¡Último fic de este libro, y cerramos con el universo de Boruto y los hechos impactantes que ocurrieron actualmente en él manga!

🌈 Categoría: "Al final del túnel"
🎧 Canción: Life goes on.
💕 Shipp: BoruSara/KawaSara

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📌 Sinopsis:
El mundo sigue funcionando como siempre, pero el engranaje de sus recuerdos discrepa de lo que realmente vive.

Uchiha Sarada tiene un dilema entre lo moral y sentimental respecto a su nueva realidad. La emoción de sus ojos no es capaz de enlazarse con las acciones de su cuerpo y el raciocinio de su mente ¿que debería elegir?
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⚠️ Advertencias:
✨ El fic se narra desde la perspectiva de Sarada Uchiha.
✨ Universo canon divergente, pues se agregan cambios de la trama original, así como agregados a percepción.
✨ Se retoman los hechos ocurridos en el último capítulo del manga de Boruto, pero desde la percepción de Sarada.
✨⚠️ SI se hace mención de spoilers del manga original, leer con cuidado.
✨Angst, Hurt-Comfort, Reflexiones.

📝 Palabras: 1,170

¡Eso es todo, disfruten de la lectura!

El mundo, simplemente, se detuvo.

A pesar de que el paisaje, los edificios y la gente siguen siendo los mismos.

Todo a cambiado.

Sin previo aviso, en un santiamén, todo cambió.

Sarada Uchiha se escapa un momento para mirar el cielo desde las rocas de los Hokage.

El cielo —completamente despejado y de azul brillante —le recuerda a él, al supuesto enemigo.

La pelinegra lleva sus manos a reposar en su pecho, haciendo ese hinco de rezar y tratar de protegerse con cierta angustia. Su corazón late rápido, sabe que está ansiosa y que es un nuevo día para seguir mintiendo.

Sabe que puede estar siendo observada, pero —de cierta forma —está protegida.

Se cerciora de estar respirando bien cuando siente una presencia detrás de ella.

Sus ojos negros miran con atención enfoque la figura de la fémina cargando un niño. Ada la mira con un rostro ecuánime, sin poder describirlo si como algo desinteresado o culpable.

—¿Se lo dijiste?

La ciborg habla, y Sarada está tentada a reírse porque sabe que la mujer ya sabe la respuesta.

Aun así, suspira lento, y tratando de canalizar de mejor forma sus pensamientos, las palabras están amontonadas en su lengua desde el día que no sabe porque su mente, cuerpo y espíritu han dejado de actuar a la vez.

Ella asiente primero, después voltea a mirar el cielo y recuerda que esa preciosa tonalidad azul solo podía verla reflejado en una persona cercana a ella, su antiguo compañero de equipo.

—Me creyó —evidenció con elocuencia, con el resultado esperado, más agregó: —, mamá sabe que yo nunca le mentiría, en especial si los involucro a... ellos —enfatizó el último pronombre para que se entendiera la referencia.

La mujer asintió, como si corroborara lo que ya había visto.

No esperó menos de la chica que se vió inmune a su poder universalmente mental; sus palabras y actos de amor fueron lo suficientemente creíbles para generar una chispa demencial en las mentes de sus propios padres.

Tanto Sasuke como Sakura Uchiha —junto a su hija —conocían la verdad, o una parte de ella, al menos.

Aun así, el corazón de Sarada seguía temblando. Un exagerado disgusto se asentaba cada que la reunión con sus amigos de generación se daba y "Boruto" era el tema principal a tocar. Haciendo énfasis en los términos de traición, egoísmo y venganza, la Uchiha sentía ganas de vomitar.

Por otra parte, debía lidiar con la extraña constancia de Mitsuki sobre buscar a Boruto y pedirle respuestas mientras paga las consecuencias. Es verdad que —también a ella —les sorprendió enterarse de lo que Kawaki hizo contra Boruto ¿o al revés?

—El... —rompió el silencio, y dándole la espalda a la mujer, continuó: —¿no te ha preguntado por mí?

Escuchó la risa del niño detrás de ella, pero sonaba más como una risa agraciada y victoriosa de una pregunta formulada con escepticismo y cierta anarquía indulgente.

En pocas palabras, al pequeño Daemon parecía agradarle la Uchiha, y no entendía por qué.

Ada se sentó sobre las piedras del monumento, cruzándose de piernas acomodó el cuerpo de su juguetón hermano y suspiró con cierta decaída emocional.

Desde que aquello ocurrió, Sarada esta segura de que Ada se convirtió —de alguna forma —en algo más humana.

—No —comentó en primera, teniendo el contacto de miradas con la chica —. Kawaki está más preocupado por comprobar la veracidad de su identidad.

Claro, el mundo seguía girando y viviendo, con una gigantesca mentira.

Aunque el mundo de Sarada se terminó ese día, y su corazón se partió en dos mitades.

Estaba aquella parte emocional, y también la parte moral.

Cuando convenció a su madre de creerle lo que acontecía, Sakura lo hizo sin chistar. La confianza de su relación fue la razón perfecta para sobrepasar una realidad con las palabras de alguien.

Sin embargo, su madre le hizo una pregunta que no ha dejado de hacerle vueltas, y la reflexiona cada que mira al cielo.

"¿A quién deseas ayudar, Sarada?"

Sarada sabía que Boruto regresaría a la aldea, lo haría, porque se lo prometió.

Sarada sabía que Kawaki tenía sus motivos para jugar sucio, inocentemente cruel, pero con objetivos justos.

Cuando pensaba en el rubio, su corazón latía con un frenesí inexplicable. Lentamente, su vínculo afectivo se agrandó tan pronto compartieron más allá de juegos, comidas y visitas de hogar; experimentaron el horror de ser separados, ser enfrentados, con la muerte siguiéndoles.

Pero cuando su mente se traspasaba a Kawaki, solo deseaba conocerlo mejor. Siempre trató de entenderlo y apoyarle con su propia experiencia para brindarle confianza, proporcionarle esa seguridad de quitar el miedo y la inseguridad del mundo y las personas.

¿Estaba mal si deseaba salvarlos y protegerlos los dos?

Siempre creció con un corazón puro, dispuesto a amar, proteger y ayudar a quien lo necesite. Al menos, está segura de haber aprendido eso gracias a la educación de su madre en su niñez.

Jamás creyó que se vería en el dilema de tener que elegir.

¿Por qué tendría que hacerlo en primer lugar?

—Uno podría matar al otro. —la respuesta le llegó como una bala que perforó el sentido moral —Lo sabes.

Por supuesto que lo sabía, y si lo pensaba demasiado, lo figuraba como el peor escenario.

Boruto estaba completamente solo.

Kawaki tenía a todos de su lado, por el momento.

¿Y ella? Sabía que se lanzaría al ataque a quien osase atacar al Uzumaki, pero también defendería al pelinegro.

¿Será que hay una salida?

¿Existe una respuesta al martirio de su tormento selectivo?

—Maldición... —gruñe al tiempo que se despoja los lentes y parpadea para iluminar sus ojos del color rojo y negro.

El símbolo de unas marcas parecidas a las de un sol negro se expandieron en sus pupilas, mientras sentía el correr de sus lágrimas.

Daemon emite una clase de gemido, como si sintiese su dolor. Ada vuelve a suspirar con comprensión.

El mundo algún día volverá a como era antes.

Está segura de que pronto despertará de esa infernal pesadilla.

Algún día podrá calmar las mariposas revoloteando en su estómago y controlará el cambio de color de sus mejillas.

Ella sabe que no es cuestión de elegir a uno u otro.

Una persona, con el corazón dividido, no tomará la decisión correcta.

Una persona, con el corazón dividido, no será consciente de su dolor.

Una persona, con el corazón dividido, no soportará ningún final.

Sarada lo sabe, por eso su madre la hizo elegir, como si ella hubiese pasado por lo mismo.

Algo en su corazón le grita que confíe en sus sentimientos, la parte racional le pide orientarse con la moral.

Como fuera, mientras ella piensa en que demonios hacer, la vida sigue.

La gente ríe, come y duerme como si nada ocurriera.

Y ella está ahí, analizando hasta la más quisquillosa posibilidad para regresar su mundo de vuelta.

La vida sigue, sí, pero Sarada quiere arreglar las cosas.

Algún día regresará a ser la capitana que sermoneará a los dos por sus tonterías.

Lo anhela, y para conseguirlo, tiene que elegir quien quiere ser ahora mismo, y como lo hará.

El último capítulo del manga me dejó mucho en que pensar 🥺, y yo sufro mucho por todo el dolor que debió despertar Sarada como para despertar el Mangekyo 😭💔✋.

Igual, estas dos parejas se volvieron mis favoritas, y debía poner a mi niña en una encrucijada porque, todos sabemos, que Sarada no solo es emocional, también es muy correcta e inteligente 🥺✨.

Con este escrito, doy por concluido este reto que me ha encantado. Espero que disfruten de los escritos y las canciones por igual 💕. Nos vemos pronto