HoSeok no estaba de ánimos para ir a estudiar a la biblioteca. Ponerse al corriente con los últimos exámenes que tendrá para finalmente terminar la secundaria. Sin embargo, JiMin ya lo arrastra hasta allí, no hay manera de negociar con el omega pelirosa en aspectos académicos.

—Haz faltado mucho, y como soy buen amigo—JiMin apoya su cabeza contra la de HoSeok —te ayudare a estudiar. HoSeok suspiro, realmente su cerebro no se encuentra en buena sintonía para tocar un libro y comenzar a leerlo, mucho menos analizarlo y tratar de aprender algo. Su relación no parecía avanzar en nada respecto a lo físico, no odia las caricias de YoonGi, le gusta sentirse querido a través de los dedos que lo tocan con ternura, pero cuando su omega interior le exige pasar la barrera y dejarse llevar automáticamente entra en pánico y lo rechaza. Rechaza ese tipo de contacto. Cuando su hermana le pregunto si se siente seguro respecto a eso no vacilo, dijo que no tendría miedo si era con YoonGi. Entonces por qué... no puede abrirse completamente.

¿Y si al final de cuentas no era suficientemente bueno para YoonGi? ¿Y si se comporta de manera incorrecta en su celo?

JiMin no deja de hablarle, HoSeok no lo escucha, se ha enfrascado en sus propios pensamientos para ver si encontraba algún tipo de explicación a su manera de ser, de reaccionar, que era lo que realmente sentía cuando YoonGi lo mira con ojos llenos de amor... pero también de tristeza.

HoSeok no era tonto, comprendía la presión que seguramente padece todos los días YoonGi en su presencia, con sus feromonas volando alrededor. Y lo peor de todo no es eso, sino que no le ha dicho ni una palabra de que su celo podría venir en tan solo semanas.

El tiempo corre demasiado rápido, el momento de la verdad llegó, y seguir ocultándolo solo empeoraría la situación, no quería estar frente a YoonGi y que de la nada su celo lo alcanzara, para ese entonces no estaría del todo consciente de sus acciones.

La entrada a la biblioteca se mantenía en silencio. Los pocos alumnos que se encontraban dentro no hacían ruido, y si hablaban solo se escuchaban pequeños murmullos. La época de exámenes afecta a todos, la concentración estaba puesta en los libros de estudio.

HoSeok se encontró con la figura del bibliotecario en el escritorio principal, registrando unas cosas en la computadora, la expresión seria de su rostro cambio a una mucho más agradable cuando noto la presencia de JiMin al lado de HoSeok. Sin que se hicieran esperar, la mirada de JiMin se conectó con la de JackSon.

<<Que incomodo>> pensó HoSeok, podía sentir tensión entre ellos. Y podría entenderlo, porque estando en su lugar de trabajo con tanta gente seria incomodo que JiMin fuera a darle un beso allí mismo, sería mal visto por los alumnos que se encuentran estudiando en la biblioteca.

Las abultadas y pronunciadas mejillas de JiMin se tornaron rojas, aparto la mirada sobre JackSon y tomó la mano de HoSeok de un tirón, el castaño protesto por lo bajo pero no dijo nada, él también sabía lo que era tener vergüenza, nervios e incomodidad frente a la persona que te gusta.

Aunque según tiene entendido... ellos ya salían. No puede evitar pensar mínimo en los sentimientos de JungKook... ¿JiMin se lo habrá dicho?

El omega pelirosa escogió la mesa en donde sentarse (casualmente al fondo de todo, donde el bibliotecario no escucharía pasar una mosca).

—Bien, Hobi, tenemos mucho por estudiar, el pervertido de Lee nos dejo un trabajo extra por habernos reído en su clase la vez pasada y además tendremos examen con el en tres días. Iré a buscar esos feos y gordos libros y comenzamos ¿bien?—HoSeok solo asintió, JiMin dejo su mochila y fue en busca de los libros de "biología del omega" (en cierto punto esos libros podrían ayudarlo a entender su naturaleza, aunque esta seguro de que había cosas escritas por alfas, el como comportarse y otras mierdas que no servían para él).

En cuanto JiMin se alejo hasta las últimas estanterías de libros, HoSeok vio al bibliotecario levantarse de su asiento y seguir los mismos pasos del omega. El ceño de HoSeok se frunció levemente. Parecían estar jugando a las escondidas como si fueran niños, si JiMin quería verse a solas con él de primera mano no lo hubiese arrastrado hasta la biblioteca.

¿Estaba siendo HoSeok un insensible con su amigo?

Quizás un poco. Pero solo porque lo arrastro hasta la biblioteca siendo que no tiene ganas de estudiar. No cuando su mente está revuelta de preguntas sin respuesta. JiMin sale detrás de los últimos estantes con la cara mucho más roja que antes, el cuello de su camisa desarmado y con un libro que parecía ser del tamaño de una piedra gigante. 

—Dios, el libro estaba muy, muy escondido—ríe en voz baja—con esto podremos hacer ese estúpido trabajo...—No hubo respuesta del castaño, JiMin se tocó la nuca nervioso al ver la expresión seria de su amigo contra su persona.

—¿Por qué me miras así?

—¿Por qué crees que lo hago?—replicó HoSeok.

—No es como si hubiese hecho algo malo—la incomodidad de JiMin se afloraba, palmeo sus muslos dos veces buscando tranquilidad—.Tampoco nos besamos demasiado como para tirar varios libros del estante...

—Yo no dije nada acerca de que se besaron allá atrás.—oh dios. JiMin estaba seguro de que la había cagado en grande al abrir la bocota que tenía. HoSeok por su parte chasqueo la lengua por la situación, lo malo no era que se besaran, él lo hacía con YoonGi. Es como si el bibliotecario tomara la relación con JiMin de una manera ¿veloz?

—Esta bien, si nos besamos. ¿Podemos no hablar de eso ahora y empezar a hacer el trabajo?—de vuelta a su asiento, urgo en su mochila un cuaderno y lo dejó sobre la mesa, ignorando la mueca que formó el castaño en sus labios. HoSeok no pensaba dar vuelta la página tan fácilmente.

—Si JackSon quisiera tener sexo contigo, ¿Le dirías que si?—la mano de JiMin fue a parar abruptamente sobre la boca del castaño, la silla del pelirosa rechino en el suelo por el movimiento brusco.

—¿Qué clase de pregunta es esa? HoSeok, estamos en una jodida biblioteca, mira si alguien te escucha, ¡me moriría de la vergüenza!—realmente nadie los esta viendo o escuchando, todos parecían estar más concentrados en salvarse de los próximos exámenes. Con cautela, JiMin miro hacia todos los lados en donde se hallaban personas, y para su propio alivio nadie parecía estar atento a su conversación. Expulso el aire que mantuvo retenido en sus pulmones y prosiguió a liberar los labios de su amigo.

—Solo responde, ¿Lo harías?—sin una mano que lo apresara retomo la pregunta. Necesita escuchar la perspectiva de alguien más en lo que refiere al contacto humano de otro nivel...

—N-no lo sé... me gusta JackSon, es lindo conmigo y me trata muy bien pero... ¿No crees que seria muy apresurado que nosotros hagamos "eso"?

—Tener sexo—contesto HoSeok.

—¡No lo digas de esa forma!—el pelirosa escondió su rostro con sus manos. HoSeok no creyó nunca ver a su amigo avergonzado por la palabra "sexo". Y pensar que él era de evitar esos temas y ahora los papeles se invirtieron considerablemente.

—¿De qué forma se dice entonces? ¿Existe la diferencia entre "hacer el amor" o "tener sexo"?—si HoSeok no quería hacerlo pero su alfa si, ¿se convertiría en un acoplamiento forzado, o simple abuso de autoridad? Pero si era al revés, si el quería y su alfa a la vez también... ¿sería un acoplamiento correcto?

—Oh, Hobi... sabes que no es lo mismo una cosa que la otra. Hacer el amor con tu alfa es un acto de amor puro, porque te estas entregando en cuerpo, sí, pero también en alma, en ese momento sus lobos se reconocen y se forma la alianza para toda la vida, por eso se debe buscar al indicado. Creo que sexo lo puedes tener con cualquiera. No hay una unión de por medio, solo placer.

—¿Y si yo estoy en celo, si mi omega piensa en ser llenado, en que categoría entra eso?—¿En algún momento las preguntas del castaño dejaran de ser extrañas? JiMin piensa que no.

—HoSeok, tu alfa me parece un animal sin cerebro por haber lastimado a TaeHyung, pero de una cosa estoy seguro, él te ama y te considera como tal. Te va a proteger en lo que dure tu celo, ustedes harán el amor y punto.—JiMin hizo ademán de que era hora de estudiar y que ya no quería hablar más sobre el asunto.  

—Gracias.—ofreció HoSeok. JiMin también le devolvió una sonrisa al escuchar el agradecimiento. La preocupación seguía latente en él, pero escuchar la opinión de su amigo lo deja en un estado de tranquilidad, la sinceridad de su pensamiento.

—Ponte a estudiar, porque estoy seguro de que reprobaras.—sentenció el pelirosa y HoSeok solo se encogió de hombros. Buscar información en el pesado y grueso libro tomara todo lo que resta del mediodía.

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—TaeHyung, tienes que volver a clases, no puedes recostarte en la cama si no tienes ningún dolor.—la doctora regaña al recién salido del hospital, obviamente sabía de su reciente accidente, como encargada de la salud del colegio tiene que tener registrado y actualizado las fichas de todos los alumnos, y cuando leyó que fue una pelea por un omega... supo inmediatamente que el beta peleo por HoSeok. Lo noto al primer momento en que entró por la puerta de su lugar de trabajo, llevando en brazos a un desmayado omega. Un joven enamorado.

—Shhh... se ve mucho más linda en silencio...—el beta se dio vuelta, dándole la espalda a la doctora.

—Mocoso... —suspiro derrotada, dialogar con chicos "rebeldes" definitivamente no era lo suyo—puedes quedarte, pero correré la cortina, si un profesor o el director te ve aquí se molestaran conmigo—finalizó.

Tal y como dijo, la doctora corrió la cortina que rodeaba la cama para los pacientes, cerrando completamente el campo de visión del chico.

A TaeHyung no le importaba, era más cómodo que nadie lo viera, los golpes se habían ido, pero los moretones amarillos impregnaban su morena piel. No quería estar en clases, que sus compañeros le preguntaran por su estado, les mentiría. Aunque supone que la mayoría de sus compañeros saben la verdadera razón de su ausencia.

¿Por qué no podían dejarlo dormir en su habitación y encerrarse hasta que olvide todo?

Su madre lo obligó a ir al colegio, la semana de exámenes inicio, y como sus huesos no están rotos—su corazón sí, pero a nadie parecía importarle—le dieron el visto bueno para comenzar a venir.

La cama de la enfermería es muy cómoda, el beta no tardó en cerrar sus ojos y empezar a meterse en el mundo de los sueños, donde al menos... podría olvidarse de su maldita realidad, de su jodido amor no correspondido.

Unos golpeteos se escucharon sobre la puerta, lo que provoca  que TaeHyung no llegue a conectarse con las nubes flotantes proyectores de sueños. No abrió los ojos, pero sus sentidos estaban atentos.

—Adelante—respondió la doctora ante la llamada y la puerta se abrió. Unos cabellos castaños se asomaron lentamente dentro.

Jung HoSeok.

—Disculpe la molestia, ¿Puedo pasar?—pregunto de forma tímida el omega. La doctora hizo un movimiento con la cabeza afirmativamente, ella estaba confiada de que el alumno TaeHyung dormía profundamente. Pero lo cierto es que no. Él no logró dormirse a tiempo, y ahora sus ojos se mostraban abiertos al escuchar la voz de HoSeok.

HoSeok cerro la puerta con cuidado y tomo lugar en un asiento extra en el escritorio de la doctora.

—No quiero molestarla—comenzó diciendo el omega—pero quería saber si mis resultados ya llegaron a sus manos.

¿Resultados de que tipo? Se pregunta TaeHyung, HoSeok no podría estar enfermo de nada, ¿verdad?

El beta decidió girarse para poder observar a HoSeok sobre la tela blanca,  su figura sobre la cortina, y se movió lo más lento posible, no quería que supieran que no dormía, que esta ahí escuchando todo.

El rostro de la doctora se iluminó y un pequeño golpe en su propia frente nació de ella misma, ¡casi se olvida de avisarle a HoSeok sobre su análisis de sangre, estaba más que listo, y las pastillas también!

—Casi lo olvido, perdona mi falta de profesionalismo, los voy a buscar en mi armario ¿si?— y como si una descarga eléctrica se manifestara en el cuerpo de la doctora, rápidamente se puso en pie y fue hasta su armario, buscando dentro de una caja los resultados. —¡Aquí esta!—hablo para ella misma, feliz de haberlo encontrado sin problemas, a su vez, reviso otra caja mucho más pequeña que la anterior y saco de allí una caja blanca: pastillas.

Encontrando todo lo que necesitaba, vuelve hasta su escritorio y apoya la caja de pastillas, los resultados los mantiene en sus manos para examinarlos, HoSeok observa sus movimientos en silencio.

—Tus resultados son buenos, un omega totalmente saludable—sonríe y toma la caja de pastillas de nuevo—estas pastillas son anticonceptivas, lo que significa que una semana antes de que comience tu celo deberás tomarlas, ¿De acuerdo? Debes tomarla todos los días, exactamente a la misma hora para que la protección sea efectiva. ¿Tienes alguna duda?

El cuerpo de TaeHyung, tenso y rígido sobre la cama. Enterarse de que a HoSeok solo le quedan semanas para su celo... no puede estar pasando, todo debería ser una horrible pesadilla... necesita salir de ahí.

Salir y ver a HoSeok, tomarlo entre sus brazos para volver a sentir sus dulces labios, robárselo al mundo entero, sacárselo a Min YoonGi, que sus pies duelan de tanto correr, de alejarse de todo lo que les impide estar juntos.

Las historias con finales felices solo existen en los cuentos para niños, y TaeHyung presiente que su final feliz... no podría ser con HoSeok.

—Esto... el celo... ¿Qué es lo que voy a hacer cuando este con mi alfa en ese estado?—HoSeok sabia que estaba haciendo una pregunta estúpida, se siente como un niño pequeño que no comprende nada del mundo de los adultos... del mundo de los omegas. La doctora lo miró dulcemente, casi con ojos maternales y extendió su palma para que HoSeok le tendiera su mano. Y así lo hizo.

—Biológicamente tendrías relaciones sexuales—ríe en voz baja y continua hablando:—pero también, será tu primer acoplamiento con un alfa, sentirás la unión de su lobo con el tuyo, tu omega dominará la mayor parte de tu cuerpo, por lo que estarás muy sensible a agentes exteriores, solo querrás estar cerca del alfa, así que el alfa se encargará de brindarte lo necesario para crear un ambiente agradable. En lo que dure tu celo no podrás hablar mucho, tu mente no te lo permitirá pero de igual forma estarás allí sintiendo todo. Una vez que el alfa realiza una marque pasaras bajo su tutela.—concluyó de explicar la doctora.

HoSeok  relamió sus labios, no es información de otro mundo, aunque eso no evitará que se sintiera ansioso.

—Va a...¿Dolerme?—pregunto casi con una pizca de miedo, la doctora negó.

—De momento no, los omegas pueden auto lubricarse en el celo, dolerá cuando el alfa te muerda en el cuello, porque usara sus colmillos, no será desagradable si los dos están en la misma sintonía. Tienen que estar de acuerdo con la marca, es lo correcto.

Luego de eso, HoSeok no pregunto nada más, por lo que se despidió de la doctora, agradeciendo el tiempo que ella le brindo para responder a sus preguntas,  una vez sola, volvió a su trabajo ordenando unos registros de alumnos sin dejar de pensar en el joven omega.

TaeHyung volvió a  buscar concentración para cerrar los ojos y dormir. No se percató de sus ojos derramando lágrimas, ni de que su almohada estaba húmeda.

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NamJoon sale de la ducha con solo una toalla en la cintura, y así mismo se sienta en el sillón para mirar un programa de televisión, después de un largo y duro día de trabajo podría darse el lujo de recostarse sobre los cómodos cojines de su hogar.

Si se lo permitía su esposo, claro esta. Pero esta no será su oportunidad.

—¡KIM NAMJOON!—SeokJin gritó con todo lo que sus cuerdas vocales le permitían—hoy tenemos invitados, ¿Piensas recibirlos así?—miro a NamJoon con los brazos cruzados, frunciendo el ceño.

—No seria una mala idea, hasta podría sacarte celos si otro omega me viera así—sonrió sin mostrar los dientes, levanto una ceja animadamente mirando directamente a los ojos de Jin.

—Vas a dormir en el sillón—sentenció el omega. NamJoon se equivoca de persona si piensa que se pondrá celoso porque otro omega que no sea él lo vea con nada más que una toalla atada a la cintura.

—Eso no es problema, amo este sillón—definitivamente, NamJoon amaba ver a su esposo con el ceño fruncido, fingiendo estar molesto. Y lo mejor de todo, verlo ser todo un mandón, eso es lo que más le ponía de SeokJin.

—Bien, si te encanta este sillón de ahora en más dormirás aquí todas las noches. Y no tendremos sexo.—bien, SeokJin jugaba sucio, NamJoon no podía contra eso, que su omega le prohibiera algo tan importante como respirar lo dejaba sin cartas para seguir apostando. En esos casos, lo mejor es levantar la bandera blanca de rendición.

—Iré por mis pantalones.—un gruñido se escapó de los labios de NamJoon a modo de protesta, la victoria no siempre estará del lado de su omega, y cuando eso suceda, definitivamente se "vengara". Jin libero una carcajada que tenía guardada, esperaba esa respuesta por parte de su esposo en cuanto formo la oración de "no tener sexo", NamJoon se retractaría de sus palabras y le obedecería sin objeciones. El omega disfruta los momentos en donde se convierte en el villano de la película.

De todas formas, no tenía quejas sobre su esposo, era atento a todas sus necesidades (sobretodo sexuales), a sus tontos antojos ahora que esperaba un cachorro, y lo más importante, su dosis diaria de caricias y mimos, no importa si esta teniendo un mal día, solo necesita que su alfa le diera un par de besos en la frente mientras enreda sus dedos sobre su cabellera. Eso era todo lo que esperaba de NamJoon.

Y ahora que tuvo el gusto de conocer al pequeño omega de YoonGi, desea con todo su corazón que las cosas funcionen bien entre ellos.

—Amor, ya llegaron—aviso NamJoon. SeokJin no escucho que hayan tocado el timbre, últimamente el embarazo lo tiene despistado de su alrededor. Iba a abrirles la puerta cuando su alfa lo detuvo de los hombros y deposito un beso en su cuello en señal de que iría él a recibirlos.

Todavía acomodándose la camisa que minutos antes se colocó NamJoon fue hacia la puerta y tomo del pomo para girarla y abrirla.

El alfa rubio observo de pies a cabeza a su amigo, vestía una simple camisa blanca y unos pantalones de jeans rotos por las rodillas. Podría sonar raro pero NamJoon sigue creyendo que YoonGi se ve mucho más sexy si se viste de esa manera, en la secundaria era el alfa más deseado de todas las estudiantes omegas, no por nada también lo apodaban el "rompe-corazones", nunca aceptaba una cita con una omega.

Exceptuando a... bueno, por su propio bienestar, no quiere nombrarla, era pasado.

En cuanto pasó su mirada a su acompañante omega, sintió que el aire se fue de sus pulmones. HoSeok es muy, muy atractivo, y puede entender perfectamente porque YoonGi lo esconde y protege de todos. No lo malinterpreten, NamJoon es hombre de SeokJin. Pero no puede evitar decir que HoSeok se ve como todo un cachorro aun: su delgada cintura, sus cabellos castaños, sus pómulos pronunciados, todo se ve delicado y bonito en él.

—Compramos helado de chocolate, crema y menta granizada. ¿Eso nos permitirá entrar?—pregunto YoonGi con una sonrisa de lado.

—Odio la menta granizada, así que no podrán entrar.

—¿Alguien dijo menta granizada?—como si lo empujara alguna fuerza divina, Jin se acercó hasta la puerta y le arrebató de las manos el pote de helado al alfa de cabellos celestes. Luego los hizo pasar a todos  y cerró la puerta de un golpe, yéndose directamente a la cocina para probar el helado de menta. No entendía el desagrado de su esposo por aquel magnifico sabor, el se lo perdía.

Jin volvió a la sala de estar (después de atender sus antojos de helado de menta). Y fue directo al cuerpo del adorable omega. NamJoon revoloteo los ojos exageradamente y YoonGi río en voz baja.

—Hobi, te siento más delgado, ¿Estas comiendo bien? ¿Te sientes enfermo? ¿Acaso YoonGi te obliga a hacer dieta?—el omega mayor estruja a HoSeok entre sus brazos, sin importarle que estuviera haciendo el ridículo frente a todos, el aroma del cachorro era muy agradable.

—Estoy comiendo bien y no estoy enfermo, la doctora de mi colegio me leyó mi análisis de sangre, dice que soy un omega saludable, así que... no te preocupes... — HoSeok respondió en voz baja contra el pecho del omega mayor, solo por esta vez... se permitió abrazarlo también, no muy fuerte por miedo a lastimar la pancita abultada que poseía SeokJin, había vida dentro de él formándose.

—Te creeré porque se que no eres un niño mentiroso, pero tengo que hacerte subir algo de peso, tendré que prepararte comida.—ahora las manos de Jin fueron a parar a las mejillas de HoSeok, y de ahí mismo un casto beso sobre su frente.

—NamJonnie, prepara la mesa por favor, Hobi y tu lindo esposo irán por la cena.—NamJoon asintió y Jin dirigió los pasos del pequeño omega hasta la cocina. Los ojos de HoSeok se posaron en la grandísima y decorada cocina del matrimonio kim. Una mesada grande, muchas alacenas de un suave color marrón claro y por los bordes rosa, miles de instrumentos de cocina de los cuales HoSeok conocía el uso de unos pocos y el delicioso aroma de comida recién terminada de cocinar.

—Espero que te guste la carne asada al horno con papas, también he preparado un poco de bulgogi y arroz, estuve toda la tarde exprimiendo naranjas para tener jugo  natural—la comida espera ser llevaba a la mesa, era mucha en verdad y HoSeok solo pudo abrir la boca por la cantidad...

—Cocinaste para toda una ciudad, increíble...—argumenta HoSeok.

—Oh, no te confíes Hobi, mi apetito es grande ahora que debo comer por mi bebé. Esto no durará cerca de mi, no lo olvides.—HoSeok y Jin rieron por lo bajo y se dispusieron a llevar la comida a la mesa.

Sin que faltara nada en la mesa, Jin mando a todos a sentarse y disfrutar de la comida, no sin antes prender una vela en el centro de a mesa para que le diera el toque "sofisticado".

Era la primera que HoSeok probaba la comida de Jin, y le pareció la mejor comida que pudo haber probado, los sabores eran justos, y el aspecto hermoso. No dudaría en pedirle consejos con algunas recetas que se le complicaban su preparación.

NamJoon tenía en sus manos una botella de vino, lo destapó y comenzó a servirle una gran copa a YoonGi... bien, lo más probable sea que se quedarían a dormir allí si su alfa ingería alcohol. No le molesta en lo absoluto, el matrimonio Kim lo trata amablemente, no lo han juzgado y eso es lo que importa al final del día.

Todavía tiene una charla pendiente con YoonGi.

NamJoon y YoonGi comenzaron a beber del fino vino mientras que HoSeok y Jin miraban con una mueca de desaprobación, SeokJin no podía ingerir alcohol por su embarazo, y a HoSeok simplemente no le llamaba la atención las bebidas de ese tipo. NamJoon le ofreció pero  rechazó cortésmente  la copa de vino.

Pasada las doce de la noche, YoonGi y NamJoon se reían por cualquier cosa que discutían, trayendo también sus recuerdos de la secundaria, NamJoon contó su propia versión de como conoció a Jin, sin omitir las partes más íntimas, como el acoplamiento y sus fetiches sexuales después de varios años en el matrimonio. Jin estaba rojo de la vergüenza y de a ratos tapaba los oídos de HoSeok. "No escuches esto, son cosas de adultos y NamJoon esta muy ebrio para detenerse" repetía hasta el cansancio.

Jin mando a HoSeok a que trajera el helado para que lo disfrutaran ellos dos solos mientras que sus alfas vivían en recuerdos de secundaria. Fue hasta la cocina y lo sirvió en dos tazones dorados y volvió con SeokJin para dejarle el postre.

—Necesito ir al baño—aviso HoSeok, y se fue tan rápido que no escucho que Jin lo llamaba para decirle que el baño estaba ocupado. No se dio cuenta de que YoonGi no estaba allí cuando volvió con los helados.

Abrió la puerta del baño de un golpe y así mismo la cerro, escucho un ruido parecido al de alguien orinando... ¡YoonGi estaba orinando en el baño!

—Oh dios, lo lamento, n-no me di cuenta de que estabas aquí, me iré de inmediato—demasiado avergonzado para dirigirle la mirada.

—HoSeok, mírame.

¿Por qué la voz de su alfa sonaba tan ronca y fuerte ahora? ¿Sera por el vino?

Tomó una larga respiración para acatar la orden. Levanto la mirada, YoonGi lo observa con ojos profundos, humedecidos, la nariz fría y con un puchero en los labios brillosos por la saliva.

YoonGi fue acercándose lentamente hasta HoSeok, arrinconandolo en la fría pared de cerámicas celestes del baño. Aun en esa posición, YoonGi no lo toca, solo se dio el gusto de enterrar su nariz en el hueco entre el hombro y el cuello de su dulce omega para aspirar el aroma a vainilla que libera, tan embriagador, mucho más que el vino que bebió.

La respiración de HoSeok subió de nivel, su pecho sube y baja, su mentón se apoyo en la cabellera celeste del alfa. Olía a coco y menta, un poco gracias al shampoo que YoonGi utiliza y a sus feromonas.

YoonGi murmura cosas pero HoSeok no las escucha con claridad.

—¿Q-qué es lo que me quieres decir, alfa?—pregunto HoSeok, y solo pudo llamarlo alfa en cuanto sintió mucho más fuerte el olor a tierra mojada, a menta mezclada con el coco de su shampoo. Se estaba volviendo loco.

—Quiero... quiero tocarte.—los balbuceos pasaron a ser susurros roncos por parte del alfa, HoSeok volvió a respirar las feromonas de YoonGi por todo el baño, llamándolo. El omega quería responderle algo, cualquier cosa, no obstante, el alfa se le adelanto.

—Pero tengo miedo de lastimarte. Sol, lo que menos quiero es causarte dolor, y si de verdad odias que te toque, te juro que jamas volveré a ponerte una mano encima... ni siquiera en tu celo.—las palabras de YoonGi eran reales, y HoSeok se sintió como la mierda por darle a entender a su alfa que sus caricias eran desagradables para él. No es así. Ama sus toques, sus mimos, sus palabras dulces. Cualquier cosa que YoonGi le daba estaba más que perfecto.

Y todo por sus miedos, por sus incesantes inseguridades. El miedo a los toques más allá de su piel oculta le ponen el corazón a mil y eso lo desestabiliza de sus pensamientos.

YoonGi le demuestra su amor y devoción, HoSeok tenía que poner su granito para avanzar en la relación a otro nivel.

—No digas eso, me gusta que me des mimos, caricias, que preguntes si estoy bien, me gusta que me toques, Mi celo vendrá en tan solo semanas y... solo quiero que tu me acompañes en ese periodo.

Las manos de HoSeok tomaron el rostro de YoonGi para acercar sus bocas y robarle un beso. La lengua de HoSeok busco colarse en la cavidad bucal del alfa, y YoonGi lo permitió con gusto, mecánicamente, los brazos de HoSeok bajaron hasta los hombros ajenos y se enrollaron en su cuello.

—Tócame alfa, por favor.—los labios de HoSeok se pegaron contra la oreja de su alfa. Y no hay nada que YoonGi no hiciera por su omega.

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Capitulo muy largo, para compensar la falta de actualización. Saludos~

Editado y corregido: 27/12/2019