A HoSeok le hubiese gustado que su madre le explicara la vida después de crear el enlace de pareja, como la que ella posee con su padre, saber que sintió y cómo le afectó en su cotidianidad, pero ella nunca dio indicios de querer hablar. Justo ahora, HoSeok no sabe si ser paranoico es uno de aquellos síntomas normales. Podría consultarle a JiMin, pero el no esta enlazado, a TaeYeon... pero es una beta. ¡Incluso a Jin! El si es un omega enlazado que podría llegar a explicarle, sin embargo, es cercano a YoonGi y podría decirle algo aunque él diga que guardara el secreto.

Otro de los síntomas... desconfianza. Aún no puede controlar su enlace con YoonGi, por lo que no siente las emociones del alfa ,o si lo siente no puede identificarlas.

Su cabeza duele cada mañana en la que desayuna con YoonGi, porque este ha estado comportándose extraño desde que regresó al trabajo y también... por el pedido de no volver a ver a Suran.

Últimamente, después de aquel mensaje comenzó a repetirse el patrón de llegar tarde al departamento, HoSeok siente el colchón hundirse cada que llega el alfa, siempre está limpio, con el cabello húmedo y el indescriptible olor sutil a menta que lo caracteriza.

HoSeok no hace preguntas, solo espera que las respuestas vengan a él, porque tiene la esperanza de que su alfa vendrá a contarle lo que le este molestando.

No han mantenido relaciones sexuales después del celo, aunque HoSeok sigue tomando las pastillas anticonceptivas que le dio la doctora. De todas formas, sigue siendo un cambio brusco todo lo que pasó. Ya no vive más con sus padres, ahora está bajo la tutela de YoonGi, tiene un enlace de pareja, está a nada de terminar sus estudios y aún no sabe si podrá aspirar a un estudio superior o siquiera conseguir trabajo. El alfa le da techo y comida, pero... es como ser un parásito. HoSeok quiere tener su propio dinero también, la idea de pedir le avergüenza.

Pero cómo hablar con YoonGi, cuando parece estar en cualquier lugar menos en la casa.

HoSeok ve masticar al alfa su desayuno mientras utiliza su celular distraídamente. Quizás si lo intenta ahora pueda obtener respuesta.

—¿YoonGi?—HoSeok lo llama, el alfa levanta la vista y asiente mientras sigue utilizando su celular. El omega carraspea leve para seguir hablando—.Quiero empezar a buscar un trabajo de medio tiempo, me gustaría ayudar con mi propio dinero, además-

—No.—interrumpe abruptamente el alfa, HoSeok deja de hablar por la fuerte voz que impone—.Yo gano muy bien para los dos, no necesitas trabajar, concéntrate en tus estudios.

—¡P-pero solo seria de medio tiempo!, es que no me siento bien viviendo así, mantenido por otro... —el omega trata de refutar, pero YoonGi niega con la cabeza.

—No es muy diferente a tu anterior vida, no te preocupes, yo te voy a cuidar—a HoSeok le revuelve el estómago escuchar que YoonGi este diciendo que siempre fue mantenido por otros, aunque no hay intención de ofensa en sus palabras, HoSeok siente dolor con cada una de ellas.

—Ahora termina tu desayuno, estas muy delgado.—con eso último YoonGi lo despide con un beso en la frente, luego toma su cardigan negro, maletín,  y sale del departamento.

Entonces es así, como HoSeok va entendiendo  las diversas facetas de un alfa que le trajo camelias blancas.

.

.

.

Un café fuerte es todo lo que necesita TaeYeon para encontrar  fuerzas y terminar con todo el abrumador papeleo que reposa en su escritorio. Hoy es un día particularmente bueno—si ignora el extenso papeleo a examinar—ya que su hijo vendrá con su nieto a visitarla, hace bastante que no lo ve por el trabajo pero siempre mantiene  llamadas de larga duración. TaeYeon sonríe para sí misma pensando en todos los regalos que tiene en su armario para sus dos bebés especiales, bueno, para ella su hijo siempre será un bebé pequeño y bonito.

El llamado a su puerta la saca de sus pensamientos felices, ella da el permiso para que pase.

—Con su permiso, buenos días—el cabello claro  de TaeHyung hace su presencia triunfal, el muchacho se desploma como una bolsa de papa sobre la silla contraria a la beta.

—¿A qué se debe el honor de tu presencia tan temprano? ¿Te duele algo?—preguntó TaeYeon con una sonrisa pero a la vez con signos de preocupación porque sabe que el muchacho pasó por una golpiza, al menos el rostro del beta está completamente sanado.

—Nah, solo quería pasar por aquí, me da mucha paz su oficina—responde TaeHyung mientras cierra sus ojos un momento.

—Enfermería, TaeHyung, se dice enfermería—le corrige la beta con una media sonrisa.

—Da igual.—responde el beta, de repente comienza a escucharse el sonido de un estómago rugiendo de hambre. TaeHyung se abraza el estómago encogido, y sus cachetes se colorean en un rosa leve.

—Alguien se saltó el desayuno y ahora su estómago quiere venganza, interesante.—la doctora suelta una carcajada y el beta se pone más nervioso y colorado.

—¡No se burle de mi! No es gracioso, yo...—otro sonido espantoso escapa de su estómago y eso hace que la doctora se ría con más ganas.

—Deja a esta mujer vieja reírse un poco—TaeYeon se permite acariciarle el cabello al muchacho de forma cariñosa, el beta agranda los ojos ante el toque inesperado. Ella se aleja del cabello ajeno y se dispone a buscar dentro de una caja colorida apoyada justo en su escritorio—.Las compre hoy, así que siguen calientes, come las que quieras—el olor a vainilla entra en la nariz del beta y su estómago responde con otro ruido.

—¿En serio, puedo?—pregunta TaeHyung, dudoso.

—Adelante.—responde la doctora mientras le tiende una magdalena, el beta la toma y como si nada le da una mordida grande y su rostro se vuelve más relajado.

—Bueno, necesito volver a mi trabajo, recuéstate en la cama un rato si lo necesitas, o llévate la caja de magdalenas si lo prefieres—TaeYeon vuelve a sentarse en su escritorio.

—No, está bien, prefiero la caja, tengo clases en un rato.—el beta se sacude las migas que cayeron a su pantalón cuando se levantó de la silla y toma la caja colorida sabiendo que la doctora se la regaló. El se dirige silenciosamente hasta la puerta, antes de irse le da una mirada más a la doctora quien concentrada trabaja en unos papeles.

—hum... —Taehyung suelta un sonido que hace que la doctora levante la mirada, él se sobresalta un poco por la repentina atención. Sabe lo que quiere contarle.

—HoSeok quiere que siga siendo su amigo.—Habla Taehyung, y antes de que la doctora siquiera hablara el chico asiente gestual en un saludo y cierra la puerta.

Ella analiza las palabras del joven, y solo logra gesticular una sonrisa para sí misma.

Entonces, también está siendo un buen día para Taehyung.

.

.

.

Hay nubes grises asomándose sobre otras totalmente blancas, HoSeok las mira detenidamente: es evidente que se vendrá una tormenta.

—¡Era un precioso día!—exclama JiMin al percatarse de la atención de HoSeok por el cielo—¿Crees que llueva?—le pregunta a HoSeok sin soltar el sorbete de su cajita de jugo.

—Probablemente... —responde vagamente el omega castaño. En todo el día no ha estado de buen humor, no se cruzó con Taehyung (puede que se esté escondiendo en algún lado del colegio) y la conversación con YoonGi no fue lo mejor.

JiMin solo gira los ojos por la respuesta de su amigo y lo toma del brazo para arrastrarlo hacia un árbol que da una espectacular sombra, el receso no dura mucho así que va a aprovechar al máximo el aire libre del patio escolar. Deja que HoSeok apoye su espalda sobre el árbol y luego se sienta el, el aire fresco es relajante.

—Aun no me creo que ya se esté terminando el colegio, creo que voy a extrañar biología... —empieza diciendo JiMin, HoSeok levanta una ceja.

—¿En serio? —pregunta HoSeok, JiMin es quien levanta una ceja ahora.

—No.—y luego de eso, el omega pelirosa suelta una risa escandalosa, es imposible que la sonrisa de JiMin no se te pegue como mosca a la miel por lo que HoSeok ya se está riendo también.

—Lo primero que voy a hacer es tirar sus libros de mierda, es un asco enseñando, ¡por fin nos vamos a librar de él!—sentencia JiMin en una sonrisa, años soportando a un profesor que no entiende un carajo  sobre omegas pero que cree saberlo aunque no sea uno. A eso, al pelirosa le ataca un pensamiento que había estado guardando para cuando hablara con su amigo —¿Ya sabes que vas a hacer cuando termines la escuela? porque yo pienso estudiar danza contemporánea.—la pregunta de JiMin no es mala en sí, pero para HoSeok lo es en ese preciso momento, justo después de lo que hablo con YoonGi.

—No lo pensé... —es lo que atina a responder, ojala esa respuesta sea suficiente para saciar la curiosidad de su amigo... evidentemente no.

—¡Entonces estudia conmigo!—JiMin lo grita todo entusiasmado y HoSeok quiere esconderse de las miradas de otros alumnos que pasean alrededor. Lo peor es que continúa hablando:— si a ti también te gusta la danza ¿No? Puedes convertirte en profesor de danza, bailas muy bien, aunque no tanto como yo.—lo último intenta sonar como un chiste, pero al notar que HoSeok no se ríe esta vez se preocupa.

—¿Estas molesto conmigo? —pregunta cautelosamente JiMin.

—No es eso—niega HoSeok—.Hoy hable con YoonGi sobre tener un trabajo para ayudar con los gastos y tener mi propio dinero, el me dijo que yo no necesito tener uno, que él puede mantenernos a los dos... me hizo sentir que siempre seré un parásito. Así que no se si el quiere que estudie tampoco.

—¿Y tú ahora le haces caso a lo que él te dice?—pregunta de forma sarcástica JiMin, toda la buena conversación parece estar alejándose.

—¿Y qué puedo hacer? Si el ya me mordió... siempre estuve bajo la tutela de un alfa, primero mi padre, ahora YoonGi, mi vida es esto.—responde HoSeok con pena. JiMin no se contentó de ningún modo.

—¿Sabes qué? Estoy harto de esto—suelta JiMin y HoSeok se sobresalta por la actitud de su amigo—.Si piensas que no puedes hacer nada porque eres omega está bien, vive así, pero no puedo estar siendo amigo de alguien que no puede hablar conmigo por más de dos minutos sin mencionar los problemas que tiene con su pareja, la realidad es que no quieres confrontarlo, y yo no voy a consolarte por eso. Me voy.

—N-no es eso, JiMin, por favor... —suplica HoSeok, una parte de él se siente mal por las palabras del omega, y otra parte las acepta cruelmente.

JiMin ignora las palabras de HoSeok y se marcha de allí, dejando a un muy dolorido amigo solo.

—¿HoSeok?— un despeinado TaeHyung aparece frente al omega—¿Está todo bien?—pregunta con un poco de temor, a lo que HoSeok niega con la cabeza lentamente y se levanta de donde había estado sentado.

—Ahora no quiero hablar con nadie, disculpa.—HoSeok se limpia discretamente los ojos con el dorso de su mano mientras sus pasos lo alejan de Taehyung.

—Claro, entiendo.—el beta le susurra al viento mismo, sus manos comprimiendo la caja colorida de magdalenas.

.

.

.

"El número al que usted llama no se encuentra disponible, para dejarle un mensaje de voz marque..."

YoonGi no contesta el celular. HoSeok suspira rendido y deja el celular sobre la mesa. El alfa tenía que ir a buscarlo al colegio como todos los días ya que el departamento no está cerca de allí como cuando HoSeok vivía con su familia. Ni una explicación sobre su ausencia recibió, lo único favorable es que el omega traía encima un poco de dinero para viajar en colectivo y volver solo al departamento...

—No entiendo nada... —HoSeok habla para si mismo, encorvándose sobre la silla de la cocina. Si hace apenas unos días el mismo YoonGi le había dicho "No me dejes" y ahora es él quien lo hace. Le gustaría ser tan determinado como JiMin pero él no se encuentra en su misma situación , él puede elegir estar o no con JungKook, su familia no lo obligo a casarse para saciar su propio interés.

Nadie sabe lo que es estar en su maldito lugar.

Su codo se siente rasposo contra la mesa, cuando presta atención a lo que causa aquello ve en la mesa unos papeles desparramados. Toma uno de ellos y comienza a leerlo, parece ser importante (aunque el realmente no entiende nada) por la única razón que se hayan escritas las palabras "entrega inmediata" y la fecha de entrega es hoy, YoonGi se los olvidó en la mesa de la cocina. Una idea cruzó por su mente rápido.

¿Podría HoSeok llevarlos hasta la empresa?

El puede hacerlo, puede llevarlo hasta allí y hablar con YoonGi también, quizás eso de ser determinado podrá ponerlo a prueba.

Sale de la silla rápido como si quemara y se dispone a buscar su mochila que había dejado sobre la cama, guarda en un folio cuidadosamente los importantes papeles y se asegura de traer todo lo que necesita (dinero que le ha dejado YoonGi en el departamento, llaves, su tarjeta para el colectivo, entre otras) para salir de allí.

Mientras baja velozmente el portero lo ve y le saluda, HoSeok aprovecha para consultarle sobre dónde esperar un taxi. El portero le indica dónde y el omega le da las gracias.

Ya dentro del taxi da indicaciones del lugar, después de todo él había ido en auto y no podría ir por su cuenta.

.

.

.

YoonGi suspira, cansado.

Se acaba de dar cuenta de que dejó el informe que tiene que tratar con su padre en la casa. La charla no es hasta dentro de una hora, si se va con el auto ahora quizás llegue a...

—Hola YoonGi, ¿Estas ocupado?— Suran entra a la habitación con un vestido negro ceñido a su esbelto cuerpo, lleva una coleta simple pero bien armada dándole un aspecto de oficinista.

—De hecho si, pero pasa, cuéntame todo.—YoonGi le señala una silla disponible y ella asiente contenta mientras se sienta.

—Perdona si andas con mucho trabajo, pero acabo de salir de mi psicólogo, y hoy me siento muy bien de ánimos, todo gracias a ti.—Suran le regala una sonrisa, la realidad para YoonGi es que Suran está mejorando con la terapia después de su deseo de querer cometer suicidio. Es por eso que ha estado al pendiente de ella en todos estos días, acompañándola a las sesiones que él mismo paga, llevándola a su casa todas las noches.

Sus resultados están dando frutos, ella se ve bien.

—Yo no hice nada, es tu propia voluntad la que  enfrenta los problemas—responde el alfa con simpleza.

—Que tierno eres actuando como si no hicieras nada por mi, pero es la verdad, sin ti no soy nada... —las palabras de Suran se vuelven empalagosas y su atrevimiento mayor al apoyar sus dos pálidas manos sobre las mejillas de YoonGi.

—Suran, ya hablamos de esto... —la voz del alfa suena grave, las manos de Suran arden sobre su piel, ella se acerca sigilosamente hacia el rostro contrario.

—No se puede evitar... —pronuncia ella para luego pegar sus labios con brillo sobre los del alfa, este se pone rígido ante el contacto pero no puede evitar pensar en lo suave que se sienten sobre el.

De pronto la puerta de su oficina se golpea creando un estruendo que obliga a YoonGi a apartarse de los labios de Suran.

—¿Q-qué fue eso?—pregunta Suran.

Sin embargo, YoonGi no responde, su cabeza comienza a doler cuando siente en el aire el aroma a vainilla.

HoSeok está corriendo por los pasillos de la gigante empresa, con la mirada borrosa por las lágrimas, todos los trabajadores lo observan pasar, algunas omegas se alteran al sentir el estrés que libera.

El vio todo.

Necesita alejarse del lugar.

Un hombre lo detiene del brazo.

—Muchacho no puedes correr aquí... ¿HoSeok? —el hombre en cuestión es el padre de YoonGi, y el parecido es tan horrible que HoSeok se suelta de su toque como si fuera el mismo alfa.

HoSeok baja la mirada, destrozado, y extiende el informe por el que había venido en un principio. El padre de YoonGi lo toma de inmediato y el corazón se le estruja de pena al ver el estado deplorable del omega.

HoSeok se retira, una vez mas, corriendo.

—¡Muchacho, espera por favor, no estás bien! —grita el hombre pero por mas que quiera detenerlo sabe que no va a conseguirlo, esas feromonas que suelta no son las indicadas para un omega.

—¡Papá!—un agitado YoonGi llega hacia donde está su padre, bajó la vista de todos los demás trabajadores—.E-ese aroma es...

Y, en frente de todos los omegas, betas y alfas trabajando y mirando allí, es que el señor Min golpea de una cachetada el rostro de su hijo.

—Padre... —YoonGi se toca la mejilla que vuelve a arder, esta vez con otro significado.

—Es HoSeok, es el aroma de tu omega.—pronuncia el señor Min.

.................................................................

Editado y corregido:13/01/2020