Limpia mi alma capítulo 5

La cena transcurrió sin ningún incidente ni hecho recalcable, Naruto tomó sake junto a todos los demás pero sin excederse al igual que el Hokage, el Kazekage y su esposa, los 2 mandatarios obviamente se contuvieron para no dar malas apariencias debido a las estrictas normativas de "decencia personal" mientras que él y su mujer no querían dar malas influencias a sus pequeñas cuando pasaran a recogerlas a casa de sus abuelos, en el otro lado de la mesa, Sakae Uchiha, no paró de beber pese a la preocupación de su nii-san, tras un gran banquete, risas, alguna que otra previsión de la futura vida del rubio, el grupo se fue dispersando hasta dar por terminada la cena, Itachi se mantuvo en silencio la mayor parte del tiempo, casi sin comer o beber, vigilante y protector con su hermana pequeña, cada vez más borracha y decaída, hasta el punto de desvanecerse sobre la mesa preocupando a los pocos que quedaban en la sala.

Naruto: Se encuentra bien?.- Muy preocupado por su compañera de equipo, Itachi puso un semblante triste observando a su hermanita en un estado lamentable.

Itachi: Si, no os preocupéis por ella, se peleó con nuestra madre esta mañana y es por eso que tomó demasiado...- Mintiendo.- Pero no quería perderse por nada del mundo esta fiesta, es por eso que vino pese a no encontrarse muy bien anímicamente, espero que no les haya molestado.- Con gesto serio.

Naruto: Oh por favor, no hay problema alguno, es más, agradezco mucho vuestra presencia aquí, espero que mañana esté mucho mejor.- Sonriendo forzadamente al ver a su amiga en ese estado.

Itachi: Por supuesto, no os preocupéis, me la llevaré a casa ya para que descanse y se reponga, fue una velada fantástica, de nuevo te felicito en nombre de todo el clan Uchiha y espero de todo corazón que logres muchos éxitos que te catapulten a la eternidad de la fama.- El rubio asintió contento y se levantó de su sitio bordeando la mesa para tenderle la mano al ambu que aceptó el gesto con una sonrisa forzada.

Naruto: Gracias a vosotros, espero no decepcionarles, muchas gracias de nuevo por vuestra asistencia y deseo de todo corazón que Sakae se recupere.- Dicho esto, el Uchiha mayor se levantó tomando delicadamente a su hermana cargándola sobre su espalda para salir a paso lento del restaurante ante la atenta mirada de los pocos comensales que quedaban a esas horas, Kakashi tosió levemente llamándoles la atención.

Kakashi: Bueno, yo también he de irme, y te lo recomendaría a ti también Naruto, mañana a primera hora te quiero en mi despacho.- Con esto dicho, el Hokage abandonó la sala no sin antes despedirse con un leve cabeceo y una sonrisa, el resto fue retirándose en un lapso de unos 30 minutos quedándose el rubio y la pelirosa solos.

Naruto: Bueno, parece que solo quedamos tú y yo... deberíamos pagar la cuenta y marcharnos a recoger a las "terremotos" de casa de tus padres.- Su esposa se repegó a él apoyando su cabeza en su hombro sonriendo.

Sakura: Pagué la cuenta por adelantado... podemos irnos cuando desees.- El muchacho sonrió acercando sus labios a los de su amor dándole un pequeño beso.

Naruto: En ese caso, deberíamos irnos ya y recoger a nuestros soles... mañana me espera otro día infernal...- La ojijade rio levemente abrazando el brazo de su esposo.

Sakura: Al final... parece que no te agrada mucho el puesto de Hokage...- Su rubio suspiró con una pequeña sonrisa mientras jugueteaba con los cabellos rosas de su amada.

Naruto: La verdad... es que no mucho... pero teniendo a mi amada esposa y niñas esperándome en casa, cualquier trabajo es el mejor del mundo.- Besando a su esposa para después coger el peluche y marcharse cogidos de la mano a recoger a sus pequeñas.

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Itachi llegó a su casa, abrió la puerta encontrándose con todo a oscuras, como era normal, sus padres se habrían marchado a dormir hace rato, mejor, así no verían el estado de su pequeña hermana, con cuidado de no hacer mucho ruido, subió las escaleras para llevarla a su cuarto, abrió la puerta y la posó delicadamente en su cama mirándola con tristeza, restos de lágrimas eran palpables en su hermoso rostro... había sido una noche muy dura para ella, se dispuso a marcharse pero unos pequeños gemidos de su hermana centraron su atención.

Sakae: No me dejes... no me dejes... Naruto... no me dejes...- Llorando, Itachi sintió su corazón estremecerse de impotencia, suspiró resignado y se sentó al borde de la cama agarrando una de las manos de su hermana.

Itachi: No soy él... pero velaré tu sueño como si lo fuera...- Susurró secando las lágrimas del rostro de su hermana con delicadeza.

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Lejos de allí, en una base subterránea oscura y silenciosa un hombre de avanzada edad con la mitad del rostro vendado y apoyado en un bastón de madera recibía a algunos de sus hombres, shinobis de la organización secreta de Konoha denominada el "NE" o "Raíz", este sujeto, uno de los consejeros más veteranos de la Hoja de nombre Danzō Shimura llevaba tiempo tramando un plan maestro para tomar el poder en la villa oculta entre las hojas, el momento era el propicio, los cambios de poder sin siempre el momento más vulnerable para cualquier sociedad jerarquizada, usaría eso a su favor, un golpe de efecto para generar conflictos internos lo suficientemente graves como para desestabilizar toda Konoha e iniciar una guerra civil de la cual el sería instigador, pero nunca participante, sus espías dentro de los clanes shinobi más importantes habían recabado suficiente información como para trazar el ardid perfecto, sabían a quién atacar, cómo hacerlo, y como explotar el dolor que le generarían al sujeto clave de su conspiración, sembrarían desconfianza, germinarían odio y recogerían el poder absoluto debilitando a todos sus obstáculos.

Danzō: El plan está preparado... quedan pocos días para el cambio de poder, usaremos a varios mercenarios y shinobis para crear problemas en la frontera, todo está planeado al milímetro y mandarán al jinchuriky a aplacar los problemas dejando vía libre para que vosotros hagáis vuestro trabajo.- Girándose hacia los cuatro encapuchados que escuchaban a su líder postrados en el suelo.- Nada de conteneros, quiero que seáis lo más sangrientos posible, cuando el jinchuriky esté de vuelta a la villa se os avisará para que estéis preparados para confrontarlo en su casa, que el panorama que encuentre en su interior quiebre su alma y rompa su mente, no quiero que lo matéis, solo limitaos a llevar esto en vuestro rostro.- Extendiéndoles 4 máscaras blancas con 2 agujeros para los ojos, y el abanico Uchiha grabado en ellas.- Que al llegar vea lo que le habéis hecho a su familia, y vuestro sharingan... incapacitadlo con un genjutsu para que podáis escapar, cuento con vosotros 4 para iniciar el desprestigio de vuestro clan y poder organizar su exterminio... pronto... muy pronto... esta villa se sumergirá en el caos y nosotros podremos aparecer para hacer prevalecer el orden.- Los 4 shinobis asintieron recogiendo sus máscaras desapareciendo en explosiones de humo, Danzō se retiró con una sonrisa de satisfacción, todo estaba marchando deacuerdo a sus previsiones.

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La mañana llegó a Konoha, Naruto dormía tranquilamente abrazado a su esposa con el conejo de peluche entre ellos 2, la puerta de la habitación se abrió lentamente asomándose dos pares de ojos, unos verdes y otros azules, esta se movió un poco más dando espacio suficiente a las 2 intrusas para colarse en el cuarto, con mucha calma y cuidado gatearon conteniendo su respiración producto del nerviosismo, con la cama a escasos centímetros decidieron rodearla cada una por un lado hasta colocarse a espaldas de sus padres, la ojiazul observó a su hermana que asintió decidida sacando una especie de caña de pescar construida a partir de un palo de madera, una cuerda, un yo-yo con un pequeño taco de madera como si fuera un carrete y un gancho que era básicamente el enganche de una percha, Kae se dispuso a colocar la caña a la altura exacta y a liberar lentamente el gancho que descendía lentamente, Aru contuvo la respiración viendo como éste rozaba la cabeza del muñeco buscando engancharse en el lazo rojo que su madre le había puesto a modo de collar, la punta rozó el lazo y Kae la movió hacia delante Volviendo a pasarse, un movimiento por parte de su padre las alarmó por lo que la pequeña pelirosa movió la caña más de la cuenta enganchando por error la boca de su padre.

Aru: Kae-chan...- Susurrando muy asustada, su hermana se llevó el dedo índice a la boca a modo de decirle que se mantuviera en silencio, movió levemente la caña sin lograr desenganchar a su padre, probó a quitar sedal pero tampoco por lo que optó por tirar hacia un lado porvocando que su padre pusiera caras graciosas incitándola a reírse.

Kae pov: Ahora no...- Conteniéndose.- Vamos...- Estirando la boca de su pobre padre que sacó la lengua babeando.- Jajajaja rio para sí ante semejante espectáculo.

Naruto: Ash... Shakura-shan...- Aru se llevó las manos a la boca evitando la carcajada mientras las manos de Kae temblaban por los mismos motivos, al oír a su esposo, Sakura abrió los ojos topándose con la escena más extraña de su vida.

Sakura: Pero qué?.- Observando el careto de su marido y a Aru detrás de este con las manos en la boca y dos lágrimas producto del enorme esfuerzo de mantener a raya la carcajada.- Niñas!!!.- Las dos dieron un respingo y la ojiverde soltó su herramienta dejándola caer a los pies de su madre deshaciendo la mueca de su padre.

Aru/Kae: G-gomen... oka-san...- Muy avergonzadas por haber sido descubiertas, Sakura las iba a regañar pero... en ese instante, Naruto comenzó a masticar el gancho poniendo mala cara.

Naruto: Mmm... viejo... no cociste bien... los fideos... están duros...- Con un hilo de baba abandonando su boca sacándole una gota enorme de sudor a su mujer y provocándoles dolor de estómago a sus hijas que apenas si podían contenerse. Sakura tomó la cuerda y tiró un poco sacando el pequeño gancho totalmente magullado por los mordiscos.- Viejo... ha... decaído este... lugar...

Aru/Kae: Aguanta...- Con las caras Rojas y los ojos llenos de lágrimas...

Sakura: Ah... este hombre...- Reprimiendo una pequeña risa al igual que sus hijas.