Falling in love

º Like the Watterson º

- ¿Quién es? -preguntó JiWoo asomando sus ojitos por la pared-. No veo a nadie guapo.

Rosé observó por encima de su hermana, encontrándose rápidamente con esa persona de la que le avergonzaba hablar.

- Ahí está -susurró con las mejillas rojas-. El niño de cabello oscuro.

- ¿El que está hablando con dos niños? -la rubia asintió avergonzada-. Mhmm, no es mi tipo, pero gustos son gustos, seguro mejorarás con el tiempo.

- Ese no es el punto, ¿Cómo me acerco a él? 

- Toda base para regalarle algo es saber como es su personalidad -comentó- ¿Ya has hablado con él?

Rosé negó sonrojándose.

- Pues, ¿Qué esperas? -y antes de que Rosie pudiera decir algo, JiWoo la empujó hasta donde estaba el chico.

Rosé perdió toda la comodidad y seguridad que tenía hace segundos, convirtiéndose de inmediato en una gelatina andante. Cuando JungHoon se percató de su presencia y le dedicó una suave sonrisa, Rosie supo que en el cualquier momento terminaría desmayándose o vomitando de los nervios.

- Hola Rosie -saludó con una sincera sonrisa- ¿Todo bien?

- JungHoonie -dijo en un susurro- Solo quiero hablar contigo.

- Creo que no te estoy escuchando bien.

Rosé carraspeó.

- Quiero invitarte a comer de mis galletas -invitó-. Las preparó el novio de mi papá.

- ¿El novio de tu papá? ¿No se convertiría en tu padrastro?

- Ehh, no, no se casan todavía -JungHoon asintió entendiendo-. ¿Quieres acompañarme?

JungHoon pareció pensarlo por un momento, dándole más nervios a la pequeña rubia.

- Claro Rosie, te veo en el recreo -y se fue dejando a la tierna Rosie con el corazón latiendo a toda prisa.

Segundos después, JiWoo se acercó a toda prisa.

- ¿Qué pasó? ¿Qué le dijiste? -preguntó emocionada- ¡Cuenta!

- ¿YoonGi es nuestro padrastro? -preguntó sin rodeos, JiWoo la miró confundida- ¿Es nuestro otro papá?

- En teoría, todavía no -respondió- ¿Eso que tiene que ver con el amor de tu vida?

- Me lo preguntó, eso es todo -se encogió de hombros y sonrió-. Lo invité a comer galletas que YoonGi me hizo.

- ¿A ti te hace galletas? A mi me preparó un sándwich.

- Me dio galletas con nueces, tu eres alérgica a las nueces -JiWoo asintió comprensiva.

- Ignoremos eso por un momento, ¡Vas a tener una mini cita con JungHoon! 

- ¿Cita? -dijo Rosé pasmada- ¡Oh por Dios! ¡Nunca lo había pensado así! ¡Estoy hecha un desastre!

JiWoo rió jalando a su hermana a uno de los baños.

Esto se iba a poner interesante.

- Bueno es hora.

- ¿Hora de que?

Ambas hermanas saltaron asustadas ante una tercero voz a sus espaldas, relajándose al instante al ver a su hermano menor con una ceja alzada y sus brazos cruzados.

- Queti -contestó JiWoo regresando su vista a el grupo de chicos a la otra punta del pasillo.

- Ya díganme, para evitar cualquier otra catástrofe -insistió.

- ¿Catástrofe? Si con YoonGi salió todo bien -JiWoo sonrió-. Es más, hoy oímos hablar de él como nuestro padrastro.

A SooBin se le subió esa idea a la cabeza ¿Padrastro? ¿Desde cuándo?

- Ya cuéntenme -asomó su mirada también al grupo de chicos-. ¿Es la conocida pubertad?

- No, es JungHoon.

- ¿JungHoon? 

- Si, el nuevo crush de Rosie -la rubia se sonrojó al escuchar su nombre en la conversación-. No le contarás a papá, ¿Entendido?

SooBin asintió confundido.

- Y supongo que tienen un plan para eso -ambas asintieron-. ¿Me cuentan que es? ¿Puedo ayudar?

- No, ya tienen una cita -contó JiWoo y SooBin se sorprendió.

- ¿Cita? ¿Sin nadie herido?

- Aunque no lo creas -sonrió JiWoo.

Apenas pasaron unos cuantos minutos, cuando JiWoo tomó silenciosamente el tupper de galletas, se las dio a su hermana y la empujó hacia el pasillo en donde estaba JungHoon. Claro, no contaba con que Rosé ni siquiera se había preparado mentalmente para eso.

Otra vez, la rubia volvió a sentir aquellas mariposas en el estómago, las piernas hechas gelatina, el corazón alocado y su rostro colorado. Todo en los 2 metros que caminó para llegar al grupo de chicos.

- JungHoonie -llamó captando las miradas de todo el grupo-. ¿No me acompañabas a comer galletas?

- ¡Oh! Me había olvidado -le sonrió-. Nos vemos después chicos, vuelvo al final del recreo -y con eso ambos partieron.

JiWoo y SooBin observaron desde la pared toda la escena, con JiWoo festejando y al SooBin con cara desconfiada. 

- No entiendo que le ve a ese tipo -dijo el menor-. No me agrada.

- A mi tampoco -confesó JiWoo-. Pero, ¿Qué se le puede hacer? Yo estoy feliz por el primer amor de Rosie, pero si en cualquier caso mis sospechas se levantan ya recurriré a ti.

- Entendido.

Lo que no sabía la feliz castaña, es que SooBin pronto comenzaría sus investigaciones, solo faltaba un pequeño detonante.

YoonGi miró al niño menor de los Park acercarse a él y sentarse a su lado en el escritorio como de costumbre, solo que esta vez actuaba algo confuso a lo normal. Sin embargo, el pelinegro mayor no quiso preguntar acerca de lo que pasaba en su mente.

- YoonGi -llamó el niño, mirándolo con sus ya conocidos ojitos brillosos-. Necesito contarte algo, pero no le digas a mi papá.

El pelinegro levantó una ceja con confusión ante lo dicho, ya preocupándose de que haya pasado algo muy malo con el niño.

- ¿Pasó algo malo? -preguntó, pero el niño negó calmando sus preocupaciones-. ¿Qué pasó SooBinnie? 

- Rosie está enamorada -soltó con un puchero apoyando su cabeza en sus manitos-. Y ese chico no me agrada.

A YoonGi tampoco le agradó que la linda rubia tenga pareja a tan temprana edad.

- ¿Novio? ¿JiMin si la deja tener novio? -cuestionó con una ceja alzada.

- ¡Ese no es el punto! -exclamó el pelinegro menor-. El chico no me agrada, apuesto a que también acompaña a otras chicas a comer galletas.

- ¿Se comieron las galletas que le preparé a Rosé? -el menor asintió-. Esas galletas solo eran para Rosie.

- ¿Qué debo hacer YoonGi? -resopló cayendo en el escritorio-. Ese tipo no me agrada, lo quiero lejos de mi hermana.

- Si vas a seguir mi consejo, solo mantenlo vigilado -contestó el mayor-. No vayas a ser una tontería, ellas podrían perder su confianza en ti.

- ¡Entendido! Gracias YoonGi -el menor dejó un suave beso en la mejilla del hombre-. ¡No le cuentes a papá sobre esto! ¡Ya vuelvo!

Y se marchó de la gran sala, dispuesto a descubrir que traía detrás de esa bonita sonrisa el muchacho nuevo de la clase.

SooBin, casi como de costumbre, caminaba por los pasillos de su escuela, sostenido un montón de libros dispuesto a guardarlos en su casillero. Si, era muy tarde para permanecer en la escuela, pero no le importaba ni a él ni a los maestros cuando tenía un solo propósito: Estudiar, estudiar y estudiar.

Pero seguía sin olvidar el consejo de YoonGi.

- No perderlo de vista -susurró para sí llegando a su casillero.

Y regresaría a casa si no fuera por las voces al otro lado del pasillo. Una desconocida, otra que juraba haberlo escuchada en otro lado. Miró curioso por la pared, observando a tal muchacho que encantaba tanto a su hermana, con lo que suponía era su amigo.

- ¿Y Rosé? Ella se ve muy interesada en ti -escuchó al amigo.

- No es mi tipo, no estoy interesado en ella -sus ojos se abrieron de par en par ante lo dicho-. No puedo obligarme a quererla.

- ¿Y la vas a seguir ilusionando?

- Trato de ser amable -enfatizó la última palabra.

SooBin asomó sus oscuros ojos por la pared al escuchar los pasos de las dos personas alejarse, comprobando que se habían ido completamente. 

SooBin también se iba a asegurar de que ese chico nuevo no lastime a su hermana.










-Mabel's

Esta historia está teniendo un recibimiento tan bueno, y eso que creo que es un asco y cuanto a narrativa e historia.

Igualmente, muchas gracias a todos.

❤️❤️❤️

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