Aclaración: Au: Lab Experiment / Experiments of Despair.
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Pov. Narradora.

Un día más, según el chico de cabello rojo que estaba en esa celda, ¿Cómo fue que terminaron en esto?, ¿Que fue lo que pasó?, Nadie tiene idea, el pelirrojo no recordaba mucho de lo que había pasado, solo recuerda un tal juicio escolar y de repente se encontraba en una celda, y lo peor.. ahora su cuerpo era de fuego y lava.. ¿Cómo diablos término así? ¿Cómo rayos es posible?, Otra vez.. no tenía idea..

Solo veía que cada cierto tiempo, metían a más gente en la habitación llena de celdas, lo curioso es que solo eran sus compañeros de clase.. no a nadie más o ajeno a la clase 78, eso lo preocupaba, ahora los únicos que faltaban eran 3.. Naegi, Kirigiri y Togami..

Los demás y últimos en entrar a las celdas les explicaron a los demás que de alguna manera los revivieron, y ahora eran experimentos de la mente maestra.. eso lo preocupo todavía más.. todos sus amigos eran ahora algo totalmente diferente, pero sabía que aún eran ellos mismos.

Se escuchó la puerta principal abrirse..

Abrió sus ojos de poco a poco, se quedó pensativo un poco al tratar de levantarse, - ¿Que habrá pasado con él? - pensó el pelirrojo. No había tenido noticias del pelirosa desde que se despertó en esa celda, solo quería saber si el mecánico se encontraba en ese lugar o no..
Esperaba que no..

Era Monokuma.. hora del desayuno..

Trato de despertar más, pero su preocupación y pensamientos no lo dejaban, sólo quería saber qué pasó con el pelirosa, o eso quería hasta que Mondo Oowada interrumpió sus pensamientos.

- He! Kuwata! Reacciona! Ya es hora de que llegue el doctor tonto-kuma.. - dijo en voz alta el chico mitad electricidad.

- Ya voy.. ya voy.., tío.. dejen dormir de vez en cuando.. - dijo el pelirrojo un tanto molesto, causando que su cabello brillará.

- Deberías de dejar ese temperamento.. no creo que te caiga muy bien.. - dijo la chica que parecía un Joker, la que una vez era la Apostadora Definitiva.

Tenia razón, no podía estarse enojando por cualquier cosa, además eso también se lo decía el mecánico, así que mejor se tranquilizó y se sentó en la cama en donde dormía, para poder ver a Mondo en la celda de en frente.

- Como estás?- preguntó el ex Motero Definitivo.

- Bien.. supongo.. - contesto el pelirrojo, rascando la parte superior de su nuca.

- Venga tío,.. no es para tanto.. - dijo el Motero, para tratar de levantarle el ánimo al pelirrojo.

- Para ti es fácil decirlo.. - dijo sin ánimo el pelirrojo.

- Puhuhuhu~ Hola a todos, qué tal?~ - dijo cantando el que una vez era un oso de peluche bicolor.

- Vaya! Ya te habías tardado doctor~ - dijo la chica que tenía doble personalidad.

- Oh??~ Bueno.. perdonen mi tardanza~ Puhuhuhu~ buenas nuevas chicos? - dijo como si nada el de cabello bicolor.

- D-donde están Naegi-kun y los otros? - preguntó la chica que está hecha mitad pez.

- Oh? Eso no importa mi querida Asahina-san.. pronto volverán con ustedes~ Puhuhuhu~ - dijo en tono algo demencial.

Después de eso empezó a dar algo de medicamento a algunos, y empezó a hacer anotaciones, hasta que volteó su mirada hacia el pelirrojo, se dirigió hacia él, con una sonrisa maliciosa.

- Oye~ Kuwata-kun~- dijo cantando el de cabello bicolor.

- Qué quieres? - dijo molestó el pelirrojo, haciendo que su cabello brillará un poco.

- Sabes~? Te tengo noticias~ - dijo de manera extraña.

- Hmm? - se quedó confundido el ex Beisbolista.

- Vienes~? - dijo cantando, mientras abría la reja del pelirrojo.

Se quedó atónito, se sentía confundido, pero algo le decía que tenía que ir, así que se levantó de su cama, y se dirigió hacia Monokuma, para que esté le pusiera una pulsera para descarga eléctrica; por si se le ocurría escapar o así.

Salieron del lugar no sin antes de que Leon se detuviera a ver a sus amigos, todos asintieron con la cabeza, no dudó en seguir, fueron caminando por un largo pasillo, hasta llegar a una puerta que ponía: DGR2: Clase 77.

Tragó saliva, sabía que no sería bueno lo que vería ahí dentro, seguramente algo parecido o incluso peor que pudieran hacerse a sus conocidos de la clase 77.
-Por favor.. dime qué no está ahí..- suplico en sus pensamientos el pelirrojo.

- Puedes pasar~ - dijo Monokuma, abriendo la puerta.

Volvió a tragar saliva, así qué pasó junto a Monokuma, ya que solo va a hacer anotaciones, y entregar medicamento.

- Oh? Que ven mis ojos! Kuwata-san!? Eres tú?- grito la chica que parecía un Wendigo, la que una vez era la Atleta Definitiva.

- Kuwata-chan?? - esa voz, le pareció muy familiar.

- Mioda!? - preguntó el pelirrojo, corriendo hasta donde estaba la voz de su amiga.

- Kuwata-chan! Qué gusto volver a oírte! - dijo la pelinegro con su tono alegre, que el pelirrojo reconocería a kilómetros.

Leon se sorprendió al ver a la chica, pero esta vez, sus ojos vendados, sus brazos todos cosidos de codo a muñeca, y con algún aparato en sus oídos.

- M-mioda.. que gustó volverte a ver..- dijo el pelirrojo con algunas lágrimas en los ojos.

Mioda no dudó en sonreír, sabía que el pelirrojo de verdad se alegraba de verla, pero sabía que podía perder toda esa felicidad si se enteraba de que le había pasado al pelirosa.

- O-oye.. él.. está aquí?..- preguntó el pelirrojo con algo de miedo en si voz.

Mioda borro su sonrisa de su cara, sabía que preguntaría, solo se dispuso a levantar su mano y apuntar al frente de ella, ahí se encontraba el pelirosa.

Leon se volteó poco a poco hasta donde se dirigía el dedo de la pelinegro, vió un tanque de agua, se asustó y espero lo peor, se acercó de a poco, para poder ver más claro, a pesar de que el tanque se veía algo oscuro, su cabello brillo un poco más para poder ver; a un chico que parecía una máquina pero también parecía un tiburón, con el cabello más de color fucsia oscuro, y esos ojos de los cuales se había enamorado.

- K-kuwata-kun?? - preguntó el que se encontraba dentro del tanque de agua, acercándose un poco para ver si no era su cruel imaginación o no.

- Souda-kun.. - dijo con voz calmada, queriendo aguantar las lágrimas.

- K-kuwata-kun.. - dijo el ex Mecánico, no podría aguantar las lágrimas, se acercó al vidrio para poner una de sus manos en el.

Leon solo sonrió, pero enseñó sus manos, brillaban muy raro, y Souda solo se dispuso a verlo con algo de tristeza y sorpresa, Leon lo último que quería era derretir el tanque de agua, así que solo sonrió.

Esos dos eran más que unidos, podían sentir la Esperanza en sus corazones, con eso ya estaban dispuestos.

Tienen la posibilidad de
   Verse otra vez...

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Ahh~ Pero como me encantó este Au~ Sinceramente..
Espero que les aya gustado,
Tal vez aga segunda parte pero con algo diferente.
Ah! El vídeo de arriba lo hice yo~~
¿Qué dicen?
¡Se despide Fer y hasta la próxima!~