ღ18

❤️‍🩹 

Agradecía en ese momento que sus amigos supieran sobre la existencia de sus medicamentos para el sueño, porque estaba seguro de que si no lo hubiera tomado la noche anterior, no hubiera podido conciliar el sueño ni siquiera un momento, ya que los nervios y la angustia lo superaban en ese momento.

Era el día, el día en el que finalmente tendría que ver a sus padres después de tanto tiempo, en donde sabía que no sería una conversación como las anteriores, en donde el foco de atención era su relación con Hanju y los futuros cachorros que pudieran tener, sino que en ese momento había todo un proceso legal de por medio, uno el cual no era agradable para sus padres.

Tenía que prepararse para todo, acusaciones, maltratos y hasta insultos. Todo era una posibilidad y él debía mantenerse firme la mayor parte del tiempo posible.

― ¿El desayuno fue bueno? ―preguntó SeokJin mientras tomaba el plato vacío que el menor acababa de dejar sobre la mesa, ya que el mayor había cocinado para él.

―Cocinas muy bien, hyung. Todo estaba delicioso―sonrió en grande, haciendo que el de hombros anchos se sintiera bien, porque ese era el punto de haber cocinado para el menor en un día tan complicado.

―Muchas gracias y me alegra que te haya gustado todo ¿Te sientes un poco mejor ahora? ―inclinó ligeramente la cabeza, haciendo que el menor asintiera.

―Sí, me siento mejor.

En ese momento todos sus amigos estaban reunidos en el departamento de la pareja, comiendo juntos y organizando correctamente la reunión que se daría con los padres de Taehyung, los cuales habían acordado el verse en menos de una hora.

Habían acordado el verse en un lugar público para garantizar mayor seguridad, los chicos estarían cerca en todo momento, aunque por petición de los padres, se alejarían lo suficiente como para no escuchar la conversación. Todos comprendían realmente el objetivo de aquello, pero no iban a oponerse, siempre y cuando pudieran verlos.

Taehyung no estaba tranquilo y no lo estuvo cuando se despertó temprano por la mañana, por lo que la pareja había intentado ayudarlo a calmarse y los demás chicos llegaron poco tiempo después para comer.

― ¿Te sientes listo para salir? ―escuchó la voz de Jimin detrás de él, el omega colocando una mano sobre la espalda contraria, acariciando suavemente.

―No estaré listo nunca, pero entre más rápido salgamos de esto, mejor―aseguró con una sonrisa tensa, levantándose de la silla para poder quedar al lado del rubio, tomándolo de la mano― ¿Ellos han dicho algo más?

―Sí, dijeron que llegarán al restaurante en diez minutos, pero yo les dije que saldríamos cuando tú quisieras y que ellos tenían que esperar si es necesario―le acarició los dedos al castaño, quien asintió ante sus palabras.

―Bueno, pero me gustaría terminar con esto lo más rápido posible, entonces sería bueno ir ahora―vio a Jungkook, quien estaba dándole de comer a Bam, porque se quedaría en el departamento mientras ellos salían― ¿Ustedes están listos?

―Sí, nosotros realmente no tenemos nada que preparar―contestó con una sonrisa Jungkook.

―Cierto, solamente debemos prepararnos mentalmente para no lanzarnos sobre tus padres para golpearlos―agregó Yoongi, haciendo que todos asintieran, porque, aunque sonara malo, era una realidad que no podían ignorar―Ni siquiera entiendo cómo los sigues considerando tus padres, si te han abandonado completamente.

El castaño suspiró ante aquello, porque sabía que muchas cosas de las que hacía no tenían sentido, en especial las que hacía cuando era pareja de Hanju.

―Yo tampoco entiendo, a veces. Pero creo que hoy pasarán muchas cosas y tendré claras otras, por lo que puede que las cosas cambien un poco o nada―se encogió de hombros―Igualmente estoy un poco preparado, espero que eso no cambie demasiado cuando estemos allá.

Los demás terminaron de prepararse para poder salir, se irían en la camioneta de Jungkook hasta el restaurante, el cual tenía mesas detrás del restaurante, en donde ellos se mantendrían. No querían que la plática fuera dentro del restaurante, porque sabían que, si a Taehyung le daba un ataque, le daría demasiada vergüenza mantenerse en medio de tantas personas, por lo que el exterior trasero sería el día ideal.

Taehyung vio cómo el alfa, quien ahora sí podía decir que era un alfa, se colocaba un suéter esponjoso, ya que el día estaba frío.

―Hyung―se acercó y colocó una mano sobre el brazo ajeno, sintiendo la tela suave debajo de su palma―Uh ¿Podrías hacerme un favor un poco raro? ―susurró, haciendo que el tatuado lo viera con curiosidad.

Desde el día en el que Taehyung había ayudado a su hermano menor, el mayor se sentía más encantado con la persona que era Kim Taehyung y quería conocerlo totalmente y ayudarlo en todo lo que pudiera. Entendía que tal vez su atención sobre el menor estaba siendo más afectuosa que con otras personas, siendo aquello un detalle que le llamaba la atención.

Sabía que sus sentimientos comenzaban a cambiar lentamente, en especial porque siempre había apreciado la belleza del omega, siendo ahora su personalidad algo que también lo llamaba a que su gusto por él comenzara a formarse, pero sabía que no estaba bien sentir ese tipo de cosas por Taehyung en ese momento, en donde el menor debía estar pensando en todo, menos en una pareja.

Por lo que sus sentimientos se quedarían así, secretos. No sabía si estos realmente aumentarían o se quedarían en una atracción, pero fuera lo que pasara, no se lo diría a nadie, mucho menos a Taehyung.

―Dime ¿Qué es ese favor? ―preguntó curioso mientras sonreía.

―Uh ¿Podrías prestarme algún suéter con tu olor? Es solo que, ya sabes, es algo confortante y creo que lo voy a necesitar un poco hoy―sus mejillas se sonrojaron completamente al estarle pidiendo aquello al mayor, la sonrisa contraria solamente colocándolo un poco más nervioso.

―Claro, en realidad traje dos, porque pensé que podía ser de ayuda―sonrió, sacando uno de su mochila y entregándoselo al menor, quien lo tomó con cuidado, sintiendo lo caliente de la tela.

Instintivamente, el menor acercó la prenda a su nariz, viendo al menor a los ojos.

―Gracias, prometo dártelo cuando todo termine―lo despegó de su rostro y comenzó a colocárselo, amando que la prenda era más grande y era totalmente cómoda.

El cuerpo de Jungkook era claramente más grande que el del menor, ya que era un alfa con músculos considerables y Taehyung era un omega muy delgado.

―Se te ve mejor a ti, quédatelo―asintió, el omega negando con la cabeza rápidamente mientras se abrazaba a sí mismo.

―No, hyung. Es tuyo.

―Era mío y ahora es tuyo―estableció firme―Bien, es hora de irnos.

Taehyung soltó una risita mientras tomaba su maleta cruzada pequeña, para poder salir. Se subieron a la camioneta del mayor, Jungkook yendo en el asiento del copiloto y los demás en la parte de atrás.

El restaurante también tenía postres, por lo que era lo que comerían principalmente ante la espera.

Al llegar Taehyung pudo reconocer el auto de sus padres, siendo la misma camioneta roja que siempre había odiado, ya que soltaba demasiado humo y siempre le daba tos cuando salían de casa.

―Bien, nos iremos a la otra mesa hasta que nos indiques, mientras tanto, nos mantendremos junto a la mesa―explicó Jimin, haciendo que Taehyung asintiera, porque repasaban el plan― ¿Estás seguro de que quieres ir?

―Sí, estoy seguro―sonrió, haciendo que todos se sintieran más tranquilos y pudieran avanzar.

Entraron al restaurante y le dijeron a una de las meseras que los estaban esperando, pero que los demás tomarían otra mesa cerca, por lo que avanzaron hasta donde los dos adultos estaban.

Taehyung sintió un nudo en su garganta cuando los vio, ambos tan serios y antipáticos como siempre, prefiriendo el mantenerse en sus celulares que hablar entre ellos o verse cara a cara. Siempre había odiado eso, pero siempre que les pedía que se hablaran o dejaran sus celulares, lo mandaban a callar.

Los ojos de su madre se colocaron sobre él cuando se colocó frente a la mesa, la omega sonriendo en grande, siendo algo que descolocó completamente al menor.

Pero lo que terminó de sorprenderlo totalmente, es cuando la omega se levantó de la silla con rapidez y pasó ambos brazos por el cuerpo de su hijo, dándole un abrazo, solo logrando que el menor se abrumara.

―S-Suéltame, no quiero que me abraces―se quejó, empujando el cuerpo de su madre como pudo, logrando separarla.

―Señora Kim, sabe que hay limitaciones en todo esto―dijo Jimin mientras atraía a Taehyung hacia él, porque habían dejado en claro que el contacto físico estaba de más, había sido una de las condiciones―Si es así, nos iremos.

La mujer respiró hondo y soltó el aire, sentándose nuevamente en su silla, notándose molesta.

El alfa solamente veía todo en silencio, manteniendo una mirada dura sobre su hijo, quien no se atrevía a conectar la mirada.

Su padre siempre había sido alguien muy retador, alguien que le gustaba intimidar y hacerse notar, por lo que era algo que terminaba afectando a Taehyung constantemente. Por lo que verlo otra vez después de tanto tiempo, era algo que no lo asqueaba.

―No lo haré más, pueden irse a la otra mesa―aseguró la omega, haciendo que los acompañantes vieran a Taehyung.

Dio media vuelta sobre su lugar, para que los demás puedan verlo a la cara.

―Está bien, chicos. Será rápido, no quiero quedarme mucho―susurró, haciendo que los demás asintieran, para acercarse a la mesa que quedaba cerca.

Taehyung respiró hondo y dejó salir el aire con cuidado, dando media vuelta para poder ver a sus padres y sentarse en la silla que quedaba libre, todo en silencio.

Había algunos postres en la mesa, por lo que el alfa le acercó uno a Taehyung, siendo un pastel de cerezas.

No le gustaban las cerezas.

― ¿Qué es lo que quieren hablar? ―preguntó con la vista fija en la mesa, no queriendo verlos a los ojos.

―Hijo, sigues siendo nuestro hijo―escuchó la voz de su padre, haciendo que sus manos se apretaran sobre sus rodillas, porque odiaba que se refirieran a él de esa forma después de todo lo que había pasado―Y te amamos, aunque creas que no es así.

Una risa irónica salió de su boca.

― ¿Me aman? ―un susurro fue el que llamó la atención de los adultos, Taehyung levantando la cabeza y viéndolos con incredulidad―Ustedes no me aman, aman a Hanju y por eso están aquí.

―No es cierto, estamos aquí porque te amamos y queremos lo mejor para ti―afirmó su padre mientras se enderezaba sobre su asiento, escuchándose y notándose molesto.

―Eso es así, sabemos que las cosas con Hanju pudieron ponerse turbulentas, pero sabemos que él está arrepentido y que puede cambiar―acompañó su madre, haciendo que la vista del omega se colocara sobre ella, quien se notaba irritada―Todo esto de la denuncia, la orden de restricción y la separación se ha ido de las manos, todo es innecesario y podría fácilmente arreglarse con comunicación.

El omega sentía tanto asco en ese momento, que no era capaz de soltar palabras.

―Mira el estado de tu marca, una mancha negra que se ha apoderado de tu cuello―su padre intentó tocar el lazo roto, pero el omega se apartó rápidamente, no dejando que lo tocara para nada.

El alfa bufó molesto por esa acción, pero no dijo nada.

― ¿No vieron nada sobre el caso? ―preguntó finalmente.

―Sabemos lo necesario, nosotros conocemos a Hanju y sabemos lo felices que eran cuando vivías con él―la mujer castaña intentó tomar igualmente las manos de Taehyung, pero el omega las mantenía sobre sus piernas, debajo de la mesa―Te notamos triste ahora, sabemos que la falta de tu alfa es lo que te tiene así.

―Hanju ya no es mi alfa y jamás lo volverá a ser―habló firme, sintiendo su labio inferior arder por haberlo mordido por tanto tiempo―Yo soy feliz ahora, más feliz que todos estos años en los que estuve con Hanju.

―No, estás confundido, es solamente eso―lo interrumpió su madre, tomando del suéter al menor, en la parte del brazo― ¿Es esto lo que te aleja? ¿Es porque ya encontraste a otro alfa? Esta cosa apesta a alfa.

Taehyung le dio un manotazo a su madre para que dejara de estirar el suéter de Jungkook, haciendo que la omega jadeara ofendida.

―Tengo amigos que realmente me aman, que se preocupan por mí y que realmente me brindan cosas positivas. Ustedes no tienen derecho a decirme con quién estar y menos con quien relacionarme de forma amorosa―su voz era neutra, como si de un robot se tratara, pero eso sucedía cuando estaba con sus padres, sus emociones se congelaban―No es mi alfa, pero si lo fuera, no es algo que deba importarles.

El omega de Taehyung comenzó a removerse al pensar en Jungkook, sintiendo el aroma en la prenda y siendo su consuelo en ese momento, en donde la incomodidad dominaba su cuerpo.

―Somos tus padres, lo quieras o no. Siempre vamos a tener autoridad sobre ti y eso es algo que no puedes cambiar―habló su padre con molestia, colocando una mano frente a Taehyung, para que lo viera―Tienes mi apellido, no me hagas avergonzarme aún más de habértelo dado.

Los chicos veían todo desde la distancia con atención, estando al pendiente de lo que hacían y sabiendo que las cosas estaban un poco descontroladas, en especial porque el padre de Taehyung pareciera que fuera a explotar de la molestia.

― ¿Creen que debamos intervenir? ―preguntó Jimin cuando vio al alfa colocar una mano frente a Taehyung, mientras le decía algo con notable molestia.

―Debemos dejar que Taehyung lo haga solo, él sabrá cuando ya no se sienta bien y quiera irse―dijo Yoongi, igualmente atento.

―Dudo mucho que lo que sea que le estén diciendo lo haga irse con ellos, se le nota molesto y no ha cambiado su rostro desde que se sentó. Así que no creo que debamos intervenir―habló Jungkook, quien mantenía entre sus manos una de las cajas que habían llevado, ya que habían pedido los postres para llevar.

Taehyung mantenía un celular en el bolsillo de su suéter, para grabar el audio de todo lo que estaban hablando, aquello siendo algo que los padres no sabían, claramente.

―Debe ser horrible el que ni tus padres te apoyen o que piensen en ellos antes que en su hijo a conveniencia―se quejó SeokJin, frustrado con la situación, porque él tenía una gran relación con sus padres.

―Hubieras escuchado lo que le dijo a Jimin, decía que nosotros solamente estábamos arruinando su vida. Al principio pensamos que hablaban de la vida de Taehyung, pero después dijeron que los más afectados eran ellos y Hanju―el pelirrojo apretó las manos al recordar, porque seguía dándole mucha molestia―No entendemos qué relación tienen ellos con Hanju, pero pareciera que lo quieren más que a Taehyung.

―Eso es claro, en realidad. Están de su lado y van a defenderlo en el proceso judicial, así que no es muy complicado el saber que lo prefieren antes que a Taehyungie.

Iban a seguir hablando, pero el sonido de un golpe hizo que todos se alertaran, viendo cómo Taehyung se encogía en su puesto mientras el padre se encontraba de pie a su lado, haciendo que Yoongi y Jungkook se levantaran rápidamente para ir con el menor.

Al parecer las cosas se habían complicado.

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