Jimin se encontraba sentado en el sofá de la sala de Jungkook con un vaso de agua entre sus manos y lágrimas rodando por sus mejillas. ¿Todo había acabado?, diez años de su vida se esfumaron ante sus ojos y aunque no fuera realmente amor lo que sentia por su ahora exesposo, le dolía mucho.

- ¿C-crees que soy un egoísta? - Le preguntó a Jungkook que estaba sentado frente a él con una mirada preocupada después de que le contó todo lo sucedido.

No había sido fácil decirle a Jungkook como se sentía y la forma en la que terminó su matrimonio. Y ahora se sentía una mala persona ¿Quizá debió esperar un poco más?, ¿Su relación con YoungJae algún día cambiarían?

-No, por supuesto que no eres egoísta Jimin, querer ser respetado y valorado por tu pareja no te hace egoísta - Le aseguró Jungkook- Una relación se trata de dar y recibir por igual, la persona que te ama lo va hacer por ser tú, no va a querer cambiarte u obligarte a ser diferente a lo que eres, la persona que te ama no va a menospreciarte ni a darte un trato inferior, sin importar lo exitoso que sea el uno o el otro, ya sea una relación entre hombre y mujer o una homosexual, todo se trata de amarse y apoyarse mutuamente-

Jimin se mordió el labio inferior - No sé qué voy a hacer ahora-

-Eres un hombre valiente, inteligente y muy talentoso Jimin - Jungkook le sonrió -Puedes hacer cualquier cosa que te propongas si pones el suficiente empeño en eso, solo se tú -

Jimin sollozó aunque en sus labios se formó una media sonrisa - Parece que solo tienes buenas y sabias palabras para aconsejar-

-Tal vez fui un filósofo o un sabio en mi vida pasada- Dijo Jungkook con una sonrisa.

- ¿Crees en eso de las vidas pasadas? - Preguntó Jimin sintiéndose un poco más relajado.

Ese era el efecto que Jungkook tenía en él desde el momento en que lo conoció, podía entenderlo y hacerlo sentir bien incluso la más simple conversación.

-Soy mitad tailandés, crecí en una cultura con una fuerte creencia en la reencarnación - Contestó Jungkook.

Jimin asintió - ¿Y qué crees que haya sido yo en mi vida pasada? -

-Mmm- Jungkook se llevó un dedo a sus labios pensando - Quizá fuiste un gran pintor, o un famoso cocinero, un príncipe y letal guerrero samurái - hizo una pose ninja haciendo reír a Jimin.

- ¿Yo un guerrero samurái? - Jimin negó con la cabeza.

Jungkook le sonrió -Realmente no importa lo que hayamos sido en nuestra vida pasada Jiminnie, lo que importa es lo que somos y hacemos ahora, esta es la vida que estamos viviendo, solo tú puedes decidir qué hacer con ella-

Jimin suspiró -Es fácil decirlo-

-Y también hacerlo si te lo propones - Le aseguró Jungkook -Pero por el momento creo que necesitas descansar, tomar una ducha para relajarte-

Jimin se mordió el labio inferior -No quiero causarte molestias-

-No es ninguna molestia Jimin, estoy encantado de tenerte aquí y Sakura también ¿verdad bonita? - Jungkook le habló a la samoyed que movió la cola felizmente acercándose a Jimin.

Jimin le acarició la cabeza a Sakura - Gracias a los dos -

-No tienes que agradecer Jiminnie - Afirmó mirándolo- esa ropa no se ve muy cómoda que digamos-

-La usé para la cena anoche, aunque no terminó muy bien- Jimin hizo una mueca.

-Espera buscaré algo que pueda quedarte - Dijo Jungkook antes de perderse por un pasillo, regresó después de un par de minutos con unas prendas de ropa -Es lo más pequeño que tengo -

Jimin un poco apenado recibió la ropa - Lo siento por esto-

-Ya te dije que estoy feliz de que estés aquí Jimin -

Jungkook le sonrió con sinceridad -Vamos te enseñare donde está el baño, tomate tu tiempo yo prepararé algo para desayunar, no te aseguro de que sepa bien pero hare mi mejor esfuerzo-

Jimin entró al baño quitándose la ropa y dejándola a un lado no pudo evitar que las traicioneras lagrimas mojaran sus mejillas de nuevo, aunque Jungkook lo hacía sentirse optimista, Jimin no tenía idea de que hacer ahora.

Además estaba bastante seguro de que sería tildado como "un mal hombre que abandonó a su esposo", las personas siempre están para juzgar y señalar sin siquiera saber lo que pasa en realidad en la vida de los otros.

Ya podía imaginárselo siendo el blanco de las maldiciones de la familia de YoungJae, aunque eso sería muy hipócrita de parte de ellos ya que nunca habían aceptado a Jimin pero así eran los Choi.

Bueno menos YeunJun, ese chico era algo muy aparte de su familia.

Jimin tampoco quería causarle problemas a Jungkook, YoungJae no era de los que reaccionaba de la mejor manera cuando las cosas no se hacían a su modo, temía que con lo furioso que había estado su exesposo hiciera algo en su contra o peor aún contra Jungkook ya que acusaba al fotógrafo de "destruir su matrimonio"

Y algo tenía claro tarde o temprano tenía que volver a enfrentarse a YoungJae, ya que había dejado todas las cosas en su casa.

Dejando que el agua recorriera su cuerpo trató de hacerle caso a Jungkook y relajarse, dejar su mente en blanco, termino se ducharse y se puso la ropa que Jungkook le prestó.

Le quedaba holgada por todos lados, pero era cómoda.

Salió rumbo a la cocina donde encontró al castaño con un delantal puesto y harina hasta en el cabello y no pudo evitar reírse.

Jungkook le miró e hizo un puchero -No te burles, apenas he asistido a una clase de cocina -

-Yo no he dicho nada- dijo Jimin sin dejar de reír y camino hasta Jungkook tratando de quitarle los rastros de harina del rostro.

Sus miradas se fijaron un momento y Jimin se mordió el labio inferior.

Jungkook miró su boca y se aclaró la garganta -Los primeros panqueques están listos y son para ti- informó dejándolos sobre la mesa.

Jimin asintió -Se ven bien, no están quemados-

-Soy un genio de los panqueques ¿lo olvidaste Jiminnie? - Dijo orgulloso terminando de poner los otros panqueques en un plato para él.

Jungkook se lavó las manos que estaban empatadas de harina y se acercó a la mesa -Uh, Jimin tu cabello aun gotea debiste secarlo mejor, vas a resfriarte- dijo levantándose y en cuestión de segundos volvió con una toalla.

-Gracias- Dijo Jimin para tomarla.

-Yo lo hago- Dijo Jungkook y empezó a secarle el cabello cuidadosamente con la toalla -Listo, también puedes usar mi secador-

Jimin estaba completamente sonrojado no recordaba la última vez que alguien le secara el cabello de esa manera - Gracias-

-Vamos Jiminnie deja de agradecerme, quiero cuidar de ti y lo hago con gusto- Aseguró para sentarse a comer el desayuno.

Los panqueques estaban bien, aunque Jimin pudo sentir una pequeña cascara de huevo no dijo nada, Jungkook había trabajado duro en prepararlos además el guapo fotógrafo apenas estaba aprendiendo a cocinar.

Solo en ese momento Jimin se dio cuenta que el bolso de color negro que Jungkook siempre usaba estaba listo sobre la una pequeña mesa- ¿Ibas a salir? -

--¡Oh!, si, iba a tomar un par de fotografías de un lugar que se ve bastante agradable por las mañanas-

Jimin hizo una mueca -Siento que por mi culpa no hayas...

-No digas eso Jimin, lo iba a hacer por pasatiempo tu eres más importante para mí y no iba a dejarte solo en esta situación - Afirmó -Además mañana podemos ir juntos, si quieres -

-Me encantaría - dijo Jimin sonriendo.

Después de terminar el desayuno Jimin se dispuso lavar los platos pero Jungkook estaba decidido a no dejarlo -Déjalos Jiminnie yo lo hago tu eres mi invitado-

-Pero tú preparaste el desayuno-

-No me va a pasar nada por lavar los platos también- Jungkook se encogió de hombros y le quito los platos de las manos.

Jimin sonrió -Vamos a lavarlos juntos- propuso.

-Está bien, está bien eres terco Jiminnie- dijo Jungkook - Yo los lavo y tú los secas -

Jimin asintió y empezaron con la labor con una entretenida charla terminaron antes de lo esperado.

De repente Jungkook miró a su alrededor - ¿Dónde esta Sakura? -

Jimin también se percató que la samoyed no estaba en ningún lugar -Estaba justo allí hace un momento- dijo señalando la alfombra.

En ese momento unos ladridos se escucharon en el patio trasero y ambos fueran a darse cuenta, Jungkook se quedó con la boca abierta ante la imagen ante ellos.

La manguera del jardín estaba derramando agua y Sakura corría y se revolcaba encantada en el charco que se había formado - ¡Sakura! ¡Niña mala! - la regañó el fotógrafo.

Sakura levantó sus orejitas y lo miro casi parecía estar sonriendo cuando empezó a correr de un lado a otro se metió a la casa casi llevándoselos por delante.

- ¡Sakura!, ¡Jimin es nuestro invitado! ¿Por qué te portas así? - Se quejó Jungkook -Le estas dando una mala impresión-

-Ella parece estar feliz - dijo Jimin sin dejar de reír.

Cuando Jungkook logro sacarla de la casa volvieron al patio trasero de nuevo -Solo sostén la manguera Jimin, no te vayas a mojar no quiero que te refríes -

Jimin asintió y puso el chorro de agua hacia Jungkook que estaba lavando el blanco pelaje de Sakura -Es la primera vez que hace un desastre así-

-No te preocupes Jungkook, ella lo disfruto ¿cierto bonita? - Preguntó Jimin y Sakura contestó con un ladrido como si le hubiera entendido.

Después de sacarle el shampoo del pelo Sakura empezó a sacudirse mojando a Jungkook y haciendo reír a Jimin.

- ¡Ahora tengo que bañarme yo también! - Se quejó.

-Yo te ayudo con eso - Jimin puso el chorro de agua justo en el pecho de Jungkook.

- ¡Jiminnie! - Dijo riendo mientras Jimin lo mojaba por completo.

Jungkook se quitó el suéter -Quiero venganza- dijo con los ojos entrecerrados.

Jimin dejó salir una risa y dejó caer la manguera antes de salir corriendo al interior de casa.

Hola mis amores estoy por aquí con este nuevo cap., les he extrañado un montón.
Perdón por la tardanza L

Espero que les haya gustado el pequeño cambio que le hice al prólogo de esta historia.