Adrenaline in my soul...🎶🎵

Cody Rhodes.

Estoy de vuelta, el público vibra ante mí aparición. Se siente tan bien el volver a casa, a la empresa que me vio nacer, meses antes en AEW le hablé a Tony sobre mi decisión y él lo supo entender. Sabía que este era el momento para seguir el camino que papá no pudo concluir: Ser campeón. Al parecer las estrellas se habían alineado, pues el rumor de mi salida llegó a oídos de Triple H y me contactó, y al leer el contrato no lo dudé dos veces y firmé. Hoy estoy aquí, pisando por primera vez en seis años un ring de WWE, pero también está ella. Danielle, una mujer que lo era todo en mi vida y que nunca pude olvidar, pero tenía que dejarla porque hace seis años yo no era nada y ella lo merecía todo. Pero ella hoy está con él.

Danielle Levesque.

El mundo que logré construir sin él, mis defensas, todo se vino abajo cuando lo vi salir de la oficina de mi hermano Paul, su regreso era un hecho. Lo vería diario, y lo peor es que a pesar de haberme abandonado yo jamás lo pude olvidar. Él era todo lo que yo quería, pero haré todo para evitarlo, porque no quiero lastimar a Roman, que fue el que me sostuvo todos estos años cuando solo quería morir de amor. A pesar de nunca poder sentir lo mismo que el samoano, por más que lo haya intentado mil veces.

Roman Reigns.

Volvió el hijo pródigo, el perdedor, el idiota. Que ni crea que le dejaré las cosas fáciles. Este es mi roster, mi patio, soy la cabeza de la mesa. No permitiré que venga a querer quitarme del foco de atención que me gané a pulso, no dejaré que me gane a mí, no le dejaré mis campeonatos, pero sobre todo eso, no dejaré que tenga a Danielle, pues si ella no es mía, tampoco será de él.