Siento que me estoy quedando sin tiempo, al estar contigo me hace ser mejor

Después de cada tormenta vendría de nuevo un mejor clima, cada palabra dicha por Zoro había hecho un hueco en mi interior y de alguna forma estaba agradecido por su cambio de actitud, así fuesen las hormonas las culpables de mi actitud cansada.

Aquel tipo que me engendró no fue quien realmente que me crío, si Zeff me viese ahora me hubiera cortado por la mitad y debería de actuar cómo alguien responsable en vez de echarle toda la culpa al espadachín de mierda.

Estaba mucho más mejor después de esa conversación motivacional, ya no me encontraba encerrado en un calabozo por mi padre, era libre de decidir cómo criar a esta nueva criatura y darle un mejor futuro.

Si seguía con mi meta de encontrar el All blue y construir un nuevo restaurante lo más probable es que le daría una mejor vida, obviamente no iba a ser normal pero trataría de criarlo con amor.

El cabeza de cactus tenía razón en decir que tendría que aprender a lidiar con esta nueva situación, aprendería con el pasar del tiempo y también me sentía mucho más cómodo con el embarazo, pasar de ser alguien infertil a tener esta clase de milagros podría tener sus cosas positivas.

Además mis compañeros lo tomaron con calma y nos felicitaron, evidentemente el más feliz fue Luffy al saber que tendría un nuevo tripulante en su barco por lo que con la bendición del capitán me sentía más liviano.

A medida que aceptaba el embarazo las cosas con mi cuerpo comenzaron a mejorar, los mareos y vomitos eran nulos, mi rendimiento había vuelto a la normalidad, con 18 semanas de embarazo parecia volver a la normalidad.

Excepto por compartir mi tiempo con el apestoso cabeza de cactus, dormíamos en la misma habitación y algunas veces cuando el se bañaba en la misma cama, se había vuelto un sobreprotector con cada cosa que hacía y no me dejaba en paz con sus estúpidas palabras.

"Quieres que te acompañe mientras de bañas, puedes caer"

"Estaré haciendo ejercicio si quieres puedes descansar"

"No creo que te veas gordo, solamente es el ángulo"

"Si sigues comiendo esa asquerosa combinación vomitare en tu cama"

Ahora mi vida giraba en tornó a Zoro, básicamente éramos un viejo matrimonio, agregando que muy pronto tendríamos que marcarnos por el bienestar del parto. Pase de ver mi estomago plano a estar más visible, había crecido con regularidad y tendría que usar mis camisas mas holgadas y de por fuera, mis pantalones me quedaban mayormente apretados por lo que tuve que acostumbrarme a vestir con pantalones más cortos.

Todo me estaba quedando apretado y así seguiría hasta el parto, probablemente nacería en julio si todo salía bien y aún no sabíamos su género, la mayoría de la tripulación apostó que sería niño.

-Me veo ridículo con esta camisa-Me digo viéndome en el espejo mientras que Zoro seguía durmiendo en la habitación.

Había vomitado toda la noche y parecía estar medio muerto, pronto también llevaría su celo por lo que se encontraba más intenso.

Gracias a Franky ahora teníamos una habitación para los 3, no era tan grande pero apenas era perfecta.

-No te queda mal cejas rizadas, es tu cuerpo adaptándose y esas cosas-Dice el cabeza de musgo sin mirarme y boca abajo durmiendo-Deberías abrigarte.

-¿Me estás diciendo gordo?-Le pregunté enojado mientras esperaba por una respuesta pero el idiota se había dormido de nuevo.

Salí de la habitación directo a hacer el desayuno y dejar al idiota enfermo en paz, al parecer le había pasado mis síntomas a Zoro quien ahora era el que se la pasaba vomitando, mareado y no sabría decir si hasta desmayado.

-Te ves tan tierno, esa camisa te queda bien-Dice Robin sonriéndome mientras pasaba a mi lado.

-Eres un sol Robin-Le digo muriéndome de la felicidad y con más autoestima para poder cocinar.

Dentro de poco llegaríamos a una isla donde Luffy se reuniría con sus hermanos Ace y Sabo, por lo que era mejor organizarse desde temprano, comencé a hacer el desayunó mientras escuchaba cómo alguien abría la puerta y se sentaba al frente de mi.

Terminé por hacer el desayunó y me sente junto al cabeza de musgo que probablemente le seguía doliendo el estómago.

-En serio no es necesario que estés tan intenso cabeza de musgo, te prometí que no huire de nuevo-Dice Sanji preparando la cena-Además no es cómo si no me pudiera defender, estoy embarazado no invalido.

-Chopper te prohibió totalmente fumar y tengo que estar pendiente de que tomes tus pastillas a la hora que es-Responde Zoro con la cabeza sobre la mesa-También tendremos que ir de compras para el bebé, no tenemos nada.

-Hablando de eso probablemente tenga que avisarle al viejo, no todos los días le dices que tendrás a su primer nieto-Le digo mientras miro de manera pensativa la puerta.

-Quiero saber como le dirás que ahora estas emparejado conmigo-Sugiere Zoro de manera burlona levantando su cabeza.

-No me recuerdes eso imbecil, podemos evitar la parte en la que tienes que tocarme-Le digo mirándolo

-Chopper dijo que tiene que ser una marca completa para no preocuparme en el parto, solo será una vez -Dice Zoro opinando-Todo irá bien cocinero, solamente relájate y después también ne muerdes.

-Esto es tan incomodo nunca me imaginé siendo marcado por un hombre y menos tú -Le menciono mientras lo observó-Menos mal tu estarás en celo, seria más incomodo siendo tú.

-Según comprendí tus hormonas están en los aires, porque lo complicas de ese modo-Responde Zoro-Sólo deja que todo pase.

-¿Estás queriendo decir que soy un pervertido? Si sigues así quien será víctima de mi cuchillo serás tú imbecil-Digo amanezandolo con el cuchillo.

-Siempre has sido un pervertido, yo no le tengo miedo al cuarto puesto-Me respondió bromeando obtener lo que quería.

Comencé a patearlo mientras el se defendía con una sonrisa burlona en su cara, sus feromonas se volvieron mucho más dulces y el olor a excitación llegó a mis fosas, era muy evidente que el masoquista se estaba calentando al verme golpearlo.

El idiota se estaba excitando porque lo estaba golpeando, me detuve un momento mirándolo aún más enojado pero cuando iba a atacar de nuevo nos interrumpieron.

Se me olvidaba que era el desayuno.

-¡idiotas dejen de pelear por el bien del bebé!-Dice Nami entrando por la puerta y golpeando nuestras cabezas-Ya casi llegamos a la isla.

-Sanji comida-Dice Luffy entrando a la cocina junto con los demás-Ace estará feliz de volverte a ver.

-Espera cocinero de la mierda, por que el hermano de Luffy estará feliz de verte-Me reclama Zoro en posición de defensa.

-¡Ambos irán a mi consultorio de inmediato!-Dice Chopper a poco de darle un aneurisma de la rabia.

A regañadientes caminó hacia el consultorio evitando por completo los reclamos de Zoro, Chopper hace que me acueste y me subo la camisa por costumbre, Chopper con la máquina de le presto Law lo mueve y se queda por un momento asombrado.

-Porque lo estas moviendo tanto, ¿esta bien?-Dice Zoro preocupado mirando la pantalla.

-Esta en perfecto sin embargo les tengo una sorpresa-Dice Chopper emocionado.

-Lo vez, el bastardo siempre está sano-Le dice Sanji a Chopper señalando la pantalla del ultrasonido.

-¿Y si es una niña?-Le pregunta Chopper a Sanji más tranquilo.

No puede ser, no puede ser.

¿Acaso esto era un sueño?

-Será la princesa más consentida con tal de que no salga cómo el cabeza de musgo-Digo mirando hacia la pantalla.

-Las demás veces no se dejaba ver pero miren esto-Dice Chopper señalando la pantalla mientras que yo no podía ver nada-Ven esto no tiene aparato masculino.

-¿Que quieres decir? ¡ES NIÑA!-Grito emocionado por ganarme la apuesta a mi hermosa Nami.

-Felicitaciones Sanji, es una niña-Dice Chopper feliz y olvidando el hecho de que estaba enojado.

-Así sea una mujer será la mejor espadachína, no dejaré que ningún imbecil le gané -Dice Zoro sonriendo.

-No empieces con tus cosas espadachin de mierda, ella será libre de hacer lo que quiera-Aunque ya la había imaginado derrotando al viejo en una competencia de cocina-Apenas bajemos le daré la noticia al viejo.

-Se lo diré a la bruja, con ese dinero compraremos las cosas de la bebé sin necesidad de pedirle prestado-Dice Zoro feliz corriendo del consultorio.

-Será mejor que me vaya a descansar, el desayuno me dejo agotado y ni siquiera desayuné-Me había olvidado por completo del desayuno y ahora la expuesta señorita también tenía hambre.

Ya me puedo imaginar todos los vestidos que le compraré, esperaba que por lo menos sacará los ojos azules de mi madre y en el fondo el cabello del musgo.

Por fin habíamos llegado a tierra firme por lo que sin importarme el pleito que estaba haciendo el idiota del espadachín con mi hermosa Nami, salí de inmediato a los puestos de comidas para probar todos los manjares.

No me fijé cómo a mi lado se encontraba una presencia bastante conocida en el pasado y aquellos sentimientos reprimidos salieron a la luz al verlo tan hermoso cómo siempre por lo que me fijé en su característico sombrero.

-¿Ace? Realmente no esperaba verte tan pronto-Le sonrió de manera amable mientras que el me devuelve el gesto.

-Hace bastante tiempo que no te veía, Luffy debe estar cerca entonces-Dice Ace sonriéndome mientras seguía comprando en el mismo puesto de calamar-Por cierto felicidades.

-¿Luffy te lo dijo no?-Ese pequeño bastardo seguramente si seguía así de chismoso pronto la noticia le llegaría al viejo y me mataría.

-El esta bastante feliz de tener un nuevo nakama, también me siento feliz que al final terminaras aceptando otro lazo-Señala Ace cambiando el rumbo de la conversación-Sigo preguntándome si habré tomado la mejor decisión.

En aquel entonces ambos nos habíamos conocido a Arabasta, sabíamos que éramos pareja destinada pero nunca llegamos tan lejos con los roces o besos por el miedo de quitar nuestra libertad, decidimos tomar destinos diferentes para al final en Marineford al borde de la muerte Ace decidir romper el lazo.

Lo último que sabía era que Marco lo había marcado para no morir, aceptaba las circunstancias del destino y no tenía ningún problema en verlo vivo.

-Sabes que no tenias otra opción, moríamos o vivíamos ambos-Lo miró por primera vez en años observando la gran cicatriz en su pecho-Esto es lo que nunca te advierten de ser pareja destinada, de alguna u otra forma siempre nos terminamos encontrando.

-Ser un omega al borde de la muerte y con el lazo roto no fue nada fácil, además de fingir mi muerte por el bien de todos-Dice Ace de manera sincera-Tal vez en otro universo pudimos ser felices.

-Deberíamos decir que seamos felices en este, vamos tonto-Digo ofreciéndole mi brazo para que se agarrara-Estás vivo, lo demás no importa.

-Tú estás muy embarazado, ¿quien es el dueño del milagro?-Dice Ace observando mi vientre con detenimiento.

-Digamos que el cabeza de musgo y yo ahora estamos en algo-Le respondí sonriéndome.

Se había vuelto más hermoso y tal vez por mis viejos anhelos quisiera saber más de él, pero tenía que superarlo y seguir.

Seguimos hablando durante un rato hasta que finalmente apareció Luffy junto a un enojado cabeza de musgo, Ace se retiro de mi lado para seguir junto a sus hermanos mientras lo miraba irse.

Se había vuelto un omega mucho más fuerte, si no hubiera dudado de mi sexualidad en aquel entonces tal vez mi destino hubiera sido otro.

-Rizado se que no te va gustar lo que te diré pero mi celo acabo de adelantarse-Dice Zoro llevándome agarrado de la mano-¿Estabas con tu destinado no?

-¿Zoro que crees que estás haciendo?-Digo incomodo al ver cómo me llevaba probablemente hacia un hotel-No crees que es muy pronto.

-Lo siento mucho Sanji pero es mejor acabar con esta tortura, deberías de relajarte-Menciona Zoro para después cargarme hasta la habitación del hotel.

Esto no podía estar sucediendo justo ahora cuando había aparecido Ace, estoy muy abrumado para pensar en cómolo haria.

No creí estar preparado para estar marcado que por culpa de su olor y hormonas era inevitable no seguirle el paso, nos adentramos a un hotel y me sentía nervioso por el bebé.

Era mi primera vez con otro alfa y este alfa era Zoro, por lo que internamente no estaba preparado para tal bestialidad.

-Deberías relajarte rizado, haré lo posible para que lo disfrutes-Susura Zoro detrás de mi espalda mientras me abraza.

-No crees que será raro hacerlo con un embarazado, literalmente ni me puedes abrazar por completo-Le susurro de manera nerviosa oyendo su corazón.

-Será raro perder esta oportunidad-Termina de decir Zoro mientras lame mi cuello de manera lenta-Usaré mis feromonas para hacer esto más fácil.

Mientras siento mi cuello caliente por sus besos, sus manos se adentran en el interior de mi camisa y siento cómo masajea, me quita mis prendas y comienza a morder todo mi cuerpo.

Cómo si fuera parte de sus feromonas y mis hormonas, no se siente tan mal al momento que comienza a masajear mi miembro por fuera de la ropa, me baja mi pantalón y siento un líquido saliendo del interior de mi.

-Creo que ese es tu cuerpo reaccionando a las feromonas, solamente concéntrate en el placer-Gime Zoro detrás de mi mientras me sigue besando y trata de tantear con sus dedos mi entrada.

Me tumba en la cama y me voltea quedando detrás de mi, probablemente buscaba una mejor posición y era mejor en cuchara.

Trató de concentrarme en el placer pero era muy difícil con tantos pensamientos en mi interior y ese nuevo líquido en mi trasero, no siento cuando Zoro se deuda a mi lado y se adentra lentamente en mi interior para moverse de manera lenta, siento cómo si todo mi cuerpo se acostumbrará a sus movimientos y el placer está por sí solo, alza mi pierna y intensifica sus penetradas.

Mi mente se encontraba tan nublada por el placer y el dolor de ser mi primera vez, no podría disfrutarlo con total libertad gracias al embarazo pero sus feromonas me mantenían dopado.

Siento cómo nuevamente cambiamos de posición y ahora es el estando encima de mi, mis colmillos comienzan a salir esperando a que Zoro llegara finalmente y mis instintosalfa salen a la luz cómosi estuviera en celo, siento su mano tocando mi miembro con fuerza hasta venirme y lo siguiente que siento es mi interior llenarse por completo y su nudo adentrarse, sentía mucho dolor hasta el punto de temer por el embarazo.

Pero el se acerca a mi cuello y lo muerde creando nuestro vínculo, yo lo acerco y de manera inmediata muerdo también su cuello creando un vínculo que nunca se rompería.

Acababa de limitar mi existencia solamente ahora en Zoro.