26
Al principio me quedé estupefacto por la noticia, pero no pasó más de un par de segundos cuando la preocupación sustituyó a la sorpresa. Xue Hao Ran era viejo, pero aún se veía fuerte y sano. Con una muerte tan repentina, ¿Yue Shun y yo podríamos estar en problemas? Siendo los últimos en haberlo visitado, y con la mala fama que había conseguido en tan poco tiempo, no me parecía del todo improbable una situación así.
Desde luego, como mi mamá aún no lo sabía, miró a Yue Shun con un poco de confusión, y después de intercambiar una mirada con Yun Zhan, preguntó: —¿Y cuál es el problema? El arroz se cuece.¹
—Ah, no es tan sencillo, Wu-jie —contestó Yue Shun, y procedió a narrar lo que había pasado en la mañana, sin olvidarse de ningún detalle, incluso de los que yo no percibí. Sin embargo, no mencionó nada sobre las negativas de Xue Hao Ran a la petición de Lian XiXi y Ji Lin, por lo que deduje que ella ya lo sabía, y por lo tanto, mi papá también debía saberlo. No supe qué pensar al respecto, ¿por qué no hicieron nada para ayudarlas?
Pero lo importante fue que mi mamá comprendió que Yue Shun y yo estábamos en riesgo de parecer culpables. —Deberé ir a ver cómo está la situación para evitar malos entendidos. Los niños necesitarán un profesor nuevo; además se debe decidir qué sucederá con los bienes de Xue-laozi.
Mi shizun asintió a cada frase, y Yun Zhan se apresuró a volver adentro para traer lo necesario para que Wu Yan Yu pudiera realizar ese trabajo. Yo me dirigí a mi habitación, después de hacer una reverencia a mi mamá y a mi maestro. Una vez fuera de la vista de todos, bajé de mis brazos a Li Zhi Xiang y me dejé caer en mi cama. Había sido un día muy pesado y largo.
Me quedé descansando por unos segundos, cuando de repente sentí algo cálido junto a mí. Entreabrí mis ojos y descubrí que Li Zhi Xiang estaba nuevamente en su forma verdadera y se había acostado a mi lado. —Lo siento gege, no pude llevarte al bosque —murmuré decaído.
Sin embargo, él apoyó su patita sobre mi hombro: —No importa, Wang-di, ya iremos mañana. Además, es mi turno de darte ánimos.
Reí un poco y me giré para abrazarlo. Por un momento creí que podríamos quedarnos así toda la noche y olvidar lo que estaba sucediendo fuera de mi habitación; sólo descansar juntos y en paz.
Pero justo cuando comenzaba a adormecerme, una voz me hizo sobresaltarme: —¡Tja'ok u k'uhy taskanv a doch'han!
Me incorporé rápidamente, arrastrando a Li Zhi Xiang conmigo. Bai Lan Hua se rió bajito, pero no dijo nada; en vez de eso, nos presumió su forma casi restaurada: en lugar de la bolita de fuego a la que ya me había acostumbrado, era una versión azul semitransparente de la pequeña zorro de dos colas que era mientras vivía.
—¡Xiao Hua! ¿Dónde estuviste? ¿Cómo recuperaste tu forma? —interrogué.
Ella se estiró y bostezó antes de subirse a la cama de un salto. Mientras daba un par de vueltas y se echaba tranquilamente, explicó: —In jyankej le qi Xue Hao Ran des. Na'min tafwultije' u ka' tyulaen yungphunhi ble' il, óol táan in ma'alob.
Miré a Li Zhi Xiang esperando que tradujera lo que Bai Lan Hua dijo, pero él no me devolvió la mirada; estaba tenso y su voz salió enojada: —¿Yaan wáaj tueñyl u ba'ax a mynvik? Bam'e' ta woxae' Wang-di yaan lo'obtaami.
Bai Lan Hua quiso protestar, pero Li Zhi Xiang la tomó de la nuca con las mandíbulas, por lo que la fantasma entró en clipnosis², y la arrastró fuera de la cama. Yo todavía no entendía qué estaba pasando, así que me levanté para seguirlos. Li Zhi Xiang siguió regañando a su hermana, y aunque todo lo que dijo fue en su idioma, entendí vagamente que era algo relacionado conmigo, y eso me puso más nervioso.
—¿Qué es lo que está pasando? —pregunté en cuanto Li-ge hizo una pausa para respirar.
Él paseó su mirada de Xiao Hua hacia mí y de regreso por unos segundos. Luego, soltó un suspiro de cansancio y me miró fijamente. —Resulta que a la señorita se le ocurrió ocultarse y quedarse en la casa de Xue Hao Ran para absorber su energía espiritual, pero tomó toda y lo mató.
Parpadeé varias veces, y miré a Bai Lan Hua, quien me devolvió la mirada de manera que no podía asegurar si estaba a punto de llorar o estaba conteniendo la risa. —Supongo que no fue a propósito, ¿o sí? —pregunté, tratando de mantener la serenidad.
Sin embargo, cuando la fantasma no pudo aguantar más y se carcajeó tanto que se cayó al suelo, me sentí un poco acongojado. Me dejé caer sobre la cama, abrazando mis rodillas, pero sin quitarle la vista de encima. —Xiao Hua, espero que no vuelvas a hacer algo así de nuevo, ya tenemos suficientes problemas.
Li Zhi Xiang se acercó a mí y apoyó su cabeza en mi hombro, intentando darme ánimos. Respiré profundo y levanté mi mano para acariciarlo suavemente. —¿Estás enojado con ella? —pregunté en voz baja.
—No, no veo por qué, el anciano se lo merecía. Sólo que estoy un poco decepcionado de que meimei no haya pensado en las consecuencias, sobre todo porque te afectarán a ti —contestó, y noté cierta melancolía en su voz.
Ninguno lo dijo, pero a pesar del poco tiempo juntos, el hecho de que Li-ge y yo fuéramos igual de solitarios y dramáticos, además de que más o menos habíamos establecido un objetivo en común, nos había comenzado a vincular de manera más honda. Por mi parte, no tenía problema en llamar a mi apego hacia él como amistad, y por lo tanto se me hacía algo natural que la preocupación del uno por el otro se centrara en cómo los problemas como éste afectarían a la dinámica entre nosotros, y sobre todo a nuestros planes.
Si conseguía llevarlo al bosque al día siguiente, quizá no lo podría visitar hasta que pasaran algunos días, ya que suponiendo que mi maestro y yo saliéramos bien librados del tema de la muerte de Xue Hao Ran, aún tendría que ocuparme de las lecciones y estaría vigilado por los Yan; de lo contrario, probablemente pasaría aún más tiempo o ni siquiera podría llevarlo al bosque.
Y si lo seguía ocultando en casa, había el riesgo de que nos descubrieran en algún momento. En ese caso, dudaba que Yun Zhan o mi mamá tuvieran algún problema, pero no creía que cuando mi papá volviera se sintiera muy contento de saber que había dejado entrar al Zorro Negro a nuestra casa.
Finalmente Bai Lan Hua dejó de reírse y se acercó con cautela, agachando la cabeza. —Ma waymyik Wang-xiong, in woel ba'ax malhe'en k'ji'abt nyuch'ej.
Volteé hacia Li-ge, y esta vez tradujo las palabras de su hermana: —Dice que lamenta haberse reído.
Regresé mi mirada a ella y asentí levemente. —Acepto tus disculpas Xiao Hua.
Bai Lan Hua alzó su cabeza y sus colas se agitaron suavemente. Extendí mi brazo para que se acercara, y en cuanto lo hizo la abracé con cuidado. Al parecer ella me tenía más confianza que Li Zhi Xiang, porque no dudó en acomodarse contra mi pecho, apoyando sus patas sobre mi pierna. Lo malo es que seguía siendo mucho más fría, y me fue difícil no mostrar que estaba un poco incómodo con su temperatura.
Pero no nos pudimos quedar tranquilos por el tiempo suficiente, ya que unos segundos después, escuché la voz de Yun Zhan desde detrás de la puerta: —Joven amo, su madre ha pedido que también venga con ella.
No quería ir a ningún sitio en ese momento, ni siquiera por petición de mi mamá. —¿Puedes decirle que no iré? Por favor; me siento cansado.
Yun Zhan se quedó en silencio por un momento, pero enseguida respondió: —Creo que será mejor si se lo dice usted mismo.
Suspiré y me levanté. Hice que Li Zhi Xiang y Bai Lan Hua se subieran a mi cama y solté las cortinas para ocultarlos de la vista. —No se muevan, regreso enseguida —pedí, y salí de la habitación. Seguí a Yun Zhan hasta el patio frente a la entrada principal, donde, junto con Yue Shun, que hacía su mejor esfuerzo para no demostrar qué tan ansioso se encontraba, Wu Yan Yu estaba esperando a que apareciéramos.
Normalmente, y a menos que fuera muy necesario, mi mamá no utilizaba la silla de ruedas que mi papá mandó a hacer para que ella tuviera un poco de movilidad, pero la razón para que no la ocupara no era algo personal. En realidad, cuando era más pequeño yo no comprendía por qué mamá prefería que la cargaran de un lado a otro, hasta que un día, me parece que cuando tenía 8 o 9 años, me subí a la silla para jugar con ella. Después de un rato probándola, descubrí que era difícil moverse por sí mismo usando las ruedas, ya que eran bastante pesadas, y tampoco había la posibilidad de cambiar de posición, así que después de un rato la espalda y caderas comenzaban a doler.
Sin embargo, esta vez mi mamá no podía hacer que Yun Zhan o Yue Shun la llevaran cargando; tenía que mostrar la autoridad que representaba en ausencia de mi papá, y estando sentada con la espalda bien derecha y los brazos sobre ambos descansabrazos, lucía tan firme y poderosa que seguramente ni el emperador se atrevería a ignorarla. Por lo tanto, cuando me miró y dijo: —Hao'er, necesito que vengas con nosotros —a pesar de su tono tranquilo y suave, no fuí capaz de negarme.
En menos del tiempo en que se tarda en beber una taza de té³, llegamos de nueva cuenta frente a la casa de Xue Hao Ran. Había mucha menos gente de la que me había imaginado, y la silueta rígida del profesor ya estaba cubierta por una sábana.
¹ Significa que lo que ya sucedió no se puede cambiar.
² La clipnosis, también conocida como inmovilidad dorsal o inmovilidad de transporte, es un estado parcialmente inerte que resulta de un apretón suave de la piel detrás del cuello. Se observa principalmente en los felinos y permite a una hembra llevar fácilmente a sus crías con sus mandíbulas. Sin embargo este reflejo también lo tienen otros seres como los caninos y los roedores.
³ Es una forma poética de referirse a un lapso de tiempo de aproximadamente 10 a 15 minutos.
.
.
.
Feliz año nuevo 🎉
Espero poder actualizar cada semana en este 2025, aunque creo que será un reto 😅 pero x.
Les dejo un dibujo, esta vez lo hice yo, y espero leer sus comentarios, teorías, dudas, quejas o sugerencias sobre este capítulo (y los siguientes).
(人 •͈ᴗ•͈)
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top