LESSLIE

Cassie y yo nos la pasamos muy bien. Ella es una niña muy tierna y de inmediato te enamoras de ella, es una niña muy lista y si te portas bien, te ganas rápidamente su cariño y su confianza.

— Lesslie ¿tú eres mi mamá? Si Sebastián es mi papá y tú sientes algo por él ¿eso te hace mi mamá? — me preguntó eso con ojos brillantes, llenos de esperanza, y eso provocaba un cosquilleo por todo mi cuerpo.

— Yo no siento nada por él — dije esquivando la mirada de la pequeña.

— Claro que sí, se te nota en tus ojos — la miré, ella seguía con sus ojos brillantes y llenos de esperanza. Cassie sabe perfectamente que aunque yo lo niegue, sentía algo por Sebastián, ella quería que estuviéramos juntos y fuéramos una familia.

Siento que nada le quitará las esperanzas.

— Para ser una pequeña niña de 6 años, notas muchas cosas.

— Me gusta creer que la vida real es cómo los cuentos de hadas, aunque en el orfanato me dijeran que no — acaricié su rostro para después tomarla de las manos.

— La vida real puede ser tal y cómo tú quieras. Si quieres que tu vida sea un cuento de hadas, lucha por eso, nosotros somos los que tenemos el poder de nuestras vidas. 

— ¿Entonces tienes el poder de estar con papá? — suspiré. 

— Si, creo que sí.

— Espero que le puedas dar una oportunidad, me gustaría mucho que fueras mi mamá — Cassie se acercó más a mí y me dio un abrazo cálido, un abrazo que hace mucho necesitaba.

— A mí también me gustaría mucho — susurré sin soltarla. 

Capítulo editado