º Like the Watterson º

Una semana había pasado desde el día de la cita y los niños no pudieron hacer estado más emocionados al presenciar como todos los días YoonGi venía a almorzar y a veces a cenar a casa.

La escuela ya había acabado y las dos pequeñas caminaban de la mano regresando a casa después una gran y aburrida jornada escolar, emocionadas por volver y comer un delicioso almuerzo en casa de su papá, junto con YoonGi.

Saltaban por la acera a solo una cuadra de su casita cuando, de la nada, un ladrido las hizo parar de golpe.

Rosé tembló en su lugar creyendo en posibles causas de ese ruido. En cambio su hermana se acercó curiosa al basurero de esa pared.

- ¡Es una bestia! -alarmó Rosé alejándose un poco.

- No, Rosie -contestó JiWoo acercándose a pasos lentos.

JiWoo se asomó por la tapa del basurero encontrándose a una pequeña criaturita llorando.

¡Era un perrito!

Sonrió en grande tratando de sumergirse para cargarlo, fallando estrepitosamente.

- ¡Ayúdame, es un perrito! -pidió y de inmediato su hermana la abrazó de las rodillas y la levantó para luego tirarla al basurero.

A JiWoo poco le importo que se haya ensuciado cuando tomó al perrito en brazos y lo acarició. Se lo pasó a su hermana y luego salió de la basura.

Ambas siguieron su camino con un nuevo amiguito en brazos.

- ¡YoonGi! -llamaron al pelinegro cuando entraron a su casa puesto que se percataron que su padre no se encontraba-. ¡Mira, mira!

YoonGi salió de la cocina algo confundido por los gritos de las niñas, luego vio esa pequeña criaturita en sus brazos, y supo que estaba demasiado jodido al tener que rechazar la pequeña bola de pelos por JiMin.

- ¿Dónde lo encontraron? -preguntó tomando al perrito y percatándose de la suciedad de la mayor de las dos-. ¿Qué te pasó, JiWoo? ¡Apestas!

La nombrada se encogió de hombros.

- Pero el perrito... -lo señaló-. ¿Nos lo podemos quedar?

- Deberías preguntarle a tu papá -contestó YoonGi.

- ¡Pero tú estás saliendo con papá!

- ¿Y..?

Ambas pensaron muy bien lo que iban a decir.

- Eres como otro papá ¿Verdad?

Buena pregunta.

- ¿Papá? -dudaron en llamar al pelinegro, quien se hallaba algo sorprendido por las palabras de las niñas.

No, todavía era muy pronto. Sonrió enternecido y señaló el segundo piso.

- Ve a bañarte JiWoo -ordenó-. Hasta eso tu papá ya viene y podrán preguntarle, ¿Está bien?

La nombrada asintió subiendo las escaleras.

- Pero si yo no estoy sucia -se defendió Rosé, odiaba completamente el baño y estar mojada-. Voy a jugar con el perrito.

- ¿No crees que es mejor jugar con una mascota limpia y perfumada? Dejaré que lo bañes junto a mí, pero debes prometer que luego te bañaras -la pequeña rubia chilló emocionada y asintió-. Bien, espera a que termine JiWoo y podremos comenzar con el perrito.

Tener una pequeña niña siguiéndolo a todas partes era algo totalmente diferente a lo que se imaginó: Todas las películas o series que vio lo hacían parecer algo molesto y horrible, pero tener a una pequeña rubia jugando a su lado esperando pacientemente a que su hermana saliera del baño para poder bañar al perrito en sus brazos, era bonito y tierno a la vez.

Volvía ese sentimiento tan hogareño que alguna vez, hace mucho tiempo, sintió.

- ¡Ya me bañé! -anunció JiWoo desde el segundo piso.

La rubia sonrió y con el perrito en brazos corrió hacia las escaleras con YoonGi detrás de ella, subieron a toda velocidad y entraron al baño cerrando la puerta detrás de sí para no ocasionar un desastre con el agua o mojar a alguna persona que pase enfrente de la puerta.

YoonGi se agachó, abrió el grifo y esperó a que el agua esté lo suficientemente tibia como para no molestarle al perrito y evitar lloriqueos por parte de este, hasta eso Rosé ya estaba con su propia bata de baño puesto que ya había acordado bañarse después de su mascota.

- Creo que ya está caliente -avisó YoonGi.

Rosé se acercó tocó el agua y asintió corroborando lo dicho.

- Listo, puedes meterlo al agua, yo te ayudaré.

Rosé metió con sumo cuidado al perrito dentro de la bañera, tomando agua con sus manos y mojando el resto del cuerpo. Era el primer baño que le hacía a un cachorro y estaba emocionada de poder hacerlo junto a YoonGi. Fue tan rápido que cuando menos se lo esperaba ya tenía en sus brazos un perrito envuelto en una toalla y con sus brazos y cabellos salpicando el piso.

YoonGi se marchó con el perrito envuelto en una toalla mientras Rosé se terminaba de dar un baño de burbujas en la gran bañera, minutos después salió lista para ir a jugar con el perrito en el cuarto, encontrándose, por supuesto, al mayor acariciando a un pequeño perrito esponjoso durmiendo en la litera.

Emocionada, se cambio velozmente para poder jugar con el perrito.

- Está dormido -contó YoonGi al ver sus intenciones-. No creo que debamos molestarlo.

Rosie hizo un pequeño pucherito y sin quitar la vista del animalito le tendió una toalla a YoonGi.

- ¿Me puedes secar el cabello, por favor? -pidió y el mayor acepto levantándose de la cama y colocándose detrás de ella dispuesto a secarle el cabello.

Con delicadeza acarició su cabello por encima de la toalla, lo peinó y le ayudó a colocarse su característico gorrito. Para YoonGi, el ayudar a la pequeña niña era algo totalmente nuevo, divertido y extrañamente tierno.

¡Vamos! Ya se estaba encariñando demasiado con ellas.

Los tres terminaron con el perrito en el sofá, dormidos, con una película animada reproduciéndose. Grande fue la sorpresa de JiMin y SooBin al ver a un animalito y a tres personas bien cómodas en su sofá.

-Mabel's

Edité el capítulo anterior porque me dije "Mucho drama, ya cálmate"  y aquí un capítulo soft y bonito porque estoy aburrida.