CORAZONES CONGELADOS I

Esta leyenda me la pidió Scarlett_inclan, espero que te guste.
.
.
.
.
.
.
.
Era una tarde tranquila en el santuario, cuando de pronto...

Hyoga: ¡Maestro!

Camus: ¿Que ocurre, Hyoga?

Hyoga: Oí que el patriarca lo envió a una misión a Siberia

Camus: Así es muchacho, me voy mañana

Hyoga: ¡Por favor lléveme con usted!

Camus: ¿Qué?, ¿Por qué?

Hyoga: Estamos en verano

Camus: ¿Y?

Hyoga: ¡La mansión es un horno! Cada día siento que me derrito un poco más, los chicos están de mal humor, el maquillaje de Saori se corrió y es algo que no quiero volver a ver, ¡Déjeme ir con usted!

Camus: - suspira - Empaca lo suficiente para cinco días, te espero afuera del santuario en 15 minutos

Hyoga: ¡Gracias, maestro! No lo molestare

Camus: (Se que me voy a arrepentir)

Un rato después maestro y alumno estaban en el avión camino hacía su amada tierra

Hyoga: Maestro, ¿De qué trata la misión?

Camus: Tenemos que proteger a una conocida de la señorita Hilda de Polaris. La muchacha fue a hacer un encargo, pero su transporte fue atacado por un grupo de caballeros renegados. La joven no sufrió daño grave y una anciana la acogió en su cabaña.
Nuestra misión es ir a buscarla y escoltada hasta el punto de encuentro, donde uno de los dioses guerreros la llevará de regreso a Asgard.
Los renegados no han sido capturados por lo que es posible que vuelvan a intentar atacarla.

Hyoga: ¿Por qué van tras ella?

Camus: Imagino que se tratar del encargo de Hilda

Hyoga: ¿De qué se trata?

Camus: No lo se

Hyoga: ¿Por qué Hilda envió a una joven en vez de uno de los dioses guerreros?

Camus: No lo se

Hyoga: ¿No preguntó?

Camus: No es de mi incumbencia

Hyoga: ¿Y no siente curiosidad?

Camus: Hyoga, aun eres muy joven, pero cuando seas un caballero dorado aprenderás que debes quedarte con la información necesaria para una misión. En la mayoría de los casos es confidencial, y aunque no lo fuera entrometerse podría poner en peligro la misión y lo más importante, debes evitar intimar con los involucrados ¿Quedo claro?

Hyoga: Si maestro

El resto del viaje fue silencioso. El cisne quedó pensativo, su maestro había hablado como si el hubiera tenido una experiencia relacionada, ya le preguntaría cuando estuviera de mejor humor.

Horas más tarde por fin llegaron a su destino

Camus: Ya llegamos, toma tus cosas, tenemos que caminar el resto

Hyoga: ¿Como cuánto?

Camus: La cabaña queda en el bosque Taiga a un par de kilómetros de aquí

Hyoga: ¿El bosque Taiga? ¿No es uno de los bosques más grandes del planeta?

Camus: Si

Hyoga: ¿Como llegaremos a la cabaña sin perdernos?

Camus: Adelante hay una pequeña aldea, la cabaña está a 40 minutos caminado adentrándose al bosque, hay un camino así que mientras no haya tormenta estaremos bien.

Hyoga: De acuerdo

Ambos caminaron hasta llegar a la aldea y se detuvieron a comer y beber algo en un bar

El rubio estaba sentado en la barra con su comida y bebida, ansioso por conocer más sobre esa región.

Bar tender: ¿Nuevo por aquí, chico?

Hyoga: Algo, pase la mayor parte de mi vida en Siberia, pero es la primera vez que visito esta región.

Bar tender: Imagino que será una estadía agradable, ya que nuestra región cuenta con un folclore excepcional y las leyendas que forman parte de nuestra cultura son fascinantes.

Hyoga: ¿Leyendas?

Bar tender: Así es, como Yuki Onna que es uno de los personajes clásicos que componen nuestra cultura.

Hyoga: ¿Yuki Onna? Creo que jamás la he escuchado

Bar tender: ¿Quieres que te cuente su leyenda?

Hyoga: - se encoge de hombros - No veo por qué no

Bar tender: ¡Ese es el espíritu! Ahora lo que sigue "La leyenda de Yuki Onna" o también llamada "La mujer de la nieve"

Su apariencia cuenta que es una mujer muy alta poseedora de gran belleza y largos cabellos negros y su piel es muy pálida, casi transparente, pero sus ojos pueden causarte pavor con sólo mirarlos, puesto que dicen que estos son tan fríos como el hielo y carentes de cualquier emoción humana.

Hyoga: - susurra - como los de mi maestro

Bar tender: No me interrumpas, chico

Hyoga: Disculpe

Bar tender: Continuó...

Suele llevar un kimono blanco, aunque en ocasiones se presenta desnuda sobre la nieve. Al moverse ella flota sobre la nieve sin dejar una sola huella, incluso algunos dicen que no tiene pies. Si se siente amenazada puede desaparecer en una nube de nieve.

Su naturaleza es malvada, en las tormentas de nieve se aprovecha de los viajeros cansados, utiliza su aliento helado para dormir los y deja que mueran congelados, otras veces los desorienta de su camino y mueren perdidos en medio de la nieve

A veces entra en los hogares de la gente y echa la puerta abajo con una ráfaga de viento para matarlos mientras duermen.
En ocasiones, se presenta con un bebé y le pide a la víctima que lo sostenga, este resulta siendo tan pesado que la persona no puede moverse y muere congelado.

Hyoga: ¿Son varias mujeres?

Bar tender: Cada aldea tiene su "Yuki Onna" Con historia y modo de matar propios

Hyoga: ¿Cuál es la de acá?

Bar tender: La de aquí solo aparece cuando hay clima particularmente nevado o hay tormenta. Se presenta en la forma de un súcubo y los seduce con su belleza, para luego por medio de un beso, robarle su fuerza vital.

(Súcubos: Demonios que toman la apariencia de una mujer atractiva para seducir hombres y alimentarse de ellos)

Hyoga: Wow ¿Tiene alguna debilidad?

Bar tender: Ninguna en particular.
Aunque, hay quienes dicen que la única forma de matar a un súcubo... Es logrando que se enamore de un mortal.

Hyoga: Fascinante

El joven iba a volver a hablar cuando lo tomaron del brazo y lo sacaron del bar.

Hyoga: Maestro ¿Que ocurre?

Camus: Yo te lo diré, lo que ocurre es que te deje solo 15 minutos y ya estabas hablando con extraños.

Hyoga: Solo quería saber sobre la región, jamás hemos estado aquí

Camus: ¿Sabes todo lo que puedo pasar? No sabias si ese hombre era un asesino o un traficante de órganos. Tal vez planeaba drogarte, secuestrarte, torturarte y vender tus órganos al mercado negro

Hyoga: Eso suena muy pesimista

Camus: Olvídalo, ¿Te dijo algo importante?

Hyoga: Dijo que es posible que nos ataque un fantasma vengativo

Camus: - facepalm - Solo olvídalo niño, tenemos que irnos, debemos llegar a la cabaña antes de que empiece la tormenta

Hyoga: ¿Habrá tormenta?

Camus: Para nuestra desgracia si, según lo que me dijeron la tormenta durará dos o tres días y empezará en más o menos una hora, la cabaña está a 45 minutos caminando así que hay que darse prisa

Hyoga: Ok

Los caballeros emprendieron el camino, para su desgracia la tormenta se adelanto y tuvieron que cruzar el bosque con una fuerte ventisca.

Camus: ¡No te separes de mí, Hyoga!

Hyoga: No lo haré

Siguieron caminando hasta que lograron divisar la cabaña a unos cuantos metros.

Camus: Adelántate, asegurare los alrededores antes que la tormenta empeore

Hyoga: ¿Esta seguro?

Camus: Obedece

El caballero de acuario dio un par de vueltas alrededor de la casita, en su segunda vuelta casi juraba haber visto una cabellera negra pasar junto a él, se aseguró de que no hubiera ningún peligro antes de decidirse a entrar.
Al entrar a la cabaña una amable mujer de edad avanzada los recibió con una sonrisa.

Sra. Kaido: Hola caballeros, me alegra que hayan llegado sanos y salvos

Camus: Usted debe ser la señora Kaido - le estrecha la mano - Soy Camus de Acuario y el es mi alumno Hyoga de Cisne

Hyoga: - hace una reverencia - Un placer conocerla

Sra. Kaido: Igualmente, espero que su estadía en mi casa sea agradable

???: ¡Sra. Kaido, ya encendí la chimenea!

Sra. Kaido: Que bien, querida ¿Podrías venir para que nuestros invitados te conozcan?

Por la puerta entra una hermosa joven de cabello negro azulado, de piel blanca y ojos tan fríos como el hielo.

Hyoga: Mi nombre es Hyoga, Y tu debes ser la amiga de Hilda

Arya: Puedes llamarme Arya

Hyoga: Que lindo nombre

Arya: Gracias - mira a Camus - Me imagino que usted será el caballero de acuario

Camus: Me llamo Camus, encantado de conocerla señorita

Sra. Kaido: Arya, ¿Por qué no llevas a estos jóvenes a su habitación? Deben estar cansados

Arya: Encantada

Camus: Aprecio su preocupación, pero nuestro deber es protegerlas

Sra. Kaido: Nada de eso muchacho, debes descansar si quieres tener energía para pelear después

Camus: En ese caso le tómo la palabra, vamos Hyoga

Hyoga : Si, maestro

Maestro y alumno siguieron a la joven por la pequeña casa hasta la última habitación de la casa

Arya: Bueno, aquí dormirán ustedes, el baño está enfrente y la sala de estar y la cocina quedan cruzando el pasillo

Camus: De acuerdo

Arya: En un rato les traeré chocolate caliente, si necesitan más mantas avísenme

Hyoga: Tranquila, estamos acostumbrados al frío de Siberia

Arya: Oh no, esta cabaña de por sí es muy fría y más ahora con la tormenta

Camus: - aprieta el hombro de Hyoga - Le agradezco su amabilidad, señorita Arya, pero no tiene que molestarse

Arya: No es ninguna molestia, caballero, yo los atiendo con todo gusto

La joven se retiró por el pasillo tarareando una dulce melodía, los caballeros entraron al cuarto y dejaron su equipaje a los pies de ambas camas.

Hyoga: Es amigable, me agrada

El acuario mayor gruñe

Camus: Estas tomando demasiada confianza, muchacho, estamos aquí por trabajo, no lo olvides

Hyoga: Lo sé, pero estaremos atrapados aquí hasta que pare la tormenta, no tiene nada de malo que nos llevemos bien con la señorita

Camus: No discutas conmigo, solo haz lo que te digo

Hyoga: Si, señor

El mayor suspira y pone una mano en el hombro de su pupilo.

Camus: Tal vez te parezca muy duro, pero solo quiero prepararte para ser un buen caballero dorado

Hyoga: - sonríe - Lo se

el mayor le devuelve la sonrisa... Interiormente.

Camus: Basta de palabras, descansa un poco

El de mechones agua marina sale del cuarto, topándose de frente con la joven y logrando que esta derramara un poco de chocolate en sus ropas.

Camus: Mis más sinceras disculpas, señorita, lamento haberla chocado

Arya: Discúlpeme a mí, venia algo distraída - sonríe - Les traje chocolate caliente

el caballero recibe ambas tazas y asiente en agradecimiento.

Camus: Gracias, señorita Arya, no tenía que molestarse

La chica niega con una sonrisa

Arya: Por favor llámeme solo Arya, estaremos viviendo juntos durante la tormenta, no hay necesidad de tanto formalismo

Camus: Si eso la hace sentir más cómoda, seré feliz de complacerla

La joven soltó una risita se corrió un mechón de cabello del rostro

Arya: Definitivamente eres un caballero con todas las letras, les llamare cuando la cena esté lista

Camus: De acuerdo

Arya: Fue un gusto conocerte, Camus

Le tendió la mano y el hombre la estrecho, haciendo una mueca al sentir la delicada mano extremadamente fría, carente de calor corporal. Sin pensarlo, tomo la mano de la mujer y la puso en su mejilla para sentir mejor la temperatura, ante esta acción el rubor inundó el rostro de la chica.

Camus: Deberías calentarte, esta helada

Arya: S-sí, claro - retira la mano nerviosa - Gracias por preocuparte

La joven prácticamente huyo por el pasillo y dejo que el Acuario ingresara a su habitación.
El rubio había dejado su armadura y equipaje a los pies de la cama se acostó cómodamente en ella, el mayor entró y le tendió una de las tasas al chico.

Camus: Acábatelo

Hyoga: Gracias

Camus: Pero ten cuidado, esta...

Hyoga: ¡Ay!

Camus: ... Caliente

El maestro niega con la cabeza y sostiene el puente de su nariz con el dedo.

Hyoga: ¿Maestro?

Camus: ¿Qué?

Hyoga: ¿No tiene sueño?

Camus: ¿De que hablas?

Hyoga: Desde que entré a la casa me siento agotado

El de cabello agua marina frunce el ceño, ahora que lo pensaba podía sentir el agotamiento en sus huesos, pero no lo tenía al ingresar a la cabaña, fue después de sostener la mano de Arya.

Camus: El viaje fue largo, estas cansado

Hyoga: Tal vez

El muchacho se recuesta en la almohada y cae dormido en cuestión de minutos
El maestro sigue el ejemplo, se deshace de sus botas y se tumba en la cama de al lado, para luego caer en un sueño inquieto.

Como consecuencia de años de arduo entrenamiento, Acuario estaba constantemente en alerta, aún estando dormido. En su estado de semi conciencia podía distinguir la fuerte ventisca que azotaba el techo, las cacerolas chocando entre sí en la cocina, incluso podía sentir la tranquila respiración del niño que descansaba en la cama contigua. El golpeteo de un par de zapatillas en el corredor llamó su atención y sus ojos se abrieron cuando dieron un par de golpes en la puerta de la alcoba.

Camus: Adelante

Una cabellera azul se asomó por el costado de la puerta.

Arya: Hola, ¿Dormiste bien?

Camus: Si, gracias

Arya: La cena esta lista, vengan pronto o se enfriara

Camus: Estaremos allí en un minuto

Arya: Claro

La joven se retiró y el caballero estiro sus músculos rígidos, antes de acercarse a su pupilo y sacudirlo.

Camus: Despierta, muchacho, no podemos hacer esperar a las señoritas

Hyoga: - bosteza - Si, señor

El rubio se frotó los ojos y algo somnoliento siguió a su mentor hasta el humilde comedor, dónde los esperaban con platos humeantes.

Sra. Kaido: Por favor, caballeros, siéntense y degusten a su antojo

Ambos jóvenes asienten y toman sus lugares en la mesa.

Camus: Le agradezco mucho su hospitalidad, Sra. Kaido

La anciana negó con una sonrisa.

Sra. Kaido: No hay de que agradecer, joven, después de todo es mi forma de agradecerles por venir hasta aquí para cuidarnos.

Hyoga: No se preocupe por nada, señora, nosotros las mantendremos a salvo

Sra. Kaido: Me alegra saberlo, pequeño, mi cansado corazón no podría soportar otro susto similar

Camus: Tengo entendido que sufrieron un ataque hace un par de días - la mujer asintió - ¿Le importaría darme algunos detalles?

Sra. Kaido: Eran las 8pm, Arya recogía los trastes de la cena cuando un grupo de bandidos echaron la puerta abajo y arremetieron contra ella - la mujer s quito los lentes para secar un par de lágrimas - Yo soy una vieja y no puedo dar mucha resistencia, pero Arya es joven y llena de energía por lo que pudo safarse de ellos.

Hyoga: ¿En serio? ¿Cómo lo hiciste?

La muchacha se puso de pie y recogió los trastes sucios de la cena.

Arya: No fue para tanto, solo corrí al bosque y supongo que los perdí

Sra. Kaido: Un rato después, Arya volvió sola del bosque con unos cuantos rasguños

Camus: ¿A usted no le hicieron daño?

Sra. Kaido: No, caballero, al parecer sólo querían a Arya.

El caballero dorado tomó nota mental de aquello. La mujer mayor se retiró a sus aposentos siendo acompañada por acuario antes regresar a su propia habitación y disfrutar de una agradable lectura. Por otro lado, el rubio se quedó ayudando a la chica a limpiar la cocina.

Hyoga: ¿Puedo hacerte una pregunta?

Arya: Claro

Hyoga: ¿Qué relación tienes con Hilda?

Arya: Bueno, se podría decir que somos amigas, continuamente viajo a Asgard a visitarla

Hyoga: ¿Y por qué te quieren lastimar?

Arya: Umm - la joven guardaba la vajilla mientras evitaba el contacto visual - No estoy muy segura, la gente de aquí en algo extraña puede parecer que me consideran una amenaza

Hyoga: ¿A ti? Pero eres muy dulce

Aquel comentario enterneció el corazón de la peli azul, quien le respondió con una caricia en la mejilla y un beso en la frente.

Arya: Buenas noches, Hyoga, descansa bien

Hyoga: Gracias, Arya, igual tu

Ambos jóvenes se retiraron a sus respectivas habitaciones. El cisne entró a la suya y empezó a desvestirse, dispuesto a ponerse algo más cómodo para dormir.

Camus: Tardaste mucho - sin apartar la vista de su libro - ¿Qué tanto hacías?

Hyoga: Conversaba con Arya

Camus: ¿Qué te dije de intimar?

Hyoga: Era relacionado con el trabajo

Camus: ¿Que averiguaste?

Hyoga: Sus respuestas eran algo vagas, pero dijo que era amiga de Hilda y que las personas del pueblo eran extrañas

Camus: ¿En qué sentido?

Hyoga: No estoy seguro, creo que le tienen miedo

Camus: Interesante...

Al vestir una sudadera y una camiseta vieja, el chico se acurruco bajo las mantas.

Hyoga: - bosteza - Buenas noches, maestro

Camus: Descansa

El mayor apago la lampara del buró y ambos cayeron en un sueño inquieto.

En medio de la madrugada, el de mechones agua marina se removía incomodo bajo las sábanas mientras una capa de sudor cubría su frente. Las imágenes borrosas pasaban por su mente cual película a blanco y negro.

???: Eres muy joven para entenderlo, muchacho

...

Una melodiosa voz femenina le susurra a su oído con malicia:

- Oh Cami, eres tan pequeño y delicado... Tan dulce e inocente

...

- Shh, será nuestro secreto, cariño... Si le cuentas a alguien sobre nuestro encuentro, el próximo no será tan agradable

La mirada del niño se encuentra con los ojos más fríos que ha visto jamás.

...

El hombre se despertó alterado, sudando frio con la respiración agitada, la ventana de la habitación se encontraba abierta de par en par, permitiendo la entrada del helado frio de la noche. de milagro no se despertó antes con la tormenta, se dijo. Se puso de pie y cerró la ventana con seguro, tomándose un minuto para observar los copos de nieve golpeando la ventana. A sus espaldas su pupilo tiritaba del frio y su piel bronceada se había tornado blanca. El mayor arrugo la frente con preocupación, se acercó al menor y enderezo sus mantas, además de adicionar un par de sus propias cobijas para calentar al niño, lo que pareció funcionar pues rápidamente se hizo bolita y cayó en un sueño profundo.

Nuevamente, el exterior llamó su atención, esta vez fueron tres golpes en la ventana. ¿Qué animal estaría a la intemperie de la tormenta? Se preguntó. Con curiosidad, pegó su rostro al vidrio intentando ver el exterior, aunque lo único que logro ver fue su propio reflejo en el cristal. Divisó su piel clara, sus rasgos finos, ojos claros y... ¿Cabello oscuro?.

El joven cayó de espaldas sobresaltado al ver un aterrador rostro femenino pegado al otro lado del vidrio, pero este desapareció en cuestión de segundos. El caballero dorado mordió su labio hasta el punto de hacerlo sangrar, mientras antiguos recuerdos volvían a su mente...

CONTINUARÁ...

¡Hola, mis bichos! Me alegra tanto estar devuelta en wattpad.
Lamento haberlo descuidado tanto, empecé la universidad hace poco y apenas pude adaptarme al horario, que es un poco pesado.
Aún así me gusta sacar huequitos para actualizar los fics. Espero que les haya gustado este capitulo, ya que tuve que dividir la historia en otras partes para extenderla un poco, la parte siguiente está en curso.

No olviden votar y comentar, sus comentarios me hacen feliz.
Nos leemos en un próximo capítulo.
Hasta pronto 😘😘

P.d:Cuanto acabe con esta leyenda seguiré con las que me encargaron, si quieren una no duden en pedirla en los comentarios.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top