¿Cumpleaños Feliz?

Cuando creyeron que era momento, de decidieron bajar del techo e ir a la sala, donde la fiesta de cumpleaños del menor se daba.

Muchos de sus invitados ya se habían ido, puesto que ya se estaba haciendo tarde. Quedándose solo Sunoo, Jake, unos cuantos primos de Ni-ki que se quedarían a dormir, y claro, Jungwon quien había bajado junto a el. Eran unas pocas personas pero Ni-ki sentía que así estaba bien, desde un principio debió ser así.

Tan pronto como bajaron de las escaleras, el cumpleañero fue sorprendido por los brazos de Sunoo rodearlo. Ni-ki correspondió al abrazo acompañado de una suave risa.

—Nos tenías preocupados, ¿Te encuentras mejor?—preguntó el mayor viéndolo con un poco de preocupación.

—Lo estoy, gracias por preocuparte.—mencionó separándose del abrazo.—También por esperarme, igual tú Jake hyung, no pensé que vendrías.

Jake se metió unas cuantas galletas a la boca y negó con la cabeza.—No mila persderia por nida.

—¡Hyung, no hable con la boca llena!—regañó Jungwon.

El australiano solo se encogió de hombros y el resto rió debido a lo pequeño que se sintió el mayor por ser regañado.

—¡Ya! ¡No se rían!—se quejó Shim—Sunoo, diles algo.

—Eres un comilón, hyung. Te dará diabetes por tanta azúcar.

Jake contrario al resto se cruzó de brazos indignado y se negó a dirigirles la palabra con la excusa de que iría por una soda.

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El momento de cantar el "feliz cumpleaños" no podía faltar, así que, los cánticos felicitando a Ni-ki por su día fueron infaltables.

Su rostro tenía un gesto neutral, como si no escuchará lo que el resto decía, pero nadie lo culpaba, el podía reaccionar como quisiera.

—¡Mordida!—gritó Jake.

Fue tarde cuando reaccionó puesto que cuando despertó de su viaje astral, el pastel ya había manchado parte de su boca y nariz.

Cerró los ojos de inmediato puesto que los flash de las cámaras no se hicieron esperar y las burlas de sus primos hacia él, tampoco. Sus risas escandalosas lo hicieron rodar los ojos con hastío. Era lo mismo de cada año.

Una risa en especial le llamó la atención, la conocía, pero lastimosamente la había escuchado en pocas ocasiones.

Sus ojos viajaron a través de los invitados, hasta que se encontraron con los ojos gatunos de Jungwon, entrecerrados y con el brillo de las pequeñas lágrimas que amenazaban con salir debido a la risa.

Ni-ki se quedó mirándolo hasta que el contrario apartó su mirada avergonzado. No supo cuánto tiempo se quedó mirando, pero el rubor en las mejillas de Yang lo despertaron de su ensoñación.

¿Lo había incomodado?

—Bueno, ha llegado el momento de partir el pastel.

—¡Yo quiero!—dijo efusivo uno de sus primos.

—¡Yo también!—replico Jake.

—Y yo, pero que no sea parte de la cara sucia de Riki—pidió su hermana con un gesto de disgusto en el rostro.

Ni-ki lo fulminó con la mirada pero a ella no le pudo importar menos alegando que preferia prevenir.

Todos comían de su pastel de cumpleaños entre pequeñas conversaciones y una que otra broma. Al menos así fue hasta que la madre de Sunoo, el hermano mayor de Jungwon y el abuelo de Jake llegaron en su búsqueda.

El primero en irse fue Sunoo, luego Jake y por último Jungwon quien por alguna extraña razón quería quedarse un poco más con Ni-ki. Quería asegurarse de que estuviera bien.

—¿Ya te vas?—cuestionó Ni-ki.

—Si.. Heeseung ya llegó por mí—habló jugando con sus manos.

—Oh.. comprendo. De todas formas, gracias por venir, creo que seguiría encerrado en mi habitaciones de ser que no hayas venido, pero no fue así. Aunque no nos llevábamos bien me apoyaste.. y pude disfrutar lo que me restaba de cumpleaños, enserio-

Jungwon posicionó un dedo entre los labios de Ni-ki pronunciando un "Shhh".

—Lo sé, soy el mejor—le dedicó una media sonrisa—No hace falta que agradezcas todo el tiempo, mientras te sientas mejor doy mi misión por completada. Ven aquí.

Jungwon abrió sus brazos y Ni-ki asintió acercandose algo tímido en busca de contacto.

—¡No tenemos toda la noche, Jungwon!—gritó Heeseung llamando la atención de los menores—Mañana tengo un exámen.

Toda la timidez pareció esfumarse con la aburrida y molesta voz de Heeseung. Jungwon solo rodó los ojos, lo abrazó lo más rápido que pudo y plantó un fugaz beso en la mejilla de Ni-ki.

—No más triste, ¿Ok?

Ni-ki aún perplejo asintió.

—¡Jungwon!—llamó una vez más el mayor.

Jungwon se despidió por última vez y se alejó con el ceño fruncido llegando por fin a la par de Heeseung.

—¡Desde cuando tú estudias para un exámen!—se escuchó a lo lejos la enojada voz del menor de los Yang.

Lemonade llegó a 2k de vistas, soy felicidad, muchas gracias :')