II
El capitán Jack Sparrow se paseaba frente a todos nosotros, seguido de un hombre bastante refinado, inspeccionando su nueva tripulación, parecía asqueado.
Si tan poco le gustaba Tortuga qué demonios hacía aquí!?
Por lo que entendí lo único que necesitaban de nosotros era que fueramos leales y temerarios.
No sé si sea algo bueno o no, pero cumplo con los requisitos.
Es lo que yo llamo libertad.
Sparrow se detuvo frente al mudo del perico, llamado Cotton, y lo intentó interrogar. Tuvo que contentarse con las respuestas poco coherentes del ave, pero a pesar de todo parecía convencido.
Todo iba marchando perfectamente, antes del mediodía ya estaríamos en alta mar...
Hasta que a Ana María se le ocurrió la genial idea de abrir su bocota, había olvidado que ella sólo quería su barco de vuelta...
No hubiera sido problema, de no ser porque yo estaba al lado, y obviamente por tonto que pudiera parecer, Jack no lo era, y tendría que darle explicaciones...
Por qué, maldita sea, no podía ser después!?
Sparrow levantó cautelosamente el sombrero de Ana María, y por suerte también, porque la cachetada que le dio me dolió hasta a mí...
"Supongo que no merecías eso"- se burló el muchacho que acompañaba al pirata.
"Si merecía esto..."
"Hurtaste mi bote!"- gritó la mujer enfurecida.
"Fue un..."- comenzó Jack, pero nuevamente recibió un lindo golpe- "préstamo, sin permiso... Siempre quise devolvértelo!"
"PERO NO LO HICISTE!"
"Te daré otro!"
Me comencé a alejar cautelosamente mientras discutían.
Luego de negociar (Jack quería matar al muchacho por ofrecer Su actual barco) Ana María accedió, y yo me dirigí con el resto de los marinos a la nave...
Dirigía.
Hasta que me tomaron por el brazo.
Ay no...
"Cuántas mujeres se intentarán infiltrar en mi barco hoy?"
"Dos, hasta donde yo sé..."- Jack me quitó de un tirón el sombrero.
Mi cabello cayó en tirabuzones negros sobre mis hombros.
"Y tú eres...?"
"Calandra Cruz"
Jack llevó un dedo a mi cabello, probablemente para hacer una observación acerca de mis rizos.
Lo aparté de un manotazo.
"Y tus intenciones son...?"
"No se puede sólo ser un pirata, ser libre?"- realmente me sorprendió que no sospechara nada a pesar de mi tono forzado y excesivamente a la defensiva.
Bueno, al menos había dado en el clavo, de algo sirve ser hija de una hechicera budú...
"Claro que se puede, pero nadie lo hace!"
"Bueno, yo si, ahora si me permite..."- lo corrí de un empujón y me dirigí a la cubierta del barco, dispuesta a trabajar. Si tenía suerte quizás me dejaban de vigía, me ofrecería también para el turno de noche.
"Pero que carácter..."- escuché murmurar a Jack a mi espaldas.
Después de todo no me había reconocido, que era lo que más temía...
..._...-..._...-..._...-...
Zarpamos, conseguí mi puesto de vigía nocturno y tuve que dedicarme el resto del tiempo a controlar a los otros marinos. Habría sido más divertido hacer su trabajo!!
Me quedé mirando las aguas que surcábamos, a mi madre.
Calypso...
Cuando ya me encontraba en mi puesto arriba del mástil comencé a notar movimientos que no presagiaban nada bueno en el agua.
Habría tormenta.
Bajé a advertir a Sparrow, aunque estaba segura que ya lo había notado.
Al parecer su brújula era más interesante, porque me ignoró.
Me aproximé a Ana María.
"Sabes a dónde vamos?"- quizás después de todo no era mala idea estar enterada.
"A la isla de la muerte"
Dejé caer la manzana que llevaba en la mano, apresurandome a recogerla.
Realmente me la quería comer...
Alto ahí, a la isla de la muerte!?
Qué se traía entre manos este hombre!?
Yo y mi manía con meterme en problemas...
"Y, sabes qué vamos a hacer allá?"- le pregunté.
"La verdad es que no debería saber, pero..."- me miró algo desconfiada de pronto.
Le guiñé un ojo, invitándola a a seguir.
"Viste al joven que anda con Jack?"
Asentí en respuesta, mirando a mi alrededor para asegurarme de que Jack no se encontrara cerca.
"Resultó ser nada más un pobre enamorado "- prosiguió, con una sonrisa de cotilleo.
"Ah, si?"- pregunté más interesada de lo que debería.
Qué rayos hacía Jack!?
Esto definitivamente era por el perla...
Al parecer Ana María lo tomó de otra manera, porque me miró con una ceja alzada.
"Bueno, lamentablemente debo volver a la cofa"- dije, apuntando mi lugar de vigilancia.
Ella sólo soltó una risa y me guiñó un ojo.
Rodé mis ojos, y me marché.
..._...-..._...-..._...-
Una vez arriba comencé a juntar piezas.
El chico William quería recuperar a su chica.
Jack Sparrow quería arrancarle el perla negra de las manos a Barbossa (el actual posesdor de el famoso barco).
La tripulación sólo buscaba una vida.
La chica realmente debía ser muy important, o tener algo irreemplazable.
Y más de una persona debían estar tras ella.
Pensando en esto recordé la historia de mis padres, el odio y dolor que había habido en mi infancia, las promesas que le había hecho a mi madre...
No quería seguir el ejemplo de ninguno de los dos, ambos son inmortales en duelo, algo que espero no tener que enfrentar, nunca.
Me perdí en las ondas marinas, viendo alguno que otro ser mitológico que probablemente sólo yo en este barco podía ver, mirando el horizonte.
Un albatros se posó cerca mío en el mástil, entrando cada vez más en confianza.
Luego de un tiempo estabamos ambos lado a lado, yo acariciando su suave pelaje, transmitiendole todos mis pensamientos.
Me acompañó hasta el amanecer, cuando fui relevada.
Sé que me demoré, perdón.
Me cuesta un poco más publicar estos capítulos más largos, además, he estado escribiendo otras cosas también...
Eso, sé que no es excusa.
No hagan un motín, prometo tratar de actualizar más seguido!!!
En recompensa por la espera les dejé un video, a por el botín!
Viento en las velas!!
🖤🖤
Aldebaranblack
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