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En su sano juicio hubiera gritado mil maldiciones, o quien sabe, quizá se hubiera puesto a llorar, pero definitivamente sabía que en una situación diferente no se quedaría callado como lo estaba haciendo.

Pero esa situación era muy distinta a cualquiera que haya vivido antes, esta vez no estaba enfrentandose a alguien él solo.

Había una pequeña criatura dentro de su ser, sufriendo las consecuencias de algo que ni siquiera él mismo sabría explicar y la persona a la que debía enfrentar era su pareja, inconsciente o no, pero era el cuerpo de Wonho.

Así que debía calmarse a toda costa, por bien suyo y el de su pequeña familia.

Literalmente tenía el destino de 3 vidas en sus manos.

Suspiró fuertemente mientras apretaba los ojos para calmarse y finalmente imaginó para sí mismo que esa era una charla normal con su pareja en un día cualquiera, nada más, no estaba hablando con un ser extraño que quería acabar con su vida.

Era Wonho, eso quería creer.

— Explícame... — carraspeó en un intento de aclarar su voz — todo acerca del dibujo y de por qué eso tiene relación entre lo que tenemos Wonho y yo...

Se hizo un silencio de varios segundos que era totalmente agonizantes para él, pero finalmente escuchó la voz de su amado con un ligero tono tétrico.

— Es... Sencillo — susurró sin dejar de toquetearlo — tu pareja tiene un don, uno muy hermoso por cierto...

Hyungwon frunció el ceño intentando ignorar las desvergonzadas caricias.

— ¿Don? — su mente viajó pensando en algún recuerdo que tuviera acerca de algo en específico — ¿don de qué? ¿De ser poseído por un idiota?

Wonho soltó una carcajada y lo tomó por el cuello sin cuidado.

— Ten cuidado con lo que dices precioso... — atrapó los labios de Hyungwon en un descarado beso que él no tardó en cortar — su don es algo muy potente, como el fuego...

Hyungwon bufó.

— ¿Vas a explicarme que carajos es ese don y como es posible que haya nacido con algo así? — masculló apartando las manos de Wonho que querían colarse por su pijama.

Escuchó una suave risita.

— Oh no... No es un don de nacimiento... Digamos que lo heredó... — susurró cerca del oído de Hyungwon — ¿has escuchado alguna vez hablar acerca de cuantas personas ha matado Wonho?

Hyungwon tragó con fuerza ante esa pregunta.

— Tenía que defenderse... — susurró tembloroso.

Y de nuevo otra carcajada.

— Ya he escuchado eso antes... — bufó — ¿es justificable matar a tu propio padre? Uff yo creo que no... — rodeó a Hyungwon lentamente y quedó frente a él — ¿que opinas tú, precioso?

Acarició el rostro de Hyungwon y entonces él lo supo.

— Eres tú ¿cierto? — retrocedió un paso — ¡Eres tú! ¡¿Qué le hiciste a tu propio hijo?!

Rápidamente detuvo al delgado por la muñeca.

— Hay algo que no estas entendiendo lindura... — sonrió y lo acarició con su mano libre — este era mi don... Me pertenecía a mi, me fue otorgado a cambio de sacrificar a ese niño bueno para nada cuando cumpliera sus 10 años... — su expresión se tornó sombría de repente — estaba todo planeado... El dibujo estaba hecho y las cosas debían pasar conforme a yo las planeé... — apretó el agarre de la muñeca — su madre intervino y murió... — sonrió de manera cínica — así que todo lo que restaba era buscar al muchacho en casa y llevarlo al lugar que debería... Pero ¿adivina qué?

Hyungwon lo miró con los ojos cristalizados al revivir los momentos de aquel día.

— Tu poder de mierda falló... — susurró entredientes.

El hombre sonrió.

— Apareciste tú... Desviandolo del camino... — suspiró y le arregló un mechón de cabello que tenía despeinado — así que echaste todo a perder... — suspiró nuevamente fingiendo sentir pena — es una lastima porque en la próxima hoja del libro, tus pequeños labios estarían siendo estrenados para hacer algo jodidamente delicioso en este lugar... — tomó la muñeca de Hyungwon con muchísima fuerza y lo obligó a tocar la entrepierna de Wonho — ¿Sabes lo mucho que deseaba ver tu pequeño y delgado cuerpo de diez años de rodillas frente a mi haciendo algo como eso? — siseó con lujuria — sería algo digno de ver...

Hyungwon forjeceó para soltarse y una lagrima escapó de sus ojos.

— ¡Cerdo! — volvió a forjecear — ¡Jamás te dejaría hacer algo así y Wonho jamás será como tú!

Él soltó una carcajada mientras sus brillantes ojos grises lo acechaban como un lobo a su presa.

— Ya lo es... — susurró muy cerca de su rostro — ¿acaso no lo notas? Es un tonto por amar a un debilucho como tú... — se quedó pensativo un momento — en cambio yo tenía planeado desecharte rápido, después de folla tu cuerpo inerte claramente... — sonrió — sin embargo este imbécil es como el Ying y el Yan...

Hyungwon frunció el ceño.

— Wonho es la mejor persona que he conocido... — susurró entre lágrimas — jamás sería como tú, ni completamente ni a medias...

Wonho sonrió.

— Su amor por ti lo hace querer dibujarte una y otra vez... — se rió — y esa es la única cosa en la que ambas caras de la moneda estamos de acuerdo... — tomó el cabello de Hyungwon con fuerza y tiró de él — así que cierra la boca porque tú suerte ha llegado a su fin... — Hyungwon gritó ante el dolor que estaba sintiendo — y si vas a abrirla, que sea para cumplir mi fantasía...

Tiró con fuerza del cabello de Hyungwon hasta hacerlo caer de rodillas al piso mientras el menor lloraba.

Sin embargo, gracias a que estando en la cama había tomado su teléfono, mientras soportaba el dolor estaba intentando llamar a la policía.

— ¡No lo haré! — apartó su cara intentando ponerse de pie, entonces Wonho volvió a tirar de sus cabellos y le dio una pequeña bofetada en el rostro.

— ¿Por qué no? — se rió — ya lo has hecho antes y te gusta... — el forjeceo comenzó nuevamente, pero en ese momento Wonho pudo ver que Hyungwon estaba intentando llamar y le arrebató el celular de la mano —  ¿Vas a acusar a tu novio de psicópata? Uh que valiente decisión de encerrar a alguien que amas por el resto de su vida... — se agachó a su altura — mírame Hyungwon... Soy Wonho en estos momentos ¿quieres hacerme esto? ¿Piensas dañarme de esa manera después de jurar que te quedarías conmigo para siempre? ¿Le harás pensar a nuestro hijo que su padre es un maldito hijo de perra? Toda mi vida he sido infeliz gracias a ti... Y ahora quieres que también lo sea en un futuro...

Dolían, dolían mucho esas palabras aunque sabía que eran chantaje.

Sintió unas terribles ganas de llorar y el dolor se intensificó en su abdomen, entonces se encogió al sentir una terrible punzada.

— No eres Wonho... — sollozó — tú no eres él...

Volvió a reírse.

— Mira a quien tienes delante y dime a quien crees que se llevaría la policía... — Hyungwon se agarró el abdomen con fuerza al sentir otra fuerte punzada de dolor — si quieres que todo esto se arregle, más te vale hacer lo que yo te diga...

El menor sollozó con fuerza desde el suelo y de nuevo su cabello fue jalado con fuerza para que levantara la cabeza.

Y antes de que se diera cuenta, su boca estaba siendo violada por aquella horrible persona que, por desgracia se había personificado en Wonho.

Levantó su borrosa mirada hacia arriba y lo único que podía ver era la cara de su pareja totalmente satisfecha de cometer tal crueldad en su estado físico.

Y de verdad quería pensar en que no era Wonho quien estaba haciéndole eso justo cuando no podía defenderse.

Pero a veces la mente y el corazón no trabajan en un mismo sentir.

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