Me desperté y tardé en recordar qué estaba sucediendo. Sentí un temblorcillo y la nave soltando quejidos metálicos.

-¿Gideon?

-El Capitán ha activado la máxima velocidad de la Webrider- me explicó mientras me levantaba y me quitaba el traje, agarré unos jeans y una camiseta -.Tal vez desee algo más formal, descubrieron que Vándalo Salvaje ha estado manipulando el tiempo debido a la tecnología, mucho más avanzada que del 2166, de su robot gigante. Por lo que van a entregarlo a los Maestros del Tiempo, ahora no podrán ignorar su responsabilidad.

Suspiré, aliviada. Ya no sería nuestro asunto, la misión estaría completa. Entre todos los Maestros del Tiempo evitarían la conquista mundial y por lo tanto la muerte de la familia de Rip. Tomé un pantalón de vestir morado y una blusa salmón, salí al puente.

-¡Martin, estás bien!- exclamé corriendo a abrazarlo al encontrarlo junto a Jax en un pasillo, no lo había visto desde que salí de la Bahía Médica.

-¿Desde cuándo dejaste de decirle Profesor?- preguntó Jax con una risita -¿Y de hablarle de usted?

-Ah... desde... ¿ahora?- me sonrojé, soltándolo e interrogándolo con la mirada.

-Claro, llamarme Martin será perfecto- sonrió, acariciando mi cabeza.

Jax me tomó del brazo y me alejó un poco -¿Te peleaste muy feo con Rip?- susurró, preocupado.

-Creo que sí- resoplé -. ¿Lo ves muy enojado?

-No, veo que tú desapareciste por casi tres horas. Él está bastante optimista sobre llegar al... ¿Punto de Convergencia? Y entregar a Vándalo- me sonrió -. ¿Porqué no vamos a buscarlo? Dijo que estaría en la biblioteca.

(N/A Ejejeje... el punto de Convergencia)

Mucho más animada, nos dirigimos a la biblioteca. El buen ánimo, junto con todo mi cuerpo, terminó en el suelo tras un estallido y una fuerte sacudida en la que detuve al Profesor de terminar en el suelo.

-Au...- me quejé, sobándome la espalda. Mientras él se deshacía en disculpas tras levantarse de encima de mi.

-¿Porqué lo hiciste otra vez, Lexell?- me regañó Jax -¿No entendiste con lo que pasó?

-Obviamente mi memoria muscular no quiso aprender esa lección- sonreí -. ¡Pero eso no importa!

Corrimos al puente donde Sara y Rip estaban revisando el panel de control, y Gideon les indicaba los daños.

-Buenos días, Señorita Lexell- me saludó Rip -. ¿Por favor podría brindarle una visita a nuestro huésped?

-Sí, Capitán.-respondí, sin estar segura de si se estaba librando de mi, y de si su tono era sarcasmo, o me estaba tratando otra vez de usted.

Sonreí antes de dar la vuelta y correr a la dirección que me indicaron, solo por dejar claro que no estaba enojada con el universo, pero ni siquiera me quedé a ver si él tenía alguna reacción.

Respiré hondo antes de abrir la puerta de la sala. Estaba mucho más tranquila después de haberle metido al tipo una patada... y un disparo láser... pero no sabía lo que me esperaba al enfrentarlo después de ello. Sí que había sido una imprudente.

-¿Y dónde te agarró el temblor?- canturrée burlonamente entrando a la sala.

-Por supuesto- empezó Vándalo con su sonrisa, aunque al menos tenía un incipiente moretón en la quijada -. ¿A quién más podrían enviar a revisar si me he escapado, si no a la Pequeña Secuaz que ahora tiene una pistola? ¿Crees que puedes hacer algún tipo de daño tú sola a alguien, antes de que te maten? ¿Sin que los demás estén sujetando a quien quieras golpear?

-Sí, sí, a la verga los discursos pasivo agresivos- dije mientras revisaba el panel de seguridad en la pared -. Me importa medio carajo.

-¿También le importará medio carajo cuando las mentiras del Capitán Hunter la lleven a la tumba?- prosiguió.

-¿Las mentiras?- sonreí -Está un poco atrasado de noticias. El Capitán ya no nos oculta la verdad.

-¿No le molesta ni un poco que haya manipulado tanto la información?-insistió.

-Tengo el bonito don de asimilar y adaptarme rápido- presumí.

-¿Cómo asimilará el caso, si decidiera poner primero a su familia que a usted?- me interrogó -¿Está bien adaptada a ser una Pequeña Secuaz, una pieza desechable? ¿Porqué aspirar a quedarse aquí, en esa posición? Cuando todos ustedes podrían venir conmigo y conquistaríamos el mundo.

-Aaaaajá... ¿Conquistar el mundo? ¿Y para qué?

-¿Para qué conquistar el mundo?- me miró, como si fuera una tonta.

-Sí, ¿para qué? ¿Gobernar gente? ¿Manejar países? ¿Administrar recursos? Si se trata de dejarle todo ese trabajo a otros y estar "encima de ellos" sin mover nada tú mismo: ¿realmente conquistaste el mundo? ¿Te están obedeciendo a ti, o a tus subordinados?

-Claro, su pequeña mente solo puede tener aspiraciones pequeñas- sonrió, apreté el puño para resistir las ganas de arrancarle la cabeza -. Recibir órdenes en una inútil cruzada para salvar al mundo. Después querrás seguramente una linda familia a la cual busques proteger, como lo está intentando tan desesperadamente ahora tu Capitán. ¿Entenderás que en su desespero, puede olvidarse de todo a su alrededor, enfocándose en ellos?

-Carajo, viejo: es normal que no lo entiendas- me empecé a frustrar -. ¿Qué sabes tú de amar? Si a tu "amada" la asesinas cada vida para tu beneficio. ¿Qué chingados sabes de que alguien que no seas tú mismo, te importe más que nada en el universo?

-Aaaah, pero qué interesante- tuve esa sensación inequívoca y contundente de que la había cagado -. ¿Usted sí entiende de eso? ¿Quién es la persona que le importa más que nada en el universo, Pequeña Secuaz del Gareeb?

-Tienes toda tu inmortalidad para que te valga reata- solté antes de dar la vuelta para irme, pintándole dedo.

Regresé a la biblioteca, con un enorme peso encima. Esa sensación de que debiste cerrar la boca 3 segundos antes.

-Pinche wey hocicón qué chingados va a saber- murmuré al detenerme en la entrada, y ver a Rip de espaldas sobre la mesa, me repetí la conversación con Vándalo en mi memoria. ¿Cómo iba a saber ese cabrón? ¿Lo que sentía en mi corazón y mi estómago, cada vez que miraba a quién tenía que luchar por asimilar como mi Capitán solamente?

-Lenguaje- me sobresalté al escuchar su pequeño regaño, pensé que había hablado tan bajo que no me alcanzaría a escuchar -¿Tan malo fue?

-Lo odio- me abracé por los hombros -¿Sabes lo qué me dijo?

-Me imaginaba que se pondría difícil, por eso te envié.

-¿Porqué a mi?- solté sin pensar -Vándalo dejó claro que lo esperaba.

-Tal vez le hubiera dicho eso a cualquiera- se giró a verme, con esa cara de arrepentimiento que no fallaba en estrujarme el corazón -¿Te dijo algo que te hiriera?

Negué con la cabeza.

-¿Lo intentó?

Asentí, sin decir nada.

Se acercó a la puerta tomando mi mano para meterme a la habitación, apretó un par de botones con lo que se cerró la puerta y se obscurecieron los paneles de cristal.

-¿Rip, qué?- lo miré tratando de adivinar qué estaba pasando, hacía un tiempo que al mirar esos ojos verdes no encontraba confusión.

-No tenía planeado que tuvieras que hablar con ese sujeto sin haber tenido esta conversación- explicó, empezando a caminar de ida y vuelta por el cuarto -. Y no puedo permitir que suceda otra cosa inesperada.

Sentí un escalofrío.

-¿Qué es lo que te dijo, lo más exactamente posible?- me interrogó sin detenerse.

Suspiré y decidí responder, no tenía caso aplazar a lo que nos llevara esa conversación -Que nos mientes y nos traicionarías por salvar a tu familia.

-¿Y tú qué piensas al respecto?

Fruncí los labios

-Por favor.- urgió.

-Perdón, es que creo que la cagué.

-Lenguaj... ay no importa- miró al techo -. ¿Qué le dijiste?

-¿Tengo que usar técnicas horribles de interrogación para una pregunta tan simple?-bromeó, después de seguir callada un par de segundos.

-Le pregunté que cómo ching... aaaag...- me cubrí la cara -¿Cómo podría entender lo que es amar a alguien más que a nada ni nadie? Y le dije que yo sí. Y entonces me preguntó que quién me importaba a mi más que a nadie para entenderlo. Pero ya sabes: con ese tono villanezco de "te pregunto algo que ya sé".

-¿Y qué respondiste?- no me atreví a descubrirme la cara, ¿se escuchaba nervioso?

-Prepárate a regañarme "Lenguaje"- dije apenada.

-Lexell...

-Más o menos "te vale reata".

Me destapé lacara y pude ver un atisbo de sonrisa -Un lenguaje bastante aceptable a lo que podría esperarse de ti.

-Perdóname por dejar que me picara- me disculpé.

-Perdóname por exponerte a la crueldad de sus palabras, pensé en que eras la más adecuada, pero tal vez te exigí demasiado- esa cara de culpa otra vez.

-¡Es que sí entiendo!- exclamé, esperando que no hiciera más daño que bien, pero necesitaba aclararlo de una vez por todas – Entiendo que podrías pasar sobre nosotros en favor de ellos. Estoy aquí consciente de eso. Perdón si te duele pensar que nunca he confiado ciegamente en ti, porque entiendo que puede llegar el momento en que te desesperes más allá de lo humanamente tolerable, y no sabemos qué reacción tendrás.

-Ambos tienen razón- me miró con más culpa que nunca -. Envié a Jax para manipular un reactor temporal de la transmisión tan peligroso, que ahora enfrenta la muerte.

-¿Qué?- brinqué.

-Pude hacerlo yo mismo, y no estoy seguro de si lo evité para proteger mi seguridad y seguir en esta... búsqueda de corregir las cosas. Me resulta altamente preocupante.

Me quedé inmóvil, tratando de asimilar lo que dijo mientras miraba cómo se dejaba caer en una silla, frotándose la sien.

-Rip, escucha- lo alcancé y me senté en el suelo, tomando su mano -: encontraremos cómo curar a Jax. Cómo arreglar todo. Pero tenemos que hacerlo todos juntos.

-Le dije a los demás que podían irse si querían, la nave auxiliar está funcionando con energía suficiente para un viaje a 2016. Deben estarlo pensando, si quieres pensarlo también.

-¡No tengo que pensarlo!- exclamé -¡No quiero dejarte! ¡Aún no!

Y de nuevo: esa sensación de que debiste cerrar la boca 3 segundos antes. Solo que ahora unida a ese deseo de que se abra la tierra y te trague, aunque en este caso sería el suelo de una nave abriéndose y lanzándome al verdor infinito de la Zona Temporal.

Desvié la mirada y me levanté -Aún no entregamos a Vándalo- traté de corregir.

-Eso no es lo que quieres decir- sentí la mano de Rip en mi hombro, no me atreví a voltear.

Sin verlo, me animé a hablar -No quiero irme hasta que Vándalo no pueda hacer daño, y te vea reunido con Miranda y Jonas. Quiero decirles que luchaste por ellos y que los amas.

-¿Eso quieres?- preguntó, tomando mis manos y girándome hacia él.

-Yo- titubeé -... Rip, yo... quiero verte feliz. No quiero regresar a casa sin ver que estés feliz.

-Lexell- puso su mano en mi mejilla, yo sentí que se me subía toda la sangre a la cara -... Lex... ¿Cómo demonios te lo explico? Pues... debido a lo cerca que veo de salvar a... tú sabes: mi familia. Cuando eso pase, yo...

Todo pasó tan rápido que no pude reaccionar: Rip puso una expresión de frustración por no encontrar las palabras adecuadas, antes de acercarse más y... rozar sus labios con los míos.

Cuando caí en cuenta de lo que pasaba, traté de abrazarme a su espalda, y no volver a soltarlo nunca, pero él se apartó.

-¡Perdón! ¡Perdón! ¡No debí hacer eso!- se disculpó torpemente huyendo hasta el otro extremo de la biblioteca. Dejó que su espalda se recargara en la pared, agachando la cabeza.

-¡Espera, Rip! ¡No estoy entendiendo nada!- me quejé, aturdida.

Empezó a hablar tan rápido que apenas y alcanzaba a registrar lo que decía -¡Ni siquiera yo lo entiendo! ¡No es algo lógico! ¡Pero lo sentiste! ¿Lo sentiste, verdad? No, claro que no, soy un estúpido.

-No eres estúpido...- pero sí me estaba confundiendo, y preocupando.

-No estoy pensando claramente- continúo, en un aluvión de palabras -. Yo... ellos... serán siempre mi familia. Y si no quieres irte, no tienes que irte. De hecho quiero pedirte, aunque entiendo si es demasiado, que confíes en que ellos... o más bien Jonas, él nunca dejará de ser mi hijo, pero lo que siento por ella ya no es... cuando te tuve en mis brazos, en la enfermería, me dí cuenta de que no quiero perderte... y que salvarlos es una obsesión... más que amor. Una obsesión tan grande que no me había dejado ver lo que siento...por... ti... Maldición, mis palabras no deben tener coherencia pero lo que siento es claro para mi, si tan solo pudieras oír a mi corazón... como él... te ama... y te necesita...

Me quedé parada parpadeando, como idiota, para convencerme de que estaba despierta y todo lo que había pasado era real. ¿Rip acababa de besarme y de decirme que...

-¿Lex?- preguntó, lo miré acercándose hasta quedar a medio metro de mi-¿Puedes decir... algo? ¿Lo que sea? ¿Todas las groserías de tu país, al menos?

-Mira: Vándalo tenía razón en algo- sonreí, aunque me arrepentí de mis palabras al ver miedo en los ojos de Rip -. Todavía me estabas engañando.

-Lo siento, Lexell, yo...

-Me tenías creyendo que solo yo estaba enamorada de ti- completé, extendiendo los brazos hasta rodearle los hombros. Sentí cómo me estrechaba por la cintura. tan fuerte que me levantó un poco del suelo.

Busqué su rostro, por primera vez mostraba calma con sus ojos cerrados, y no pude resistir más sin besar sus labios.

Quise pensar que era parte de besar a un Maestro del Tiempo, que ese instante se congelara. Se volvió lento, eterno, mientras nos apropiábamos del tacto y calor de los labios del otro.

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¿Podemos hablar de cómo Rip se siente tan culpable por lo de Jax, que lo confiesa a la primer oportunidad? Dios, este hombre me rompe el corazón una y otra vez. Hace años que un personaje no me calaba tan hondo...

Bueh... No quise estirar demasiado el "ay me gusta pero no me hace caso", para evitar que se volviera recurrente y terminara por cansar. Y con lo que pasa más adelante... el Notice me Senpai le quita potencial dramático al asunto.

SPOILER TIME Ya tengo escrita una escena con Phil (bueno los diálogos) y prepaaaareeen los kleeeneeeex cuando lleguemos a eso. Recuerden que si tienen alguna idea para capi intermedio mientras el equipo original sigue reunido, aún están a tiempo de pedirlo. Si no no hay problema, avanzaremos más rápido FIN DEL SPOILER TIME