Un par de horas después…

Ruby, Marge, Wally y Lisia salieron del ruidoso edificio para tomar aire, después de todo, era cansador bailar con tanta gente.

Lisia: ¡Uf! Sí que bailé mucho…

Marge: ¡¿Tú?! Ruby y Mack fueron los últimos en regresar a las mesas en cada ronda.

Lisia: Punto a tu favor.

Wally: Este es el momento…-se apartó del grupo, lanzó una Poké Ball y volvió a seguirles el paso.

Marge: Es ahora o nunca…

Wally: Lisia, ¿podemos ir cerca de ese risco?

Lisia: Eemm sí, no hay problemas.

Marge: Ruby, ¿podemos hablar un momento?

Ruby: ¡Claro!

Wally: Genial.-tomó a Lisia de la mano y se la llevó cerca del risco.-Confío en tí, Altaria.

Marge: ¡Perfecto!-tomó a Ruby de la mano y se lo llevó a una zona apartada.

Wally y Lisia estaban parados cerca del risco, con una linda vista al cielo y sus estrellas.

Lisia: ¿Qué pasa, Wally? ¿Para qué estamos aquí?

Wally: Para esto.-chequeó los dedos, y llovieron meteoritos.
Altaria había usado Cometa Draco.

Lisia: ¡Es increíble! ¿Cómo sabías que iban a llover meteoritos?

Wally: Yo le ordené a mi Altaria que use Cometa Draco, lo hice para tí.

Lisia: ¡Es hermoso!

Wally: Y… quería decirte algo, algo muy importante… Lisia… tú…

Lisia: ¿Sí?

Wally: Tú… me gustas…
Cuando Angie me atacó y me abandonó, tú apareciste y no descansaste hasta animarme, y lo lograste. Además, durante estos días, me he sentido extraño cuando estaba contigo. No podía sacarte de mi cabeza. Estoy feliz de haberte conocido, y si no puedes corresponder a mis sentimientos lo entenderé, Lisia.

Lisia: Wally…-soltó unas lágrimas- Eres tan dulce… Estoy muy feliz de escuchar todo lo que dijiste. Y, tú también me gustas.

Wally: ¿Enserio?

Lisia: Por supuesto.-se limpió las lágrimas.- Tu forma de ser con todo el mundo, tu personalidad y tu gran y noble corazón simplemente me derriten. Eres el chico más lindo que he visto nunca, y nunca le das la espalda a tus amigos. Tú me gustas desde la primera vez que te ví en el restaurante de Ciudad Portual.

Wally: Lisia, ¿quieres ser mi novia?

Lisia: ¡Claro que sí!-se acercó al peliverde, puso sus manos en sus mejillas y lo besó tiernamente en los labios; el menor correspondió tímido al beso. Unos segundos después se separaron por la falta de aire.

Wally: ¿Te parece si buscamos a Ruby y a Marge y les contamos de la noticia?

Lisia: Me parece bien, corazón.-entrelazó su mano con la de Wally y fueron a buscar a Ruby y Marge.

El par de coordinadores se encontraba en un banquillo con vista al mar.

Ruby: ¿Qué querías decirme, Marge?

Marge: Bueno, esto… ¿Cómo te digo?

Ruby: Oye, tranquila.

Marge: De acuerdo. Ruby, me gustas.-el menor se sorprendió.

Ruby: ¿Q-qué…?

Marge: Lo que oíste. Adelante, me puedes rechazar, pero antes déjame terminar. Cuando fui a tu casa y te ví llegar, no te habría reconocido de no ser por el gorro. Habías crecido, y no sólo físicamente, maduraste durante estos cinco años. Con cada experiencia y momento que tuvimos en nuestro viaje para detener a Sapphire, me di cuenta de algo, de que estaba enamorada de tí. Entiendo si no te gusto, pero ahora me siento mucho mejor ahora que me lo saqué del pecho.

Ruby: Marge…

Marge:…

Ruby: El año pasado, las cosas se pusieron tensas conmigo y Sapphire; ya que ella se volvió muy manipuladora y celosa. De a poco, el amor que tenía hacia ella se fue apagando hasta que con lo que hizo hace un mes, los sentimientos que tenía por ella murieron definitivamente. Pero al mismo tiempo, pasé por muchas cosas contigo, y en esos momentos me sentía muy feliz, e incluso olvidaba que estábamos persiguiendo a Sapphire. Marge, creo que lo que siento por tí es algo igual de fuerte que lo que sentía por Sapphire.

Marge: ¿D-de verdad?

Ruby: Por supuesto, me gustaría ser tu novio.

Marge: Estoy tan feliz…

Ruby: Yo igual…

Ambos unieron sus labios en un dulce beso, y al rato se separaron.

Marge: Se sintió bien.

Ruby: Lo mismo digo. ¿Qué tal si le contamos a Wally y a Lisia?

Marge: Me parece bien.-sonrió, y se levantó del banquillo al igual que Ruby y se tomaron de la mano para después buscar a Lisia y a Wally.