|02| La Dichosa Fiesta.
— ¿Jungwon, estas seguro que no es demasiado? - dijo el omega peli blanco.
— Tranquilo ddonnu, además, Sunghoon hyung tiene más ropa que nosotros - el otro omega de cabello castaño tenía aproximadamente seis bolsas con logos de marcas de ropa en cada mano.
— Pero sólo será una noche que saldremos ¡Y tenía ropa en mi armario! - reprochó cansado de llevar también cinco bolsas en cada mano.
— Necesitabas más ropa no te quejes.
— ¿Por que no me ayudaron a escoger mi ropa? Por su culpa no me pude decidir cuál llevar - el peli negro de bonito aroma a galletas señalo las compras que tenía.
— Luego no te decides en escoger así que no - respondió Jungwon.
— Tu tampoco te decides al momento de comprar ropa Jungwon - hablo Sunoo.
— Shhh silencio ddonnu.
Los tres omegas salían del centro comercial con incontables compras. Cosa que Sunoo se arrepentía mucho pues sus amigos dijieron que irían solo a comprar lo que usarían esa noche y terminaron llevándose casi media tienda.
Después de las amenazas que escucho de Youngbin, tomó la decisión de ir con sus amigos a esa fiesta. Claro que desde un principio no quería ir.
Pero al fin de cuentas alguien los tenía que cuidar si tomaban demás. Ya los conocía. Sabía que Jungwon tomaría un poco pero si se encontraba con Jay sería un completo desastre y no quería que nada malo le pase, aunque tendría que tener miedo de lo que le pueda hacer al alfa si este hacia algo que no le gustaba. Y su Hyung no es de beber pero tenía que estar alerta si se aparecía el alfa que despreciaba con todo su ser.
El de piel pálida se podía defender, pero si Youngbin usaba su voz de mando, Honnie estaría en problemas y el no lo permitiría.
Así que no le quedó de otra que ir a la casa de Jungwon para arreglarse y salir hacia la dichosa fiesta.
Estaban en la casa de su amigo Jungwon, mirándose en el espejo acomodando la ropa que había elegido de todas las compras que hizo el castaño.
Este consistía de una camisa negra de algodon de manga larga, con la mitad de esta blanca. Teniendo en el hombro izquierdo un estampado de cuadros de colores neutros. Acomodando su pantalón de mezclilla de color gris oscuro y luciendo unas botas negras.
Suspiro, pues era un atuendo sencillo pero seguía insistiendo que tenía suficiente ropa y no era necesario comprar más. Pero sus pensamientos fueron interrumpidos por una sensación de gotas de agua pegando en su rostro, haciendo que cerrar sus ojos y le pícara un poco la nariz.
— ¿Jungwon, que haces? - pregunto el peli blanco retrocediendo unos pasos, pero siendo seguido por el nombrado - ¿Qué me estas rociando?
— Es para neutralizar tu olor - siguió rociando aquel líquido, ocasionando que el otro soltara un estornudo - Yeonjun dijo que lo mejor era llegar sin olor alguno, la última vez ocurrieron cosas demasiado desagradables y es mejor prevenirlas.
— Si pero me estás echando mucho supresor - soltó otro estornudo haciendo que se aparte el castaño.
— Tu olor es un poco difícil de ocultar - y siguió roceando el líquido - ¡Quieto!
Cuando por fin terminaron de arreglarse, salieron hasta el auto quien sería conducido por Jungwon.
Quien vestía un atuendo muy lindo de una camisa de cuello alto de algodón blanco, arriba de esta tenía otra de una tela más delgada de color azul marino que tenía los tres primeros botones sueltos y un pantalón de tela color blanco. Sencillo pero llamativo para una fiesta al igual que su Hyung tenía un conjunto de una camisa de botones café oscuro acompañado de un pantalón de tela color negro junto con un par de dijes como accesorios.
Ni Sunghoon ni el sabían dónde sería la fiesta, aunque Yeonjun era quien las organizaba nunca las hacia en su casa. Bueno, si la fiesta era de tal magnitud que llenaba un bar.
Si bien era el rey de las fiestas en la escuela, siempre tenía cuidado de quienes invitaba. Y eso es lo que agradecía Sunoo, pues no tendría que convivir con personas poco conocidas para el.
— ¿Estas seguro que es por aquí? - pregunto Sunghoon, pues ya estaban algo alejados del centro de la ciudad y se estaban adentrando en una zona poco concurrida.
— Tranquilo Hyung, tu confía en mi - dijo seguro, girando el volante, adentrándose en un callejón oscuro.
— La última vez que confíe en ti, me dejaste en vergüenza con la directora - dijo Sunoo mirando a las personas que estaban en el suelo con un porro de marihuana, y siendo Kim Sunoo sus muecas no hicieron falta.
— Entre en pánico lo siento.
Y siguieron en el transcurso hacia la dichosa fiesta, pero cada vez más se adentraban en callejones que desconocían, sintiendo que estaban en un laberinto. Hasta que apreciaron una enorme puerta al final de uno de los pasillos, justo del tamaño de un auto para que este pasará fácilmente. Y así fue, y una vez adentro vieron algo que no se imaginaron.
Parecía una especie de estacionamiento gigante, donde habían incontables autos y motocicletas junto a sus dueños. Y eso solo era el principio, pues al adentrarse más en el enorme lugar, hubo una parte donde las construcciones ya no estaban, solo había una enorme pista pavimentada que se perdía a la lejanía. A los alrededores de esta habían unas especies de mini edificios donde en los balcones las personas bebían y celebraban al compás de la música que se escuchaba.
— Mierda, Jungwon ¿que es esto? - el Omega con olor de galletas hablo hacia el otro que estaba más tranquilo que el, buscando un lugar donde aparcar su auto.
— Es algo a que me gusta llamar el parque de los autos - cuando encontró un lugar apartado, estacionó el auto y se bajo, siendo seguido por los otros omegas - tranquilos, se van a divertir.
— ¿Yeonjun hace este tipo de fiestas en lugares ocultos? Jungwon responde ¿que hacen estas personas aquí? - dijo el peli blanco.
— Están esperando que hagan misa Sunoo - dijo con un tono de sarcasmo - ¡Pues están aquí para competir en las carreras!
— ¿Carreras? ¿Esto es legal? - dijo Sunghoon igual de desconcertado, dando paso a un auto que pasaba.
— Lo es... Solo si la policía nos encuentras, vengan, la fiesta nos espera - empezó a caminar directo a uno de los edificios.
Al estar en pie de la construcción, Jungwon se adentró hasta llegar a unas escaleras y subir seguido de los otros dos.
Una vez estando en el segundo piso, el Omega de olor algondon de azúcar empezó a seguir hasta una puerta doble - o como se llame - para entrar en ella, siendo recibido por un olor nauseabundo de alcohol y las luces de colores del lugar dándole en la cara.
— ¡Jungwonie, bienvenido! - hablo un chico de cabello rosado después de tomarse de un trago la bebida en su mano, se acercó a ellos dejando a su compañia en el olvido.
— ¡Yeonjun Hyung! - se hacerco el nombrado para abrazarlo para después hablar un poco fuerte gracias a la música - ¡Perdon por la tardanza, me perdí un poco en la ruta!
— ¡No te preocupes, muchos de aquí los tuvimos que ir a buscar para llegar! - tomó el basó a medio tomar de una chica que pasaba y cuando terminó se lo devolvió vacío, cosa que poco le importó la mirada de la mujer - ¡Pero al final de cuentas es por eso que no nos encuentran!...¡Sunoo, pensé que no ibas a venir!
El nombrado recibió el abrazo del peli rosa quien tenía impregnando el olor a licor en su ropa. Pero aún así le correspondió.
— ¡Lo tuvimos que obligar entre Sunghoon Hyung y yo! - hablo Jungwon -
— ¡Pues espero que se diviertan! - tomó otro trago de un chico para hacer lo mismo de hace un rato, al fin de cuentas la fiesta era de el - ¡Ire a recibir a los recién llegados, nos vemos en la pista!
Y se fue dejando a los omegas a media fiesta.
— ¡Ire a la barra, si quieren vayan a bailar! - dijo Sunghoon, viendo directo la barra de bebidas.
— ¡Ven Ddonnu! - lo jalo el castaño del brazo, aun que se negó pero ya estaba en medio de toda la multitud.
Bueno no le quedaba de otra.
Así estuvieron al rededor de treinta minutos, mientras el castaño se movía mientras tomaba de una copa con vodka - que no sabía de donde lo sacó - el veía hacia todos lados, intentando ver alguna cabellera peli negra, específicamente la de Yeongbin. Pero derrepente fue jalado de su brazo, siendo dirigido entre las personas que iban a la misma dirección que el junto a su amigo.
Cuando llegaron a uno de los balcones de la habitación en la que estaban, Jungwon lo jalo hasta estar al borde la barda y su mirada se encontró con la pista pavimentada que vio al principio de su llegada pero esta vez desde lo alto del edificio.
— Jungwon ¿que esta pasando? - pregunto refiriéndose a las personas que hasta hace unos momentos estaban a dentro en la habitación y ahora estaban afuera en el balcón o viendo por las ventanas, incluso pudo ver varias personas al pie de la construcción.
— Van a empezar las carreras ¡Y Jay hyung será uno de los competidores! - emocionado contó lo último, viendo con entusiasmo hacia el inicio de la carretera - Mira ya están llegando los corredores.
Miro hacia la dirección donde el castaño decía, viendo que entre la multitud se hacían paso unos dos autos muy bonitos y brillantes. Uno de color blanco plateado, podría decir que era un modelo de BMW M2 aunque sólo recuerda el nombre por que su padre no dejaba de hablar y enseñarle autos con ese nombre. Y lo seguía uno de color azul con una decoración de una aleta en la parte de atrás, ese no sabía el modelo.
Estos se detuvieron antes de rebasar una línea de color rojo marcada en el pavimento y empezaron a sonar los autos, haciendo rugir los motores mientras de ves en cuando el de color azul se tiraba al frente.
— ¿Van a competir? - pregunto el peli blanco sin dejar de ver hacia el frente. Intentado ver a los conductores pero en su posición no lograba ver mucho.
— Claro, aunque el del auto azul no tiene oportunidad - dijo bebiendo de su trago, apoyando sus antebrazos al barandal.
— ¿Por que no tendría oportunidad?
— Solo observa...
En eso una mujer con una vestimenta demaciado descubierta se hacerco hasta estar al frente de los dos autos, justo en medio. Su falda estaba por arriba de los muslos y tenía un top que llegaba justo debajo de su pecho, mientras usaba unos tacones altos. Pero no le prestó importancia, pues en ese momento los autos rugieron retandose el uno al otro y la chica empezó a mover un pañuelo en el aire mientras gritaba una cuenta regresiva.
Sunoo todavía no creía que estuviera en esas carreras ilegales de las cuales sólo veía en las películas de acción, pero ahí estaba, presenciando como el pañuelo de la mujer rozaba contra el suelo cuando bajo su brazo con cierta fuerza y como aquellos autos arrancaban a toda velocidad perdiéndose rápidamente a la lejanía. Los gritos de las personas se escuchaban cuando éstos partieron y como algunas personas recogían dinero por las apuestas que hacían.
Y de un momento a otro vio a Jungwon y a Sunghoon abajo en la pista mientras le daban dinero a uno de los apostadores.
— ¿Pero que-...? - no los había visto irse, y con suma rapides se habría paso entre la gente para bajar las escaleras y llegar hasta ellos con dificultad.
— Hasta que llegas Ddonnu, pensé que te quedarias allá arriba - despreocupado dijo el castaño.
— Idiotas... No me avisaron - intento recuperar aire por el cansancio de bajar las escaleras - Me dejaron solo...
— Pero si te mandamos un mensaje - dijo Sunghoon tomando de su cerveza.
— ¡Con el ruido de la gente no lo podría escuchar! - exclamó el omega de aroma a durazno.
— Bueno ya, error mio. Pero ya que estas aquí, vamos con Jay para esperar a los corredores y saber si gane un buen billete - dijo Jungwon caminando entre la multitud.
El omega castaño parecía una mamá pato en el agua enseñando a sus patitos a nadar, pues a donde iba Jungwon, iban Sunghoon y Sunoo al desconocer ese lugar.
— Won ¿que tanto tardarán el regresar? - hablo Sunghoon siguiendo al nombrado.
— ¿Los autos? Pues iban a dar una vuelta hasta el centro de la ciudad, pero los atajos son muchos, creo que dentro de cinco minutos estan devuelta.
— ¿Cinco? - pregunto incrédulo Sunoo - Pero sólo tienen dos minutos desde que salieron.
— Esos autos se veían con varios caballos de fuerza, además ya saben la ruta de memoria, llegaran rápido por lógica - hablo buscando por arriba de los cuerpos andantes.
— ¿Y que ganan con hacer esto? - pregunto de nuevo el peli blanco recibiendo la mirada de Jungwon - Digo, algún motivo debe de haber.
— Pues... El ganador se queda con el auto del otro o de lo que allan apostado, pero muchos de aquí lo hacen por diversión- ¡Jay Hyung! - aceleró el paso hasta una dirección.
Al escuchar el llamado, un chico de cabello peli negro miro en su dirección, tenía una camisa sin mangas negra con un pantalón de mezclilla del mismo color, estaba apoyado en una motocicleta deportiva de color rojo, se veía rudo e intimidante al ser un alfa, pero ya lo conocían al ir en el mismo Instituto y ser un crush de Jungwon. Cosa que era un alfa simpático.
— ¡Wonie! ¿Cuando llegaste? - dijo cuando se acercaron - ¡Oh! Hola Sunoo, hola Sunghoon.
— Hace un rato, como no te encontré por aquí fuimos directo con Yeonjun.
Con un asentimiento del alfa, siguió viendo hasta donde estaba mirando hace rato.
Era una pantalla un poco grande en la pared de uno de los muros que adornaban el lugar, donde se veía claramente desde un ángulo una persona conduciendo un auto y de otro lado de la pantalla una especia de GPS en tiempo real, donde se veía como la flecha recorría unas calles que el mismo desconcia.
— ¿Quien va ganando? - pregunto Sunghoon, viendo a la pantalla.
El chico que estaba en ella no se le podía ver con claridad el rostro, la cámara parecía estar a un lado del volante desde abajo y se veía como movía con rapidez y algo de brusquedad el volante junto con la palanca de velocidades, mientras empujaba sus piernas en ciertos momentos hacia delante, suponiendo que pisaba los pedales de freno y velocidad. Llevaba una camisa de cuello alto al parecer de algodón negro y este lo cubria por arriba de su nariz, solo dejando ver su cabello negro que se movía de vez en cuando por el viento y el movimiento que hacia. Sus ojos oscuros clavados al frente, tenía una brillante cadena de plata decorando su cuello y podía ver una chaqueta de color negro cubriendolo junto con unos guantes sin cubrir sus dedos y un pantalón de color rojo que suponia era de mezclilla
Ya lo habíamos perdido...
— No lo se... - respondió Jay, alzándose de hombros - pero ya lo sabremos.
El alfa se movió hacia la orilla de la pista de pavimento, seguido de los tres omegas, haciendo espacio hasta llegar a una posición más adecuada para ver cómo los autos empezaban acercarse a toda velocidad, mientras se acercaban el peli blanco empezó a notar la diferencia de distancia entre los dos autos.
Y el color plateado iba ganado por un metro de distancia.
Se podían escuchar como la gente al rededor con ellos, incluso Jungwon y Jay gritaban con entusiasmo, hasta que al final cruzó la línea de meta.
Dejando en claro que el era el ganador.
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