❤️‍🩹

Jadeó con dolor cuando sintió su nariz punzar cuando tomó la maleta entre sus manos, sabiendo que no tendría que estar levantando maletas, pero queriendo ayudar a la pareja para que no se cayeran en el camino a la camioneta.

―Taehyungie, no tienes que levantar maletas―se quejó el rubio mientras corría hasta el castaño, para poder quitarle la maleta de las manos, la cual pesaba debido a toda la ropa que habían colocado dentro―Te dará dolor de cabeza.

―Lo sé, pero quería ayudarlos con tantas maletas―habló bajo mientras entregaba la maleta, sintiendo su cabeza punzar, pero intentando ignorarlo para no preocupar a los demás.

En ese momento su nariz se veía espantosa, a criterio de Taehyung, por lo que andaba por la casa con una mascarilla puesta, para que no fuera tan evidente el hecho de que tenía una pelota amoratada sobre su rostro.

No le gustaba verse en el espejo así, por lo que no se la quitaba hasta que fuera hora de ir a dormir o unos minutos para poder respirar fuera de ella. Igualmente se la quitaba cuando tenía que colocar la compresa fría, pero siempre en privacidad.

―Nos ayudaste mucho cuando comenzaste a empacar todo, así que no debes preocuparte por eso―lo confortó Yoongi, dándole caricias en la espalda, para que no sintiera que no había ayudado en nada, cuando había sido todo lo contrario.

―Bueno, pero igualmente quiero seguir ayudando―suspiró, tomando en su lugar una de las maletas que tenía ruedas debajo de la misma, para poder llevarla sin que su cabeza doliera más o que su nariz estuviera a nada de explotar― ¿Todo está listo?

―Sí, tenemos todo y vamos a buena hora para evitar el tráfico, gracias por habernos ayudado o no terminaríamos nunca con tantas cosas―dijo Jimin mientras soltaba una risa, tomándole una mano al castaño, para que los acompañara hasta abajo―Vamos.

Ese día Taehyung se quedaría solo en el departamento, ya que Jungkook había decidido quedarse con su hermano menor para ayudarle con matemáticas, siendo la materia débil del omega, por lo que no podría llegar ese día.

Eso también había sido tomado como una oportunidad para el castaño, porque él sabía que en algún momento de su vida se iría del departamento de la pareja para poder vivir solo, como el omega independiente que quería ser. Por lo que tenía que practicar el quedarse solo sin ponerse a llorar por el miedo, porque de esa forma no podría avanzar ni mejorar.

Igualmente, sabía que Jungkook tenía cosas más importantes que hacer que cuidarlo como si fuera un bebé que no podía cuidarse por su cuenta.

Colocaron todas las maletas dentro de la cajuela y la pareja se subió a la camioneta, el omega castaño apoyándose sobre la ventana abierta del lado de Jimin, para poder despedirse.

―Los llamaré en una hora, para saber cómo van en el viaje y cuando lleguen finalmente llámenme por favor, quiero saber que todo esté bien en el viaje―pidió con una sonrisa, pero notándose que en realidad estaba angustiado y preocupado, porque aunque siempre viajaran a esa misma dirección, temía que algo les pasara.

―Claro que sí, igualmente te mandaré fotografías del paisaje, para que veas con nosotros―le dio un ligero apretón en la barbilla al castaño, haciendo que sonriera por debajo de la mascarilla―Y date un respiro de esta cosa, no es bueno que la uses todo el día dentro de casa, aunque te sientas avergonzado por la hinchazón.

―Bien, me la quitaré―habló suave, alejándose del auto para que pudieran encenderlo―Viajen con cuidado y disfruten mucho, los amo.

Una vez más, se sentía como un hijo despidiendo a sus padres.

―También te amamos y trata de descansar, que esa nariz tan bonita que tienes debe curarse poco a poco―dijo Yoongi, señalando al omega castaño para que tomara en serio sus palabras, el castaño asintiendo.

―Lo haré.

Vio la camioneta avanzar hasta salir finalmente del estacionamiento subterráneo, soltando el aire que había contenido en su cuerpo, apretando las manos ante el nerviosismo.

Subió en el ascensor al departamento y cerró la puerta con seguro, siendo aquello la primera cosa que le brindaba tranquilidad en medio de la soledad.

―Gatitos bonitos, ustedes con mi compañía constante en esta semana―habló mientras se acercaba al sofá grande, en donde ambos mininos estaban descansando tranquilamente―Espero no ser una molestia en medio de su tranquilidad, si es así, denme un golpe con la pata para que los deje en paz―habló mientras tomaba a Miu, quien no se quejó, sino que comenzó a ronronear totalmente a gusto.

La gatita se subió sobre el pecho del omega, para poder mantenerse al lado de su hermano y con las caricias ajenas.

Decidió que dormiría un momento, especialmente porque sentía su nariz punzar y su cabeza doler, por lo que era mejor descansar antes del almuerzo, en donde tenía que calentar lo que Jin le había llevado.

Antes que nada, sacó su celular de su bolsillo y vio las notificaciones, en donde solamente había algunas de YouTube, juegos que había instalado y unos pocos de Kakaotalk. Entró a Kakao y vio mensajes de Jungkook, por lo que entró a su chat rápidamente.

Jungkookie hyung:

Espero que no estés por el departamento con una mascarilla puesta, de verdad espero que no sea así.

Igualmente ¿Ya se fueron los chicos? Según me dijeron se irían aproximadamente a esta hora.

10:13 am.

Tú:

¿Has instalado alguna cámara en el departamento o cómo sabes que estoy usando una mascarilla? A veces me das miedo, hyung...

Síp, los chicos ya se fueron hace poco tiempo, el lugar se siente solo sin ellos, aunque se la pasan la mayoría del tiempo fuera de casa.

10:56 am.

Jungkookie hyung:

No necesito una cámara, ya conozco muchas cosas de ti, así que puedo adivinar algunas cosas sin mucho esfuerzo. Por favor quítatela, debes dejar que la nariz esté al aire libre para que cure correctamente y no vale la pena que la cubras por nada :c

¿Cómo te sientes? ¿Te duele menos la cabeza o sigue molestando?

10:58 am.

Tú:

Está bien, me la quitaré :c

Duele un poco y la nariz también, por eso voy a dormir un rato antes de la hora del almuerzo, para ver si el dolor puede disminuir aunque sea un momento.

¿Cómo va el estudio con Soobin?

11:00 am.

Jungkookie hyung:

Vamos muy bien, pero de la nada se puso caprichoso y comenzó a pedirme helado como premio por realizar bien sus ejercicios.

<Foto adjunta>

Míralo con esa gran sonrisa en su rostro colorado, como si no hubiera casi llorado minutos atrás para que consiguiera helado para él como todo un bebé llorón.

11:08 am.

Taehyung soltó una risa ante la fotografía mientras se quitaba la mascarilla, dejándola sobre la mesa del centro.

En la fotografía se veía a Soobin sonriendo mientras sostenía un vaso con helado, notablemente orgulloso de haberlo obtenido. Su rostro se notaba colorado y había varios papeles regados sobre la mesa, por lo que era bastante claro que seguían estudiando.

Se veía una foto muy hermosa y por un momento deseó el haber tenido a alguien como Jungkook o como Soobin en su familia, que lo apoyara y amara de forma tan sincera y por sobre todas las cosas.

Tú:

Aww, se ve que se está esforzando mucho para estudiar y se lo merece, sé comprensivo con el pobre Soobin, que estuvo enfermito recién.

11:12 am.

Jungkookie hyung:

Claro, síguelo apoyando mientras yo batallo solo :c

Por cierto, Soobin pregunta si podemos visitarte hoy a la hora del almuerzo, quiere ver cómo estás y cuidarte un poco. Le conté lo que pasó, espero que no te moleste y me disculpo si es así.

11:14 am.

Tú:

No me molesta, hyung. Entiendo que se lo comentes, así que no te disculpes por eso. Yo en realidad me gustaría verlos, pero no quiero interrumpir a su tarde de estudios, en especial porque mañana es la última prueba de Soobin.

¿Por qué no nos vemos mañana? Así podemos celebrar un poco la finalización de las pruebas de Soobin, para que se sienta algo recompensado después y así podemos vernos. Dile que no se preocupe, que mi cara no está en su mejor momento, pero que mejora poco a poco.

11:18 am.

Jungkookie hyung:

Nos parece una buena idea, de hecho ¿No te gustaría quedarte mañana con nosotros? Como una pijamada.

Soobin me está amenazando con su cuchara llena de baba para que te invite, yo le dije que tal vez no te sientas del todo cómodo quedándote, pero esa suciedad me hace sentirme amenazado.

<Foto adjunta>

A mí también me gustaría que te quedaras, pero ya sabes, no quiero que hagas algo con lo que no te sientes completamente cómodo.

11:20 am.

Tú:

Hyungie, siempre eres tan considerado conmigo y lo aprecio mucho.

Me gustaría, en realidad. Jamás he ido a una pijamada, así que me emociona tener la primera con ustedes :D

Prepararé mis cosas para mañana y estaré pendiente para cuando me digas que vienes por mí.

11:23 am.

Taehyung comenzó a sentirse realmente emocionado en ese momento, porque sabía que ambos hermanos lo tratarían hermosamente en su visita y el hecho de poder tener su primera pijamada era algo que lo hacía querer saltar de la emoción, pero no haciéndolo porque sabía que su cabeza dolería más si daba un brinco.

Siguió hablando por varios minutos con Jungkook, quedando con que iría por el a su departamento por la mañana, para que pudiera instalarse correctamente en el departamento y después irían al instituto por Soobin, para que pudieran almorzar.

En ese momento olvidó es estado hinchado y probablemente desagradable de su nariz, solamente pensando en que, el día siguiente sería uno muy alegre para él.

Descansó por varias horas, los mininos manteniéndose sobre él para aprovechar su calor corporal y brindándole al mismo tiempo el propio.

Cuando se despertó a las tres de la tarde, se quiso golpear a sí mismo al no haber colocado alguna alarma para poder tomarse sus medicinas, pero rápidamente colocó a calentar la comida que le había dejado Jin y la disfrutó en la sala, mientras veía una película de Disney por el televisor, soltando risitas suaves de vez en cuando.

A esa hora no le daba tanto miedo el andar solo por el departamento, al menos no como antes. Pero sabía que una vez llegara la noche, las cosas serían distintas y su miedo no lo dejaría tranquilo.

―Quizá deba hacer limpieza mientras tanto, aprovechando que los chicos no están―susurró cuando terminó de lavar los platos, pensando que sería una gran idea, en especial porque al día siguiente se quedaría en el departamento de los hermanos―Sí, eso haré.

Su pensamiento de descansar quedó totalmente de lado, se supone que tenía que reposar para que pudiera sanar correctamente, pero en ese momento la necesidad de mantener su mente distraída era mayor, por lo que tomó los elementos de limpieza, siendo aquellos la espiradora y el trapeador.

Colocó música en el televisor de la sala y comenzó a aspirar los muebles, intentando sacar de mejor manera los pelos de gato que se aferraban a las telas, los cuales no eran demasiados, pero que tenían que quitar para que no se pegaran a su ropa después.

Los gatos lo seguían por todo el departamento, el menor limpiando desde el salón hasta las habitaciones, por lo que todo quedaba realmente limpio e intentaba que los gatitos no fueran dejando pelos en medio de sus caminatas.

Trapeó finalmente y casi le da un ataque de tos cuando inhaló demasiado aroma del desinfectante, teniendo que tomar agua para que la tos dejara de molestarlo y después pensó que era mejor idea el diluir el desinfectante con agua, para no morir ahogado por el olor.

Su cabeza comenzaba a doler, por lo que terminó con la limpieza rápidamente y dejó los utensilios en el cuarto de lavandería, para poder tomar una ducha y descansar.

―Muy bien, hemos avanzado muy bien―susurró mientras se adentraba a la ducha, comenzando a pasar el jabón de cuerpo con la esponja, comenzando a sentirse relajado por el baño― ¿Cuándo será el día que dejaré de hablar solo? No lo sé, realmente no creo que ese día llegue pronto, pero supongo que es reconfortante el tener mi propia voz para escuchar en medio de la soledad.

Sintió ardor comenzar a expandirse en sus brazos, haciendo que se extrañara, porque hace mucho tiempo no sentía algo así en su hora de baño, en especial porque sus heridas estaban siendo tratadas o ya habían sido curadas adecuadamente.

― ¿Qué sucede? ―susurró, intentando ver la parte de su brazo, por debajo de su codo, logrando ver unas heridas considerables que jamás había notado anteriormente― ¿Uh? ¿Y esto?

Terminó de enjuagarse con agua para poder salir de la ducha y verse las heridas en el espejo del baño, notando que las heridas eran más grandes de lo que había pensado en un principio y se veían recientes.

No recordaba el haberse lastimado en algún momento e igualmente no podía sentir dolor antes de haber colocado el jabón, por lo que todo era demasiado raro para él. No parecían heridas de gato, porque si fuera así las líneas serían desiguales, pero eran rectas, como si hubiera tirado de su piel e hincado sus uñas.

Intentó pensar en qué podría ser la causa de las heridas y recordó que, ese día al despertar de su siesta, había despertado sudado y ligeramente frío, seguramente por haber tenido una pesadilla como de costumbre.

En muchas ocasiones sus pesadillas no lograban despertarlo de forma violenta, sino que solamente abría sus ojos, sin una pizca de sueño en su cuerpo y con la frente fría y sudada. Por lo que podía ser que en esa ocasión eso fuera la causa de su despertar extraño, no logrando recordar su sueño o pesadilla, pero sí notando que no había sido agradable debido a sus heridas.

Respiró hondo y dejó salir el aire, pensando en que ya tenía suficientes heridas en su cuerpo como para crearse más de forma inconsciente.

Debía hablar eso con su psicóloga, no quería hacerse daño.

Se colocó una pijama cómoda, siendo su favorita, la que consistía en una camisa manga larga y un pantalón, ambos de algodón y con bonitas ilustraciones de osos pandas. No la usaba desde que comenzó a vivir con Hanju, porque el alfa solamente lo dejaba dormir con las piernas al aire, con ropa interior y una camiseta del alfa.

En realidad ese conjunto le gustaba mucho, utilizar camisas grandes y sin nada más que ropa interior abajo no le incomodaba, pero las cosas cambiaban cuando no le dejaba usar nada más que eso en días de frío, prohibiéndole el usar sus pijamas favoritas, las cuales amaba colocarse los días de viento helado.

Se abrazó a sí mismo, sintiéndose cálido.

Cuando se acercó a la nevera para poder buscar helado, su celular comenzó a sonar, pensando en que tal vez era Jimin.

Correteó hasta la mesa del centro para tomar su celular, contestando la llamada al confirmar que era él.

―Hola.

― ¡Taehyungie! ¿Cómo va todo por ahí? ―se le escuchaba emocionado, siendo una señal de que ya estaban en el lugar o cerca de este.

―Todo normal ¿Y ustedes? ¿Ya llegaron a la cabaña?

―Sí, todo está hermoso como siempre y realmente estamos emocionados. Ojalá hubieras venido con nosotros, estoy seguro de que todo te encantaría aquí―Taehyung suspiró, porque sus amigos lo amaban tanto, que no dudaba que sus palabras fueran sinceras.

―Otro día será, por ahora, disfruten esto como una luna de miel sin necesidad de un casamiento formal―soltó una pequeña risita, sintiendo ardor en sus heridas recientes, cerrando ligeramente los ojos cuando recordó que no colocó pomada sobre ellas.

―Ojalá pudiéramos casarnos, pero tienes razón, esto puede ser como una luna de miel―la risita de Yoongi se escuchó al fondo, haciendo que Taehyung se sintiera feliz.

―Bueno, no quiero quitarles más tiempo de sus vacaciones. Disfruten y descansen, coman rico y tomen muchas fotografías―pidió mientras se sentaba en el sofá recién limpiado, viendo a los mininos dormir en sus camitas.

―No nos quitas tiempo, pero bueno, te dejaremos descansar un poco mientras nosotros nos acomodamos aquí ¡Te escribimos luego!

―Nos leemos luego y disfruten mucho.

Colgó la llamada y vio la pantalla de su celular, su fondo de pantalla siendo una fotografía de los gatitos cuando llegaron a la casa, haciendo que sonriera de forma inconsciente.

Para pasar el tiempo antes de tener que ir a dormir, colocó una película que realmente no terminó de comprender, pero que lo mantuvo entretenido dos horas y media, en donde soltaba pequeñas risas ante los chistes de los protagonistas.

Lo que sí pudo ver en la película, fue la presencia de una familia tan bonita, que Taehyung solamente pudo sentir envidia por los personajes ficticios, teniendo tantas ganas de poder pedir una familia tan bonita como esa o al menos una que le tuviera un mínimo de aprecio.

Sería algo lindo, pero sabía que en momentos pedía cosas imposibles de obtener.

La alarma para su medicina para antes de dormir se dejó escuchar, por lo que apagó el televisor y comenzó a apagar las luces, dándoles mimos a los gatitos para que lo acompañaran a su habitación y descansaran con él, para que no se sintiera muy solo.

Cerró la puerta y rápidamente encendió la lampara de noche, para después ir al baño para poder cepillar sus dientes y lavarse la cara, en esa ocasión sí recordando el colocarse la pomada sobre sus heridas y jadeando bajito ante el ardor.

Pensaba en que quizá dormir con una camisa manga larga ayudaría a que no volviera a dañarse mientras dormía.

Se acomodó sobre la cama y se arropó, sintiéndose cómodo.

Comenzó a ver algunos vídeos en su celular, sabiendo que si el sueño llegaría a él, se dormiría aunque estuviera viendo vídeos en su celular.

Sus párpados comenzaron a cerrarse mientras veía a un gatito ser rescatado de un alambre de púas, su celular cayendo a su pecho y sus brazos dejándose caer lentamente sobre su cuerpo, el sueño llevándolo sin remedio.

En muchas ocasiones no lograba recordar lo que soñaba, pero en otras sí podía hacerlo y solían ser pesadillas, por lo que aquello le frustraba considerablemente.

Dentro de la neblina de su sueño, pudo visualizarse a sí mismo en su anterior casa, se encontraba lavando los platos como todas las mañanas, seguramente después de haber hecho el desayuno para Hanju.

Solamente podía ver aquella parte de la cocina, los demás espacios estando llenos de neblina, como si no existieran realmente.

De pronto, vio a Hanju entrar a la cocina y golpearle el trasero con fuerza y nada de cariño, por lo que el omega se sobresaltó y dejó caer uno de los platos, haciendo un ruido espantoso contra el lavaplatos, pero tomándolo rápidamente para ver que no se hubiera dañado.

― ¿Te preparaste para mí? ―escuchó la voz grave, el alfa tomándolo por la cintura y apegando su pecho a la espalda contraria.

―No he podido, tenía que lavar esto―escuchó su propia voz, siendo un tono apagado y sin emoción alguna.

―Sabes que no me importa y que tienes que prepararte cuando yo te diga―gruñó, comenzando a aplicar más fuerza en el agarre de las caderas, siendo doloroso―Si no te preparas, tendrás que aguantarme de golpe, sabes que por mí no hay diferencia.

Aquello hizo que sintiera tanto temor, su cuerpo comenzando a liberar feromonas llenas de miedo y un grito agudo saliendo de su garganta cuando Hanju lo tomó con fuerza y lo hizo girarse sobre su lugar, para que quedaran frente a frente.

―Ahora vas a tomarme, lo quieras o no―de repente las manos ajenas se colocaron sobre el cuello de Taehyung, comenzando a presionar con fuerza, sonriendo ante el rostro lleno de angustia del menor, quien intentaba liberarse mientras colocaba sus manos sobre las propias.

Intentaba llamarlo por su nombre para que lo soltara, pero el agarre era tan fuerte que no lo dejaba decir nada, solamente sintiendo cómo poco a poco su cuerpo comenzaba a quedarse sin oxígeno, sintiendo esa sensación de estar cerca de la muerte que había experimentado anteriormente.

Un jadeo ahogado salió de su cuerpo como último recurso, para después dejar de patalear y luchar, su cuerpo simplemente dejándose caer ante el peso muerto. Hanju vio el cuerpo en el suelo y comenzó a reír con fuerza, pasando sus manos por su cabello mientras se regocijaba por sus acciones.

En ese momento la realidad llegó a su cuerpo y logró despertarse golpe, sobresaltándose y sentándose sobre la cama en medio de jadeos asustados y lágrimas bajando por sus mejillas, ante la horrible pesadilla que había tenido.

Miró la hora, eran a penas las dos de la madrugada, pero sabía que por mucho que lo intentara, no podría volver a dormir.