Capitulo Diecisiete

Tenemos El Tiempo Deformado

"El hotel y casino Lotus ¿eh?" dijo Naruto, mientras miraba hacia el hotel. Naruto tuvo que admitir que se destacaba bastante, y se sorprendió de que no estuviera agrupado con los otros hoteles.

Sin embargo, todos notaron que nadie entraba o salía del casino, pero las brillantes puertas cromadas estaban abiertas, derramando aire acondicionado que olía a flores, a flor de loto. Para Naruto, olía a pueblo de hojas cuando los cerezos estaban en flor. Era un olor que disfrutaba y apreciaba mucho.

Poco a poco, el grupo decidió acercarse al casino ya que el lugar se sentía tan tentador de acercarse. Cuando lo hicieron, uno de los porteros les sonrió alegremente y les indicó que entraran.

"Hola niños, se ven cansados, ¿quieren entrar y sentarse?"

El grupo se miró el uno al otro.

"No podría doler ¿verdad?" Percy preguntó. "Quiero decir que hemos tenido un día largo para poder descansar un poco aquí. Todavía nos quedan seis días".

"Algún día debería estar bien", dijo Grover recibiendo gestos de cautela por parte de Annabeth y Naruto.

Aunque Naruto sospechaba un poco del lugar, había leído que los casinos en Las Vegas solo permitían la entrada de personas de veintiún años. Los más jóvenes podían quedarse en el hotel pero no podían ingresar a la parte del casino. Entonces, ¿por qué este chico les haría un gesto para que entraran? Parecía un poco extraño en su propia opinión.

Naruto asintió de acuerdo con su contraparte con solo ver el lugar en la pantalla ya le parecía un lugar extraño.

Además, Naruto dudaba que su madre o abuela aprobaran que su hijo y nieto de catorce años entraran a un casino de Las Vegas.

Pero la mirada en los rostros de su amigo mostró que querían entrar, y él realmente no quería ser un fanático de la fiesta.

"Preferiría continuar con la búsqueda, pero si ustedes quieren tomar un pequeño descanso, entonces supongo que estaría bien. Sin embargo, es mejor no quedarse aquí por mucho tiempo", dijo recibiendo el aplauso de los demás mientras lentamente Se dirigió hacia el interior.

Sin embargo, tan pronto como entraron en el casino, Naruto pensó que habían tomado la decisión correcta, ya que todos se quedaron boquiabiertos en el interior y el interior del hotel y casino.

Todo el vestíbulo era una sala de juegos gigante con casi todas las generaciones de juegos que se podían imaginar a lo largo de los años. Había un tobogán acuático cubierto que serpenteaba alrededor de los múltiples elevadores de vidrio, que subían al menos cuarenta pisos. Había un muro de escalada al costado de un edificio y un puente cubierto de puenting. Había trajes de realidad virtual con pistolas láser en funcionamiento y cientos de videojuegos, cada uno con un gran televisor de pantalla panorámica. Naruto pensó que cualquier cosa divertida que se te ocurriera, este lugar probablemente lo tenía. Había algunos otros niños jugando, pero no tantos. Sin esperar a ninguno de los juegos. Había camareras y bares por todas partes, que sirven todo tipo de comida que puedas imaginar.

-¡WHOA! -gritaron los semidioses a excepción de Bianca y Nico y Las Cazadoras más jóvenes al ver todos los juegos y comida que había.

"Whoa", fue todo lo que los cuatro pudieron decir, ya que todos parecían haber encontrado el tesoro enterrado de Black Beard.

"Supongo que a ustedes les gusta", dijo un botones, mientras se acercaba a ellos sonriendo ante las miradas de asombro en sus caras.

Llevaba una camisa hawaiana blanca y amarilla con diseños de loto, pantalones cortos y chanclas. "Bienvenido al Lotus Casino. Aquí está la llave de su habitación", dijo entregando las cuatro llaves de la habitación a los cuatro.

"Pero ni siquiera alquilamos ninguna habitación", dijo Naruto un poco escéptico saliendo de su asombrado funk y mirando al tipo con una mirada curiosa para verificar si este tipo estaba tratando de detenerse. Pero el chico solo negó con la cabeza.

"No te preocupes por eso. Sabíamos que vendrías y ya preparaste tus habitaciones. La cuenta está a cargo. Sin cargos adicionales, sin propinas. Solo ve al piso superior, habitación 4001. Si necesitas algo, como burbujas adicionales para la bañera de hidromasaje, o objetivos de tiro al blanco para el campo de tiro, o lo que sea, simplemente llame a la recepción. Aquí están sus tarjetas Lotus Cash. Trabajan en los restaurantes y en todos los juegos y atracciones ".

-Creo que estoy un poco celoso de mi contraparte -Naruto con Annabeth Grover y Percy de acuerdo con el.

Les entregó las cuatro tarjetas de crédito de plástico verde que tenían el símbolo de loto.

"Um, por curiosidad, ¿cuánto crédito tiene esto?" Grover preguntó obteniendo asentimientos de acuerdo.

"Bueno, ya que todo está pagado, es ilimitado", dijo sin perder nunca su sonrisa gigante.

"Whoa", fue todo lo que pudieron decir de nuevo, mientras miraban la tarjeta.

Por mucho que Naruto quisiera decir que esto era una especie de truco, y que algo debía haber estado sucediendo, todavía era un niño de catorce años que ahora tenía algo con dinero ilimitado y podía hacer lo que quisiera.

Era la cosa más tentadora que Naruto había enfrentado. Estaba tratando de luchar, pero al mirar a los demás y ver las sonrisas gigantes en sus rostros, sabía que era una batalla perdida.

Luego el grupo subió al ascensor y revisó su habitación. Era una suite gigante con cuatro habitaciones separadas y un bar repleto de dulces, refrescos y papas fritas, y una línea directa al servicio de habitaciones. Toallas suaves y camas de agua con almohadas de plumas. Un televisor de pantalla grande con satélite e Internet de alta velocidad. El balcón tenía su propia bañera de hidromasaje, y efectivamente, había una máquina de tiro al plato y una escopeta, para que pudieras lanzar palomas de arcilla sobre el horizonte de Las Vegas y enchufarlas con tu arma.

"¿Es esto el cielo?" Percy preguntó

"No estoy seguro, pero creo que esto podría estar lo más cerca posible del cielo", dijo Naruto fascinado con el lugar tanto como los demás.

Todos los semidioses a excepción de Bianca y Nico asintieron de acuerdo con la contraparte de Naruto.

"Oh, Dios mío", dijo Annabeth. "Este lugar es ..."

"Dulce", dijo Grover. "Absolutamente dulce".

Lo primero que hicieron todos fue correr a sus baños y tomar una larga ducha caliente. Naruto suspiró felizmente cuando el agua caliente tocó su piel.

Después de los últimos dos días y de haber peleado con los Amables, las Hermanas Gorgona, el León Nemean, la Quimera y el Echidna, esta ducha caliente era exactamente lo que Naruto necesitaba. Ya podía sentir sus músculos relajándose.

Después de salir de la ducha, miró dentro del armario para encontrar nuevos pares de ropa. Escogió una camisa verde oscuro con jeans grises y converse verde y una chaqueta con capucha negra con cremallera para poner eso.

Después de secarse y vestirse con la ropa muy cómoda, regresó a la sala principal donde Percy, Annabeth y Grover, completamente renovados, lo esperaban. Grover estaba comiendo papas fritas a su gusto mientras Annabeth miraba el canal de descubrimiento. Naruto juró que nunca dejó de aprender. Mientras Percy estaba jugando actualmente en una PSP.

"¿Ustedes quieren regresar al lobby y divertirse un poco?" Dijo obteniendo una sonrisa de entusiasmo de los demás antes de que detuvieran lo que estaban haciendo y salieran de su habitación.

Si antes Naruto Annabeth Grover y Percy estaban un poco celosos de sus contrapartes ahora lo estaban más.

Regresaron al elevador de vidrio y entraron nuevamente al vestíbulo principal para ver que todo estaba igual como lo dejaron.

"Entonces, ¿qué van a hacer primero?" Preguntó Naruto antes de darse cuenta de que todos se habían separado tan pronto como salieron del elevador de vidrio.

Miró a su alrededor para ver a Percy a punto de saltar desde la parte superior del vestíbulo y mostró una extraña sonrisa de emoción.

Annabeth estaba frente a un juego gigante de Sims 3d. Naruto lo reconoció como el lugar donde puedes construir tus propias citas y cosas así. No le sorprendió que ella fuera a eso y supuso que estaba feliz ya que la vio hablando sola mientras apretaba botones al azar.

Mientras tanto, Grover se había encontrado frente a un juego de realidad en el que jugabas como el venado y tenías que dispararle a los sureños. Naruto tuvo que reírse cuando escuchó a Grover gritar "muerte a campesinos" y "la naturaleza lo conquista todo".

Todos los semidioses junto a Apolo y Hermes estaban riendo mientras ambos dioses estaban tirados en el suelo riendo a carcajadas mientras los demás dioses rodaban los ojos al ver lo inmaduros que eran Apolo y Hermes.

Decidió que era mejor dejar que Grover tuviera su momento para patear el trasero de la sociedad.

"Bueno, todos los demás han encontrado algo que hacer. ¿Qué debo hacer?" pensó para sí mismo mientras escaneaba el área. Pensó en jugar un juego de zombies llamado House of the Dead 3 donde esencialmente andaste matando zombies.

También pensó que podría ir al tobogán que rodeaba los ascensores de cristal o tal vez unirse a Percy en puenting.

Al menos lo habría hecho, si su nariz no hubiera captado un olor familiar.

Cuando olió el aroma, se detuvo a medio paso y su cuerpo se congeló por completo. Reconoció ese olor más que nada en el mundo. Era un olor al que se había acostumbrado tanto en la Hoja que ahora era como una segunda naturaleza para él.

Giró la cabeza olfateando el aire antes de salir corriendo por uno de los pasillos que conducían al vestíbulo.

Después de solo un minuto de correr, Naruto se detuvo y miró dónde terminó y descubrió de dónde provenía el olor familiar. Levantó la vista para ver un letrero de neón azul brillante, y sus piernas casi se rindieron cuando lo vio.

-Me pregunto que habrá visto y olido mi contraparte -Naruto pensó para si mismo mientras veía la pantalla y sus ojos se habrieron al ver lo que veía su contraparte.

Ichiraku de Dios

"De ninguna manera", pensó Naruto antes de entrar.

Cuando entró, echó un vistazo a su alrededor. El restaurante era muy similar al de Ichiraku en la hoja, pero era mucho más grande. Había mesas repartidas por todo el lugar con algunas personas sentadas alrededor disfrutando de sus comidas. También había un área de heces cerca de las cocinas para cualquiera que viniera solo.

No había nadie más allí, así que Naruto se acercó y se sentó. No tuvo que esperar mucho antes de que una bella camarera con el cabello largo y castaño que le llegaba a la espalda se le acercara con una sonrisa en el rostro. Se parecía un poco a Ayame, pero esta chica parecía un poco mayor y tenía la piel más clara con ojos azules.

"Hola, ¿puedo tomar tu pedido?" dijo ella con una voz amable.

"Urm seguro podría conseguir dos cuencos de miso ramen, por favor", dijo mientras la camarera garabateaba.

"¿Algo más?" preguntó ella antes de que Naruto sacudiera la cabeza.

"Eso es todo por ahora, gracias", dijo mientras la camarera le daba un asentimiento. Justo antes de que pudiera irse y poner la orden en Naruto, rápidamente habló con ella.

-Ahora creo que quiero un poco de Ramen -Naruto dijo resiviendo un asentimiento de su madre.

-Naruto si quieres cuando todo esto termine te puedo preparar un poco de Ramen -Bianca dijo mirando tímidamente mientras Naruto la miraba con estrellas en los ojos además ella había leído en un libro de recetas de cocina Japonesa como preparar Ramen.

-Claro que me encantaría Bianca-chan -Naruto dijo para celos de Annabeth Silena y Zoe que miraban con dagas a Bianca que las miraba con una mirada presumida.

"Disculpe, pero ¿podría responder una pregunta que tengo sobre este lugar?" Dijo obteniendo una mirada curiosa de la chica.

"Supongo que sí. ¿Qué te gustaría saber?" Ella preguntó.

"Este lugar. Hay un lugar igual en las Naciones Elementales llamado Ichiraku's Ramen. Me preguntaba si este lugar se basaba en ese puesto de ramen", preguntó, recibiendo una mirada sorprendida de la camarera.

"En realidad sí. El dueño de este restaurante no es otro que Hebe, la Diosa de la Juventud", dijo sorprendiendo un poco a Naruto. "Lady Hebe visitó la aldea Leaf en las Naciones Elementales hace unos años y se topó con el puesto de ramen por casualidad. Se enamoró del pequeño lugar. Cuando regresó se hizo suyo. Aunque el ramen aquí no es exactamente como el uno en las Naciones Elementales, todavía es bastante bueno ", dijo antes de irse a darle la orden al cocinero Naruto.

Naruto simplemente se sentó allí para tomarlo. La Diosa Hebe había visitado la Hoja y aparentemente había pasado mucho tiempo en lo de Ichiraku. Todo esto era nuevo para él y dudaba que Teuchi y Ayame supieran que una diosa los visitaba.

De hecho, ahora que lo pensaba, cuando tenía ocho años notó que una mujer muy hermosa estaba mucho en Ichiraku y había estado conversando mucho con Teuchi y Ayame. Naruto incluso le habló un par de veces y ella parecía lo suficientemente amable. Ella no lo miró ni lo trató mal. Ella solo le habló amablemente y él pensó que se hacía llamar Miyo.

Las chicas interesadas en Naruto no sabían que hacer estar enojada con la diosa por estar tan cerca de Naruto o tener que  la Diosa se interesa en Naruto.

Naruto tuvo que reírse para sí mismo. "Parece que Dioniso no fue el primer dios que conocí después de todo".

No tuvo que esperar mucho antes de que la camarera volviera a él con sus órdenes y colocara los dos cuencos frente a él. Ella le dijo que disfrutara antes de ir a los otros clientes.

Naruto lo miró y le dio una expectativa cercana. Observó los fideos y los trozos de carne de cerdo en el tazón mientras saboreaba un poco de la sopa. Sabía bastante bien. Mucho mejor que lo que tenía hasta ahora durante su tiempo en este mundo. Se encogió de hombros antes de recoger sus palillos y comer algunos de los fideos con el cerdo y masticarlos.

Cuando lo hizo, se congeló por completo y su mente se apagó por completo.

Este ramen Era tan bueno que era casi exactamente como el de la aldea de hojas. Había pasado tanto tiempo desde que tuvo un ramen tan grande que nunca pensó que volvería a probarlo.

"Um señor, ¿está bien?", Dijo la camarera agitando la mano frente a la cara estupefacta de Naruto.

Se preguntó si debería darle una leve bofetada para despertarlo antes de que Naruto saltara repentinamente tres metros en el aire antes de aterrizar de nuevo en su asiento.

"ESTO ES IGUAL A ICHIRAKU RAMEN", gritó mientras comenzaba a devorar su ramen a una velocidad muy rápida que sorprendió a la camarera y a todos en el restaurante.

-La forma en la que Naruto se come el Ramen me recuerda a -Hestia hablo pero fue interrumpida por Apolo.

-A Arty ella también disfruta tanto comer Ramen como mi sobrino -Apolo dijo con Hestia asintiendo de acuerdo con los dos adictos del Ramen sonrojando se cómo un tomate.

Durante la siguiente hora, Naruto ordenó un plato tras otro, ya que no podía obtener suficiente de las cosas. Lentamente, la pila de cuencos comenzó a acumularse hasta que finalmente llegó a la asombrosa cifra de treinta cuencos.

Todos estaban asombrados de cómo podía comer tanto y, sin embargo, no verse gordo en absoluto. Puso a muchos un poco celosos.

"¿Dónde lo pone todo?" pensó la camarera. Lo máximo que alguien comió fueron 25 cuencos y eso fue de Hermes, que es un poco habitual. Sin embargo, este niño acababa de comer un dios de alguna manera ".

Naruto dejó caer sus palillos mientras se frotaba el estómago lleno. "Ahora de eso es de lo que estoy hablando", murmuró para sí mismo. Había pasado un tiempo desde que podía consentirse así y se sintió bien hacerlo.

"Vaya, eso fue increíble", dijo una voz detrás de él, lo que hizo que Naruto se diera la vuelta para mirar detrás de él.

Justo detrás de él había un niño que debía tener unos diez años. Tenía el pelo negro y lacio y tenía un tono de piel verde oliva. Sus ojos eran de color marrón oscuro y llevaba una camisa verde oscuro con jeans azules desteñidos y una bufanda marrón que le rodeaba el cuello.

-Mira Bianca soy yo -Nico dijo con una sonrisa al ver que aparecía en la pantalla mientras Bianca solo puso los ojos en blanco pero asintio con una sonrisa a su hermano pequeño.

"Jeje, gracias" dijo Naruto rascándose la nuca. "Ha pasado un tiempo desde que tuve tan buen ramen que me perdí un poco".

"¿A qué sabe esto?" dijo el joven examinando los cuencos de los que Naruto había comido. "Nunca lo he probado antes".

"¿Quieres probar un poco?" Preguntó obteniendo un rápido asentimiento del joven que se sentó a su lado.

"Camarera dos tazones más de miso ramen, por favor", dijo recibiendo un asentimiento escalonado de la camarera antes de que ella diera la orden. Naruto juró que escuchó un gruñido desde la cocina.

"Por cierto, soy Naruto Uzumaki", le dijo al niño que lo estaba mirando, ya que parecía un poco pequeño para su edad.

"Soy Nico, Nico DiAngelo. ¿Quieres ver mis autos mitomágicos?" preguntó con una expresión de esperanza que confundió un poco a Naruto.

"Um seguro por qué no. ¿Qué son exactamente?" preguntó él obteniendo una sonrisa gigante y feliz de Nico mientras sacaba una baraja de cartas de su bolsillo.

"Es un juego de autos, aunque me gusta coleccionar las cartas y las figuritas", dijo mientras sacaba algunas figuritas de su otro bolsillo. "Se basan en la mitología griega", dijo sorprendiendo a Naruto que tenía ganas de sonreír.

"No lo dices", dijo mientras Nico extendía parte de la tarjeta frente a él y Naruto los miraba bien. Había algunos de los dioses dibujados en una caricatura como moda, pensó que Naruto tenía que admitir que se veían muy bien. Debajo de las imágenes tenían poca información como puntos de ataque y defensa.

Todos los semidioses soltaban pequeñas risitas al ver la emoción del chico menor por ese juego de cartas pero se preguntaban de que trataba ya que nunca escucharon hablar de él.

Pensé que Naruto estaba un poco sorprendido de que a Nico le gustaran tanto, ya que en la parte inferior de la tarjeta decía que estaba hecha en 1940. Supuso que le gustaban las cosas viejas.

"Entonces, ¿tienes un favorito de todos ellos?" Preguntó Naruto, que recibió un asentimiento furioso de Nico.

"Sí, de todos ellos, mi favorito es Hades", dijo entregando una tarjeta que tenía una imagen de un hombre con una armadura negra con un casco bastante malo que parecía opuesto y amenazante. Naruto tenía curiosidad por saber si el verdadero Dios del Inframundo realmente se parecía a eso.

"Aunque él es el único para el que no tengo la figura. Tengo todos los demás, pero no Hades".

"No te preocupes, estoy seguro de que lo encontrarás eventualmente. Entonces tendrás el set completo", dijo Naruto alentador, lo que obtuvo una sonrisa del chico más joven.

"Supongo que no tienes la tarjeta de Artemis, ¿verdad?" dijo, recibiendo un guiño de Nico, comenzaste a arrastrarte por el set.

Después de un par de segundos de búsqueda, Nico sacó una tarjeta y se la entregó a Naruto. "Aqui tienes."

Naruto lo miró. La tarjeta era de una mujer con cabello castaño rojizo que le llegaba hasta la mitad de la espalda y llevaba una especie de corona plateada en la cabeza. Llevaba una especie de toga como un vestido que se detenía justo por encima de las rodillas y estaba descalza. Ella empuñaba un arco en sus manos y había una imagen de un ciervo detrás de ella con anteras doradas.

Artemisa se sentía un poco triste al recordar que su contraparte aún no se había presentado a la de su bebé.

Naruto sonrió mientras miraba la foto. "Me pregunto si así es como se ve realmente mamá" , pensó para sí mismo.

"¿Por qué Artemisa?" Nico preguntó ya que quería saber por qué Naruto quería ver eso.

"Um, supongo que se podría decir que es mi favorita de los dioses griegos. Parece que puede patear todo tipo de traseros". dijo, ya que dudaba que Nico le creyera si decía 'Oh, esa es mi madre. Genial, ¿eh?

"Oh, está bien", dijo Nico antes de volver a sus cartas. "¿Quieres quedártelo?" preguntó, sorprendiendo a Naruto. "Tengo dos de la carta de Artemis y dos de sus figuras para que puedas conservarlas si quieres". dijo mientras metía la mano en su otro bolsillo y compraba una figurita de Artemisa. Su postura era igual a como estaba en la tarjeta.

"¿En serio, esto está bien?" preguntó, recibiendo un asentimiento de Nico. "Bueno, gracias amiguito", dijo mientras ponía la tarjeta y la figura en su bolsillo.

"No hay problema", dijo Nico cuando la camarera regresó y puso el tazón sobre la mesa. Luego miró a Naruto y dijo

"Por favor, no pidas más. El cocinero se está poniendo tacaño".

"Um seguro", dijo Naruto alzando las cejas antes de que ella se fuera antes de encogerse de hombros ante el confundido Nico.

"Bueno, cava", dijo mientras Nico miraba sus palillos. Los recogió e intentó usarlos, pero estaba teniendo dificultades.

Nico iso un puchero al ver que su contraparte no podía usar los palillos el también quería usarlos y preguntaba qué sabor tenía el Ramen.

"Aquí usa una cuchara por ahora", dijo entregándosela a Nico, quien luego tomó una cucharada de ramen de tamaño moderado. Cuando lo hizo, su cara se iluminó como la Navidad.

"Vaya, esto es increíble", dijo Nico cuando comenzó a devorar su comida tan rápido como llegó.

"Te dije que era bueno", dijo Naruto recibiendo un asentimiento de Nico mientras terminaba su ramen y se frotaba su cálido estómago con una mirada de satisfacción en su rostro que hizo reír a Naruto. Oh, la grandeza del ramen.

"NICO DI ANGELO", gritó una voz a través de la habitación, captando la atención de Naruto y Nico. Cuando Nico vio quién era, palideció un poco y Naruto juró que incluso vio un poco de sudor.

Marchando hacia Naruto y Nico era una niña unos años mayor que Nico, pero tenía una característica muy similar a la de él. Tenía el pelo largo y negro con la parte superior cubierta por un sombrero verde desteñido bastante grande y tenía una piel de color oliva. Llevaba un jersey marrón oscuro con vaqueros azules desteñidos y llevaba botas negras que parecían demasiado grandes para ella. Naruto solo podía adivinar que esta chica debe estar relacionada con Nico de alguna manera.

"Nico, te he estado buscando durante la última media hora. Simplemente saliste corriendo sin decírmelo", dijo en un tono molesto, obteniendo una mirada triste de Nico antes de que él se volviera hacia Naruto. Cuando hizo un pequeño sonrojo apareció en su rostro.

"U-Um h-hola", tartamudeó. "Soy Bianca Di Angelo, la hermana mayor de N-Nico".

"Hola, soy Naruto, es un placer conocerte", dijo cortésmente y estrechó la mano de Bianca. No pudo evitar encontrarla tartamudeando un poco linda.

Bianca al escuchar la última parte se sonrojo como un tomate al igual que Naruto porque se imaginó a Bianca tartamudeando y tenía que admitir que era linda.

"Lo siento si mi hermano ha sido un poco molesto. Espero que no te haya molestado".

"No, en absoluto", dijo Naruto sacudiendo la cabeza. "Nico ha sido una buena compañía y ha sido genial hablar con él. Me mostró sus cartas mitomágicas", dijo recibiendo un gemido de Bianca.

"Nico no todo el mundo está obsesionado con esas cartas como tú", dijo severamente recibiendo un gemido de Nico.

"Pero a mi hermana Naruto no le importa. Incluso me trató con ramen", dijo sorprendiendo a Bianca.

"Naruto, no tenías que hacer eso", dijo, pero Naruto solo agitó su mano.

"Está bien. Nico nunca había probado el ramen antes y quería difundir la grandeza del ramen", dijo mientras le echaba un poco de sudor por detrás de la cabeza de Bianca. "Además, era gratis de todas formas con estas tarjetas ilimitadas".

"RAMEN", gritó Nico.

"Oh, genial", se quejó Bianca recibiendo risas de los dos niños antes de dejar que una pequeña sonrisa apareciera en su rostro.

"Bueno, gracias por cuidarlo, pero tenemos que irnos", dijo Bianca, recibiendo un asentimiento comprensivo de Naruto.

"¿Podemos finalmente bajar por el tobogán gigante?" Nico dijo que recibió un pequeño asentimiento de Bianca que hizo que Nico gritara de alegría.

-Oh genial pobre de mi contraparte el nunca dejará de hablar del Ramen -Bianca dijo dando un suspiro mientras los demás semidioses reían.

Nico luego se bajó de su taburete antes de salir del restaurante. Se dio la vuelta y se despidió de Naruto. "Adiós Naruto. Gracias por el ramen", dijo antes de desaparecer.

"Nico espera", gritó. Rápidamente se dio la vuelta para despedirse de Naruto antes de encontrarse enterrada en el pecho de Naruto. Naruto se había levantado un momento antes de que Bianca se diera la vuelta y lo golpeara con la cabeza apoyada contra su pecho.

"Cálido", fue lo primero que pensó antes de que un sonrojo llegara a su rostro y se sacudió rápidamente.

"Oh, perdón", dijo ella, pero Naruto se rió entre dientes.

"Está bien. Será mejor que vayas tras él antes de que se meta en los dioses sabe qué tipo de problemas", dijo Bianca con un movimiento de cabeza y una sonrisa antes de perseguir a su hermano menor.

"Qué par tan extraño" , pensó antes de salir del restaurante y despedirse de la camarera que ahora estaba exhausta.

Mientras caminaba por los pasillos del hotel, miró todo a su alrededor, observando las diferentes habitaciones llenas de todo tipo de cosas divertidas y actividades.

Pensó que no podía evitar sentir que le faltaba algo. Algo importante que simplemente no estaba viendo, y le preocupaba un poco. Este lugar parecía demasiado bueno para ser verdad. Tenía que haber algún tipo de captura.

Naruto tenía los mismos pensamientos que su contraparte si algo que aprendió de su tiempo en Konoha fue a no confiar en algo que hiba demasiado bien tenía que haber un truco en ese lugar.

"Me pregunto dónde están los otros?" pensó para sí mismo antes de escuchar el sonido de las máquinas tragamonedas y los gritos de alegría y furia estallaron.

Naruto volvió la cabeza y miró por uno de los otros pasillos para ver una habitación con muchos de los residentes más adultos del hotel en la parte del casino del hotel.

Naruto miró el lugar y una sonrisa se abrió paso hasta su cara.

"Me pregunto si mi increíble suerte aún está intacta". pensó antes de mirar rápidamente a su alrededor. No había nadie alrededor, así que rápidamente hizo una señal con la mano antes de convertirse en una columna de humo. Cuando el humo se apagó, Naruto estaba disfrazado de veinteañero con cabello castaño oscuro atado en una cola de caballo con una cicatriz sobre el puente de su nariz.

"Espero que a Iruka sensei no le importe que tome prestada su apariencia por un tiempo" , pensó antes de entrar al casino.

Tenía su dinero en el bolsillo de lo que le quedaba, ya que realmente no quería dejarlo en su habitación de hotel, sin importar cuán seguro fuera al parecer.

Al entrar en el casino, se sentó en una de las máquinas tragamonedas y puso un cuarto. Luego tiró de la palanca emocionado para ver qué pasaría. Tan pronto como lo hizo, la máquina comenzó a hacer mucho ruido y las monedas comenzaron a salir. Naruto sonrió.

Su suerte aún estaba intacta. Suerte por la que Tsunade estaba muy celosa ya que tuvo la peor suerte en todo el mundo.

Pasó los siguientes diez minutos en las máquinas tragamonedas y estaba ganando cada vez. Tenía que conseguir bastantes contenedores para todos sus cuartos. Llamaba la atención cuando la gente se preguntaba cómo una persona podría ser tan afortunada.

Ahora varios de los dioses hombres se preguntaban si era buena idea llevar con ellos a Naruto para ganar mucho dinero en las Vegas pero esos pensamientos se fueron tan rápido como llegaron al ver las miradas que Artemisa y Hestia les dirigían como si supieran lo que pensaban.

"Todavía lo tengo" , pensó antes de que su mirada comenzara a mirar alrededor del casino y vio una mesa de póker. Ahora que era donde estaba el dinero real.

Naruto no era exactamente alguien a quien le gustaba jugar, pero cuando eres bueno en algo no puedes evitar que te guste. Además, si jugaba bien sus cartas, podría obtener bastante dinero de este lugar que podría ayudar a financiar la búsqueda y proporcionar dinero para más adelante en la vida. "Gana, gana", pensó Naruto.

Se acercó a la mesa de póker cuando una persona se levantó y se fue. Naruto supuso que no les iba muy bien ya que se quejaban y maldecían por lo bajo. Naruto se sentó y miró al repartidor de cartas.

"Cuenta conmigo."

Una hora después

Naruto miró sus cartas mientras miraba al chico frente a él. Los únicos que quedaban en la mesa eran Naruto y un tipo rico de mediana edad que Naruto pensó que debía haber pensado que era el dios padrino con el traje negro y la corbata, el pelo peinado hacia atrás, el cigarro en la boca con un bombín en la cabeza.

El chico estaba mirando a Naruto nerviosamente mientras Naruto mantenía la calma ya que tenía una mirada sin emociones en su rostro.

Una multitud se había formado alrededor, debido a lo alto que estaba jugando el juego. Cada uno tenía múltiples fichas de colores que iban desde miles hasta miles de dólares. Todos los demás se retiraron y abandonaron el juego, no queriendo perder más dinero mientras solo quedaban Naruto y el otro chico.

-Aw eso ya no es divertido solo con dos personas -Naruto dijo asiendo un puchero que para las chicas interesadas en el se les iso lindo.

"Bien, caballero, ¿qué será?", Dijo el repartidor de cartas mientras el padrino aspirante sonreía y empujaba todas sus fichas al centro.

"Estoy todo adentro", dijo recibiendo algunos jadeos de la gente que lo rodeaba.

Naruto levantó una ceja antes de sonreír. "Lo mismo para mí", dijo empujando sus fichas en el medio también.

El otro hombre sudaba un poco cuando Naruto de alguna manera logró mantener su fachada sin emociones cuando el repartidor de cartas dijo "está bien, muchachos. Muestren sus cartas".

Cuando lo hizo, el otro hombre fue primero cuando una sonrisa se dirigió a su cara. Extendió sus cartas y dijo "Casa llena", ya que tres 2 y dos 5 encontraron su camino a los ojos de todos los que aplaudieron un poco.

"Quizás la próxima vez, mocoso", le dijo al disfrazado Naruto mientras iba a recoger todas las fichas.

"No tan rápido", dijo Naruto llamando la atención de todos mientras ponía sus cartas sobre la mesa mostrando un diez, jota, reina, rey y as de corazones.

"Rubor real", dijo haciendo que todos gritaran de asombro mientras el otro tipo tenía una expresión de incredulidad en su rostro. "Creo que estos son míos", dijo, mientras recogía todas las fichas. Pensó que debía haber ganado al menos 2.5 millones en efectivo, ya que todas las personas a las que venció parecían extremadamente ricas y parecían tener billeteras infinitas.

Si antes todos no se habían sorprendido con la suerte loca de Naruto ahora parecía que les hiba a dar un infarto al oír la cantidad de dinero que había ganado.

-Creo que ya lo dije antes pero lo diré de nuevo ¡MI SOBRINO ES ASOMBROSO! -Apolo exclamó con sus manos asia arriba con todos los dioses masculinos asintiendo de acuerdo con Apolo.

Cuando recogió sus fichas se detuvo cuando escuchó una voz en su cabeza. Casi como un susurro.

"No te dejes engañar, Naruto. Debes salir del casino. Recuerda tu búsqueda. No caigas en el truco de los hoteles por más tiempo", dijo antes de desaparecer rápidamente.

Tan pronto como la voz habló, la realidad finalmente golpeó a Naruto como una pared de ladrillos. "Maldición" , pensó mientras recogía rápidamente sus fichas de póker, las tomó para cambiarlas por dinero antes de irse rápidamente con un maletín gigante en sus manos que rápidamente selló para más tarde.

Cuando nadie lo miraba, volvió a su forma normal antes de correr por el hotel tratando de encontrar a los demás.

"Este lugar" , pensó mientras corría. "Tiene que estar encantado. ¿Cómo no lo había visto antes? Soy tan estúpido" , pensó regañándose a sí mismo antes de doblar una esquina y encontrarse con Percy.

Percy también tenía una expresión de pánico en su rostro y Naruto solo podía imaginar que Percy también lo descubrió y tal vez recibió algún tipo de mensaje como él.

"¿Lo descubriste también?" Preguntó Naruto rápidamente cuando Percy asintió con la cabeza.

"No puedo creer cómo nos enamoramos. Me olvidé por completo de la búsqueda. Solo lo recordaba porque escuché a alguien susurrar en mi cabeza. Creo que fue mi papá", dijo mientras Naruto asentía.

"Lo mismo de mí. Creo que fue mi mamá quien me habló. Me quedé tan atrapado en este lugar, que sentí que me atraía y me hacía querer nunca irme".

Bianca y Nico estaban sorprendidos al escuchar que el hotel y casino en el que vivían estaba encantada los dioses se preguntaban quien encantaría el hotel pero Zeus y Poseidón ya tenían una idea de quién había sido pero no comentaron nada.

"Tenemos que salir de aquí. Percy, encuentra a Annabeth mientras que yo iré a buscar a Grover. No te detengas por nada. Tan pronto como lleves a Annabeth a la habitación, toma tus cosas y nos iremos".

Percy asintió antes de que los dos se separaran para buscar a sus compañeros de equipo.

Naruto no tardó mucho en encontrar a Grover. Todo lo que tenía que hacer era escuchar el grito de "DIE REDNECKS".

Grover seguía jugando el mismo juego todo el tiempo y no parecía un poco escalonado.

"¡Grover!" Gritó Naruto pero Grover parecía ajeno.

Él dijo: "¡Muere, humano! ¡Muere, tonta, contaminante, desagradable!"

"¡GROVER!" Naruto gritó finalmente haciendo que el sátiro se diera la vuelta y apuntándole con la pistola de plástico.

"Vamos, nos vamos", dijo Naruto agarrando el brazo de Grover con un firme agarre mientras alejaba al sátiro. Grover estaba luchando por salir, pero Naruto lo venció fácilmente.

Naruto solo miró a su amigo sátiro con los ojos en blanco Grover solo se sonrojo sabiendo que no se podía safar del agarre de Naruto debido a que era más fuerte que el.

"No solo un poco más. Le estoy enseñando a los cuellos rojos una lección que nunca olvidarán", declaró antes de recibir algunas bofetadas de Naruto, quien luego comenzó a sacudirlo como una muñeca de trapo.

Grover se congeló y parpadeó varias veces antes de que sus ojos se abrieran de par en par. "OH MIERDA", gritó finalmente logrando controlarse haciendo que Naruto gimiera. "¿Cuánto tiempo hemos estado aquí?" Preguntó obteniendo un encogimiento de hombros de Naruto.

"No tengo idea, pero no mucho, espero. Creo que solo unas pocas horas, pero al ritmo que íbamos, dudé de que alguna vez nos íbamos a ir", dijo Naruto cuando los dos subieron al elevador de vidrio y regresaron a la habitación a buscar Las cosas de Grover.

Tan pronto como llegaron, Grover se dirigió hacia su habitación para recoger sus cosas y vio que Percy y Annabeth ya estaban allí, terminando de empacar.

Annabeth parecía molesta porque cedió a la tentación tan fácilmente mientras que las cejas de Naruto se alzaron cuando vio que la cara de Percy estaba roja con algunas marcas de arañazos. Naruto hizo un gesto hacia su rostro que recibió un gemido y una mirada dirigida a Annabeth.

"Alguien no quería que le quitaran el juego de los Sims, así que decidieron arañarme y abofetearme cuando intenté moverla", dijo Percy en un tono molesto mientras Annabeth se reía nerviosamente mientras se rascaba la parte posterior de la cabeza.

-Te mereces eso y más -Annabeth declaró con su madre de acuerdo con ella mientras los demás ponían los ojos en blanco.

"Jeje, lo siento", dijo.

Percy tuvo que reprimir una carcajada cuando hizo eso porque parecía una versión femenina de Naruto cuando se avergonzaba.

"Wow, qué cruel", dijo Naruto recibiendo una bofetada juguetona en el pecho de la chica de cabello rubio cuando Grover salió corriendo de su habitación donde los cuatro salieron corriendo de la habitación y se dirigieron hacia el vestíbulo.

Cuando salieron del elevador de vidrio, fueron a la recepción donde encontraron al tipo de antes y aún tenían su sonrisa gigante y alegre en su rostro.

"Nos vamos", le dijo Percy.

"Qué pena", dijo con los ojos caídos un poco. "Acabamos de agregar un piso completamente nuevo lleno de juegos para los miembros de la tarjeta de platino".

El hombre extendió las cartas frente a ellos y todos sintieron una ola de deseo de tomarlas. Sin embargo, sabiendo que tenían que salir de allí, todos gritaron "¡NO GRACIAS!" antes de correr hacia las puertas.

El sonido de los juegos que se jugaban y la risa llenaron el aire y se olían fuertes olores de deliciosa comida, pero el grupo siguió corriendo y afortunadamente logró salir después de pasar por las puertas del casino.

-Ese lugar sin duda es una trampa para atraparte por días sin que te descuenta -Naruto dijo resiviendo asentimientos de todos menos los obvios.

"Salimos. Gracias a los dioses", dijo Annabeth antes de ver a Naruto recogiendo un periódico descartado a un lado de ellos.

Lo recogió y cuando vio la fecha gritó "Maldita sea".

Lo que todos dijeron mirándolo antes de sostener el papel frente a ellos y señalar la fecha en la parte superior.

Leyó el 20 de junio.

Los otros se quedaron sin aliento y se dieron cuenta de que estaban "Estuvimos allí durante cinco días. Eso significa ...", comenzó Percy antes de que Annabeth lo interrumpiera y los mirara con gravedad.

"Mañana es el solsticio de verano. Nos queda un día. Si no lo hacemos, entonces los dioses estarán en guerra".

Naruto respiró hondo y profundo al pasar al lado del camino y silbar. Cuando hizo un taxi se detuvo justo en frente de ellos. "Siempre quise intentar eso", dijo haciendo que los demás pusieran los ojos en blanco antes de que comenzaran a subir al taxi.

"Los Ángeles por favor", dijo Annabeth cuando entró.

El taxista masticó su cigarro y nos evaluó. "Son trescientas millas. Para eso, tienes que pagar por adelantado".

"¿Aceptan tarjetas de débito de casino?" Annabeth preguntó.

Los cuatro involucrados en la búsqueda esperaban a que aceptaran la tarjeta pero Naruto sabía que si no lo hacía el pagaría con el dinero que ganó en el casino.

El se encogió de hombros. "Algunos de ellos. Igual que las tarjetas de crédito en su mayoría. Tengo que pasarlo primero".

Annabeth le entregó su tarjeta verde Lotus Cash. El hombre lo miró un poco vacilante antes de encogerse de hombros y pasarlo por su máquina.

Su medidor comenzó a vibrar y en poco tiempo las luces parpadearon. Finalmente, un símbolo de infinito apareció junto al signo de dólar.

El hombre silbó antes de mirar a Annabeth. "¿Dónde está su alteza?", Dijo en tono cortés, lo que provocó que Annabeth se enderezara. Naruto supuso que le gustaba que la llamaran "su alteza".

"Los Ángeles", dijo mientras el taxista asentía antes de comenzar a conducir.

Tan pronto como comenzaron a conducir, echaron un último vistazo al Lotus Hotel and Casino.

"No me he divertido tanto en mucho tiempo", dijo Percy suspirando mientras los demás asentían.

"Tengo que dispararle al cuello rojo", murmuró Grover con una sonrisa melancólica. Obviamente también se divirtió mucho, incluso si les costó cinco días.

"Construí ciudades", dijo Annabeth refiriéndose a su juego de Sims con el que estaba obsesionada. Sin duda lo que ella quería hacer en el futuro.

"Gané 2.5 millones de dólares", dijo Naruto asintiendo con la cabeza antes de darse cuenta de que todo estaba en silencio. Levantó la vista para ver a todos, incluido el taxista, mirándolo con cara de asombro. Naruto nunca dejó de sorprenderlos.

"¿Qué?"

Todo en la sala del trono era silencio momentos después se escucharon varias risas siendo los semidioses Apolo y Hermes los más ruidosos las Cazadoras eran risas controladas al igual que los dioses cuando Athena pudo parar de reír y cuando todos se callaron se aclaró la garganta para continuar con la lectura.

Capitulo Dieciocho

Tan Serca Pero Tan Lejos

Bueno aquí está otro capítulo más gente espero y les aya gustado y quiero agradecer a todos los que leen la historia en general no solo a los que votan porque gracias a todos los que se dan el tiempo de leer la historia y sus comentarios de apoyo me anima a seguir escribiendo la sin más me despido hasta el próximo capítulo.