🍂;;11•Hechos que lastiman.
Papá pidió mi custodia hace unos días. Se enteró sobre lo que hizo mi mamá y decidió hacer una demanda.
Y la verdad, prefería quedarme con una madre que intentara matarme a quedarme con alguien que abusara sexualmente de mí.
Ambas estaban mal, y si soy sincero quería seguir "viviendo" con Kou.
—Amane, baja, se nos hará tarde.
—Ya voy.
Bajé las escaleras y me encontré con Kou, esperándome en la puerta para ir al instituto.
—Ya está, podemos irnos —avisé.
Salimos y caminamos unas pocas cuadras, todo era silencio. Por alguna razón, sentía que él estaba enojado conmigo.
—¿Estás molesto?
—¿Por qué lo estaría? —contraatacó, rápido.
—No lo sé —revoloteé mis ojos y miré al cielo despejado—. Hoy va a haber estrellas fugaces.
—Si… —suspiró y volteó su cara para mirarme fijamente—¿Vas a aceptar ir con tu papá?
—No —respondí de inmediato.
—Pero tu mamá intentó quemarte, y…
—Con ella estaré mejor que con él —respondí algo cortante, Kou no sabía nada de mí y no podía saber, por eso era preferible darle respuestas cortas y concretas.
Quizás mi tono de voz fue intimidante o algo así, pero cuando me estaba por ir a mi salón, entre toda la multitud de estudiantes, me preguntó.
—¿Por qué?
Sabía perfectamente a lo que se refería, pero intenté disimular con indiferencia.
—¿'Por qué' qué?
—Lo que me dijiste antes. Sobre que preferías a tu madre en vez de tu padre. ¿Por qué? —me planteó, otra vez.
Odiaba cuando se ponía tan insistente.
—...
—Amane, dímelo. Voy a retenerte aquí hasta que me lo digas.
—No te importa una mierda, déjame en paz.
(...)
Había páginas en blanco en mi vida. Por más que quería, no recordaba nada.
Después de la muerte de Tsukasa, no me acuerdo qué pasó.
Y luego de que mi papá me violó por primera vez, tampoco puedo acordarme qué pasó.
La profesora explicaba algo de física, pero estaba concentrado en mi hoja, haciendo garabatos o dibujando una luna.
Me perdí en mis recuerdos y en esas páginas en blanco que aún no estaban escritas en mi cabeza.
—Amane tiene que dejar de pensar.
Volví a escuchar esa voz, pero le resté importancia.
Aunque él esté muerto, seguía pareciendo como si estuviera vivo todavía.
—Amane va ir con Kou y le confesará su amor. Pobrecito Kou…
Su manera de hablar era retorcida, siempre lo fue.
—Amane se quedará solo… pero yo estaré ahí.
—Amane, ey, te estoy hablando. ¡Amane!
Clavé mis ojos al frente, perdido.
—¿Qué estoy haciendo… aquí? ¿Cómo llegué…? —murmuré para mí mismo.
—Amane, soy yo, Kou. ¿Cómo llegaste? Pues caminando, bah —se notaba molesto, pero no sé por qué—. Vámonos, ya tocó el timbre del recreo.
(...)
—¡Kou! ¿A dónde vamos? Llevamos más de una hora caminando, estoy cansado.
—Lo siento Amane, si te duele el tobillo puedo cargarte.
—¡No! —sacudí mi cabeza en negación, sonrojándome.
—Ah, ya llegamos.
Miré a mi alrededor, no sabía qué era ese lugar. Pero era… era hermoso.
Había un río, y por arriba cruzaba un puente.
—Me gusta el lugar, pero, ¿qué vamos a hacer aquí?
—Mamá solía traernos aquí a mirar las estrellas —suspiró—. Me recuerdas a ella; aficionada a la astronomía.
Inevitablemente me sonrojé, por el como el viento movía ligeramente sus cabellos, era una imagen hermosa.
—Entonces, ¿por eso querías que traiga mi telescopio?
—Sí —volvió a mirar el río—. Aunque estaba en duda en si traerte después de lo que me dijiste esta mañana.
—¿Qué dije? —ladeé mi cabeza, confundido.
Clavó sus ojos zafiro en mí. Algo acusante y a la vez notaba cierta melancolía.
—Amane, a veces siento que me lo haces a propósito.
—Pero Kou…
—Comencemos a armar el telescopio, puede que anochezca pronto.
Me sentía mal, porque yo no recordaba y porque eso, a él lo lastimaba.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top