De cuando ya solo te queda...


-No puedo hacer entender a Nate y Amaya- nos explicó Wally cuando estábamos reunidos en el puente-. Ella quiere salvar su aldea, y él está...

-¿Loco?- interrumpió Sara.

-Iba a decir "enamorado"- se quejó Wally.

-Amaya no exagera al querer salvar su aldea- resoplé -. ¿Y si fuera nuestra familia y la gente que prometimos proteger?

-Condenar al mundo causando un anacronismo salvando la aldea de alguien del equipo- dijo Rip con desaprobación -. Suena a algo que harían las Leyendas.

-Arriesgar la realidad cuando la señorita Cassini no dejó que Jax le disparara para evitar que se llevara el trozo de pica, es justo lo que la señorita Yui le dijo que era una terrible equivocación - dijo Gideon tan tranquila -. Los humanos son curiosos, ¿no le parece?

-Tenemos todos los tótems, tenemos una oportunidad- urgió Sara, mientras Rip me miraba con culpa y yo trataba de sonreír.

-¿Están considerándolo en serio?-reclamó Ava -La solución es arreglar anacronismos, uno por uno.

-¿Recuerdas cuando dije que necesitaríamos a las Leyendas?- Rip la miró, desafiante -Ha llegado el momento de dejar el escalpelo y usar la sierra.

-Tenemos que intentarlo- añadí -. La prisión de Mallus está cada vez más frágil, y los anacronismos son demasiados. Dudo que soporte mucho más, y antes de que algo pase y evite que usen los tótems, que podría ser... cualquier cosa y ya no me sorprendería, debemos usarlos.

-¿Entonces deciden hacer esto con la sierra?- Ava nos miró decepcionada -Lo considero como su renuncia al Buró.

-¡AVA!- grité, Rip me detuvo de la mano cuando traté de seguirla.

-Lex: no podemos hacer esto a la manera del Buró y a la manera de las Leyendas al mismo tiempo- musitó, resignado.

Me solté, sintiendo que se me salían las lágrimas, y caminé en dirección opuesta a donde Ava se había ido.

-¿Aislarte para beber es lo que aprendiste del idiota de tu novio, mexicana?

Soltando un gruñido destapé una cerveza, por reflejo había pedido un six en la máquina de comida, y se la pasé a Mick que había entrado en la cocina sin pedir permiso.

-No es un idiota- reclamé, con pocas fuerzas, mientras destapaba una botella para mi.

Mick me miró sin dejar de darle el primer trago, antes de soltar un suspiro de satisfacción -Bien, veamos: dejaron la nave, hicieron su estúpido Buró, y ahora quieren hacer otra vez las cosas como en la nave. Pero ya no pertenecen aquí, y ahora ya no pertenecen al Buró. La rubia estirada los acaba de correr.

Solté un quejido largo mientras me cubría la cara.

-Tu noviecito: se causa el desprecio de los Maestros del Tiempo, se causa el desprecio de las Leyendas, se causa el desprecio del Buró- continuó Mick, como si estuviera enlistando una lista de compra -. Pero no se ha causado tu desprecio, así que no es tan idiota.

-Mick...- lo miré, entendiendo lo quetrataba de decirme.

-Sabía que lo ibas a seguir- continuó, sin mirarme -. Sabía que estarías de su lado sin importar lo que sucediera. Ustedes son muy parecidos.

-¿Idiotas?- resoplé.

-Su idealismo raya en eso, sí- sonrió burlón -. Son un par de idiotas que quieren salvar al mundo, sin importarles quién se oponga y lo que pierdan en la lucha. Cuando nos trajeron aquí, en pocos días te aferraste con esa cabezona terquedad a protegerlo a él, ahora te hizo escalar a querer salvar el universo.

Me limpié las pocas lágrimas que me habían salido -Perdona si te herí con todo esto.

Él gruñó -Tu lealtad es con él. Pocas personas encontrarán una lealtad tan fuerte como la de ustedes. Así que como dije: no es tan imbécil si ha sabido mantenerla.

-Cuando acabemos con Mallus- dije con la cabeza baja -. Voy a pedirle que nos olvidemos de viajar en e ltiempo. Que no volvamos a luchar. ¿Crees que se enfade?

-Ese tonto saltaría de la nave con un disfraz de mono cirquero si se lo pidieras- se burló.

No pude evitar reírme, Rip me había dicho algo muy parecido años atrás.

-A mi no me molestaría que quisieran regresar a la nave. Pero soy un gran entusiasta de que la gente haga lo que se le venga en gana, y si lo que les da la gana es irse- sonrió levantando su botella de cerveza en un improvisado brindis-... Nos divertimos mientras duró, ¿o no, mexicana?

-Sí- brindé también. Nos quedamos bebiendo en silencio hasta que Gideon avisó que fuéramos al puente porque Amaya y Nate habían vuelto.

-¿Pueden repetirme porqué esto podría funcionar, cuando no fue así la última vez que alguien lo intentó?- pidió Wally.

-No funcionó la última vez porque el tótem de muerte los traicionó- explicó Sara con calma.

-Y si no me informaron mal: casi asesinas a todos por aquí, la última vez que tuviste contacto con el tótem- me quejé.

-¿Quieres usarlo tú?- me desafió.

-Pues a lo mejor- repliqué -. Después de todo, fui yo quien usó esa cosa increíblemente poderosa para salvar tu trasero... ¿cómo se llamaba? ¿Pica del Destino?

-No tienes idea de lo que es estar muerta.

-Y tú gran parte de las veces no pareces tener idea de lo que estar viva.

-Niñas, dejen de pelearse- Damien Darhk entró al puente -. Yo lo usaré.

El silencio cayó sobre todos como una loza, hasta que Rip soltó un breve "¿Qué?".

-Solo quienes henos experimentado la muerte podemos usarlo- explicó Darhk -. Y la señorita Lance no tiene mis habilidades y conocimiento en asuntos metafísicos.

-¡Ay, no puede ser!- se lamentó Rip cuando Sara le pasó la piedra a Damien.

Nate pidió el tótem de tierra, y le dieron a Ray el de agua. Zari los llevó a enseñarles lo más básico que necesitaban para usarlo, se permitieron solo dos horas.

-Ven- volteé cuando escuché a Rip llamándome, me ofrecía su mano.

Caminamos por algunos pasillos hasta donde era su habitación... estaba vacía, solo tenía la cama con un colchón desnudo, me senté y la acaricié, recordando que era el lugar al que pertenecíamos solo nosotros dos.

Rip se sentó junto a mi, se había quitado la gabardina y la había colgado en el perchero vacío. Suspiró y tomó mi mano, sin mirarme.

-Hay algo que podríamos hacer- dijo como si lo estuviera pensando para si mismo -. Si ellos no pueden con los tótems, es la primera vez que usarán varios.

-Haré lo que creas mejor, Cielo, lo sabes.

Él volteó, mirándome con culpa -Te he pedido tantas cosas difíciles, y has tenido que hacer otras más por mi culpa. Y ahora esto... sería lo más difícil y doloroso que podría pedirte. Si te niegas lo entenderé.

-Eso que me pedirás- susurré acariciando su mejilla -. ¿Hará que tú estés bien?

-Sí... no... no estoy seguro...

Se me rompió el corazón al verlo más triste y confundido que nunca, ¿qué era lo que podría pedirme?

No pude preguntar, me besó y ya no pude pensar en otra cosa.

-Lex...

Apreté los ojos, oía la voz de Rip entre sueños, llamándome, y yo no quería despertar.

-Amor, nos están buscando- urgió.

Abrí los ojos, Rip estaba sentado, ya se había vestido, y tenía mi cabeza sobre sus muslos, acariciándome el cabello. ¿Qué tan profundo me había dormido para no sentir el cambio?

-¿Quién nos busca?- pregunté, sin lograr terminarme de despertar.

-¿Las leyendas? Estamos en la Webrider, ¿recuerdas?- preguntó, sonriéndome con ternura -Amor, ya es hora...

Entendí.

Suspiré.

Era hora.

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Quiero gritar y ya son 9:30 de la noche... ya no son horas de gritar... pensaba que ya estaba mucho más tranquila con que esto termine, pero justo ahora que ya revisé el capítulo una última vez antes de darle a Publicar, me doy cuenta de que no, no estoy más tranquila.

Aiuda.

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