16
- Buenos días - saludó con voz suave sacudiendo levemente al niño - Despierta Reich - le vió atentamente mientras despertaba poco a poco
- Hmm... -
- Venga ya pequeña sabandija - apareció el otro chico abrazando a su pareja con un brazo mientras que el otro se dirigió a sacudir al menor
- Hey! - le regañó para detenerlo, le sonrió calmadamente - Reich despierta - volvió a susurrar y en cuanto el alemán abrió sus ojos la luz del sol entrando lo lastimó, dejandolo confundido
- Reich - habló otra voz, diferente a la de los gemelos que Third recordaba, se sentó en la cama frotando sus ojos - Reich mi amor despierta - susurró con cautela la voz de aquel estadounidense
- Onu? - murmuró algo confundido
- Como estás? - se sentó a su lado acariciando su cabeza
- bien - respondió debilmente acomodandose en la cama para apoyarse en su pecho
- cuidado, no vayas a aplastar tu estómago de nuevo cariño - se movió un poco para abrazarlo con cuidado
- mi que? - se apoyó en la cama confundido sin entender que pasaba
- el bebé Reich... - continuó acariciando su espalda suspirando cansado, lo de siempre todos los sábados por la mañana
Reich se sentó con brusquedad haciendo asustar al otro, movió la manta a un lado y levantó la polera que usaba como pijama. Se quedó estático viendo el bulto de su vientre.
- Estoy embarazado? - cuestionó aún confundido, Onu no entendía por que la pregunta
- Pues... si, desde hace 6 meses Third - respondió con obviedad
- Cuando lo hicimos? -
- No lo hicimos para concebirla, no podíamos así que fuimos a una clínica, acaso no lo recuerdas? -
- Hace cuanto tiempo salí del psiquiátrico? -
- Como... 3 años más o menos - se sentó a su lado abrazandolo por los hombros - Estás bien?
- No recuerdo nada -
- Como? Nada nada? - vio al otro negar y se preocupó - bien, cierra tus ojos, respira y trata de recordar algo
- Vamos a tener un hijo? Estamos casados?! - brincó asustado y con miedo
- Reich calmate! - lo abrazó para tratar de calmarlo
- Por qué no puedo recordarlo?! -
- Solo es por tus pastillas si? No te asustes, respira si? Todo va a estar bien - le dió mimos unos minutos mientras el fascista inhalaba y exhalaba con calma para relajarse al menos mínimamente
- Está bien, seguro ya me voy a acordar, no te preocupes -
- Quieres tomar algo de agua? -
- Si por favor - se mantuvieron tomados de las manos durante un par de horas.
A veces Reich necesitaba un respiro, a veces Onu lo necesitaba. Pero nunca encontrarían la paz estando juntos en estas condiciones.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top