que están siendo atacados en el centro de la ciudad. La policía necesita asistencia para evacuar a los afectados y mantener el orden.

Lincoln Loud: (determinante) Entendido. Vamos, Kamala.

Doctor Strange conjuró un portal que brilló con una luz mágica. Lincoln y Kamala se dirigieron hacia él rápidamente, el portal se abrió y el par atravesó la brecha dimensional.

Al llegar al centro de la ciudad, la escena era caótica. Los Duende Bots se movían como una plaga imparable, sembrando destrucción por doquier. Edificios en ruinas, coches volcados, y escombros esparcidos por las calles daban testimonio del paso implacable de los robots. Los gritos de pánico y el sonido ensordecedor de las sirenas llenaban el aire, mientras la policía hacía lo imposible por mantener el control en medio del caos.

La ciudad estaba en ruinas y la gente huía despavorida, buscando refugio en cualquier lugar seguro. Las calles estaban atestadas de personas corriendo, tratando de escapar de la devastación que los Duende Bots habían traído.

Lincoln Loud: (con determinación) ¡Es hora de actuar!

Sin más dilación, Lincoln se transformó en Anti-Venom, su aspecto intimidante emergiendo con un resplandor siniestro. Con su cuerpo cubierto por el simbionte, se lanzó al combate, enfrentándose a los Duende Bots con una furia implacable. Sus movimientos eran rápidos y precisos, sus garras y tentáculos rasgando y destruyendo a los robots que se interponían en su camino.

Anti-Venom: (gruñendo mientras ataca) ¡No dejaré que sigan causando estragos!

Mientras Lincoln combatía, Miss Marvel estaba ocupada ayudando a la policía a evacuar a los civiles. Sus poderes le permitían mover rápidamente a los afectados y guiarlos hacia los buses de evacuación. Con su habilidad para estirarse y cambiar de tamaño, se movía entre la multitud, asegurándose de que cada persona tuviera un camino seguro hacia la evacuación.

Miss Marvel: (gritando sobre el ruido) ¡Todos hacia los buses! ¡Necesitamos que se muevan rápidamente!

El esfuerzo combinado de Lincoln y Miss Marvel empezó a tener un efecto positivo. Los Duende Bots comenzaron a ser repelidos, y la policía podía concentrarse en asegurar las rutas de evacuación. Los buses se llenaban con personas aterrorizadas pero seguras, mientras los héroes luchaban para mantener el caos bajo control.

A medida que Lincoln derrotaba a más robots, el campo de batalla se despejaba lentamente, pero el tiempo seguía siendo un factor crítico. Cada minuto que pasaba era un recordatorio de la amenaza que aún persistía, y la llegada de Leni y Lynn se volvía cada vez más esperada.

La ciudad seguía en ruinas, pero la valentía y el trabajo en equipo de Anti-Venom y Miss Marvel estaban marcando la diferencia. Con cada batalla ganada, la esperanza de una resolución se mantenía viva, mientras el destino de los civiles y de la familia de Lincoln pendía de un hilo.

Mientras la ciudad de Nueva York estaba sumida en el caos, Leni, transformada en la poderosa Scream, corría a toda velocidad con Lynn a cuestas. La joven, ahora poseída por el simbionte Scream, estaba furiosa y frustrada por la situación. Cada paso que daba en su carrera acelerada resonaba con una intensidad inquietante, mientras sus gritos llenaban el aire, aterrorizando a cualquier robot que intentara acercarse.

Scream: (molesta) ¡No puedo creer que hayas insistido en traer a Lynn! Ella solo va a estorbar. ¡Esto está complicando todo!

Leni: (con determinación) ¡No tenemos tiempo para pelear! Necesito que te concentres en llegar a Lincoln. No podemos perder más tiempo. Él necesita nuestra ayuda, y no voy a dejar que nada nos detenga.

Lynn, aferrada a la espalda de Leni, observaba el caos a su alrededor con una mezcla de preocupación y determinación. Aunque estaba aterrorizada, su espíritu luchador no se había extinguido. Cada vez que Scream trataba de acelerar más, Lynn sentía el viento helado y la presión de la velocidad, pero se aferraba con fuerza, sabiendo que su hermana estaba haciendo todo lo posible por llegar a donde se necesitaban.

Scream: (gruñendo mientras aumenta la velocidad) ¡Está bien, pero más te vale que este sea un buen plan! ¡Estamos haciendo un desmadre aquí!

Leni: (gritando para hacerse oír sobre el rugido del viento) ¡Confía en mí! ¡Solo sigue corriendo! ¡Lincoln y los demás están en peligro!

A lo lejos, Lynn observaba un Duende Bot que se acercaba con una velocidad alarmante. Sabía que no podían permitirse detenerse ni un segundo. Con determinación, le pidió a Scream que la lanzara para enfrentar la amenaza.

Lynn: (gritando) ¡Lánzame! ¡Tengo que acabar con ese robot!

Scream: (gruñendo con frustración) ¡Estás loca, pero si eso es lo que quieres, será!

Scream ajustó su velocidad y, en un movimiento ágil, lanzó a Lynn por los aires. Lynn se deslizó en el aire con el viento a favor, empuñando su bate de metal. Con una precisión mortal, descendió sobre el Duende Bot que se acercaba, estrellando su bate contra la cabeza del robot con un golpe devastador. La cabeza del Duende Bot estalló en chispas y fragmentos metálicos, dejándolo inerte en el suelo.

Lynn: (con determinación mientras cae) ¡Eso es por Lincoln!

Scream extendió sus brazos, capturando a Lynn en el aire con una agilidad sorprendente. Con un movimiento rápido, la volvió a colocar sobre su espalda. La fuerza y el control del simbionte garantizaron que Lynn se mantuviera segura mientras continuaban su carrera hacia el corazón de la ciudad.

Scream: (resoplando) Bien hecho. Pero no podemos perder más tiempo. ¡Aún hay mucho por hacer!

Leni, con una mirada de aprobación hacia Lynn, ajustó su rumbo para asegurar que su hermana estuviera a salvo. Mientras avanzaban, el caos y el estrépito de la batalla se hacían más intensos a medida que se acercaban al epicentro de la crisis.

Leni: (mientras continúa corriendo) ¡Estamos casi allí! ¡Mantén la calma y prepárate para ayudar cuando lleguemos!

Lynn: (aferrada con fuerza, su voz cargada de determinación) ¡Vamos, Leni! ¡No podemos detenernos ahora!

Leni, agotada pero decidida, asintió con la cabeza, manteniendo su ritmo frenético. El viento azotaba sus rostros y el rugido de los Duende Bots resonaba en sus oídos. Cada paso que daban estaba cargado de tensión, y la amenaza de los robots de Norman Osborn las seguía de cerca. Leni, con Scream envolviéndola en su forma protectora, estaba concentrada en llegar a su destino, pero una aparición inesperada frente a ellas las obligó a detenerse.

Un portal se abrió repentinamente en su camino, su brillo hipnótico llamando la atención de ambas hermanas. Se mantuvieron alerta, sus cuerpos tensos y listos para cualquier eventualidad. De la abertura mágica, emergió Doctor Strange, su presencia imponente en contraste con el caos que las rodeaba.

Doctor Strange: (con voz firme, pero cargada de urgencia) ¡Entren al portal ahora! ¡No hay tiempo que perder!

Sin titubear, Leni y Lynn se lanzaron al portal, confiando en el poder y la autoridad del hechicero. La transición fue rápida y envolvente; un momento estaban en el desolado paisaje de la ciudad, y al siguiente, se encontraron en el interior de un majestuoso castillo.

El castillo era una maravilla arquitectónica, con altos muros de piedra y detalles intrincados que hablaban de una historia rica y poderosa. La grandeza del lugar proporcionó un contraste sorprendente con el caos que acababan de dejar atrás. Leni, con el corazón aún acelerado, miró a su alrededor con asombro, mientras Scream utilizaba su forma simbiótica para protegerlas.

Lynn: (mirando el entorno, su voz temblorosa pero sorprendida) ¿Dónde estamos?

Scream: (volviendo a su forma normal y extendiendo sus brazos protectores) ¿Es esto un refugio seguro?

Doctor Strange: (con tono tranquilizador mientras se acercaba a ellas) Están a salvo aquí. Lincoln fue quien las envió. Él está en el centro de la batalla en la ciudad. Les pidió que vinieran a este lugar para garantizar su seguridad mientras él y los demás enfrentan la amenaza.

Leni exhaló un suspiro de alivio, su preocupación por su hermana y por ella misma disminuyendo al darse cuenta de que estaban en un lugar seguro, al menos por ahora. La presencia de Doctor Strange era un rayo de esperanza en medio de la tormenta.

Leni: (mirando a Strange con gratitud, pero aún con inquietud) ¡Gracias por traerlas aquí! ¿Dónde está Lincoln?

Doctor Strange: (gesticulando hacia una de las puertas del castillo) Lincoln está en el centro de la batalla. El conflicto en la ciudad es intenso, y su prioridad es asegurarse de que todos estén a salvo. Ustedes estaban en peligro, y él quería protegerlas mientras él enfrenta la amenaza.

Scream: (mirando a Strange con inquietud) ¿Podemos hacer algo desde aquí? No podemos simplemente quedarnos sin hacer nada mientras él y los demás están en peligro.

Doctor Strange: (asintiendo con una mezcla de comprensión y resolución) En este momento, su seguridad es primordial. Sin embargo, si desean ayudar, puedo proporcionarles una forma de comunicarse con Lincoln y con otros héroes en la ciudad. De esa manera, podrán coordinar sus esfuerzos y estar al tanto de la situación en tiempo real.

Lynn: (su voz llena de determinación) Queremos ayudar. Si hay algo que podamos hacer, por favor, cuéntanos. No podemos quedarnos aquí sin hacer nada mientras los demás están luchando.

Doctor Strange: (con un asentimiento aprobador) Muy bien. Les proporcionaré una forma de comunicación mágica que les permitirá mantenerse en contacto con Lincoln y con el resto del equipo. Además, les enviaré información sobre la situación en la ciudad para que puedan coordinarse adecuadamente y actuar en consecuencia.

Mientras Doctor Strange trabajaba en los hechizos necesarios para facilitar la comunicación y coordinar sus esfuerzos, Leni y Lynn se prepararon para la siguiente etapa de su misión. La ansiedad y el miedo iniciales fueron reemplazados por una determinación firme y un sentido renovado de propósito.

La sala del castillo, con su atmósfera serena y majestuosa, se convirtió en un centro de preparación para las hermanas. La presencia de Doctor Strange les daba confianza de que estaban en el camino correcto, y el conocimiento de que Lincoln estaba en el centro de la batalla las impulsaba a actuar con más fervor.

Con la magia de Strange facilitando su comunicación y el plan en marcha, Leni y Lynn se sintieron listas para enfrentar lo que viniera. Su papel en el conflicto estaba lejos de haber terminado, pero estaban decididas a hacer todo lo posible para apoyar a Lincoln y a los demás en la lucha contra el Duende Verde y sus secuaces.

A medida que el hechicero les transmitía las últimas instrucciones y el enlace mágico se establecía, las hermanas se prepararon para la batalla que estaba por venir, conscientes de que su esfuerzo podría marcar la diferencia en el destino de su mundo.

Mientras los últimos civiles eran evacuados y la última oleada de Duende Bots caía bajo el implacable ataque de Lincoln y Kamala, la sensación de peligro en el aire se intensificaba. El sonido de las explosiones y los gritos había comenzado a menguar, pero la tensión seguía siendo palpable. Lincoln, aún en su forma simbiótica, respiraba con dificultad mientras observaba el paisaje devastado a su alrededor. El caos había sido contenido, pero algo mucho más oscuro y amenazante estaba por llegar.

A lo lejos, entre las ruinas de la ciudad, una figura solitaria emergió de las sombras. Incluso desde esa distancia, su presencia era inquietante, como si la oscuridad misma emanara de él. Su aura negativa parecía absorber la luz a su alrededor, y Lincoln sintió un escalofrío recorrer su cuerpo. Reconoció a ese hombre al instante. Era el mismo ser que había secuestrado a May Parker y que, en un enfrentamiento anterior, había logrado hacerle daño a él y a su simbionte de una manera que nadie más había conseguido en los últimos tres años.

La rabia comenzó a hervir dentro de Lincoln al ver al hombre que había causado tanto sufrimiento. Apretó los puños, sintiendo cómo el simbionte reaccionaba a sus emociones, queriendo atacar de inmediato. Sin embargo, algo lo detuvo. Había algo en la presencia de ese hombre que lo inquietaba más allá de la simple amenaza física. Había una conexión, un conocimiento que ese ser tenía, y Lincoln lo sabía.

Lincoln: (enfurecido, pero manteniendo la distancia) ¡¿Dónde está May Parker?! ¡¿Qué has hecho con ella?!

El hombre, envuelto en una energía oscura y pulsante, simplemente lo miró con una calma perturbadora. Su rostro, impasible, no mostraba rastro de emoción. Los ojos del hombre brillaban con una extraña y fría malevolencia. Lincoln sintió que su rabia chocaba contra una pared de indiferencia, lo que solo lo enfurecía más.

Misterioso Hombre: (con voz profunda y cargada de una malicia contenida) ¿Realmente crees que puedes enfrentarte a mí otra vez, Lincoln Loud? ¿Aun después de lo que pasó la última vez? Sabes bien que yo fui el único que pudo dañarte... y a tu simbionte.

Lincoln sintió cómo las palabras del hombre lo golpeaban como un balde de agua fría. No podía negar la verdad de lo que decía. Aquel hombre había sido el único en mucho tiempo que había logrado hacerle daño verdadero, dañando tanto a su cuerpo como al simbionte que lo protegía. La herida física había sanado, pero el miedo latente de que alguien pudiera atravesar sus defensas seguía presente.

Lincoln: (con voz tensa, tratando de mantener la compostura) ¿Cómo lo hiciste? ¿Cómo fuiste capaz de lastimarme a mí y al simbionte?

El hombre esbozó una sonrisa siniestra, como si la respuesta a esa pregunta fuera algo que había estado esperando que Lincoln comprendiera por sí mismo.

Misterioso Hombre: (con tono enigmático) ¿No lo has adivinado todavía? No fue suerte, ni casualidad. Fue... ciencia. Energía pura, derivada de lo que dio origen a Anti-Venom. Yo... soy parte de ese experimento, y ese poder... corre por mis venas. Pero eso no es todo, Lincoln. Yo sé más de ti de lo que podrías imaginar. Sé... tu verdadero nombre.

El mundo de Lincoln se tambaleó. Había intentado ocultar su identidad, su historia, todo lo que era, tras la máscara y el simbionte. Pocos conocían su verdadero nombre, y menos aún sabían la verdad sobre él. La revelación de que este hombre no solo tenía el poder para dañarlo, sino que también conocía su identidad, lo llenó de una sensación de vulnerabilidad que no había sentido en mucho tiempo.

Lincoln: (dando un paso atrás, su mente corriendo mientras trata de procesar la información) ¿Cómo...? ¿Quién eres realmente?

Misterioso Hombre: (dando un paso adelante, la energía a su alrededor crepitando con poder) Soy más de lo que crees. Soy la culminación de la ciencia y el odio. Pero lo más importante... soy tu peor pesadilla hecha realidad.

Lincoln apretó los dientes, sabiendo que este enfrentamiento sería diferente a cualquier otro. El hombre frente a él no era un enemigo común. Era alguien que tenía la capacidad de destruirlo, de revelar todo lo que Lincoln había tratado de ocultar, y de desatar un poder que podría poner en peligro a todos los que amaba.

Lincoln: (tomando una postura de combate, decidido a enfrentarlo) No me importa quién seas. Si sabes algo sobre May... si tienes algo que ver con esto... te haré pagar.

Misterioso Hombre: (sonriendo con malicia) Entonces ven, Lincoln. Ven y enfréntate a tu destino.

El aire se volvió más denso, cargado de tensión. Lincoln sabía que lo que estaba por suceder no era solo una batalla física, sino una confrontación que pondría a prueba todo lo que él era, y todo lo que estaba dispuesto a hacer para proteger a los suyos.

Lincoln y Kamala se prepararon para atacar al misterioso hombre, pero antes de que pudieran moverse, un portal se abrió repentinamente frente a ellos. La energía que emanaba del portal era inconfundible, y ambos fueron arrastrados a través de él sin poder resistirse. Cuando el torbellino de luz se disipó, se encontraron de nuevo en el castillo, donde Doom los esperaba, con su imponente figura destacando en la penumbra.

Lincoln, aún en su forma simbiótica, estaba furioso. Su ataque había sido interrumpido justo cuando estaba a punto de obtener respuestas. Se giró bruscamente hacia Doom, su voz resonando con una mezcla de ira y desconfianza.

Anti-Venom: (exigiendo una explicación) ¡¿Por qué nos has traído aquí?! ¡Ese hombre tiene a May Parker, y estaba a punto de conseguir respuestas!

Doom lo miró con su habitual calma, su voz era firme y llena de autoridad.

Doom: (con frialdad) Si hubieras continuado, Anti-Venom, ese hombre habría destruido no solo tu cuerpo, sino también el simbionte que te protege. Su energía es letal para ti.

Las palabras de Doom hicieron que Anti-Venom se detuviera por un momento, pero la ira seguía ardiendo en su interior. Algo en el tono de Doom, en su elección de palabras, le hizo sospechar que había más detrás de esa advertencia.

Anti-Venom: (avanzando hacia Doom, su tono amenazante) ¿Qué estás escondiendo, Doom? No creo que todo esto se trate solo de protegerme. ¡Dime la verdad!

El simbionte que cubría a Lincoln comenzó a cambiar, adoptando una forma aún más aterradora. Su cuerpo se expandió, y las fauces del simbionte se abrieron, mostrando una fila de dientes afilados. Kamala, preocupada por lo que Anti-Venom pudiera hacer, intentó intervenir, colocando una mano en su hombro.

Miss Marvel: (tratando de calmarlo) Lincoln, no es el momento para esto. No podemos enfrentarnos entre nosotros.

Doom: (levantando una mano para indicar que Kamala no interfiriera) Déjalo, Miss Marvel. Anti-Venom tiene derecho a saber la verdad.

Hubo un momento de tenso silencio mientras Doom miraba fijamente a Anti-Venom, su máscara reflejando la luz tenue del castillo. Finalmente, Doom rompió el silencio, su voz resonando con una gravedad que hacía eco en las paredes de piedra.

Doom: (con resignación) Ayudé a Norman Osborn a crear el Anti-Venom. Pero no lo hice solo. La clave para su creación fue la energía negativa... la energía de Martin Li, también conocido como Mr. Negative. Fue él quien proporcionó el poder necesario para transformar un fragmento del simbionte Venom en lo que eres ahora.

Anti-Venom se quedó inmóvil, la revelación impactando profundamente. El nombre "Martin Li" resonó en su mente, uniendo piezas que nunca había considerado.

Anti-Venom: (en shock) Martin Li... él es la persona para la que trabajé en el centro F.E.A.S.T...

El aire en la sala se volvió denso con la tensión, mientras Lincoln procesaba lo que acababa de escuchar. Doom, ajeno a la verdadera identidad de Lincoln, solo lo conocía como Anti-Venom y lo observaba con una mezcla de curiosidad y precaución.

Doom: (con voz firme) Mr. Negative es un ser de pura energía negativa, capaz de destruir al simbionte que te envuelve. Si te hubieras enfrentado a él sin estar preparado, habría sido tu fin. Y con tu desaparición, nuestras posibilidades de detener a Norman y su ejército habrían disminuido drásticamente.

Anti-Venom sintió cómo la rabia y la confusión se mezclaban dentro de él, creando un torbellino de emociones que amenazaba con desbordarse. Quería gritar, quería golpear algo, pero sobre todo, quería respuestas. Todo lo que creía saber estaba siendo desmoronado, y la revelación de que Martin Li, un hombre que había sido una figura paterna para él en algunos momentos, estaba detrás de su creación como Anti-Venom, era un golpe que no podía soportar.

Anti-Venom: (con voz rota, pero llena de determinación) No importa quién sea... si él tiene a May, lo enfrentaré. No permitiré que siga haciendo daño a más personas.

Kamala, viendo la lucha interna en Lincoln, colocó una mano en su hombro de nuevo, esta vez con más fuerza, tratando de transmitirle apoyo y comprensión.

Miss Marvel: (suavemente) No estás solo en esto, Lincoln. Todos estamos en esta lucha juntos. Lo que sea que esté pasando, lo enfrentaremos juntos. Pero primero, debemos pensar con claridad y planificar nuestro próximo movimiento.

Doom, por su parte, miró a Anti-Venom con algo que casi podría interpretarse como respeto. A pesar de la rabia y el dolor, Lincoln no se había dejado dominar por sus emociones, al menos no del todo. Había algo en él, algo que Doom reconocía como un espíritu indomable, que no se quebraría fácilmente.

Doom: (asintiendo lentamente) Miss Marvel tiene razón. Este no es el momento para actuar impulsivamente. Mr. Negative es un enemigo formidable, y si lo enfrentas sin un plan, estarás condenado. Pero con mi ayuda, podremos trazar una estrategia para neutralizar su poder.

Anti-Venom, aunque aún enfurecido y herido por la revelación, supo que Doom tenía razón. No podía permitir que su rabia lo llevara a la autodestrucción. May Parker, y todos los demás que aún necesitaban su protección, dependían de que él mantuviera la cabeza fría y los pies firmes en la tierra.

Anti-Venom: (respirando hondo, dejando que el simbionte vuelva a una forma menos amenazante) Está bien. Pero cuando llegue el momento, yo seré el que enfrente a Martin Li. Nadie más.

Doom asintió en silencio, aceptando la resolución en los ojos de Anti-Venom. El destino de todos los que estaban en peligro dependía de las decisiones que tomarían en las próximas horas, y mientras planificaban su siguiente movimiento, la sombra de Martin Li y su poder seguía cerniéndose sobre ellos como una amenaza inminente.

Unas puertas se abrieron, revelando a un grupo que incluía a Doctor Strange, la Antorcha Humana, Quicksilver, Moon Knight, y... Leni y Lynn. El albino avanzó lentamente hacia ellas, sus ojos fijos en sus hermanas. Las chicas, al ver a Lincoln, comenzaron a caminar hacia él también, con una mezcla de emociones reflejadas en sus rostros. Lincoln no las había visto en más de tres años.

Con cada paso que daba, el simbionte empezó a retroceder, desprendiéndose de su cuerpo como si entendiera que este era un momento en el que Lincoln debía estar solo, sin la influencia de Anti-Venom. Poco a poco, el simbionte se replegó, dejando únicamente a Lincoln en su forma humana.

Del otro lado, a medida que Leni avanzaba hacia su hermano, algo más sucedía. Scream, el simbionte que había estado unido a Leni, comenzó a emerger de su cuerpo. Las emociones de Leni, profundas y conmovedoras, ahora también resonaban en Scream. El simbionte mostraba una rara expresión de felicidad, reflejando la alegría de su huésped.

Leni: (con la voz temblorosa, pero llena de amor) Lincoln... ¡No puedo creer que seas tú!

Lynn, que siempre había sido la más fuerte de las hermanas, trató de mantener la compostura, pero no pudo evitar que las lágrimas llenaran sus ojos.

Lynn: (con voz quebrada) Hermano... Te hemos extrañado tanto...

Lincoln, con el corazón latiendo rápidamente, sintió cómo las barreras que había construido a lo largo de los años comenzaban a desmoronarse. Las emociones lo invadieron, y por un momento, olvidó todo lo que había pasado, todo el dolor y la lucha, mientras sus hermanas se acercaban a él.

Scream, al igual que Leni, parecía compartir esta felicidad. Aunque era un simbionte conocido por su naturaleza violenta, en ese instante, mostraba una suavidad y calidez poco comunes.

Scream: (con una voz que resonaba con la emoción de Leni) Lincoln... Nosotras también te hemos extrañado...

Finalmente, cuando Lincoln estuvo lo suficientemente cerca, Leni y Lynn corrieron hacia él, abrazándolo con fuerza. Era un abrazo cargado de años de dolor, pérdida y amor incondicional.

Lincoln: (con la voz ahogada por las emociones) Yo... también las extrañé... más de lo que puedo decir...

Mientras permanecían abrazados, los demás observaban en silencio, comprendiendo la magnitud del reencuentro. Strange y los demás héroes sabían que, en este momento, las palabras sobraban. Lo único que importaba era la reunión de una familia rota, y el resurgimiento de un vínculo que ni el tiempo ni las circunstancias pudieron destruir.

Después de unos momentos, Lincoln, con una mezcla de determinación y preocupación, llevó a sus hermanas a la mesa del comedor del castillo. Las sombras proyectadas por las velas y las luces tenues creaban un ambiente íntimo, pero la tensión en el aire seguía siendo palpable.

Leni y Lynn se sentaron, mientras Lincoln tomaba asiento frente a ellas. A pesar del alivio evidente en sus rostros, también había un peso innegable en sus miradas, sabiendo lo que había pasado y los peligros que enfrentaban. Mientras se servían algunos bocados de comida, la conversación se volvió inevitable.

Lincoln: (con voz grave pero calmada) Debo agradecerles por venir y por estar aquí, pero necesito que se queden en el castillo hasta que todo se calme. Las cosas están muy peligrosas afuera, y no quiero que se arriesguen.

Lynn: (con firmeza) No, Lincoln. No vamos a quedarnos aquí mientras tú estás en peligro. Sabemos lo que estás enfrentando, y no vamos a quedarnos al margen.

Leni: (asintiendo, con una expresión decidida) Lynn tiene razón. No podemos quedarnos sin hacer nada. Queremos ayudar. Lo que sea que esté pasando, estamos en esto juntas.

Lincoln: (con un suspiro de frustración) Entiendo que quieran ayudar, pero esto no es un juego. La amenaza es real, y no es solo sobre nosotros. Hay más en juego aquí. Su seguridad es crucial para mí.

Kamala Khan, que había estado observando, se acercó a la mesa. Su preocupación por sus amigos y la situación en la ciudad no le permitían ignorar la discusión.

Kamala: (suavemente) Lincoln, entiendo tu preocupación, pero si tus hermanas están decididas a ayudar, tal vez sea mejor encontrar una manera de integrarlas de forma segura. Hay mucho que podrían hacer, incluso dentro del castillo.

Doom, que había permanecido en un segundo plano, se unió a la conversación con un tono que mostraba su propio sentido de responsabilidad.

Doom: (con autoridad) La decisión de proteger a tus hermanas es noble, Anti-Venom. Pero en una batalla como esta, cada miembro del equipo tiene un papel. Si ellas insisten en unirse, debemos asegurarnos de que tengan las herramientas y el entrenamiento adecuados para mantenerse a salvo.

Lynn: (mirando a Lincoln con determinación) Lincoln, no vamos a retroceder. Si hay algo que podamos hacer, lo haremos. No podemos quedarnos en la sombra mientras el peligro acecha.

Leni: (con firmeza) Lo que pasa es que no solo te tenemos a ti. También tenemos nuestras propias habilidades. Scream y yo hemos pasado por mucho y sabemos cómo luchar. No vamos a quedarnos aquí sin hacer nada.

Lincoln miró a sus hermanas con una mezcla de frustración y admiración. Sabía que era imposible cambiar sus mentes una vez que se habían decidido. Aceptando su determinación, su expresión se suavizó ligeramente.

Lincoln: (con voz resignada) Está bien. Si insisten en quedarse, entonces necesito que estén preparadas. Tendrán que estar alertas y listas para cualquier cosa. Haré todo lo posible para mantenerlos a salvo, pero no podemos subestimar el riesgo.

Las tres hermanas compartieron una mirada de comprensión y determinación. La decisión estaba tomada, y sabían que estarían enfrentando la amenaza juntas, sin importar los peligros que les esperaran. Lincoln se sintió un poco más aliviado al ver la resolución en los rostros de sus hermanas, aunque el peso de la responsabilidad seguía sobre sus hombros.

La conversación se desvió hacia los detalles de cómo integrar a Leni y Lynn en los planes de la batalla, con el compromiso de protegerlos y preparar una estrategia para enfrentar a los enemigos que aún amenazaban la ciudad. Aunque el conflicto seguía siendo una sombra sobre ellos, el vínculo familiar que los unía les daba una fuerza renovada y una determinación inquebrantable.

Así, mientras el castillo se preparaba para la batalla que se avecinaba, cada miembro del equipo sabía que sus decisiones y acciones en los próximos momentos serían cruciales para el desenlace de la lucha contra el caos que se había desatado.