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— Bien la actividad es simple y de rutina, ya saben precauciones del gobierno por los eventos recientes— Aizawa miró a Midoriya, Bakugo, Todoroki, Yaoyorozu y a Kirishima— Deben atacar a estas simulaciones de estos seres humanos que se harán pasar por villanos.

Aizawa Shota señaló las simulaciones

—Las simulaciones son maniquíes de diferentes formas y tamaños, que poseen un registro de daños que son enviados aquí— alzó la tableta— Señalarán que tan graves son las heridas o traumas que dejaron, esto les ayudará a medirse en cuanto a sus ataques. Cualquier poder en exceso puede matar, recuerdenlo.

— ¡Sí, sensei!

La prueba fue sencilla, tanto que algunos comenzaron a quejarse, en especial Bakugo que renegaba de todo, por suerte solo quedo en eso.

Al avanzar el tiempo, seguía el eléctrico, se acercó calmado frente a la simulación, tenía forma de un hombre fornido y alto.

— Venga mocoso

Volteo a la derecha nervioso.

— ¿Q-Qué?

Se agarró el cabello, tratando de convencerse a sí mismo que no escucho nada, no ahora, ¡No!

Esa voz debía estar enterrada en lo más profundo de su mente como las alucinaciones, pronto su mente se encontraba infestada de voces, algunas desquiciadas, otras enfadadas y burlonas.

Se volvería loco, no aguantaría el resto del día y el siguiente con todo esto.

Se quebraría.

— ¡Eso fue un intento mediocre!, hazlo de nuevo a menos que quieras irte al agujero

— ¡Hazlo es ahora o nunca! ¡Odia y llora, mata y muere! ¡ Destruyelo todo, revuelcate en el polvo!

— Una vez más

— Maldito imbécil, ¡levántate gusano! ¿Crees que me detendré aunque estés sangrado?

La electricidad recorría su cuerpo, los flashes aumentaban con todas las voces que perforaban su cordura, haciendo que el alumbrado de la escuela comenzará a fallar, toda la electricidad que robó de los aparatos  se dirigió al fornido maniquí.

— ¿Crees que con eso podrás hacerme daño?, no me mueves nada, pequeña basura— Gritó esa odiosa voz , descargando todo su odio y resentimiento al objeto de forma humanoide. Imaginando que era aquel hombre y esa mujer que le hicieron tanto daño, que lo condenaron desde su nacimiento.

Pero...

Surgió una voz, una que sabía a quien pertenecía, a su madre adoptiva.

— ¿Estás solo? Oye, ven toma mi mano para que no te pierdas en el camino, pequeño — hablo con dulzura, ella le devolvió la conciencia.

Acaso, ¿Aquello era una señal?

Una mano cálida se poso en su mejilla acompañada de una sonrisa y el viento agitando el cabello negro de la fémina.

Paro de inmediato su ataque al enemigo inexistente.

Denki dirigió su mirada a la clase, que lo miraban asombrados, bueno casi todos (Midoriya se la pasaba murmurando emocionado) por su parte su profesor tenía una cara de desconcierto. Nadie se atrevió a decir nada durante unos minutos, ni los siguientes.

Claro, hasta que la rubia explosiva entro en acción.

— Oe, ¿Qué mierda fue eso? — exclamó Bakugo acercándose lentamente, los demás dejaron la timidez y se acercaron.

— Eso fue increíble.

— ¿Es una técnica especial?

— Está vez no hiciste corto circuito.

— ¿Ahora puedes controlar la electricidad de aparatos electrónicos?

— Hermano eso estuvo colosal.

Él alzó las manos mostrando su nerviosismo, bajo la mirada avergonzado por lo que hizo.

— Sí.

El resto de las horas fueron técnicas, para la buena fortuna del rubio, apartándose del grupo evitando sus preguntas, inconsciente despertó la preocupación de sus docentes y compañeros.

Al terminar las clases, fue el último en salir pues se había perdido en sus pensamientos de nuevo sin resolver nada de los ejercicios que encargo Aizawa.

Recorrió los pasillos de la escuela caminando hacia los dormitorios sin ánimos, al dar la vuelta por uno, se encontró con el héroe igneo.

— Endeavor

El llamado lo miro por un largo tiempo como si tratase de recordar algo, chasqueando la lengua en el proceso.

Denki sudo frío suplicando que no lo reconociera como lo había hecho él.

— Tu... Eres ese niño de ese caso. El niño Denatsu.

Mierda.

— Yo... Ahora me apellido Kaminari

El héroe frunció el seño.

— Así que a final de cuentas decidiste ser un héroe, en el mismo curso que mi hijo. No me di cuenta que eras tú, mocoso.

El festival deportivo, evento que es transmitido en vivo a nivel nacional y por internet a internacional, Endeavor nunca vio a Denki luchar contra la chica de la clase-B, solo escucho la presentación que dió Present Mic. Por lo tanto su nombre actual no significo nada para el adulto, pero si su apariencia física.

Denki asintió y apretó los puños.

— P-P-Pensé que se había olvidado.

Endeavor soltó una carcajada.

— ¿Cómo olvidar al mocoso que me electrocutó casi matando me? No me hagas reír.

— Lo siento— se disculpó en un murmullo mirando al piso.

—Por cierto debes superarlo, ese bloqueo de cortocircuito no lo tenías antes, es algo mental ¿Verdad? De niño eras más poderoso.

Él tenía razón, ese cortocircuito solo era una barrera mental que se puso por miedo de sí mismo.

— Yo...

— Es patético y lamentable, no deberías dejar que los desgraciados de tus padres te arrastren a lo que hicieron. Deja de ser un cobarde y enfrentalo, si no, mejor deja la UA y no le estorbes a Shouto.

El Todoroki siguió su camino, ignorando al de ojos dorados que solo tenía la mirada encojida junto a una postura hecha bolita con las lágrimas recorriendo su rostro.

Llorando por lo patético y estúpido que se sentía, él jugando como un niño cuando sus compañeros se esforzaban en ser los mejores héroes, él queriendo recuperar el tiempo que nunca lograría compensar de su niñez.

Debía de avanzar, pero tenía tanto miedo.

Miedo de su poder.

Miedo de su herencia.

Miedo de su sangre.

Miedo a que ya no lo vieran como un compañero.

Miedo y odio de su verdad.

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Kaminari Denki, ese fue el nombre que se le concedió después de llegar al orfanato a los ocho años, originalmente no tenía nombre sus padres ni siquiera se tomaron la molestia de darle uno, pero si un apellido que lo perseguirá por mucho tiempo.

Denatsu

El apellido del villano llamado Thunderbolt y su pareja Litium una villana. Ambos con Quirks de electricidad.

Kaminari Denki era hijo de villanos.