"Solo eres tú, mi joya más preciosa. "

—¿Qué haces? —Kaito preguntó a su novia, que miraba el celular una y otra vez mientras estaba sentada en el sofá de la casa del mago.

—¿Puedes venir un momento? —pidió emocionada, indicándole sentarse a su lado, él obedeció. —¿Cuál es más bonito? —le mostró en la pantalla un montón de vestidos. —Ya sabes, para la fiesta de graduación.

—No sé. —murmuró pensativo. —¿Cuál es el más fácil de quitar?

—¡Ay, tonto! —respondió riendo.

—Te verías linda con cualquier vestido. —admitió volteando a verla con una sonrisa. —De verdad.

Ella río risueña.

Y Kaito le dio un beso en la frente.