Presente

Respiro con agitación. No puede ser. Me suelto del agarre de Yerik, el cual evito que asesinara al director, y retrocedo confundida.

—Tú... Estás vivo... ¿Cómo?

Sonríe.

—El mundo está lleno de sorpresas —Pasa su mano por su cabello oscuro y en su muñeca visualizo otro tatuaje de luna como el que tiene en el cuello —ni siquiera sabía que estabas aquí —Gira la vista a un costado y su sonrisa se borra —sino ni hubiera pasado —Sus ojos azules vuelven a mirarme —. Parece que el director siempre está en todo.

—¿A qué te refieres?

—No vine aquí de casualidad, tengo órdenes de vigilar al recién llegado —Se cruza de brazos y frunce el ceño —pero parece que si estás aquí, esa persona eres tú.

Lo sabía, el director no confía totalmente en mí. Pero esto, Yerik. Me supera esta situación ¿Qué voy a hacer? ¿Cual debería ser mi siguiente movimiento? Esto me desconcierta en todo sentido.