-¿Señorita Cassini?

-¿Sí?

Y ahí estábamos de nuevo: Rip interrumpiendo un entrenamiento. Me limpié el sudor de la frente y lo miré: algo no andaba bien.

-La señorita Lance y yo trajimos a alguien para interrogarlo- comenzó a explicar-. Y tal vez hasta le alegró contarnos que Vándalo Salvaje tiene el cuerpo de Carter, no creo querer saber para qué lo usará. Tenemos que recuperarlo, se lo debemos, y también a Kendra le debemos despedirse.

-Sí, Capitán- respondí reprimiendo un escalofrío -. Pues estoy lista, esto fue un buen calentamiento, vámonos- guardé las katanas y caminé a la puerta.

-No... en realidad no está lista- irrumpió algo nervioso -. La señorita Lance no quiere ir, ya que debemos infiltrarnos en una... fiesta.

-¡WUUUUU FIESTA!- exclamé con las manos en alto.

-Por favor: es trabajo- se quejó juntando las manos -. Pídale a Gideon un vestido de gala, que no llame mucho la atención. Salimos en dos horas.

Asentí, contenta.

Terminaba de maquillarme en mi habitación cuando Rip pidió pasar, me giré a decirle que ya estaba lista y sentí un brinquito en el estómago: usaba un smokin negro y traía una gorra de chofer en la mano.

Me di cuenta de la elegancia de sus facciones y lo bien que portaba ese atuendo. El Capitán tenía un gran sentido del estilo.

¿O más bien Gideon? Me había dado un vestido negro halter, con una abertura al costado de las piernas para poder tener movilidad, y un collar de perlas. Me sentía como para poster de Desayuno en Tiffany's, solo que castaña.

Me llevó al puente donde Sara sostenía a un desconocido, yo fingiría ser su acompañante y Rip su chofer para poder entrar a la fiesta.

Ya dentro lo dejamos en la cajuela del auto y nos introducimos entre la fiesta como si fuéramos una pareja más.

-Nunca había venido a un evento tan elegante- murmuré, preocupada -. En teoría sé como comportarme, pero...

-Estará bien- afirmó -. ¿Me permite?

Sentí que me sonrojaba, él me estaba ofreciendo la mano para bailar. Me cosquilleó el brazo al aceptar y dejarme guiar a la pista. Hizo una reverencia antes de empezar a bailar, y me mariposeó el estómago al sentir que nos balanceábamos al mismo tiempo, ¿QUÉ ME PASABA? ERA SOLO UNA MISIÓN. ERA EL CAPITÁN.

-Tengo algo que contarle- interrumpió los pensamientos que se me estaban amontonando en el cerebro -. Creo que por aquí me van a llamar Gareeb, de cuando intenté asesinar a Vándalo. Parece que tiene una especie de culto donde es la deidad y yo...

-¡Ooooh! ¡Y tú eres Gareeb el Maligno!- solté una risita -Espera. ¿Intentaste asesinar a Vándalo?

-¿Podríamos no hablar de cómo me acobardé de destrozarle el cuello cuando era un simple mortal?- preguntó agobiado -Pude terminar con todo, salvar a mi familia, al mundo... y no pude hacerlo. Pensé que no podía soportar seguir adelante, con la culpa de sus muertes sobre mi.

-Hey, tranquilo- susurré, tratando de calmarlo antes de que alzara la voz y llamara la atención -. Todos nos equivocamos, si tus errores fueron más grandes, pues solo tendremos que esforzarnos más.

Suspiró, con tristeza. ¿Cuánto había tenido que soportar? ¿Cuánto seguía guardando en silencio?

Me perdí unos momentos en el baile, estar ahí valía la pena, podía pasármela bien un ratito, hasta que al dar una vuelta noté algo.

-¿Capitán?- él se sobresaltó un poco, ¿también había dejado de poner atención? -Esos dos de allá tienen la marca que me dijo tenía que buscar.

Fingimos estar ebrios y perdidos, aunque yo tenía un sonrojo de verdad causado por sus brazos sosteniendo mi cintura, pegándome a su costado.

Sentí hasta pena de romper el juego para cruzar violentamente por la puerta que custodiaban los tipos que habíamos seguido, y nos encontramos con lo que buscamos.

Con tan mala suerte que nos descubrieron y al no tener armas y ser demasiados, no pudimos evitar que nos ataran y nos llevaran a una habitación enorme iluminada enrojo, con un calor insoportable y un penetrante aroma a incienso, que nunca he tolerado. En pocos segundos empecé a sentirme mareada.

Vándalo Salvaje nos explicó lo que brevemente me había dado a entender Rip: bebían la sangre de Carter para aumentar la vida de sus fieles.

-Aclaro que en esta demencia de culto, estoy de lado de el Gareeb Maligno.- murmuré con odio -¿Habrá alguna manera mística de meterle esa jodida sonrisa por el ano?

Pareció escucharme, porque me miró y sonrió aún más.

-Qué pinche asco...- escupí, sin importarme que Rip me regañaría por mi vocabulario, aunque no lo hizo.

-¿De dónde sacaste a tu pequeña secuaz, Gareeb?- me inspeccionó con sorna -¿Dónde están los otros? ¿Es la única que no se ha enterado que fracasaste, y lo más seguro es que fracasarás de nuevo?

-Sabe más que tú.- dijo con odio.

-Aaaah, eso es seguro.- se dirigió a Rip -¿Porqué querías matarme, Gareeb? Con tanta necesidad, ¿qué fue lo que te quité? ¿A ella?- me metió un puntapié en las costillas, solté el aire en un quejido ahogado.

-Me acaba de conocer, pendejo.- alcancé a decir, mirando que a Rip le sacaba el reloj de bolsillo y lo abrió. Alcancé a ver una fotografía, aunque me interesaba más recuperar el aire que enfocarla.

-Claro, ellos... ¿tu esposa? ¿Tu hijo? Pero no los reconozco, no los he asesinado, aún.

-¡Cabrón!- grité tratando de levantarme, Rip hizo lo mismo, y alcancé a dar un par de patadas y cabezasos antes de terminar tirada con varias manos deteniéndome.

-¡RIP, NO!- grité, al ver cómo Vándalo lo pateaba repetidamente en el suelo.

Un estruendo interrumpió todo, llegaron los refuerzos. La refriega se puso mucho más pareja con las armas de nuestro equipo, una asesina entrenada, y nosotros liberados por fin.

-¡Llévense a Carter!- nos ordenó Rip.

-¡No haré eso, Capitán!- grité, tratando de alcanzarlo.

-¡Obedece o te regresaré a casa!

Apreté los labios y me di la vuelta, cubriendo a los demás que llevaban cargando el cuerpo sin vida.

Entré a la Webrider y sin hablarle a nadie caminé hasta mi habitación, cerrando la puerta.

Me observé en el espejo, con el cabello revuelto, el maquillaje corrido, el vestido un poco roto. Totalmente diferente a como me vi unas horas antes. No era una chica elegante que iba a fiestas, era una Leyenda que debía salvar al mundo. O eso creía.

Me cambié, desmaquillé y me tumbé en la cama.

-Señorita Cassini, el Capitán Hunter solicita hablar con usted.- me despabiló Gideon cuando ya estaba empezando a adormecerme.

-Pues dile que no quiero.- reproché.

-No es una sugerencia- irrumpió el aludido cruzando la puerta y entrando.

Me senté de un salto, y no pude evitar tirarle una mirada asesina.

Él no me pudo sostener la mirada -Lamento que todo se haya salido de control- dijo como si no importara.

-Yo contribuí a ello. Es parte del trabajo, Capitán- mascullé, molesta -. Como esperaría que lo fuera ser tu apoyo y no dejarte solo.

-Ya la había arriesgado demasiado- explicó, mirándome por fin, con esa tristeza que solo sus ojos podían reflejar -. Lo que hay entre Vándalo Salvaje y yo... no quiero que traiga más muertes.

-¿Y entonces porqué nos trajiste, Capitán?- reclamé, furiosa -¡Ya estaban ahí los demás! ¿Porqué no simplemente aceptas el apoyo del equipo que formaste, en lugar de irte de cabeza a que te maten a ti solo? ¿No escuchaste lo que dijo ese cabrón?

-Lenguaje...- me interrumpió, sin mirarme.

-Dijo que soy "La pequeña secuaz del Gareeb"- proseguí -. ¡Todos lo somos! ¿Vas a entenderlo? ¿O vas a regresarme a casa? ¿Quieres que te siga en esto, o no, Capitán?

Nos quedamos en silencio, sin mirarnos.

Volteé a verlo, de reojo. Miraba a la pared como si ella tuviera las respuestas. Me di cuenta de que estaba cansada para ponerme a jugar a la ley del hielo -Con todo lo que pasa, no debería agregarle estar enojada contigo, Capitán.

-¿Porqué me llama Capitán con tanta insistencia?- preguntó sin mirarme -Por un momento escuché que me llamaba Rip.

Sentí que me sonrojaba, recordándolo.

-Porque eso eres, Capitán. Para nada me parece que quieras ser algo más, algo como un compañero. Ya ni siquiera estoy segura de si quieres seguir siendo eso: el Capitán delas Leyendas.

-Sí quiero- resopló -. Su Capitán y de los demás. Fui un idiota.

-Aquí nadie contradice a nadie, Capitán.

Sonrió por medio segundo, y me miró por fin, solemne -Haremos un funeral para Carter, ¿quiere venir?

Ah, sí... ya teníamos un compañero caído. Mieeerda.

-Ahora voy, la ropa deportiva rosa no es para un funeral

Rip salió sin despedirse, yo exhalé, ¿me había excedido? ¿Estaba sobreactuando? ¿Porqué me afectaba tanto? Preferí no pensarlo más mientras me vestía y me sujetaba el cabello con un par de broches, salí a encontrarme con los demás.

-¿Me preparas algo de comer antes del funeral, mexicana?

Sonreí.

-Claro, Mick.

Un rato después, no podía sonreír más. Miraba la pequeña placa de piedra con el nombre de Carter en el suelo, mientras Rio hablaba sobre la inspiración que le brindaba el equipo, y que la muerte de un compañero era una muestra de que "una persona sola no puede cambiar al mundo".

Observé al resto irse, y Rip miraba hacia la tumba, temblando un poco al escuchar que El Profesor Stein le decía a Ray estar orgulloso de él.

Entendí.

-¿Capitán?- pregunté, acercándome un poco, sin obtener ninguna reacción- Rip...

Él cerró los ojos, dudé en irme, pero sabía que éramos un equipo. Y un rato antes le había dicho que debía confiar en nosotros.

-Rip... yo también estoy orgullosa de ti. Y seguramente vas a decir "Oh no, no deberías porque blablabla" pero no me importa. No te culpo por no haber matado a Vándalo cuando pudiste, entiendo que no eres un asesino... eres un héroe, ¿cierto? Y te esfuerzas tanto... estoy orgullosa, Rip, aunque no me creas... o no te importe.

-Usted debió dar el discurso en memoria de Carter -musitó, sin mirarme-. Estaré bien, pero creo que debo quedarme... unos minutos más aquí solo.

Asentí, y regresé corriendo para alcanzar al resto.

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No tolero el copal, me marea y me duele la cabeza. Hay quienes bromean que estoy poseída por un nahual o algún otro ente sobrenatural prehispánico.

Encontré este chart, por cierto, ¿en dónde me ubican?

-Nunca apuñalaría a nadie.

-Apuñalaría a alguien en represalia.

-Gitaría "YO NUNCA DUDO, BITCH!" antes de apuñalar a alguien.

-Apuñalaría a alguien sin advertencia.

-Apuñalaría a alguien como advertencia.

Pueden contestar con lo que han visto hasta ahora, y si cambian de opinión regresar a comentar de nuevo XD