Por primera vez en su vida HoSeok se sintió escuchado y comprendido, irónicamente el que dispuso de su tiempo y oídos fue un alfa, ni aunque su vida hubiese estado en peligro hubiera abierto su corazón para compartir sus secretos con alfas.

Si su yo del pasado lo estuviera viendo en el momento que llora contra el cuello de un alfa, atreviéndose a inhalar el aroma ajeno,  seguramente se estaría propiciando el mismo una paliza.

YoonGi tiene algo que lo hace ser diferente a los demás alfas, exactamente no sabia que era lo que lo caracteriza por sobre los demás de su clase, pero de una cosa sí estaba seguro el omega, el alfa es sincero, su mirada lo demuestra,  habla con la verdad,  principalmente con el corazón.

Quizás YoonGi es diferente.

HoSeok logró calmar su agitado corazón y pudo controlar sus rebeldes lagrimas, después de eso el alfa le propuso caminar por el parque para que el omega pudiera despejar su mente de esas inseguridades e inhalara un poco de aire puro, eso lo hará sentir mejor.

Dentro del parque se encontraba un pequeño puesto ambulante de helados, el señor que los atendió trae un delantal a rayas verticales blancas y rojas con un moño amarillo (HoSeok no pudo evitar pensar en que parecía  ser más un payaso que un vendedor de helados). YoonGi le dijo que eligiera el sabor que el quiera, por lo que no pudo rechazar su oferta (no importa la estación del año el helado se puede comer siempre en todas), pidió un helado de chocolate y el alfa uno de crema.

—Aquí tiene joven, un helado de chocolate para ti y para su esposo uno de crema—dijo aquel vendedor entregando los dos conos de helados al omega , se ruborizo.

Ni siquiera había sido marcado y ya lo habían visto como esposo de YoonGi, sabía que el vendedor no lo decía con malas intenciones por lo que no respondió nada.

—Todavía no estamos casados, pero si estamos comprometidos—. Habló el alfa y mientras lo decía miraba al omega, este solo miro para otro lado.

—¡Oh, perdone mi atrevimiento!, Pero ya sabe cómo son las cosas, hay que casarse rápido para que puedan venir los cachorros; aun recuerdo el casamiento con mi esposa, éramos tan jóvenes, les deseo mucha suerte—. El vendedor posó su mano en su mejilla y el codo en su carrito, dio un suspiro como si hubiese recordado algo de hace muchos años.

YoonGi le dio las gracias y partió con HoSeok hacia otra parte del hermoso y verdoso parque.

El helado no era exageradamente grande pero se estaba derritiendo y escurriendo en la mano del omega, desesperado chupo repetidas veces intentando no derramarlo y fracasó miserablemente en el intento; provocando así que su cara se manchara de chocolate.

Bufo rendido y con la cara llena de chocolate, YoonGi sonrió como un tonto enamorado; simplemente HoSeok le parecía la cosa más hermosa y adorable que haya visto en su vida.

—Creo que alguien sigue teniendo cinco años— el alfa de inmediato se rió y el omega solo pudo refunfuñar más inflando sus cachetes inconscientemente, como si de verdad fuera un niño.

—Puedo ayudarte con eso— de sus bolsillos sacó un pañuelo de papel y comenzó a limpiar suavemente los restos de helado en la cara de su omega.

El omega no se sentía tan incómodo como horas atrás ni tampoco con miedo, esta teniendo toda una mezcla de sentimientos que le eran imposibles de procesar en el momento. Definitivamente YoonGi no se parecía en nada a su padre alfa, las veces que tiene que conversar con su padre consigue tener el estómago revuelto y los nervios a flor de piel.

Siempre remarcando el rol que cumple en la sociedad como omega, que tiene que comportarse como se debía y que por nada del mundo se atreviera a cuestionar una sola orden que su futuro alfa le impondría.

Su padre le transmite odio y YoonGi le transmite paz por esa misma razón no puede compararlos aunque los dos sean alfas y eso lo deja un poco desconcertado. De alguna manera YoonGi le daba una ligera esperanza de pensar que no todos los de su categoría son iguales.

La noche no tardaría en hacerse presente en aquel parque por lo que el alfa tomó la decisión de llevar a HoSeok a su casa, no quería tener luego problemas con los padres del omega.

En el auto volvieron a mantener distancia, los espacios cerrados entre omegas y alfas solo podrían provocar una sola cosa y YoonGi quería llevar bien las cosas para no asustar a su dulce omega.

Unas cuadras antes de que el auto de YoonGi llegará a su destino el omega decidió ponerle fin al silencio.

—Gracias por lo de hoy, la pase muy bien y... sobre todo por haberme escuchado—. HoSeok se armó de valor para dar ese agradecimiento, sus manos estaban hechas unos puños apretando con fuerza la tela de su pantalón.

—No quiero que me des las gracias por algo que todo el mundo hace o debería hacer, serás mi compañero, lo normal es que quiera saber todo sobre ti, y tranquilo que no se lo diré a tus padres,esto es entre nosotros—. YoonGi extendió una de sus manos y la apoyó sobre la mano del omega.

¿Por qué el corazón de HoSeok se descontrola cuando entra su piel en contacto con la piel de aquel alfa?

Sus miradas se alinean y se quedan estancadas ahí mismo, con los latidos de sus corazones como el único sonido que los acompaña.

El omega de HoSeok se lo estaba pidiendo, cerró lentamente sus ojos esperando algún movimiento del alfa. YoonGi acercó su rostro al contrario, podían sentir sus respiraciones fluir irregularmente. HoSeok sabía lo que se venía pero su instinto no lo hizo querer alejarse sino acercarse hasta que no existieran dos personas en ese auto.

Estaba completamente seguro de que YoonGi lo besaría en los labios en ese auto pero lo único que recibió fue un pequeño y húmedo beso en su mejilla derecha.

Un simple beso en la mejilla.

—Buenas noches, HoSeok—. Fue lo último que dijo el alfa esa noche, HoSeok asintió y salio rápido del auto para meterse a su casa, cerrando la puerta de la entrada de su casa tan velozmente que cualquiera pensaría que se estaba escapando de una horda de zombies.

Apoya su cuerpo sobre la puerta, se toca la mejilla que había sido besada por el alfa, se siente caliente.

"Eso ha sido tan..." no dejo a su pensamiento terminar de elaborar esa oración, negó repetidas veces con su cabeza tratando de convencerse a él mismo de algo.

Le da miedo pensar en que deseaba ser besado por YoonGi.

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—¡Quiero que JungKook se enamore de mi!— grito el omega pelirosa golpeando la mesa en donde estaban sentados comiendo.

HoSeok observa la frustración de su amigo mientras que TaeHyung estaba concentrado en cuantas papas fritas podría meterse en la boca.

—¿No hubo avances esta vez en los vídeo -juegos?— pregunto HoSeok y el pelirosa negó con la cabeza para luego esconderla y rodearla sobre la mesa entre sus brazos.

—Quisiera ayudarte pero... ese tal  "JungKook" es una persona un tanto...— el pelirosa levanta su cabeza como si lo hubiese despertado una alarma y mira con el ceño fruncido a HoSeok.

—¡No te atrevas a decir la palabra "raro" para describir a mi alfa ¿ok?, además, el no es raro, solo le cuesta ser sociable con las demás personas pero así me gusta más porque no tendría competencia si el no se habla para nada con otros omegas— el pelirosa se miró las uñas orgulloso por dar su propia devolución sobre la personalidad de aquel chico.

Los ojos de HoSeok dieron un giro quedando por un momento en blancos para luego volver a su posición original—Si lo conoces tan bien como supongo el a ti seguro que ese día hablaron un montón ¿verdad?

Ahora el que tenía una ceja levantada era HoSeok; quien con su mirada interroga a su pequeño amigo.

—Hablamos una vez... solo cuando le dije "hola"... el resto del día se la paso jugando con las máquinas de ese apestoso lugar lleno de frikis— de los ojos del pelirosa brotaron unas pequeñas lágrimas, no eran de tristeza sino de indignación.

El beta había terminado por fin sus papas fritas y se infiltró en la conversación de sus otros dos amigos.

—Puede que mi raro hermano no te  demuestre su amor ni aunque pasaran cien estrellas fugaces a la vez en el cielo pero el siente algo por ti—. El beta posó su dedo índice sobre la mesa y comenzó a dibujar patrones imaginarios sobre ella. Los ojos de JiMin se habían abierto lo más que podían y con su codo seco esas lágrimas que había dejado libres.

—¿Lo dices en serio, no me estas mintiendo?— la cara del pelirosa reflejaba esperanza, si tenía una pequeña posibilidad con JungKook quería saberlo.

—Prometí no decir nada pero viéndote así te contaré algo sobre el. Ya habrás notado que el es incapaz de hablar con alguien por más de dos minutos, bien, las veces que hablamos siempre me pregunta por ti, no por Hobi, solo me pregunta por ti. Estoy seguro de que ese bobo te quiere.

La sonrisa que se formó en la cara de JiMin por escuchar las palabras del beta se veía imborrable.

Mientras JiMin no dejaba de exigir más información sobre su amado el celular de HoSeok vibra por la llegada de un mensaje.

Para ser más exactos un mensaje de YoonGi.

"Hoy voy a pasar a buscarte al colegio, ya pedí permiso a tus padres así que no hay problema, quiero mostrarte algo muy especial para mi."

Inevitablemente HoSeok sonrió al ver el mensaje de YoonGi.

¿que podría ser eso tan especial para que el alfa lo quiera compartir con el?

Su mente le trajo el recuerdo de aquel beso en la mejilla y volvió a sentir su rostro arder.

¿Qué clase de sentimiento está sintiendo por ese alfa?

Espera averiguarlo pronto o se volverá loco.

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¡Hola a todxs!

¿me extrañaron? ( ahre nadie jaja :'v)

Bueno, otro capitulo para quien quiera leerlo~♡

Otra vez, gracias por los votos y comentarios, me hacen muy feliz ^^

(ღˇᴗˇ)｡o♡ Mucho amor para ustedes~






Editado y corregido: 16/12/2019