chapter ten:
A QUIET NIGHT

"you're the kind of man who makes me sad"

maratón 3/3

Maddison

Ni bien llegamos a la fiesta, Nicole nos recibió y halagó a  Belly por su vestido y la tiara de flores que habían decidido llevar a la fiesta. Ambas nos invitaron a juntarnos con las demás chicas, pero eso no estaba en mis planes así que me disculpé y seguí mi camino para buscar algo que tomar.

El lugar está lleno, casi ni puedo moverme entre la gente que baila, se besa o simplemente está ahí parada en medio de los pasillos. Este solía ser mi ambiente: ir a fiestas, tomar, divertirme con chicos y chicas de mi edad, pero ahora no recuerdo la última vez que, voluntariamente, decidí ir a una fiesta. Encuentro la cocina luego de un par de minutos y logro agarrar una botella de cerveza.

Mi celular vibra en mi cartera. Es una notificación de u n mensaje de Fiffy en el grupo que tenemos entre las tres. Dice "suerte hoy en la fiesta (ojalá que pase algo con el castaño de sonrisa bonita)". Me río en voz alta y me doy cuenta de que no había visto a Nick desde que llegamos. Él decidió no ir directo desde mi casa, por lo que luego de la cena se fue y dijo que iba a venir por su cuenta.

Agarro un vaso, me sirvo lo que sea que sea el líquido rojo que está en la mesa y sigo con mi camino para encontrar a Nick. El gran tamaño de la casa hace que sea difícil congeniar con alguien en tiempo y espacio. Abro cada puerta, dando con situaciones que prefiero olvidar. Cuando entro a la habitación que está al lado del baño, la situación me golpea más fuerte que las anteriores.

Es Nick con otra chica. Una rubia que no recuerdo haber visto en ningún lugar. Ni siquiera me gasto en decirle algo, no se merece verme enojada. Bajo las escaleras a toda velocidad tratando de borrar la imagen de mi cabeza. No hablábamos hace mucho, pero son este tipo de cosas que a una le lastiman el autoestima.

Salgo por la puerta principal para encontrarme a Belly, Cam, Jer, Conrad y un chico más que no conozco. Lo primero que reconozco el la expresión de mi hermana, com o si algo hubiese pasado. Me olvido de lo que yo estaba viviendo para descifrar lo que le pudo haber pasado a Belly.

—¿Estás bien, Bel?—ella asiente.

—Sí, estoy un poco cansada. Hablamos en casa ¿okey?—ahora soy yo la que asiente.

—Veo que se quedaron sin un jugador. Me sumo.

El resto de la noche fue eso. Jugar al Beer Pong, cantar canciones en el aparato de karaoke, ignorar al imbécil de  Nick y fingir demencia con la cercanía de Conrad. Sin dudas esto no era lo que quería voy a tener una resaca muy fuerte mañana, pero necesitaba eliminar de mi cabeza todo lo que en mi mente apareció.

—Creo que deberías bajar, Maddie.—me aconsejó Jer.

Todo estaba medio borroso, pero identificaba perfectamente que estaba sobre la mesa del living cantando a todo pulmón una canción  de la cual no me acuerdo el nombre. 
¿Me pasé de tragos? Posiblemente.
¿Estaba consiente de lo que hacía? Sí (no).

—¿Por qué? Me estoy divirtiendo, para eso es la fiesta ¿no?—toda la gente que antes cantaba conmigo dijo un entonado "sí" ante mi pregunta. Jer forcejeó un poco conmigo para bajarme.

—Okey, se acabó.—esta vez fue Conrad, que se paraba de una de las sillas para venir hasta mí.—En serio, Mads. Vamos.

No quería irme, pero como la idiota alcoholizada que soy, me encuentro caminando detrás de él. Me abre la puerta de la camioneta en el lugar de copiloto y yo entro sin chistar. Se sube y no espera ni un segundo para emprender viaje. Me apoyo contra la ventana, tratando de no mirarlo, aunque se me  hace una tarea imposible.

—¿Estás bien?

—Nick estaba con otra, lo vi  en una de las habitaciones.—me sincero y él frena la  camioneta de una manera muy brusca y me mira.

—Es un imbécil.

—Igual de imbécil que tú.—el alcohol te hace decir cosas que no dirías sobria, pero eso no las hace menos sinceras.—Arranca el auto, por favor. Necesito llegar.

Y eso es lo que hace. Es tan cobarde que no puede siquiera reclamarme o intentar explicar nada. Tampoco quiero que lo haga, pero una pequeña parte dentro de mí desea profundamente que me diga lo que quiero escuchar.

˗ˏˋ 🐚 ˎˊ˗

Al llegar subo directo por las escaleras. Siento los  pasos de Conrad detrás, m uy cerca mío, como cuidando que no pise mal y me caiga por las escaleras. Su presencia me sigue hasta mi habitación, pero se detiene en la puerta.

—Voy a estar abajo, dime si necesitas algo.

Estaba cerrando la puerta cuando no pude controlar el impulso de preguntar.

—¿Por qué?—él se queda callado,  sin entender qué va mi pregunta.—¿Por qué no puedo gustarte como las demás chicas? Lo intenté, juro que intenté, pero no se que hacer.

Se acerca despacio hasta mi cama, apoyándose en el respaldo y me abraza. Descanso mi cabeza en su pecho escuchando sus latidos, sabiendo que es por este chico que mi vida se dio vuelta completamente. Me abrazo más fuerte a él, como sintiendo que si lo suelto va a desaparecer por completo. Y por un momento, me creo que está pensando lo mismo que yo, que Conrad me necesita de la misma manera.

nota de autora💌

Holaa lindas, cómo están? 

Sé  que este capítulo es corto comparado con los demás que venía escribiendo, pero  prefería condensar solo acá  la noche de la fiesta y en otro capítulo arrancar con el día siguiente, aunque los dos capítulos esos  queden más cortos.

¿qué opinan de todo lo que pasó en estos últimos caps? Las leo. 

Por favor voten y comenten si les gustó el capítulo, ayudan un montón y es muy fácil. Digamos no a lxs lectorxs fantasmas.

lxs amoooo mucho 💗