🍃 : ꒰ Chapter Seven ꒱ : 🐑

Un Niki menos tonto.

Las seis de la tarde era lo que indicaba el mini reloj de ranita en la muñeca de wonnie. No habían muchas personas en el parque y el sol antes brillando en su máximo esplendor se despedía escondiéndose tras las colinas.

Heeseung debía estar allí hace media hora. Sin embargo no se molestó, ya que no estaba del todo solo, tenía a su lacayo con el.

—Fueron buenas ventas Yang —dijo Niki a su lado extendiendo una bolsa de tela hacia Jungwon—Esta todo completo, no tienes de que preocuparte.

El mayor de ambos asintió y se puso a contar la cantidad de dinero en la bolsita, a diferencia de otros días, aquel día las ganancias habían incrementado el doble.

¡Excelente!

—Gracias Niki —agradeció Jungwon con una pequeña sonrisa.

—Ni lo menciones, después de todo no tenía de otra ¿o si?

—Tienes razón, plebeyo hiciste un buen trabajo—felicitó el mayor a Nishimura revolviendo sus rebeldes cabellos.

—Ey! No soy un perro detente! —pidió Niki pero aún así Jungwon seguía jugando con los desordenados cabellos rubios.

Sorprendentemente, Niki escucho algo que jamás pensó oír.—Te ves mucho mejor ahora Kiki—le dijo el azabache. Posterior a eso escucho fuerte y vacilante la risa de Won.

—¡Won!

Aquella voz hizo a ambos salir de la situación en la que extrañamente compartían.

—Heeseung-ah, eres un irresponsable, mamá dijo que a las 5:30 debería estar tomando un baño —regañó Jungwon en cuanto la alta figura de su hermano mayor estuvo frente a el y Niki.

—Lo sé, pero en mi defensa había mucho tráfico.

—Si, lo que digas —contestó aún sin creerle—Recuerda llevar el carrito con cuidado que vale más que tu viejo auto con olor a combustible rancio.

Heeseung sintiéndose ofendido le reclamó al menor, siendo esto inútil porque Jungwon hizo oídos sordos.

—Esta oscureciendo —dijo Jungwon tocando de manera suave el hombro de Niki—¿Porqué no nos acompañas?

—¿No te molestará eso?—pregunto Niki sorprendido.

—¿Debería? —volvió a preguntar enarcando una ceja.

—Esta bien, los acompañaré.

—¡Bien! —exclamó alegre Jungwon.

La pregunta que ahora aguardaba en la mente de Niki era.. ¿Qué mosco le había picado a Jungwon?

Todo parecía tan irreal y tan fuera de si. Lo que más aterrorizaba al japonés era que ¿Porque no le disgustaba?

Ese día estaba muy extraño.

—Me alegra recibirte en nuestro hogar Riki, ¿Gustas tomar una galleta? Aún están calentitas —ofreció la señora Yang con dulzura en su voz.

Niki asintió y la muy emocionada madre de los hermanos Yang no tardó en extender la bandeja que tenía en sus manos hacia el rubio.

El menor veía a la madre de Jungwon muchas veces, por la mañana viendo a esta regar su jardín, conversar a casa de su madre e incluso cada vez que salían de la escuela. Jungwon era recogido de la escuela por su madre y lograba verla entre la gran multitud de personas, siempre pensó que sería el tipo de señora con rostro lindo y comportamiento egocéntrico, pero la mujer resultaba ser lo contrario.

Era bella por fuera como por dentro, además de que se notaba su empeño por evitar incomodar y brindar a los demás un aura de confianza. Nada parecido a los rumores que las señoras de su cuadra hablaban por las tardes.

—Muchas gracias señorita Yang —respondió ante la amabilidad de la madre.

—¿Señorita? —se preguntó a si misma, sus mejillas se pintaron de un rojo suave y con una grande sonrisa respondió —Deberías traer a Riki más seguido a casa wonnie.

El menor de los hijos de la señora Yang miró a este con el ceño fruncido—Si eso no implica morir en el intento, tal vez.

La señora Yang carcajeo y girando sobre sus talones salió de la vista de ambos niños.

Jungwon con un ademán, hizo un gesto de "Sube" y siguió al pelinegro detrás a subir las escaleras.

—¿Puedo preguntar algo? —se atrevió Niki por fin a hablar desde que llegaron a la casa del mencionado.

—Permiso concedido.

—¿Para que necesitas tanto dinero?

—Acedia estará pronto a la venta.

—¿Acedia?

Jungwon asintió.

—Es un videojuego que pronto estara a la venta y yo bueno-

—Lo quieres —dedujo Niki al  instante y Jungwon levanto un pulgar.

Jungwon abrió una puerta color blanco y le indicó que entrará. Niki supuso que era su habitación, debido a las figuras de acción en su repisa y la decoración en sus paredes.

—¿Entraras o te quedarás allí parado? —preguntó Jungwon recostado en el marco de la puerta.

—Si, ya voy —dijo y finalmente entró.

—Bueno, ¿porqué estamos aquí?—fue directo al grano Niki. Algo tenía que haber detrás de esa extraña amabilidad con la que Yang lo trataba.

Jungwon se sentó sobre su cama y palmeo el sitio a su lado indicando que se siente a su lado. Niki se sentó y espero una respuesta mientras jugaba con su dedos.

—¿Me dirás?—insistió otra vez Niki.

—¿Porqué eres tan impaciente? —pregunto Jungwon frunciendo el ceño.

—Tal vez porque ya es noche y mi madre no sabe donde he estado toda la tarde, mucho menos donde estoy ahora —contestó con obviedad Niki.

El pelinegro asintió entendiendo.

—Bueno, digamos que.. hoy nos vi reflejados a ambos.

—¿En una vitrina de alguna tienda o una ventana de algún auto?

—No seas bobo, no hablo de ese tipo de reflejo, es algo más que el exterior, ¿Entiendes?

Niki rascó su cuello tratando de descifrar las palabras de Jungwon. Pero nada se le vino en mente ni al inicio ni final de estas.

—No me sorprende, tu eres tan tonto.

—Y tu raro, habla en un idioma en el que hablemos los dos, por favor.—pidió Niki escuchando salir un gruñido de parte de Jungwon. Creo que no había sido buena idea preguntarle.

—Me di cuenta que nuestra actitud no es la mejor.

—Lo supe desde el día en que me pinchaste el balón que cayó en tu jardín.

Jungwon gruñó otra vez y contando mentalmente hasta diez se calmó —Quiero que arreglemos nuestras diferencias, sé que suelo ser muy..gruñón pero tu actitud a veces quiebra mi.. mi..

—¿Sensibilidad?

—Podría decirse que si —respondió Jungwon—Es por ello que intentaré llevarme mejor contigo.

—Supongo que tengo que decir que yo también, ¿no es así? —interrogó y el mayor lo fulminó con la mirada—S-si claro, intentaré ser un Niki menos tonto pero ya deja de mirarme así.

—¿Lo prometes?

—Lo prometo.

Jungwon pareció satisfecho y como si una especie de pacto se tratara estrecharon sus manos dispuestos a tratar de cumplir aquella promesa.

Estoy así )( de hacer una versión omegaverse, con bastante fluff y todo bien bonis de esta historia ♡

Gracias por leer ♡

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