— Vamos Omega, no es como si te fuera a morder - dijo el alfa acercándose más al chico.

— Sungchul será mejor que te alejes - molesto le contestó, pues el nombrado lo había intentado acorralar contra unos casilleros.

Claro, intento. Por que el Omega opuso bastante resistencia, tanta que pareciera que fuera la fuerza de un beta. Pero su olor a durazno y chocolate blanco - una combinación no muy común - lo delataba, además de su apariencia pequeña.

— Solo será un beso, nada malo pasará - puso sus dos manos alrededor del peliblanco - lo disfrutarás, así que no pongas resistencia omega.

Se empezó acercar al rostro del chico que con un poco de asco intento alejarlo pero este puso mayor resistencia, que lo tomó de los brazos de una manera bastante fuerte, obligándolo a mantenerse quieto.

Mala idea...

— ¡Te dije que te alejes! - y con eso, le dio un golpe muy fuerte en su parte baja.

El alfa lo soltó de manera brusca y se alejó para después empezar a retorcerse en el suelo del dolor.

— ¡Maldito omega! - grito tan fuerte, llamando la atención de un grupo de chicos que estaban del otro lado del pasillo.

Sunoo rodo los ojos y desde arriba le contestó — Idiota, espero que después de esto dejes de estar apostando por intentar robarme al menos un beso.

Se dio la vuelta y recogió su mochila que había caído al suelo cuando Sungchul lo acorraló para después empezar a caminar alejándose un poco, hasta que...

— ¡Omega, adonde crees que vas! - grito con voz de mando hacia el peli blanco, quien se detuvo en seco - Más te vale regresar aquí si no...

— ¿Si no que? - interrumpió Kim, dándose la vuelta con una expresión enojada mirando al chico en el suelo, incrementando su olor a uno más fuerte - No te tengo miedo Sungchul, yo no soy como otros omegas que con solo gritarles con esa estúpida voz de mando los tendras a tus pies.

Se acercó a el y desde arriba siguió.

— Yo no obedezco la maldita voz de alfa y mucho menos la tuya, así que deja de perder el tiempo imbécil e intenta mejorar tus calificaciones por que están de la mierda.

Y con eso se dispuso a caminar en dirección contraria rumbo a la cafetería, pasando por el lado del grupo de chismosos quienes habían grabado gran parte de la humillación que le dio a aquel alfa.

Aunque no era la primera vez que esto sucedia.

Sungchul era uno de los alfas que más seguían intentado sumisar a Kim Sunoo, aunque ninguno lo a logrado, pues se ganan un buen golpe en la mejilla o en los testículos. Algunos no pasaban de pretender cortejar al omega, pero los alfas son muy estúpidos que sus cortejos los hacen en su cama.

"Imbéciles... "

Esa era la sociedad en la cual le tocó vivir.

Y no sólo los alfas están tras de el, omegas e incluso betas lo desprecian por tener a la mayoría de los brutos alfas detrás. No sabía por que se enojaban tanto si no valían la pena esos altas. Son personas con demaciado orgullo...

— ¡Ddonnu aquí!

Sunoo vio a un pequeño chico pelicastaño agitando su mano para que se acercara a la mesa donde estaban.

— ¿Qué pasó, por que llegaste tarde?

— Lo de siempre Jungwon - se sentó al lado del nombrado, dejando su mochila a un lado de el -

— No se si envidiarte o tenerte lastima amigo - dijo Jungwon, tomando de su jugó -

— ¿Ahora quien fue? - hablo una tercera voz con un tono fastidiado -

— Sungchul, Sunghoon Hyung, esta vez solo quería un beso - dijo tomando un poco del desayuno de Jungwon -

Yang Jungwon era uno de los amigos de Sunoo, era un omega extremadamente lindo, su olor era un poco dulzon, siendo este algodón de azúcar con un toque de vainilla, era conocido en el Instituto como un chico muy seguido por los alfas y betas - pero no al extremo de Sunoo - no tenía pareja, pues algunos alfas intentaron sobrepasarse con el que recibieron una muy fuerte patada en el estómago.

Park Sunghoon era otro de los amigos del nombrado "omega rebelde". Un omega demaciado hermoso, su aroma a  galletas y canela era bastante adictivo, era uno de los patinadores reconocidos de la escuela, a decir verdad era bastante frío y directo con las personas. Pero eso no quiere decir que no sea cariñoso y comprensivo con las personas.

— Youngbin no te quita la mirada Hyung - dijo Jungwon mirando atrás del peli negro -

Este giro para ver cómo el alfa le sonrió al ver que lo estaba mirando. El omega rodo los ojos y siguió comiendo.

— No se cansa de ser un pesado - dice fastidiado -

— Dimelo a mi, son unos completos idiotas - hablo Sunoo, robándole una papa a Jungwon -

— Oye Sunoo - llamó el castaño al peli blanco - ¿estas seguro que no quieres ir a la fiesta del sábado? Dicen que Yeonjun esta esmerandose mucho en los preparativos.

— ¿Ustedes irán? - miro a sus amigos esperando respuesta -

— Jay me invitó a ir. Pero no quiero ir solo - Jungwon bajo su mirada a su comida, intentando que no se dieran cuenta de su sonrojo -

— No voy a dejar solo a Jungwon, así que iré con el - hablo Sunghoon, siguiendo con su comida -

— No lo se chicos. No quiero estar en una fiesta con demasiadas personas...

— Será divertido ddonnu - intento convencer al mayor, pero al no ver alguna señal positiva volvió hablar - ¡No me puedes dejar solo Kim Sunwoo!

— Irás con Sunghoon hyung. ¡Sabes que de los dos el es el más responsable!- hablo del mismo tono de voz Sunoo -

— ¡Si pero no será lo mismo! Hyung no es muy sociable que digamos - se cruzó de brazos Yang viendo con su ceño fruncido a sus mayores -

— No te lo discuto...

— Solo faltare yo, no es como que ustedes dos no hayan ido solos algún bar - dijo el peli blanco viendo como sus amigos se lo quedaron viendo con sorpresa - ¡No me digan que no! Ya me llegaron diciendo como se la pasaron esa noche de tu cumpleaños Yang Jungwon.

— Tu no quisiste acompañarnos - se defendió - ¡Pero quien fue el chismoso que fue con el chisme!

— ¡Eso ahora no tiene nada que ver!

— ¿Mierda, se pueden callar? - hablo con fastidio el de tes pálida - están haciendo un escándalo.

Ante el regaño, Sunoo y Jungwon se retaron con la mirada para después sacarse la lengua muy infantilmente.

"Sip, esos son tus amigos Sunghoon... "

Sunoo estaba caminando tranquilamente hacia su casa. La jornada escolar había terminado por ese día y ya no quería saber más de la escuela.

Después de despedirse de sus amigos que se iban juntos, pues prácticamente vivían uno al lado del otro. Salió rumbo a su hogar, intentando llegar lo antes posible.

He intentar me refiero a que sus planes se vieron afectados por unos brazos lo llevaron cerca de un callejón del cual estaba pasando, para después acorralarlo contra la construcción.

"No otra vez... "

Y cuando estuvo a punto de insultar a quien se atrevía a empujarlo y acorralarlo. El olor a alfa llegó a el demaciado rápido y fuerte que hizo que se cubriera su nariz y viera hacia arriba para encarar al alfa con una cara de pocos amigos.

— ¿Que es lo que quieres Youngbin? - dijo aún con la nariz tapada.

— Escuchame bien Kim Sunoo, necesito que me ayudes con Sunghoon - hablo el alfa demaciado cerca de la cara del Omega.

— ¿Que te ayude con Sunghoon? Estas loco si crees que lo haré y hazte a un lado - empujó fuertemente al pelinegro haciendo que este quedará más lejos, pues su aroma ya lo estaba fastidiado demaciado - ¡Sunghoon hyung no te quiere entiende!

— Eso es ahora pero cuando me de una oportunidad verás que el y yo seremos la pareja más enamorada que allas visto.

— Que estupideces estoy escuchando. No te ayudaré - y se dispuso a seguir caminado si no fuera por que el alfa volvió hablar cosa que lo detuvo en secó por lo que dijo.

— Sunghoon no es como tu Sunoo, el sigue siendo un Omega y si yo digo una sola palabra con mi voz de mando lo tendré a mi disposición.

— Más te vale que no se te ocurra ponerle una mano encima si no...

— Creeme Kim. Aun que lo cuides todo lo que quieras no lo podrás cuidar todo el tiempo. El es demasiado delicado, no es como tu o Jungwon que son rebeldes. No se podrá defender - dijo con un tono burlón, viendo como el peliblanco estaba más que furioso - Cuando te descuides lo podré hacer mio cuando quiera.

— ¿Entonces por que me estabas pidiendo ayuda? Es demaciado idiota que me pongas sobre aviso - pregunto molesto.

— Lo quería hacer de manera pacífica, pero al ver que no quieren cooperarar tuve que tomar otras medidas. ¿Como se vería mi marca en su bonito cuello? - fingió pensar aquella pregunta con una estúpida sonrisa -

— Escúchame bien, si le llega a pasar algo a mi hyung te parto esa maldita cara que tienes ¿entendiste? - se giro en su propio eje para seguir su camino, no quería seguir cayendo en provocaciones.

— Creeme que no sabrás cuando me acerque a Sunghoon, Omega - el peliblanco escucho una risa demaciado irritante a sus espaldas, pero se mantuvo firme al frente.

Tendría que ir a esa fiesta con sus amigos, no los pondría en riesgo. Menos a su bonito hyung.