❤️

Era el día y estaba preparado para poder pasar por ello, sabía que probablemente las cosas se salieran un poco de control, pero no quería predisponerse a que las cosas realmente serían así.

Le habían quitado finalmente los puntos de su frente, por lo que ahora la herida tenía que terminar de cicatrizar. Pero en esos momentos tenía a un doctor como novio, así que realmente no se preocupaba por eso, siendo Minho quien lo revisaba a diario y lo ayudaba a curarla cuando era necesario.

Pero en esos momentos estaba un poco intimidado, ya que se reuniría con los padres de su ex y aunque sonara como una tontería, era algo que lo dejaba un poco inquieto de momentos igualmente.

― ¿Estás listo? ―preguntó Taehyung en ese momento, haciendo que el omega lo viera, ya que anteriormente había mantenido su mirada en la cuna de su bebé, aunque el cachorro no estaba ahí, sino en la cama.

―Sí, estoy listo, solamente algo nervioso―asintió con una sonrisa, haciendo que Taehyung sonriera también, colocándole una mano sobre la espalda baja contraria, para darle algo de aliento―Pero me siento más tranquilo.

Minho le había deseado suerte por mensajes, ya que no había podido ir por la mañana y no podía llegar antes de que se fuera a la reunión, porque tenía que trabajar, por lo que en esos momentos se encontraba con Taehyung, quien igualmente estaba a nada de irse a trabajar también.

Por lo que se había decidido que la reunión fuera en el centro comercial donde trabaja Taehyung, Bangnie ofreciéndose para rodear la mesa unos minutos hasta que viera que todo estaba en orden y después dejarlos solos con los padres.

Por petición de Hoseok, no iban a reunirse en un lugar demasiado ruidoso, porque a su bebé no le gustaba ese tipo de ambientes y con motivos, por lo que irían a una heladería que era bastante calmada a esa hora, porque normalmente las personas no almorzaban helado.

Ellos se leían como personas dulces, esperaba que fuera de esa forma.

―Bueno, Hannie ya está preparado para salir, lo puse muy guapo―dijo mientras dirigía la vista del omega a su bebé, el cual estaba arreglado e incluso su cabellito estaba peinado, haciendo que una risita se escapara de su boca, enamorado.

―Mi vida, te ves tan guapo―le habló con voz dulce, acercándose para poder cargarlo y besarlo en su mejilla como amaba hacerlo―Te amo, tan hermoso siempre.

Taehyung amaba totalmente cómo Hoseok le profesaba su amor a su bebé y sabía que eso pasaría cuando tuviera a su propio bebé, pensando en que sería algo precioso.

―Bien, estamos listos, entonces―asintió, acercándose para poder tomar el canguro― ¿Me ayudas, por fa?

―Claro, voy.

Le colocó el canguro correctamente para que el bebé pudiera ir seguro, ya que se irían caminando hasta el centro comercial y sería más cómodo para eso.

Cuando terminó de colocarle el canguro, se dividieron un momento para poder tomar sus cosas, Hoseok tomando la maleta de su bebé y Taehyung su mochila. No llevaban demasiadas cosas, por lo que el camino no sería incómodo.

Salieron del departamento y se encaminaron hasta el centro comercial, siendo de las pocas veces en las que Hoseok iba caminando por la calle con su bebé, siendo algo que lo ponía nervioso en ocasiones, pero intentando llevarlo de la mejor manera, sintiéndose muy bien de que Taehyung lo estaba acompañando, porque tener su apoyo era algo que valoraba muchísimo y que jamás sabría cómo agradecerle correctamente.

Cuando entraron al centro comercial, Hoseok se detuvo un momento en el pasillo del primer piso, haciendo que Taehyung se confundiera, acercándose para saber si había sucedido algo.

―Hey ¿Sucede algo? ―preguntó preocupado, pensando en que quizá se estaba arrepintiendo de ir a conocer a los adultos― ¿Ya no quieres ir?

―No, no es eso. Es solamente que estoy pensando en otras cosas y me despisto―confesó, siendo realmente una verdad, pero no siendo específico en qué era aquello que lo mantenía pensativo―Vamos.

No quería tener un momento emotivo con Taehyung en medio del centro comercial, en donde un montón de desconocidos pasaban cerca de ellos y que podían arruinar el momento, por lo que sabía que era mejor comentarle todos sus agradecimientos cuando estuvieran solos o cuando el ambiente fuera mucho más íntimo.

Taehyung asintió y retomaron el camino, yendo primero al estudio de tatuajes para dejar al rubio y después Hoseok se iría con Hanlee a la heladería, Bangnie llegaría después.

―Hola, chicos―saludó el pelinaranja con una sonrisa, colocando una mano sobre la espalda de su bebé en la cangurera, para dar una reverencia a los presentes.

―Hola chicos y bebé―saludó Bangnie, haciendo que Hoseok riera, sacando a su bebé con cuidado de la cangurera para que el más alto pudiera cargarlo, quien lo tomó con mucho cuidado y comenzó a arrullarlo― ¿Cómo ha estado este ángel?

―Muy bien, hyungie. Es un bebé muy bien portado―sonrió en grande, saludando también a los demás que se acercaban y los que se encontraban en sus puestos trabajando.

―Definitivamente lo es―asintió el barbudo, Hanlee acercándose al bebé para tocarle la pancita, teniendo cuidado para no tocarle el rostro sin lavarse antes― ¿Estás listo para ir? Yo me pasaré cuando pasen quince minutos.

―Está bien, hyungie. Gracias por eso―asintió con una sonrisa―Estoy listo, ellos ya están ahí―dijo, viendo en el celular de Taehyung que tenía mensajes de ellos, diciendo que estaban esperando en la heladería.

―Síp, están en la mesa diez―dijo mientras mostraba la fotografía en donde se podía ver el número de la mesa y unos helados.

―Oh, copa de helado de mango―se sorprendió con una sonrisa al ver su helado preferido de toda la vida― ¿Cómo saben que ese sabor me encanta?

―Porque les comenté, ellos querían saber para pedirte algo bueno antes de que llegaras, para que pudieras comerlo lo más pronto posible―dijo con una sonrisa, porque lo que había logrado hablar con los padres del chico, ellos eran muy dulces―Así que vayan. Si necesitas algo o ayuda con Hannie, no temas en venir a decirme.

―Síp, gracias a todos―sonrió, estirando la cangurera para que Hannie pudiera entrar, Bangnie siendo quien lo colocó con cuidado―Bueno, es hora.

―Vamos―asintió Hanlee con una sonrisa, encaminándose para quedar cerca del omega y ambos salir del estudio, junto al bebé―Por cierto ¿Cómo te fue con Minho?

Hoseok se había vuelto cercano a Hanlee, de alguna forma que aún no terminaban de comprender. Hoseok no tenía celular, pero por medio del teléfono de Taehyung hablaban un poco y el omega se había creado un perfil de Instagram para poder hablar, aunque no tenía fotos ni nada, solamente lo usaba para charlar, ya que podía usarlo en la computadora.

―Muy bien, hyungie. Ahora somos pareja―comentó con una sonrisa, haciendo que el alfa sonriera en grande, colocando una mano al aire para que el pelinaranja le diera los cinco, el alfa apretujándole cariñosamente la mano.

―Te lo dije, se le notaba que estaba coladísimo por ti―se encogió de hombros, porque era claro―Me alegra mucho, espero que las cosas salgan realmente bien, ya verás que todo será muy bueno para ambos, incluso para Hannie.

El omega asintió, aferrándose a la cinta de las escaleras eléctricas y su otra mano en la espalda del bebé.

―Lo sé, realmente él siempre ha sido muy cercano a nosotros desde antes, por lo que no han demasiada diferencia, más que...ya sabes, besos y eso―sonrió apenado, haciendo que el alfa tatuado riera ante aquello.

―Claro que eso es diferente, pero es bueno que te des la oportunidad de amar sinceramente―le acarició el cabello, no queriendo despeinarlo, por lo que lo hizo cuidadosamente―Por cierto, quiero pedirte que tengas cuidado.

Hoseok se bajó de la escalera eléctrica con cuidado, viendo con cuidado a su mayor.

― ¿Por qué?

―Porque sus padres se muestran dulces y puede que en verdad sean buenas personas, pero ten cuidado con lo que te digan o de lo que te intenten convencer. Nada de mencionar a su hijo como alguien que puede cambiar o que merece una segunda oportunidad, menos que te pidan que su hijo pueda ver al bebé―Hoseok asintió, porque definitivamente eso podía pasar y claramente no llevaría a nada bueno―Si eso pasa salte de la heladería y ven con nosotros, por favor. No dejes que su dulzura te engañe.

Hoseok asintió, porque claramente aquello tenía sentido, al igual que la preocupación de su amigo, porque esa dulzura podía ser falsa.

―Sí, estaré pendiente de eso. Igualmente ahora analizo más esas cosas, sabes que no pondría en riesgo a mi bebé, hyungie―le sonrió para calmarlo un poco, el tatuado suspirando y asintiendo.

―Bien, eso es importante.

Llegaron finalmente a la heladería y lograron ver la mesa donde estaban los padres desde la entrada, por lo que el pelinaranja suspiró, dándose fuerzas.

―Bangnie vendrá pronto, no temas solo levantarte ante cualquier cosa y si todo va bien, levanta el pulgar para que nos sintamos tranquilos―Hoseok atendió a la indicación.

―Sí, hyungie. No te preocupes, siento que todo saldrá bien.

Después de dar aliento y calmar al preocupado alfa, Hoseok se encaminó dentro de la heladería, explicándole a la mesera que lo estaban esperando, por lo que solamente se adentró hasta la mesa número diez.

Sentía a su bebé, apegarse a su pecho, por lo que lo abrazó mientras avanzaba hacia la mesa, pronto la mirada de ambos adultos colocándose sobre él, haciendo que se pusiera un poco nervioso.

―Hola ¿Son los señores Choi? ―preguntó tímido, aunque era claro que eran ellos, porque era el número de la mesa y veía la gran copa de helado de mango que estaba esperando por él.

Los adultos se levantaron con una sonrisa, dando una pequeña reverencia, la cual Hoseok correspondió.

―Sí, somos nosotros, un gusto conocerte finalmente, Hoseok―comentó la mujer, haciendo que el pelinaranja sonriera.

―Igualmente―sonrió, colocándose un poco de lado para que pudieran ver el rostro del bebé―Él es Hannie, probablemente esté algo calmado, porque tiene sueño.

―Oh, es un bebé hermoso―chilló la madre, el padre asintiendo ante aquello, viendo al bebé con los ojos abiertos y su puño en la boca, atento a lo que sucedía a su alrededor―Se parece mucho a ti, es precioso.

Hoseok sonrió ante aquello.

―Gracias.

―Por favor, toma asiento. Le preguntamos a tu amigo Taehyung sobre tu helado favorito y nos dijo que era el de mango, así que te pedimos esta copa. Si quieres algo más puedes comentarnos, estamos muy contentos de poder conocerlos.

Hoseok se sentó con cuidado, quedando un poco separado de la mesa, ya que su bebé estaba al medio, por lo que se colocó un poco de lado para poder quedar un poco más cerca de la mesa.

―Por cierto, presentándonos directamente, yo me llamo Hyori y mi esposo se llama HaJoon. No habíamos logrado hablar contigo directamente―le sonrió la mujer, notándose bastante contenta y con los ojos brillantes.

―Un gusto conocerlos, pues soy Hoseok, aunque ya lo saben―sonrió de lado, los adultos asintiendo.

Hoseok tomó la cuchara que estaba al lado de la copa y tomó un poco del helado, porque sinceramente tenía muchas ganas de comerlo.

―Antes que nada, queremos disculparnos por todo, por todo lo que nuestro hijo te hizo―comenzó el padre, haciendo que Hoseok suspirara, saboreando el helado en su boca, pero prestando atención―Realmente nosotros no sabíamos nada, él siempre fue alejado a nosotros y no nos contaba nada de lo que hacía, así que no pudimos hacer algo al respecto. Pero si hubiéramos sabido, habríamos hecho todo lo posible para sacarte de ahí―dijo con voz sincera, haciendo que el omega sonriera, porque podía ver el dolor en los ojos de los padres, quienes estaban notablemente decepcionados.

―Ustedes no tienen la culpa, fue algo muy complicado―asintió, haciendo que los adultos se sintieran un poco más calmados.

―Lo sabemos, pero igualmente nos sentimos muy decepcionados por todo lo que te hizo nuestro hijo, especialmente porque no pensábamos que fuera una horrible persona―en ese momento el rostro de los adultos se arrugó.

―C-Cuando nos mostraron tus fotos, en el proceso de la denuncia, nos quedamos sin palabras, sentimos que nuestro mundo se cayó por completo―confesó HaJoon, sintiendo un repelús al recordar cuando les presentaron el caso y las pruebas―Fue demasiado imprevisto e impactante que no supimos qué hacer, además de llorar.

Hoseok apreció aquello, porque estaban siendo muy sinceros y contándole cosas más personales, siendo ese un detalle que apreciaba totalmente.

―Queremos aclarar que nosotros no estamos buscando llevarte con nuestro hijo, aunque sería imposible porque jamás saldrá de prisión, pero igualmente no lo haríamos si estuviera fuera―aclaró la madre con ambas manos sobre su cuerpo, mostrando que era sincera―Solamente queremos conocerte por todo esto y queríamos conocer a tu bebé porque, después de todo, somos prácticamente sus abuelos ¿No?

Hoseok asintió, porque, aunque odiaba a su ex, eso no significaba que debía odiar a su familia, quienes nada de culpa tenían.

―Lo son, son sus únicos abuelos, de hecho―dijo con una sonrisa apenada, pero siguiendo con su helado para dejar el pesar.

―Oh ¿En serio? Tus padres...―quiso saber un poco la mujer, pero tampoco quería ser irrespetuosa.

―Ellos se alejaron desde el primer momento, me dijeron que ya no me consideran su hijo y demás cosas. Así que claramente ya no los tomo en cuenta, menos para la vida de mi Hannie―explicó, los adultos comprendiendo.

―Oh, lamentamos eso, debió ser muy difícil todo―Hoseok asintió, pero se encogió de hombros.

―Lo fue, pero ahora estamos bien, muy bien.

En ese momento Hannie estiró su mano, la cual tenía el cascabel y la colocó sobre la mandíbula de su padre, haciendo que el omega lo viera y le dejara un beso en la mano, como solía hacer siempre que el bebé colocaba sus manos sobre sus labios.

―Mh, sé que nos acabamos de conocer, pero...―comenzó la mujer, haciendo que el pelinaranja viera nuevamente a los adultos―Quería saber si puedo cargar al bebé un momento, claramente si tú lo aceptas y si él se siente cómodo, porque no nos conoce y entiendo que pueda asustarse un poco.

Hoseok asintió rápidamente, dejando la cuchara sobre la mesa.

―Claro que pueden, es posible que llore, porque no termina de acostumbrarse a los olores desconocidos de repente, pero no se angustien. Es un bebé muy calmado―dijo mientras desabrochaba con cuidado la cangurera, para poder sacar al bebé.

―Muchas gracias por permitirnos―agradeció el padre―Por cierto ¿Qué te sucedió en la frente?

―Oh, me caí en el baño y me abrí la frente―comentó mientras soltaba una risita, los adultos realmente preocupados―No se preocupen, ya pasó y no fue tan grave.

Sacó a Hannie con cuidado y el bebé comenzó a mover sus piernas y manos con emoción, jadeando encantado cuando comenzó a recibir besos en su mejilla y su cabellito fue aplanado con cuidado.

―Oh, es tan bonito―jadeó la mujer mientras se levantaba de la mesa, Hoseok imitándola para poder darle al bebé―Diosa luna, esta criatura tan hermosa.

Hannie se vio algo extrañado ante el olor de la omega que lo había tomado, manteniéndose un poco quieto y con una mueca como si quisiera llorar, pero no haciéndolo porque lograba sentir aún el olor de su padre.

― ¿No le molesta el cascabel? ―preguntó el adulto, su esposa sentándose a su lado con el bebé en brazos, el alfa acercándose para poder verlo bien.

―No, se ha acostumbrado totalmente a él, lo tiene desde el día en el que salió de la incubadora―explicó con una sonrisa, manteniendo una vista sobre su bebé por cualquier cosa―Ha sido de mucha ayuda y él lo ama.

―Oh, eso es una alegría―comentó la madre demasiado enamorada del bebé― ¿Sabes si existe algún tratamiento u operación que se le pueda realizar en el futuro para ayudarlo?

Hoseok apretó los labios.

―No, dentro de las predicciones se ha dicho que es algo permanente―se encogió de hombros, porque realmente no le molestaba―Mi pareja es doctor y dice que dentro de estas causas, no existe un tratamiento para que pueda hablar.

Los adultos se sorprendieron un poco ante aquello, pero no despegaron la vista del bebé, quien se sentía un poco más cómodo.

― ¿Tienes pareja? Qué bueno y más que sea un doctor―dijo el padre mientras le acariciaba la pancita al bebé, quién tomó su mano con cuidado, haciendo que el adulto jadeara emocionado.

―Sí, realmente estoy casi rodeado de médicos, no de forma tan literal―soltó una risa―El novio de mi amigo Taehyung, con quien hablaron, es un doctor también.

―Vaya, qué alegría. Siempre es bueno tener un doctor en la familia, en especial si son más―sonrieron ambos adultos.

Hoseok se sintió muy cómodo en ese momento, su vista solamente desviándose de los adultos cuando vio a Bangnie pasar por la mesa, por lo que le levantó los pulgares con una gran sonrisa, para que subiera que todo estaba excelente.

El barbudo asintió con una sonrisa, acercándose al mostrador porque igualmente compraría helado.

―Debemos admitir que compramos unas cosas para el bebé, esperando que aceptaras conocernos para poder dártelas, incluso algunas cosas para ti―dijo el padre, haciendo que la mujer asintiera rápidamente―Por si puedes pasar por ellas o nosotros podemos ir a recogerlas, no sé si manejas o tu novio lo hacen, para poder llevarlas.

―Mi novio conduce, solamente que por el momento estoy esperando a poder mudarme de departamento. Por ahora vivo con mis amigos y trato de no llenar su departamento con muchas cosas, por lo que creo que sería bueno esperar un poco. En estos días he estado viendo departamentos en el mismo edificio, para poder mudarme con Hannie.

―Eso es maravilloso, si necesitas ayuda en algo, puedes decirnos. Nosotros realmente queremos que nos tomes en cuenta las veces que necesites, ya sea por Hannie o por ti―ambos adultos asintieron, haciendo que Hoseok se sintiera muy contento, porque le gustaba saber que había personas que lo apoyaban.

Dio algunas cucharadas a su helado, porque no quería que este se echara a perder por no comerlo.

―Muchas gracias, en verdad―les dio una pequeña reverencia―Solamente quiero pedirles un favor.

Aquello hizo que ambos adultos lo vieran.

―Yo seré el único que le comentará a Hannie sobre su padre biológico, cuando yo considere correcto y de la forma en la que yo lo vea mejor. No quiero que alguien más le comente sobre esto sin que yo sepa, porque por el momento él se apega mucho a mi pareja y seguirá siendo así―los adultos se vieron entre ellos unos segundos, pero no tardaron en asentir, sabiendo que la petición tenía sentido―Sé que es su hijo, pero no lo quiero en la vida del mío. Les daré el voto de confianza a ustedes, pero entiendan que estoy en un punto en el cual no deseo arriesgar nada.

―T-Te entendemos, en verdad lo hacemos. Sabemos que hizo cosas horribles e imperdonables, así que es completamente comprensible eso y créeme que no vamos a hacer nada que no debamos―asintió―Incluso en nuestra casa no hay rastros de él, ni fotos o su habitación. Todo nos cayó como un balde de lava hirviendo y no queremos que este bebé tenga que ser parte de eso.

Aquello hizo que Hoseok se sintiera a gusto.

―Bueno, ahora a comer los helados antes de que derritan―dijo el hombre con una sonrisa, no soltando su mano, la cual estaba atrapada entre las manos del bebé, comiendo con la que tenía libre.

Después de comer sus helados, se quedaron varios minutos más charlando sobre cómo iba la vida del pelinaranja y lo que planeaba hacer, los adultos alentándolo a realizar todo aquello que deseaba y pidiéndole al pelinaranja que les recomendara un curso para aprender lengua de señas también, haciendo que el pelinaranja sonriera contento.

Tuvo que tomar a Hannie en brazos cuando el bebé comenzó a llorar, por lo que lo tomó con cuidado y lo colocó en la cangurera, para hacerlo dormir.

―Por cierto, Hoseok―dijo el padre, haciendo que el omega lo viera―Sé que tú descartaste el que nuestro hijo pagara una pensión mensual para los cuidos del bebé.

Hoseok no comprendió a qué venía el tema, pero asintió.

―Sí.

―Bueno, nosotros pedimos que te la hagan llegar igualmente y ellos solamente esperan tu aprobación. Aunque no sea algo que te guste, es bueno que él también aporte, cariño―dijo la madre, haciendo que el pelinaranja desviara la vista por un momento, pensando en si realmente valía la pena―Él solamente va a trabajar dentro de la cárcel y te darán de ese pago mensualmente, si deseas que él no lo sepa, se mantendrá en secreto el que te están mandando ese pago mensual, pero piénsalo.

Hoseok asintió.

―Lo voy a pensar, les comentaré cuando lo decida―les dio una sonrisa, haciendo que los adultos sonrieran también―Bueno, no tengo celular, pero creo que es un buen momento para tener uno, ya me siento mejor―asintió, mordiéndose el labio mientras buscaba con la mirada la tienda de celulares―Le diré a mi amigo que vayamos a comprar uno y les pasaré mi número con Taehyungie.

―Perfecto, gracias por eso, estaremos ansiosos de comunicarnos contigo.

La reunión había salido excelente, por lo que Hoseok estaba muy contento, pensando en que lo mejor era pedirle a Hanlee que lo acompañara a comprar un celular, porque ya era momento de tener uno sin sentirse asustado de hacer algo incorrecto.