Pasaron tres semanas, para entonces Yugi se encontraba bastante tranquilo y despreocupado ya que durante ese lapso tiempo David no le había hecho la más mínima maldad. Aquel joven llego a pensar que David había declarado las paces después de lo del pica pica, pero dicho pensamiento estaba en lo incorrecto debido a que el ruso en el transcurso de dichas semanas había estado buscando toda la información posible sobre Yugi y su oscuro pasado con ayuda de Zane y Áster Phoenix, quienes eran los amigos del joven Romanov. Un dia común como cualquier otro David, Zane y Áster se encontraban en la habitación del actual campeón del duelo de monstruos hablando sobre una estratagema perfecta para obligar a Yugi a abandonar sus sueños.

-Muy bien amigos, el dia de hoy llevaremos a cabo el magnífico plan que ideamos -dijo el joven de ojos violetas y cabello celeste.

-¿Estás seguro de lo que haremos David? -pregunto Áster quien era un joven de cabello color plata, ojos grises y de piel blanca quien vestía con un elegante traje gris que le daba gran elegancia a su persona.

-Si Áster, ya que en verdad estoy harto de verle la cara todos los días a ese mocoso de Yugi Muto, simplemente no lo soporto –respondió un tanto molesto.

-Pues entonces manos a la obra amigos - dijo Zane serio pero seguro de sus palabras y acciones.

-Solo una última cosa, como saben este plan es arriesgado y podría ocasionarnos demasiados problemas si Yugi va de llorón con Shepard.

-Sabemos cuáles pueden ser las consecuencias y no importa lo que vaya a suceder, no te abandonaremos -respondieron ambos amigos del joven ruso, quien tenía una profunda sed de venganza.

-Amigos no quiero que estén en problemas por mi culpa, así que si Yugi va de llorón cúlpenme a mí de todo –dijo serio pero seguro de cada una de sus palabras.

-Sabes que no te abandonaremos David, somos tus cómplices y también tendríamos que pagar las consecuencias, así que ya no digas más porque no vamos a escucharte -dijeron ambos amigos del joven Romanov.

-De acuerdo, entonces ya saben cuál es el plan.

Paso una hora, para entonces eran las 7:00 de la mañana. Para entonces Yugi abandonaba su dormitorio para dirigirse a su clase correspondiente; se encontraba tranquilo ya que no había tenido problemas con David en el transcurso de la semana. Camino por uno de los pasillos que conducían a su aula hasta que de pronto Áster lo tomo por la espalda e impedía que gritara. Aquel joven se encontraba inmóvil y un poco asustado ya que algo muy en su interior le decía que terminaría en sufrimiento. Áster quien tenía a Yugi bien sujetado llevo al pequeño e inocente al baño de hombres, para que una vez dentro esté cerrará la puerta del lugar con cerrojo para que no intentara escapar. Yugi comenzó a golpear la puerta con desesperación debido a que la escena no pintaba bien, hasta que detrás suyo escucho la voz de David.

-Privet Yugi Muto -saludo en ruso a su pequeño invitado.

-¡Déjame salir inmediatamente David! –exigió el pequeño de cabello tricolor mientras lo encaraba con valentía.

-Porque debería obedecerte.

-¡Ayúdenme! –grito con toda las fuerzas que tenía mientras golpeaba la puerta.

-jajaja, ni te molestes en grita porque nadie te escuchara, no tienes esperanzas de huir de mí.

Yugi al escuchar la terrible amenaza por parte del ruso fijo su vista en Zane y Áster para tratar de persuadirlos sin éxito alguno.

-¡Déjenme salir! Como es posible que lo obedezcan, no son su sirvientes para que hagan todo lo que a él se le plazca –dijo con valentía mientras señalaba a David.

-Te equivocas Muto, David no nos obliga ni nos ha obligado a ser sus cómplices respondió Zane en nombre suyo y de Áster.

-No te molestes en darle explicaciones a ese niño patético Zane -respondió David con seriedad mientras cruzaba los brazos.

-David tiene razón, no hay porque darle explicaciones a nadie -respondió Áster para reafirmar las palabras de su amigo.

Después de aquella charla David se acercó a Yugi con odio y rudeza, lo que provoco que éste perdiera la valentía que traía consigo aquel día.

-Estoy hartó de ti y quiero que te largues de una buena vez de la academia.

-¡No me voy a ir de la academia solo porque tú lo ordenas!

-Bien Yugi, si no te iras por las buenas será por las malas –respondió con seriedad en su voz mientras que sus ojos reflejaban maldad y una gran sed de venganza, para proceder a realizar una seña con la mano para que Zane y Áster continuarán con el plan.

Zane al ver la señal de su camarada tomo a Yugi de los brazos y lo llevo directamente a una de las letrinas. Yugi al imaginar lo que estaba a punto de suceder intento zafarse sin éxito alguno, ya que el joven de cabello azul marino tenía mucho más fuerza que él.

-¡Ya déjenme! –grito con fuerza, ya que su rostro estaba enfrente del inodoro.

-¡Zakryuat'! En verdad que me tienes fastidiado pequeño mocoso –dijo el joven ruso con furia en su voz.

Después de aquellas palabras David tomo la cabeza de Yugi con su mano derecha para impulsarlo con fuerza al agua del inodoro. Pasaron diez segundos, para entonces David saco el rostro húmedo de Yugi del inodoro, lo que provoco que esté comenzara a toser levemente.

-¡Aunque me hagas un millón de veces lo que acabas de hacer, no me iré de la academia de duelos! –exclamo valerosamente.

-Vaya Muto que valentía, pero ese papel no te queda, solo eres un tonto y un estorbo en la vida de todos, eres la persona más ruin que comete error tras error además de que no eres capaz de pedir perdón –respondió con severidad y molestia en su voz.

Después de aquellas palabras David volvió a tomar la cabeza de Yugi para sumergirlo nuevamente, lo que obligó al joven de cabello tricolor a soportar la tortura de su cruel agresor. Pasaron diez segundos y David volvió a sacar al joven para dirigirle unas últimas palabras antes de retirarse de aquel lugar.

-¡Te detesto y no descansare hasta verte lejos de la academia! –dijo mientras levantaba con fuerza la cabeza de Yugi para que sus ojos lo mirarán fijamente.

Después de aquellas palabras David y compañía se retiraron de aquel lugar, dejando completamente a solas a Yugi quien se encontraba completamente empapado en aquel baño de hombres.

-Tengo que ser valiente ya que lo prometí, pero si esto continua no soportare demasiado y tendré que darme por vencido –se dijo así mismo mientras intentaba limpiarse la cara con su chaqueta.

Después de aquellas palabras de aliento abandonó aquel lugar para dirigirse al dormitorio de los Ra amarillos a darse una ducha rápida, porque aunque David lo allá metido en agua limpia era antigíenico que permaneciera de esa manera. Una vez que Yugi se encontraba en su habitación se preparó nuevamente para volver a salir de su dormitorio debido a que debía asistir a clase.

***

Mientras tanto en Magadan Rusia lo padres de David, Kaisa y Anthony se encontraban preocupados por su hijo, ya que ellos hubieran preferido que David hubiera estudiado en Tokio, pero no en neo city domino ya que aquel lugar representaba tragedia para su familia.

-Anthony estoy muy preocupada por mi David, crees que en domino lo hallan re... -dijo la madre de aquel joven con un poco de nerviosismo en su voz.

-No lo creo Kaisa, nuestro hijo es muy directo y ya nos hubiera dicho, pero si quieres confirmar escríbele una carta.

-Tienes razón, la escribiré ahora mismo.

La madre de David comenzó a escribir la carta para su hijo, ya que era necesario averiguar si había llegado con bien a la academia, esperando que cuando recibiera respuesta no obtuviera malas noticias.

***

Después de varias horas el atardecer se hizo presente con un hermosos sol radiante y una brisa agradable que invitaba a todos a pasear por los bosques de la isla de la academia, o bien a participar de un duelo amistoso con los amigos. Yugi quien estaba un poco pensativo a causa de lo que vivió aquella mañana no tenía ánimos de nada, hasta que Atticus comenzó a charlar con él.

-Si no es indiscreción ¿por qué te habías retirado del duelo de monstruos? -pregunto mientras caminaban por el bosque.

-Es un tema que prefiero no recordar Atticus.

-Perdóname no quise ser entrometido, pero es que en verdad me cuesta tanto entender cómo es que Yami Muto falleció y tu siendo el segundo mejor duelista te hayas retirado.

-Te contare solo una parte de mi pasado, aunque desde hace seis años trato de evadir ese tormento que no me deja de perseguir –respondió un tanto nostálgico a causa del dolor de los recuerdos.

-Pues soy todo oídos Yugi, tal vez no pueda ayudarte a superar el pasado pero si a darte un poco de aliento –dijo serio y con mucha tranquilidad en su voz para darle a entender a Yugi que su amistad es sincera.

-Todo comenzó el primero de noviembre de hace seis años, ese día yo herí gravemente a mi hermano mayor emocionalmente, pero fui tan cobarde que no tuve el valor de disculparme por miedo a que me respondiera con las mismas palabras que lo hirieron. Esa misma noche exactamente a las 8:30pm mi madre y mi abuelito habían ido a comprar la cena, para entonces mi madre había dejado a Yami a cargo de mí y de la casa, pero a pesar de mis sentimientos de arrepentimiento mi miedo y orgullo fueron más fuertes que mi humildad y valentía –conto mientras intentaba que sus palabras no rompieran en llanto.

-Vaya, entonces por una discusión te retiraste.

-No, aún falta más.

-Bueno, entonces continúa.

-A las nueve de la noche mi hogar fue víctima de un trágico accidente que le arrebato la vida a mi hermano, yo hubiera podido evitar su muerte si jamás lo hubiera abandonado ese día –dijo con llanto en su voz ya que al recordar la última vez que vio a Yami lo partía en mil pedazos.

-Cálmate Yugi, yo creo que en donde quiera que esté el rey de los juegos él ya te perdono y no te culpa de lo sucedido.

-Solo espero que tengas razón Atticus - respondió mientras se limpiaba con un pañuelo de tela que siempre cargaba en el bolsillo de su pantalón.

-Claro que tengo razón, oye puedo hacerte una pregunta más Yugi.

-Sí, claro Atticus.

-¿Por qué soportas todo lo que te hace David?

-Bueno, es que no se si has notado que David tiene una gran parecido a Yami, aunque hay algunas pequeñas diferencias físicas y emocionales.

-Pero esa no es razón para que te dejes hacer tantas maldades, yo sigo insistiendo que deberías reportarlo con Shepard.

-Tengo mis razones para no reportarlo Atticus, pero eso es algo confidencial.

-Como quieras amigo, si quieres seguir soportando al macabro de David ya es tu decisión.

-Tú no lo entiendes Atticus, tengo el raro presentimiento de que David es una persona generosa, amable, cariñosa, protectora y humilde pero el odio y el egoísmo de su corazón opacan su verdadera personalidad.

-Déjame ver si entendí, tú me estás diciendo que soportas todo lo que te hace David solo para recuperar la bondad que hay en él, bueno si es que tiene una.

-Sí, me hice la promesa de que descubriría cuál es su verdadera personalidad.

-Bueno, si necesitas mi ayuda te la daré, de acuerdo.

-De acuerdo.

Pasaron las horas, para entonces el anochecer se hizo presente con un viento temible; eran las 12:30 de la madrugada por lo que los duelistas de aquella academia ya se

encontraban durmiendo. Para dicha hora en una de las habitaciones de los Ra amarillos, se encontraba Yugi moviéndose en su cama con gran desesperación, al parecer estaba teniendo una pesadilla que perturbaba su tranquilidad. En el sueño se podía percibir con toda claridad un ambiente frio y hostil en donde se encontraban frente a frente los dos hermanos Muto.

-Yami, me da mucha alegría verte –dijo el joven de tierna e inocente mirada con alegría.

- A sí, pues a mí me desagrada tu presencia Yugi –dijo el joven de hermosos ojos violetas que siempre mostraban seriedad.

-Pero hermano yo...

-¡Cállate! Y no me llames hermano, crees que eres muy necesario en la vida de los demás, pues estas muy equivocado porque no vales la pena, tu solo sabes herir y asesinar a los que te quieren –respondió con furia en cada una de sus palabras mientras veía cara a cara a Yugi, quien por alguna razón recordó la mirada del joven Romanov.

-Yami yo... yo... yo soy un tonto y perdóname por haberte dejado morir, si hubiera intentado sacarte de aquel incendio tu aun seguirías con vida -dijo con tristeza en su voz mientras intentaba tomar a su hermano del hombro.

-Tienes toda la razón Yugi, tú eres el culpable de todo, tú me abandonaste, ni si quiera intentaste ayudarme – respondió molesto mientras quitaba la mano de Yugi de él.

-Perdóname, en verdad ya sé que cometí un grave error al dejarte solo cuando quedaste inconsciente.

-¡Qué los dioses te perdonen, porque yo no los hare!

En ese momento la silueta de Yami fue desvaneciéndose lentamente de aquel lugar, dejando a Yugi sollozante bajo aquel cielo oscuro. Después de aquella escena Yugi despertó de golpe de su pesadilla alterado y lleno de terror, así que sin pensar en sus acciones se levantó de la cama para mirarse en el espejo de su tocador.

-Quien debería estar en aquel cementerio tendría que haber sido yo y no Yami –dijo furiosos y con lágrimas en los ojos mientras se miraba en el espejo.

Yugi simplemente no podía soportar la pérdida de su hermano mayor, que a causa de su ira y desesperación comenzó a golpear la pared con el puño hiriéndose gravemente los nudillos.

-Porque tuve que abandonarte, porque no pude haber tenido el valor para pedirte perdón –dijo llorando mientras se acostaba nuevamente en su cama para volver a la tierra de los sueño, pero antes de cerrar sus ojos nuevamente dijo unas últimas palabras.

-No estoy seguro de por donde debería empezar para ponerle orden a este desorden en el que estoy, pero por el momento lo único que puedo hacer es continuar el juego macabro de David.

Después de aquellas palabras Yugi cerró lentamente sus ojos y en minutos volvió a quedar profundamente dormido. 

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Privet - hola.

Zakryuat' - cállate.

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Ending: Over My Head –Sum 41.

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Holiii a todos este es el siguiente capítulo, perdón la tardanza jejejeje, ya entre a trabajar y pues no había tenido tiempo. Gracias por leer y seguir esta historia no olviden votar o dejar comentario sayonara.