-Lo siento Chuck-Susurró el moreno a su amigo-Creo que será mejor que volvamos-Jeff y el menor del claro, eran los únicos que aún permanecían en la entrada luego de 15 largos minutos.

-No puedo-Insistió el churco con las mejillas humedecidas-Le di mi palabra de que los esperaría...

El médico suspiró y palmeándole la espalda, se dio media vuelta para regresar a sus labores diarias.

-Thomas, él te necesita-Hablaba el castaño inundado por la desesperación-Todos lo hacemos, aquí y en tu época...Tienes que volver, solo tienes que hacerlo...

El menor se cubrió el rostro percibiendo su determinación derrumbarse como una pila de naipes. Newt estaba en lo cierto, ellos ya no...

-Ey-El eco se oyó lejano y cansado-Es Chuck¡.

El mencionado se destapó los ojos y los dirigió hacia el laberinto. Conforme reconoció las figuras que emergían del gran pasillo, su expresión cambio por completo; sus labios curvándose ampliamente dejaron que la sonrojes destellante en felicidad, borrara rastro alguno de las lágrimas antes derramadas.

-SI¡¡¡

Antes de que el asiático y compañía pudiesen reaccionar, el menor ya les había alcanzado apretujándolos en un fuerte abrazo.

-Nosotros también...-Murmuró Thomas débilmente-Te echamos de menos-El novato entrelazó varios de sus dedos en los churcos de su amigo.

Thomas estaba pálido como el papel, su cuerpo sudado tiritaba por un frío que en el transcurso de la noche solo empeoró. Ojeras oscuras demarcaban sus ojos, esos que luchaban por mantenerse despiertos; los sofocos silenciosos desenmascaraban lo pausada y dificultosa de su respiración, complementada por sus labios azulados y resecos, apenas moviéndose con cada silaba pronunciada.

-Shuck¡-Chilló el churco alarmado-JEFF, AYUDA¡

En el portal el médico aguardaba con la boca abierta y a sus espaldas chicos de todas las direcciones se acercaban aceleradamente, luego de que el grito efusivo de castaño acabara con esa callada mañana.

Con un último empuje de energía, Minho recargó a Alby sobre sus hombros y echó a correr lidiando él solo con el peso del líder. Thomas le siguió el paso lo más rápido que pudo, siendo ayudado por Chuck. Una vez los chicos cruzaron el borde, aterrizaron exhaustos sobre el pasto verdoso.

-Maldición, eso no se ve nada bien¡-Señaló asustado Jeff sin siquiera tener que revisar las heridas del novato-Chuck la camilla rápido¡. Debemos cerrar los cortes cuanto antes¡.

-Alby-Habló el azabache negando con la cabeza-Alby ha sido picado...necesita tu ayuda más que yo...

-Estas delirando, debes haber perdido al menos un litro de sangre¡-Insistía el contrario-Si no actuamos ahora...

-No pierdas el tiempo-Intervino Minho apoyándose sobre una de sus rodillas-He intentado convencerlo de lo contrario por un largo rato, pero sigue negándose a ser tratado hasta tanto Alby no este seguro-El corredor dio un par de suaves cachetadas a la mandíbula del novato-¿Ves? Él va a estar bien, nosotros lo vigilaremos. Lo peor ya paso, créeme.

-Voy a estar bien...empieza con él por favor-Agregó Thomas con decisión.

-Ok...pero Minho te llevará con Clint entretanto. No estoy de broma novato-Instantáneamente el médico pasó a evaluar el estado de Alby-Tienes razón, esto no pinta nada bien-Junto con otros habitantes, empezaron a sujetar el cuerpo del mayor a la cama auxiliar.

El bullicio creció al igual que la aglomeración de chicos que los rodeó. Thomas cabeceaba a punto de perder el conocimiento, siendo sacudido por el asiático a su lado.

-Ey, quédate con nosotros Thomas-Le hablaba Minho chasqueando los dedos a pocos centímetros de su rostro-Te reparcharán y cuando estés como nuevo nos pondremos manos a la obra.

-Sí Thomas, aguanta-El churco ayudó a levantar al azabache del suelo, luchando por mantenerlo en pie-Espera...¿A qué te refieres con...

-Ya somos tres, Shank-Declaró el corredor guiñándole un ojo.

-Minho, tu...

-Lo sabe-Reafirmó el novato-Tuvimos tiempo de sobra allí dentro, además...tenía que suceder eventualmente.

Una radiante sonrisa se ensanchó en la cara de Chuck nuevamente-Genial¡-Vociferó emocionado-Ya era hora, estaba cansado de no poder hablar de esto con nadie más.

-Bueno no me considero un fiel creyente como tú, pero lo suficiente como para darle una oportunidad-Aclaró el asiático.

-¿Y qué opinas sobre ya sabes, el "futuro" y demás?-Indagó el churco.

-Aun pienso que es una locura-Contestó al instante el corredor-Pero en una vida monótona y subyugada como la nuestra, tal vez es un poco de locura lo que necesitamos.

Chuck rio al ver a sus dos amigos sonriendo pese a las circunstancias. No dudó en abrazarlos una vez más, llorando esta vez por razones muy distintas-Estoy tan feliz de que hayan vuelto...

Thomas iba a agradecerles a ambos, sentir su apoyo luego de la continua e inevitable pesadumbre, le brindaba una calidez que casi conseguía disfrazar lo helado de su demacrado estado físico. Sin embargo en ese preciso instante vislumbró un rostro muy conocido irrumpir en la multitud a empujones.

Thomas suspiró liberando todo el aire que llevaba en los pulmones, su cuerpo se sentía tan ligero y endeble como una pluma, no obstante una fuerza reavivó en su interior al verlo. Cuidadosamente se separó de sus compañeros dando cortos, torpes y necesitados pasos hacía el chico de cabellera rubia.

-Newt...

***********

Cuando el grito llegó a sus oídos, se levantó de la tierra tan rápido que embistió a Gally en el proceso. Arrancando a correr como un desquiciado de tal manera que su cojera palpitaba, atormentándolo con cada zancada, Newt atravesó los cientos de metros que lo separaban de la entrada.

Al llegar al tumulto jadeaba con los ojos empañados por los vestigios de las lágrimas, esas que fueron secándose con el roce del viento. Se abrió paso con brusquedad entre las personas hasta obtener plena vista de aquellos que contra todo pronóstico, habían regresado.

Allí estaban los tres: Alby acostado sobre la camilla que era levantada y transportada por dos claréanos; su camisa levantada revelaba la marca dejada por un maldito penitente, confirmando las sospechas de la tarde anterior. La vida de la persona que más admiraba y respetaba, era una víctima más de ese asqueroso laberinto.

Desvió su atención hacia Minho, quien a juzgar por como lucía parecía estar ileso. Lo observó más entusiasta de lo que debería estar teniendo en cuenta el infierno por el que pasaron, pero a decir verdad eso le importaba un plopus en comparación con el alivio de verlo.

Ambos habían regresado tal y como Thomas prometió. Así fue como sus pupilas se posaron en el maltrecho azabache

Era de esperarse que de sobrevivir a esa noche la condición de salud del novato no sería la mejor, esto teniendo en cuenta las heridas que ya cargaba desde antes. Era  simplemente peor de lo que pudo y quiso prever.

La tez de Thomas tenía la misma vitalidad que una piedra, su cara extenuada y anémica se agitaba con cada respiro. El chico no parecía ser capaz de mantenerse erguido sin ayuda, la ropa que en algún momento había estado limpia, estaba manchada y chorreada casi en su totalidad por una inmensa cantidad de sangre que aún no dejaba de fluir.

Las palabras no surgían, se mantuvo estático incluso cuando el menor se percató de su presencia. Newt nunca imaginó que ver a alguien a quien conocía de tan pocos días, en una condición crítica como esa, pudiese llegar a dolerle tanto.

-Newt-Habló Thomas tan bajito que si no fuese lo único que él veía en ese instante, pudo no haberle escuchado.

-Tommy...-Siseó el rubio en respuesta.

La sensación de agobio dio paso a incandescentes oleadas de felicidad, unas que por poco no le permitían mantenerse en una sola pieza. Sus manos temblaban, sus finos labios también y el órgano en su pecho palpitaba tan vertiginoso que de seguir así, se derretiría ahí mismo.

Todo ese mar de emociones provocado por el sencillo hecho de oírlo decir su nombre.

-Todo estará bien-Balbució el novato-Alby...él se pondrá mejor, no...no tienes que preocuparte, Newt.

El menor sonrió míseramente, como si mover cada mínimo musculo de su rostro le resultará casi imposible. Aun así lo hizo y ahora caminaba cerrando la distancia entre ambos; el equilibrio de muñeco de trapo con que andaba le hizo perder el balance y caer hacía adelante.

Newt no reparó en que segundo exacto se lanzó hacia él, sujetándolo firmemente entre sus brazos.

Quería convencerse de que la única razón a por qué se aferraba con esa vehemencia al contrario, era por el miedo a que este se estrellara contra el piso. Que no se apegó paseando sus manos por la espalda del menor por algo más allá de lo obvio, que la desesperación de perderlo no era más que una extensión de su compañerismo; que el motivo por el que se rehusaba a soltarlo no obedecía a otro sentimiento que se negaba a sobrellevar.

No allí, no en el área, no bajo el control de los creadores, no en la esclavitud e inefable condena que eran sus vidas.

-Cállate...solo cállate-Respondió el rubio muy cerca de su oreja-Te vas a poner bien, Tommy.

Thomas exhaló largamente y enseguida correspondió el gesto abrazándolo por igual, recargando la cabeza en su hombro-Lo siento-Habló el chico-Intenté hacerlo lo mejor que pude...pero no logré evitar que fuera herido...lo lamento de verdad...

-He dicho que está bien-Insistió queriendo sonar molesto, su voz quebrándose falló estrepitosamente-Estás de vuelta...los tres lo están-Se corrigió al final no queriendo sonar demasiado afectado.

-Te lo prometí...eso es razón suficiente como para volver.

Con los nervios a flor de piel, percibió de reojo como los labios del menor se curvaban con cada palabra que salía de su boca. Le irritaba el que el otro dijese cosas como esas tan a la ligera, cosas que él mismo no se creía capaz de decir en voz alta.

-Eso ya no importa-Manifestó en aras de desviar la conversación a una que le resultara menos incomoda-Ahora podrás descansar, Tommy.

El novato pareció entender sus intenciones y asintió sin decir más. En ese breve y efímero instante solo lo sintió a él. El aire cálido que liberaba acariciándole el cuello, la mejilla fría que rozaba su piel y el corazón que bombeaba acelerado contra el suyo.

-Newt-Habló Minho unos metros atrás, ambos pares de ojos cruzándose en un innegable consuelo-Es bueno ver tu cara de Ploplus-Bromeó el corredor acercándose con una sonrisa ladina.

Quiso responder, no obstante con Thomas tan cerca suyo desconfiaba de su propia elocuencia. Las emociones eran tantas que iban dejando en el olvido la tormenta atroz que lo dominó por eternas horas de incertidumbre.

El rubio alargó uno de sus brazos en dirección al corredor, quien no dudó en terminar de unir sus dedos en un expresivo apretón de manos. Cerró los parpados estrechando la palma contraria, nunca soltando al azabache.

-¿Viste a un penitente?-Preguntó el cocinero arruinando el momento que entre los tres habían creado.

-No solo vio uno-Reveló el corredor en tono elevado-Lo mató.

Las miradas se giraron en torno al novato, todas incluida la de Gally.

Thomas se separó un poco de Newt, manteniendo uno de sus brazos afianzado alrededor del cuello contrario, apoyándose en él sin llegar a recargarle todo su peso.

-Lo matamos-Afirmó el novato centrando su visión en el asiático, este lo imitó y como si fuese el mejor de los chistes, ambos se sonrieron-Juntos.

La conmoción se acrecentó en los habitantes, la lluvia de preguntas comenzó mientras Minho intentaba resolver las que podía. Todos estaban intrigados, ansiosos por saber y escuchar cómo es que consiguieron esquivar la muerte. Todos menos uno.

Ni Thomas o Minho se percataron de la mirada confusa combinada con 'algo' más, que les dirigió intercaladamente Newt una vez la complicidad entre los dos sobrevivientes se le hizo evidente.

-Vamos-La voz del rubio surgió seria-Tu y Alby necesitan ir a la enfermería.

Fue lo último que dijo el segundo al mando previo a soltar la mano de Minho y dirigirse al campamento, llevándose a Thomas con él.

***********

Lo recostaron sobre una de las camas de hojas, le quitaron las prendas empapadas y limpiaron la mayoría del líquido vital esparcido, le retiraron las vendas usadas así como le dieron a beber un vaso de leche y fruta machacada; todo una agradable antesala del momento en que procedieron a desinfectar las cortadas con antiséptico.

El malestar que fue opacado por la insaciable frialdad de su anatomía, retornó y se intensificaba con el necesario tratamiento.

-Quédate quieto-Gruñó Clint por décima vez, pasando del chillido adolorido del novato.

Thomas hiperventilaba, temblaba y gimoteaba cada vez que el médico volvía a introducir el punzante y delgado objeto a través de su magullada piel. La primera vez tuvo suerte de estar inconsciente, pero ahora Chuck y Minho tenían que sujetarlo de brazos y piernas para mantenerlo recostado y lo más inmóvil posible.

Cada pinchazo que entraba en su carne y la atravesaba de salida, ardía y lo hacía retorcerse del sufrimiento. Minho le alcanzó un pedazo de madera para que mordiera y acallara los gritos, ya que eso era lo único que le nacía hacer: Gritar y patalear hasta que Clint terminara con su endemoniadamente lento trabajo.

-Bien hecho amigo-Animó el corredor-Vamos, solo falta la última.

Otra capa de alcohol se derramó en su abdomen haciéndole escupir el madero y arrancándole un alarido. Las cosas no mejoraron cuando el médico empezó con la segunda cortada, si era posible sentía que dolía el doble. Se le hizo eterna la hora en que Clint comenzó a envolverlo en una cantidad ridícula de vendajes.

-Deja de quejarte, solo fueron 32 punzadas-Soltó el médico y Thomas pudo jurar que visualizó un dejo de diversión en sus palabras-¿Qué hay con esa mirada?-Continuó Clint haciéndole frente al chico que apretaba los puños-¿Qué te hizo pensar que era buena idea entrar al laberinto en esas condiciones?.

-Ya déjalo-Advirtió el asiático-Alby y yo no estaríamos de vuelta de no ser por él.

Clint paseó la vista entre el respetado guardián y el novato.

-Nunca dije lo contrario-Habló el médico levantando los hombros-Gracias por eso. Ahora quédate aquí y no eches a perder mi trabajo-Añadió el chico apartándose del trio.

-No le pongas atención-Intervino el churco-Siempre ha estado del lado de Gally.

Thomas les sonrió por el apoyo brindado, no obstante un inesperado grito los alertó. Iba a levantarse pero Chuck lo frenó.

El asiático se puso de pie estirando cada una de sus piernas-Yo me encargo-Con eso, el mayor cruzó la puertecilla de tela que dividía en dos la enfermería, dando con el lado donde el líder del claro era atendido.

**********

No hubo mucho que pudieron hacer por Alby, higienizaron la zona y le dieron a beber agua de amapola para al menos evitar que sintiese dolor. Con el moreno dormido y sin una cura al alcance, solo podían desear un milagro; uno que sabían no llegaría.

Newt se sobresaltó al oír otro de los horrorosos gritos de Thomas. Apretó los parpados en un vano intento de no dejar que esto lo inquietara, especialmente frente a tanta gente.

-Debemos tomar una decisión, Newt-Dijo Gally devolviéndolo a su situación actual-Sé que aún estamos asimilando esto, pero tú y yo sabemos cómo terminará.

El rubio le desvió la mirada y la mantuvo sobre el hombre que le dio la bienvenida.

-Tiene que irse lo queramos o no...son las reglas y aplican para todos por igual.

-No-Respondió por reflejo.

-Newt, tenemos...

-Acaba de llegar¡-Explotó el mayor-Dale un maldito segundo de calma, ¿Quieres?¡-Bramó el rubio ya harto del comportamiento de su amigo.

El constructor acentuó el entrecejo-Puedes intentar aplazarlo, pero ya sabes cómo acabará esto.

-Por favor, Gally-Replicó cansado y masajeando sus cienes-No tomaré una decisión como esa ahora...No lo haré.

-Bien¡-Concedió el brabucón-Hablaremos del novato entonces-Sentenció haciendo que los músculos de Newt se tensionaran-Entró al laberinto, incumplió las reglas y debe ser castigado.

-¿Te has vuelto completamente loco?-Gruñó Newt reduciendo la distancia entre ambos-Estuvo a punto de morir, aun lo está y tú solo piensas en aventarlo al pozo¡.

En cuestión de segundos el asiático se abrió paso a esa zona, corriendo el separador de tal manera que las pupilas del rubio y las del novato volvieron a encontrarse.

-Si Alby estuviese consiente haría valer las normas-Se defendió Gally y antes de que Newt volviese a protestar, continuó con su argumento-Mira, me alegra que hayan regresado pero si deseamos volver a la normalidad, él tiene que hacerse responsable-Declaró señalando a Thomas con su dedo índice.

-¿SALVAR NUESTRAS VIDAS FUE TAN TERRIBLE PARA TI?¡-Protestó Minho acercándose peligrosamente al constructor.

-Oh Shuck-Susurró inquieto el churco desde su posición.

-No te vi a ti distrayendo un penitente para que no me comiera vivo¡-Soltó ya a pocos centímetros del rostro contrario-Si no sabes de lo que hablas, mejor ni abras la boca.

-Alto los dos¡-Interrumpió Jeff, interponiéndose entre ambos claréanos-Esta es MI enfermería y no pienso dejar que se agarren a golpes dentro ella, cuando tengo a dos de nuestros compañeros gravemente heridos aquí¡.

Esta vez fue el constructor quien sorteó al moreno y avanzó hacía el asiático con la agresividad de un toro enfurecido.

-GALLY, AFUERA¡-Ordenó sujetando al aludido del antebrazo con fuerza-Esta discusión terminó.

-Cuando Alby no está disponible yo tengo la última palabra¡-Lo confrontó con el nudo de arrugas acentuándose en su frente-Thomas ya ha sufrido suficiente, permanecerá en la enfermería hasta que se recupere y pueda trabajar¡.

La cabeza de Newt hervía por la exaltación, sentía la sangre bullendo por sus venas siendo apenas consiente de lo rudo que sonó. Gally lo forzó hasta el límite de lo tolerable, quebrando por completo la paciencia que últimamente le costaba tanto mantener.

-Estas cometiendo un grave error-Alegó Gally endureciendo la voz.

-Fin del asunto¡-Terminó el segundo al mando.

Estaba harto de ser pisoteado, de sentirse impotente e ignorante. Todas esas emociones colisionaron imposibles de retener por más tiempo.

-No tenemos idea de lo que harán ahora que este Shank asesinó a una de sus mascotas-Masculló el constructor zafándose de su agarre-Si algo peor nos sucede será su culpa; así que recuerda este momento, cuando fuiste tu quien eligió aprobar sus acciones.

Con eso dicho Gally se marchó furibundo, siendo seguido por Clint.

-Eso fue intenso-Exclamó Chuck luego de un suspiro de alivio.

-Gracias-Thomas se irguió para hablar, con una expresión serena que denotaba grata tranquilidad-Gracias Newt.

El rubio lo miró con el ceño fruncido, el silencio y el revoltijo de sentimientos entre frustración, recelo, alegría y nerviosismo le oprimían la garganta como un perverso parasito. ¿Cómo era posible que Thomas lo pusiese de cabeza con un par de simples palabras?.

No podía permitirse dejarle ver la mescolanza de inseguridades en que se había convertido. Por lo que sin corresponder respuesta alguna, le dirigió una mirada agreste; mantenerla le requirió tanto esfuerzo que le era difícil sostenerla sin dejar de respirar.

-Newt-Habló Jeff acabando con ese breve momento-¿Podemos conversar afuera?-Murmuró el médico dirigiéndose a la salida.

El rubio le siguió sin protestar, dejando a Chuck, Minho, Thomas y al derribado Alby solos en la cabaña.

-Podemos tenerlo aquí dos noches más pero luego tendremos que hacer lo que Gally dice, lo siento-Confirmó Jeff decaído-Desearía poder hacer más por él...

-Lo sé...Agradezco tu ayuda, Jeff-Musitó el mayor con sinceridad-Yo también quisiera que fuese así...puedes retirarte, nosotros lo vigilaremos.

El médico le palmeó la espalda y se encaminó en dirección a la cocina.

Perder a Alby dolería tanto como si le extirparan una parte de sí. Sabía que debía comenzar a hacerse a la idea de continuar sin él, sin embargo no se consideraba capaz de suceder su labor, por algo era 'Segundo' al mando.

Él no era un líder, alguien valiente a quien los demás seguirían sin dudarlo, mucho menos ahora que su juicio era cuestionado por más de la mitad de los habitantes. Newt sencillamente no veía un camino claro el que seguir, todo era tan turbio que le costaba reconocerse a sí mismo entre esa espesa niebla.

"No estoy solo". Se confortó al recordar a ciertas personas. "Minho y yo estamos en esto juntos...y Tommy". La tierna sonrisa que se formó en su rostro, se desvaneció tan rápido como llegó. "Minho y Tommy..."

De tonto no tenía un pelo, pudo notar algo entre el corredor y el novato tan visible como las nubes sobre su cabeza. Se trituraba los sesos intentando justificar esa corazonada, pues estaba seguro que ellos no se relacionaron antes de la pesadilla en el laberinto.

Algo había ocurrido esa noche entre Minho y Thomas, le frustraba sentirse molesto o enojado al respecto; no era lógico luego de que añoró y lloró por su regreso. No era así como quería estar junto a sus compañeros. Quizás fue su imaginación.

Respiró hondo agotado de darle tantas vueltas a sus propios pensamientos y se dispuso a entrar a la edificación.

Cuando estuvo a nada de empujar la puerta, el conjunto de voces y lo que estas decían congelaron cada uno de sus movimientos. Newt recobró las fuerzas suficientes para pegar su cabeza de perfil contra la madera, mientras su mente y pecho recibían los agudos golpes que había suplicado no sentir nunca más.

-¿Entonces qué haremos ahora que Minho también lo sabe?-Comentó Chuck.

-Seguir con el plan-Respondió Minho-Thomas y yo lo discutimos anoche, tenemos algunas ideas pero debemos actuar antes de que se desmaye de nuevo.

Sus ojos ardían aguándose, lo había hecho otra vez. Thomas confió en una persona con la que nunca había hablado, antes que en él. En ese instante fue incapaz de seguir fingiendo que no le importaba.

-Lo lamento chicos-Balbuceó el novato-Quisiera poder hablar de esto con calma, pero dormir...necesito-Thomas se frotaba los parpados para no sucumbir ahí mismo-No debo...

-No digas eso-Le consoló el menor-Te mereces un buen descanso, hiciste tu cuota heroica del día-Añadió el churco-Ya habrá tiempo luego.

-No quiero ser aguafiestas, pero antes de eso hay que hacer lo que te pidieron y también tienes que cumplir lo que me prometiste-El corredor sonó serio-Tienes que decírselo a Newt, es tiempo.

El rubio apretó los puños de tal manera que sus nudillos se blanquearon por completo. Minho no era nadie para Thomas y aun así el chico le dijo sus secretos, esos que tanto le había pedido oír. No se limitaba a eso; verlos actuar tan cercanos y agradables el uno con el otro, como si se conocieran de años, le despertaba ganas de golpear algo.

-Acerca de eso¡-Intervino Chuck-Tienes que decirle la verdad, le prometí que lo harías al volver.

-¿Qué tu qué?¡-Expresó Thomas escandalizado-¿Por qué has hecho eso?¡.

Lo hería.

Thomas lo hería con cada insensible palabra, esas que una vez nublaron su juicio y le hicieron especular sobre cosas sin sentido, tambalear su templanza y bañar de placidez sus preocupaciones con una simple sonrisa.

-No lo entiendes. Newt estaba bastante afectado anoche, no quería ver a nadie...se convenció que ustedes tres iban a morir dentro de los muros-Insistió el menor-No soporté verlo en ese estado así que le dije que todo estaría bien y que al regresar tú te dejarías de rodeos y hablarías con él.

Newt se sintió vergonzosamente expuesto.

Él mismo lo provocó al dejar que alguien lo viese sin su usual mascara, solo al lamentable y dramático chico que intentó suicidarse 3 años atras. La idea de que Thomas soltara una carcajada en cualquier momento le provocó una acelerada taquicardia acompañada por sus pupilas destellantes y en sus dedos temblorosos.

-Es el momento Thomas-Dijo Minho de nuevo.

-Por favor espera¡-Reiteró Thomas cruelmente-No puedo...te lo dije anoche...

-Lo recuerdo-Respondió condescendiente el corredor-Pero Newt es mi mejor amigo...nunca lo he engañado y no pretendo empezar ahora; especialmente si eso implica tener que mentirle a la cara.

-Yo tampoco lo haré más.

-Chicos...

Newt tuvo suficiente, el horrendo cóctel de resentimiento y enfado que se formó en su interior, rebasó la copa con esa última negación.

-No es necesario-Les cortó el rubio reapareciendo en el umbral de la enfermería.

No quiso meditar más en la razón, le bastó con concederle a esa imprevista y jamás experimentada sensación de recelo y envidia, envolverlo de pies a cabeza y desatarse en busca de su causante.

Los tres rostros invadidos por el pánico se giraron en su dirección, cada uno de ellos petrificado por su entrometida presencia. Newt no tenía lugar en esa habitación y quería acabar con todo el jodido asunto de una maldita vez.

-No me interesa una sola palabra de lo que tengas o no por decirme-Atacó mientras lo despreciaba con la mirada-Has lo que quieras, confía en quien quieras, no tienes idea de lo poco que me importa.

Chuck angustiado, se cubrió la boca sorteando la vista entre los presentes. Minho por otra parte, liberó un largo suspiro y maldijo al azabache en silencio.

Thomas se puso de pie tan rápido e imprudente, que no resultaría raro verle sangrar de nuevo.

-Newt, por favor¡-Chilló el novato con su voz destrozada-No es así¡.

El mayor se relamió los labios, virando ligeramente la cara de modo que el semblante desmejorado no conmoviese su determinación-Cállate, enserio-Escupió apartándose de la puerta y acercándose-Tengo suficientes preocupaciones ahora como para prestarle atención a tus mentiras e inseguridades.

-Ok Newt-Intervino Minho, claramente compadeciéndose del novato-Cálmate por favor-Trató de terciar el corredor con gentileza-Siéntate y solucionaremos esto...

-No-Lo frenó el rubio, en esta ocasión dirigiéndose directamente al asiático-Me alegro demasiado de que estés de vuelta Minho, de verdad lo hago...así que por el bien de nuestra amistad, has el favor de no entrometerte en esto-Pidió conteniendo las lágrimas de desengaño, algo que no pasó desapercibido para el oriental.

El golpe emocional fue evidente en el rostro de Minho ante lo último dicho por su mejor amigo; luego de eso retrocedió permaneciendo callado.

-No es su culpa-Habló Thomas en un lastimero susurró-De ninguno de ellos...te ruego que los dejes fuera de esto-Imploró al borde de iniciar otra de sus escenitas-Esto es entre tú y yo.

Newt encorvó ambas cejas debiendo contener el sollozo en lo más profundo de sus pulmones; en cambio soltó una risotada terriblemente fingida-No hay un "Tu y yo", Thomas-Arrojó sin contemplaciones-Lo digo enserio-Ratificó enterrando bajo tierra lo que verdaderamente sentía-Sanate y luego has tu trabajo. No eres diferente a ninguno del resto.

No existan palabras precisas que pudiesen describir como la poca esperanza en la expresión del azabache se destruyó en cuestión de segundos. Pero no caería otra vez, estaba cansado de intentar comprenderlo y no obtener nada a cambio, de luchar contra una corriente que no hacía más que rechazarlo.

-Newt-El llanto finalmente escurría por la mejillas pálidas de Thomas, tan incesante y descontrolado como lo recordaba-Newt, por favor...

-Detente-Lanzó con la ilusión de que en verdad lo obedeciera; tal vez eso haría las cosas más fáciles, a lo mejor así cada vocablo que abandonaba su boca sabría menos a veneno, uno que lo estaba intoxicando casi tanto como al contrario.

"No es justo...El cómo me hace sentir no es justo...no lo dejaré manipularme más".

-¿Quieres ser corredor?. Hecho...Eres problema de Minho ahora.

No soportaba mirarlo, no tenía el derecho a hacerle sentir mal. Thomas se lo buscó el solo desde el inicio; él no tenía por qué pagar los platos rotos de todas sus farsas. Con eso decidido, se dio la vuelta dispuesto a marcharse de una puñetera vez.

-No de esta manera, amigo-Lo detuvo Minho sujetándole por el codo. Su mano temblaba posiblemente por los roces que habían surgido recientemente entre ambos.

-Minho...no te entrometas.

-Te oí...pero eso no quiere decir que te vaya a hacer caso-Se atrevió a contradecir el corredor-Tú me enseñaste a ver el panorama completo aun cuando mi primera reacción es actuar por impulso.

-Esto es diferente.

-No, no lo es-Insistió el mayor-Newt, si creo que esto es lo correcto, que después de la ira y el rencor vendrán cosas que realmente valen la pena...en ese caso no me importa que me cargues la bronca por el tiempo que consideres necesario, no te dejaré ir de esta cabaña hasta que oigas lo que tiene que decir.

-¿Qué te hace pensar...

-¿Confías en mí?

-No viene al caso.

-Si lo hace, ¿Confías en mí?.

-Eso no im...

-¿Confías en mí?

-Minho...

-Ahora calla tu-Le sermoneó el corredor más tranquilo al ver como el rubio iba cediendo-¿Confías en mí?.

Newt agachó la frente formando un pequeño puchero del que no sintió orgulloso. Detestaba cuando Minho lo chantajeaba de esa manera, el asiático sabía bien como calmar el mal humor que pocas veces dejaba salir.

-Escúchalo...si te da igual no volveré a decir una sola palabra al respecto-Prometió honesto el mayor-Sé que tienes todas las razones para actuar así, pero yo también tengo las mías para defenderlo...Salvó mi vida cuando pudo haberse quedado aquí, cuando pudo huir dejando que fuese devorado...Si no lo haces por él, hazlo por mí.

El rubio le sostuvo la mirada a su amigo, finalmente suspirando con resignada frustración.

-A veces te odio, Shank.

-No lo haces. Solo odias cuando tengo razón y tu no-Contestó Minho, sonriendo por primera vez desde que esa confrontación dio inicio.

-Está bien-Murmuró Newt dándose golpes de pecho por su falta de voluntad-Que quede claro que lo hago por él-Continuó asertivo frente al azabache, quien ya había sido auxiliado por Chuck y acomodado de nuevo en la camilla.

Thomas limpió su rostro y carraspeó antes de proseguir-Lo siento Newt...no alcanzas a imaginarte cuanto lo hago...sé que he tardado demasiado, lo que menos quería es que llegáramos a esto, pero te entiendo...tienes todo el derecho a despreciarme-Admitió con sus labios temblorosos.

-Si crees que eso va a cambiar en algo el que...

-No...no lo espero-Expresó entristecido-Eres la persona más lista, reflexiva, honorable y sensata que he tenido la fortuna de conocer-Confesó con tanta sinceridad en sus pupilas, que le aumentó sin querer su ritmo cardiaco-Sé que probablemente piensas que soy la peor persona que ha salido de esa caja, no te diré lo contrario...Me has ofrecido tu confianza y te he ocultado la verdad. Es por eso que no espero ser perdonado...solo deseo que sepas que no lo hice por gusto, porque pretendiera herirte...lo hago porque incluso ahora, soy un cobarde que le aterra afrontar la realidad...

-Ese no es mi problema-Alegó el rubio por la simple necesidad de no parecer débil ante él, por no demostrar el revuelo enloquecido de sentimientos que volvía a ocasionarle.

-Quizás tienes razón y lo que digo no servirá de nada...pero te lo debo mucho más de lo que podría explicar alguna vez-Admitió con esa hermosa mirada cristalizada que ya no podía obviar-No ser honesto contigo ha sido uno de mis mayores arrepentimientos...Estoy cansado de esconderlo todo, de odiarme a mí mismo por negar tantas cosas que siento...

Newt cerró los ojos siendo incapaz de conservar esa cortina de frialdad, que le dolía llevar encima como centenares de espinas incrustadas en sus manos.

¿Realmente iba a darle una última oportunidad después de lo que ya había hecho? ¿Valdría de algo? ¿Sería otra patraña suya? ¿Cuánto tardaría en volver a sentirse diminuto y un completo desconocido para sí mismo?.

-Por favor permíteme intentarlo...te prometo que no cometeré el mismo error otra vez.

https://youtu.be/JoNLb7VxDjA

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So while I'm turning in my sheets

And once again, I cannot sleep
Walk out the door and up the street
Look at the stars beneath my feet
Remember rights that I did wrong
So here I go

There is no place I cannot go
My mind is muddy but
My heart is heavy, does it show
I lose the track that loses me
So here I go

And so I sent some men to fight,
And one came back at dead of night,
Said "have you seen my enemy?"
Said "he looked just like me"
So I set out to cut myself
And here i go

I'm not calling for a second chance,
I'm screaming at the top of my voice,
Give me reason, but don't give me choice,
'Cos ill just make the same mistake again,

And maybe someday we will meet
And maybe talk and not just speak
Don't buy the promises cause
There are no promises I keep,
And my reflection troubles me
So here I go

I'm not calling for a second chance,
I'm screaming at the top of my voice,
Give me reason, but don't give me choice,
'Cos ill just make the same mistake again

So while I'm turning in my sheets
And once again, I can not sleep
Walk out the door and up the street

Look at the stars
Look at the stars, falling down,
And I wonder where, did I go wrong.

Canción: James Blunt - "Same Mistakes"