Parte 3.

Parece que me llevara al menos otra parte mas para terminar el resumen :c.

Para que no se olviden les dejo mas spoiler en una imagen xd.



Les juro que la imagen sin bajada de calidad, se pueden ver mejor los contornos del cuerpo de Bell °>°


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Tras su victoria contra Albert, Bell continúo caminando en la misma dirección que había llevado hasta ahora; hasta aquella segunda misión en la que se enfrentarían a Bahemot. Era un monstruo increíblemente poderoso. Conocido como el rey de la tierra; la bestia creaba terremotos, y abría la tierra con sus rugidos.


En aquella ocasión, fue el golpe de Heroe de Bell apoyado por la magia de Albert que a su vez era impulsada por la magia de viento de Aria, la que finalizo las defensas y dieron pase a la victoria.


Bell hubiera ganado muchos aplausos, pero él odiaba a las multitudes. Además, luego de que había conseguido en Lv. 2, había priorizado evitar cualquier dato de él. Por ello, toda Orario la desconocía. Incluso su familia, solo los mas altos mandos de su propia familia están conscientes de su presencia dentro del grupo de la facción, probablemente, mas fuerte de todo el mundo.


Siendo ya Nivel 9 a los 14 años, había tocado el mismo suelo que Albert. Sus poderes solo eran ligeramente diferentes, y aun así si se enfrentaban en una lucha entre ambos, esta jamás se detendría.


Poco después de su subida de nivel la familia Zeus hicieron una última expedición. Todo esto sucedió poco antes de perecer en la tierra desconocida, donde se alojaba el dragón negro. El monstruo más poderoso de las tres misiones.


En aquel ultima expedición conoció a una chica que tenia mucho apego a tratar de ser mas cercano a él. Pero, jamás fue así, y una vez la ultima de las tres grandes misiones empezó, su destino había sido sellado.


Cuando abrió los ojos nuevamente, las llamas cubrían el campo de batalla. El suelo estaba caliente y solo había una persona que estaba a su lado. Aria, que le había cubierto con su viento, antes de recibir la carga de llamarada del dragón negro.


El dragón negro seguía con vida. Pero todos, a excepción suya habían muerto. Y desde ese momento, se culpo totalmente por no haber sido mas fuerte como para aguantar el ataque del dragón Negro, y salvar a sus compañeros. Sin embargo, a pesar de su culpa, y sus ganas de morir en ese momento, tenia que cumplir algo. Albert y Aria, ellos tenían una hija.


Ahora mismo estaba sola. La niña, estaba dentro de la ciudad, y ellos le habían pedido cuidarla. Todavía no podía morir, si ese era el caso. Tomando toda la fuerza que le quedaba, regreso hasta la ciudad de Orario, para hablarle a Zeus y ayudar a la niña. Sin embargo, debido a sus Heridas, el viaje le tomo varias semanas. Y cuando por fin toco el hogar de su familia, se entero que Zeus y Hera fueron desterrados de la ciudad.


Su persona, ya prácticamente quebrada luego de ver a todas las personas que conocía morir, además por su culpa, lo impulsaron a irse de la ciudad, todo para no perder a la última persona que conocía bien.


Olvido por completo su promesa, y fue en búsqueda de Zeus.


Aunque de igual manera, solo pudo estar con Zeus un par de años más, hasta que él volvió a dejarlo. La falna de Zeus desapareció, pero gracias a una de sus habilidades, el poder se mantuvo impregnado en él.


Entonces, mientras miraba en sí mismo, recordó la promesa. [La niña]; la había dejado sola por mucho tiempo. Y eso ya no podía seguir así. Así que, incluso si tenia que poner a Orario de cabeza, la encontraría. ¡Jamás!... tomo por hecho que ella estuviera muerta, todo por que era hija de Albert y Aria.


Al tocar nuevamente las puertas de la ciudad, su presencia provoco un crujido en el pulgar de un pequeño hobbit. –


– A bell le impresiono al escuchar, que la familia Loki tenia a la niña, e inquieto, pidió saber donde se encontraba. –


– Al estar en frente de una de las primeras plantas del dungeon, creo pánico en la elfa de primera clase de la familia Loki. No solo por verlo frente a ella, sino por la impotencia que sentían ante su presencia. Sin embargo, toda aquella energía que desprendía se esfumó. Todo se fue, luego de ver a la niña.


Pensando que parecía estar bien con ellos, se hizo la pregunta de que si él se merecía protegerla luego de haberse olvidado de ella por mas de dos años.

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