Título: LAZARUS I

Autora: Clumsykitty

Fandom: MCU con un pellizco de Marvel Cómics.

Parejas: bastantes, principalmente Stony, Thorki y Spideypool.

Disclaimer: Nada me pertenece aunque muera por ellos, todo es de Marvel y Mr. Lee entre otros, lo único mío es esta idea mía convertida en historia. Dicho está.

Warnings: Esta larga historia está dividida en libros que van en secuencia numérica pero no en orden de trama. Historias muy agridulces, crudas como violentas. No apta para corazones sensibles o mentes tiernas. Sobre aviso no hay engaño.

Gracias por leerme.

LIBRO V. El libro de las Despedidas.

Sentimientos.

He cometido el peor de los pecados

que un hombre puede cometer. No he sido
feliz. Que los glaciares del olvido
me arrastren y me pierdan, despiadados.

Mis padres me engendraron para el juego
arriesgado y hermoso de la vida,
para la tierra, el agua, el aire, el fuego.
Los defraudé. No fui feliz. Cumplida

no fue su joven voluntad. Mi mente
se aplicó a las simétricas porfías
del arte, que entreteje naderías.

Me legaron valor. No fui valiente.
No me abandona. Siempre está a mi lado
La sombra de haber sido un desdichado.

El Remordimiento, Jorge Luis Borges.

Deadpool no era un hombre con las palabras adecuadas para momentos como por el que estaba atravesando, así que optó por abrazar a Peter y dejar que descargara toda su ira sobre su pecho hasta que finalmente estalló en llanto quebrado, convirtiéndose después en hipos ahogados. Tony se había marchado, todos se preguntaban a dónde o el por qué. Fue Rocket quien les reveló la verdad cuando Groot le presionó. Un enfrentamiento abierto contra Myrddin Pendragón a costa de su vida con tal de acabar con esa amenaza y permitirles a los demás el poder huir tranquilos de la Tierra. Claro que Peter fue corriendo de inmediato al Quinjet para volar en dirección al cuartel, momento en el que Wade llegó para impedirlo, peleando con el adolescente para hacerle entrar en razón.

-Ya, ya, tesoro mío, nada ganas con llorar así.

-... papá... papá...

-Ha hecho lo que mejor sabe hacer, amor, salvarnos a todos.

-... no, no, no... no...

-Escucha –Wilson tomó su rostro que limpió con sus guantes- Tenemos que marcharnos ahora que podemos. La muerte de Myrddin alertará a sus pares y vendrán volando a este mundo para hacerlo trizas.

-Pero...

-Así lo hubiera querido tu padre.

Peter lloró de nuevo y Wade suspiró pensando en cómo alejarlo de aquella tristeza, tronando sus dedos al tiempo que sonreía.

-Hey, Peter, ¿quieres conocer a alguien?

-¿Eh?

El mayor giró su rostro hacia su hombro derecho detrás del cual se materializó trepando una criatura que Peter jamás había visto. Diminuta, apenas si del tamaño de un puño cerrado con cuatro brazos delgados de tres largos pero finos dedos que se aferraron al uniforme del mercenario. Piel pálida con enormes ojos que el chico juró ocupaban la mitad de su cuerpo, vivaces en color azul oscuro con brillo semejante a estrellas titilando. Tenía la cabeza redonda con cabellos flotando como humo en color blanco con una sonrisa macabra aunque tierna si ambos adjetivos podían estar unidos en la misma descripción, pues la abertura de su boca iba literalmente de oreja a oreja, mostrando unos microscópicos colmillos translúcidos.

-Te presento a Francis... bueno no es el Francis Francis que conocí pero le puse así porque su nombre real es impronunciable a la lengua humana.

-¿F-Francis?

-Sip, es lo que nosotros llamábamos un dios de la muerte. Renunció a su oficina del Hel para ser agente libre. Francis es quien me ha está diciendo todo, Peter. Y opina como yo, que debemos largarnos ya de este planeta.

-¿Por él es que sabes tantas cosas?

-Hey, también dame algo de crédito, no soy taaan tonto. Al menos no en esta historia.

Peter suspiró con una débil sonrisa, tallándose sus ojos. –Okay.

-¿Te sientes mejor?

-Sí –asintió el chico, mirando alrededor para sacar de unos estantes cercanos cosas que fue repartiendo sobre los controles, hasta que al fin dio con lo que buscaba, una caja de cartón que abrió ante la vista curiosa de Francis como del mercenario- Esto lo encontré la otra vez que salí con Hulk a buscar víveres.

-¿Qué es?

Las manos de Peter sacaron un pequeño bolso, de aquellos con un estampado fotográfico que Wade reconoció bastante bien. Su sonrisa desapareció al acto, quedándose serio. Incluso Francis le miró muy atento al ver su extraña reacción por un pequeño bolso de tela corriente ya desgastado por haber estado expuesto a la erosión en las dunas como las tormentas. Peter lo levantó otro poco más, ofreciéndolo al hombre delante de él, frunciendo su ceño al ver su negativa, optando entonces por tomar casi a la fuerza una mano rebelde donde lo colocó, cerrando sus dedos alrededor. Deadpool jaló aire, apretando sus párpados.

Fue como un viaje en el pasado, recordando esos tiempos trabajando de manera ilegal para ganar dinero que gastaba en apuestas, alcohol, sin mucho sentido hasta que un día se topó con una mujer que distaba mucho del canon típico de la damisela en problemas. Vanessa Carlysle. Dura, independiente y con un humor que podía rebasarle, lo cual ya era decir mucho. Amor a primera vista o como él solía decirlo, calentura a primera vista. No importaba. Hasta entonces fue que tuvo algo de paz, encontrando un hogar en las condiciones menos pensadas hasta que el cáncer vino a dar al traste con toda la situación. Y Vanessa jamás le abandonó, a su lado con una incondicionalidad que provocó más adelante su transformación como Deadpool.

Wade rió y luego se echó a llorar con aquel bolso barato sin su contenido original, perdido al momento del Ragnarok cayendo sobre el planeta Tierra, en primer lugar, y en segundo lugar porque él lo había abandonado de la misma forma que dejó de creer en todo cuando Vanessa desapareció junto con los millones de seres humanos asesinados por los demonios del Muspelheim. Sin embargo, cuando estaba en una nueva cruzada sin sentido, parecía que desde el pasado llegaba un saludo, un mensaje de que todo estaba bien, que encontraría la forma de solucionar el desastre porque a pesar de todo lo que él había causado, Vanessa seguía a su lado. Prácticamente mordió ese pequeño bolso, levantando su vista hacia el muchacho con los ojos más hermosos que hubiera visto, su razón para tratar de obrar un milagro.

-¿Por qué, Peter?

-Porque Vanessa fue importante para ti, y cuando encontré...

-Ella ya no está.

-Lo sé –el muchacho le sonrió, acariciando su rostro- Yo sé que ya no está, pero su recuerdo no tiene por qué perderse, Wade. Fue importante para ti, es importante para mí.

Con una risa desganada, el mercenario se irguió del suelo para besar la frente de Peter primero, seguido de sus labios, abrazándole después con Francis gorgoteando cosas ante aquel despliegue súbito de afecto humano. Las manos del mercenario acariciaron los cabellos castaños del chico, como si con ello pudiera borrarle todas las amarguras que había estado viviendo... las que todavía iba a padecer.

-No te merece. Este pútrido universo no te merece.

-Se dice que cuando menos lo merecemos, es cuando más necesitamos amor.

-Deja esas tonterías para gente más inocente, ¿quieres? –Wilson tomó aire, recuperando la compostura y guardando aquel bolso maltrecho en su cinturón con sumo cuidado- Gracias, amor.

-No fue nada. Estamos a mano... creo.

-Podría decirse, mi cielo lindo –el otro le sonrió- Hey, ¿quieres cargar a Francis?

-Sí.

El muchacho salió al fin del entre los asientos frente a los controles del Quinjet, empujando con su cadera una carpeta asomada entre las cosas que había sacado y que cayó al suelo con un rebote seco, esparciendo su contenido. Deadpool le tendió a Francis mientras recogía todo por él, no pudo evitar leer lo que varios papeles decían. Mucho era de planos y planes para los Vengadores en caso de emergencia, algunos apuntes del propio Stark como mensajes que habían sido escritos, todos provenientes de la Milano, pero había una notita que tomó entre sus dedos con el ceño fruncido.

-Peter, ¿qué es esta nota escrita con tu letra sobre un Incidente Fantasma?

-Oh –el chico parpadeó, acariciando el cabello que sintió suave de Francis quien ronroneó- Pues... no lo sé.

-Soy muy viejo para las mentiras, corazón.

-No miento, es algo que una vez encontré en los archivos de papá... Steve. Pero jamás supe de qué se trataba. Preguntarle fue la peor idea.

-¿Y eso por...?

-Se enojó mucho conmigo y me hizo jurar que nunca más cuestionaría o mencionaría eso. Jamás vi a papá de esa manera en ninguna otra circunstancia.

-¿Qué fue el Incidente Fantasma según tú?

-Pues –Peter se encogió de hombros- Solo llegué a saber que mi papá Tony estuvo involucrado y que por ese incidente perdieron el Ojo de Odín.

-"El capitán de la Milano desea ayuda en la recolección de materiales antes de partir, Peter, Señor Wilson" –interrumpió Skyfall en esos momentos.

-¿Qué tal si presentas a Francis a los demás y ayudas con eso? Terminaré de recoger aquí y los alcanzo.

-Okay.

-Francis es una dulzura, a nadie lastimará. Por eso es agente libre, recuérdales eso.

-Otra vez, okay.

Wade guiñó un ojo al muchacho quien se fue entretenido con una criatura sobrenatural cómodamente descansando entre sus manos y pecho que le hablaba como si Peter entendiera, cosa que no sucedía más toda esa charla le hizo sonreír todavía más. La sonrisa del mercenario volvió a desaparecer en cuanto estuvieron solos, volviéndose a una pantalla.

-Quiero una explicación, Sky.

-"Hice una promesa."

-Mis cojones. ¿Qué infiernos fue eso del Incidente Fantasma?

-"Seguro recuerda el tiempo en que la nueva SHIELD tuvo una temporada de clausura."

-¿Ajá?

-"Fue por el Incidente Fantasma."

-Creí que teníamos un trato, viejo. No me salgas ahora con esto.

En la pantalla apareció un video antiguo, de una cámara de vigilancia en algún sitio parecido a una fortaleza medieval. La fecha mostrada era mucho antes del inicio del Ragnarok, meses antes del nacimiento de Peter. Se vio la clásica armadura de Tony Stark estaba ahí igual que el fallecido Coronel Rhodes, ambos hablando de forma bromista cuando de pronto apareció una distorsión en el video. Una forma difusa que solo ojos agudos podrían detectar apareció de una esquina volando directo hacia donde el castaño. Acto seguido, el Hombre de Hierro comenzó a atacar a ciegas, cobrando la vida de los agentes de SHIELD cercanos que tuvieron la ingenuidad de aparecer en esos momentos, desapareciendo del encuadre con el coronel gritando por ayuda. Wade dejó caer su mandíbula.

-¡¿Qué ching...?!

-"Nunca pude averiguar la naturaleza de la entidad que atacó a Tony. El Capitán Rogers me hizo prometer nunca decir nada al respecto."

-Pues Steve acaba de desaparecer y como las deudas, tu promesa se ha ido con él. Canta.

-"Tony sufrió un episodio psicótico inexplicable que nadie pudo detener... más que Loki Laufeyson, quien pidió a cambio del favor el Ojo de Odín que Steve robó de las cámaras de SHIELD. Todo volvió a la normalidad después de eso."

-Y Peter nació después.

-"Sí."

Wilson se talló su rostro, pasando sus manos por su nuca varias veces, caminando en círculos.

-Sé que tienes alguna idea, Skyfall. Eres la mejor IA que Tony pudiera haber creado y estás más allá de una simple programación.

-"Lo que atacó a Tony quería que Loki interviniera, temo que es la misma entidad que Francis te ha mencionado como El Mensajero."

-¿Volvió loco a mi suegro para que el Jotun viniera y se llevara el Ojo de Odín?

-"También le hizo algo a Tony, pero no puedo asegurar su naturaleza. El capitán dio las órdenes, el Sargento Barnes y yo obedecimos."

-Wo, wo, wo... ahora estás hablando muy rápido. ¿Qué cosa ordenó la Capipaleta?

-"... el asesinato de cada testigo y/o involucrado en el Incidente Fantasma."

El mercenario maldijo cuanta palabra soez conocía y se inventó otras más, abriendo sus ojos completamente anonadado. Se dio en la frente, pateando al aire.

-¡Steve Rogers!

-"No me arrepiento de nada, Señor Wilson, la salud y felicidad de Tony estuvieron en juego."

-¿Por qué? ¿Por qué, Skyfall?

-"Seré sincero con usted, me parece que El Mensajero sabía algo de Tony motivo por el cual le atacó, esperando la acción de Loki, quien terminó como juguete de los Pendragón."

-¿Qué sabía, Sky? Ahí está la gallina de los huevos de oro.

-"¿Quiere mi teoría?"

-Adelante. Escupe ya.

-"Acorde a lo que Francis ha sugerido, sospecho que El Mensajero es capaz de viajar no solo por el espacio, sino por el tiempo, y ha estado manipulando aquellos eventos que favorecieron el estado actual del universo. Uno de esos eventos fue el Incidente Fantasma. Señor Wilson, creo firmemente que Tony formó parte de la vida de los Pendragón en Avalon."

-¿Exactamente cómo formó parte, mi buen amigo? ¿Fue una roca o qué? Tú y yo sabemos hasta dónde llega la línea Pendragón y el apellido Stark no figura en la genealogía.

-"Es probable... que Tony sea Excalibur."

Hubo un mortal silencio en el Quinjet con un asesino mercenario tenso de la cabeza a los pies, con una expresión mezcla de terror y furia al mismo tiempo. Tardó un par de minutos en reaccionar, pero lo hizo porque Skyfall habló una vez más.

-"Loki se ha marchado, Peter fue a buscarle con Francis."

-¡AAAHH! ¡¿POR QUÉ SIEMPRE HACEN ESO EN LOS MOMENTOS MÁS IMPORTANTES?!

Maldiciendo una vez más, Deadpool salió del Quinjet, bajando a toda velocidad y pasando de largo tanto a Sif como a Starlord quienes le informaron del escape aparente del Jotun con la persecución a pie de Peter. Ordenando que se preparan para su regreso y deteniendo a Hulk quien deseó acompañarle, Wade corrió tras el adolescente tratando de reordenar sus ideas con respecto a la información recién adquirida. No le cupo duda alguna que el Incidente Fantasma era una pieza clave en la desesperada caza de Myrddin Pendragón sobre Tony Stark, pero gracias a las acciones del Capitán América, estaba atado de manos para averiguar toda la verdad. Sin embargo, si el Hombre de Hierro era para variar la ironía, la famosa espada Excalibur, más le valía estar bien muerto porque entonces los Pendragón en Asgard iban a querer algo más que a un Jotun fugitivo.

Tercera Despedida: Peter.

-¡PETER! ¡CON UN DEMONIO!

El Mensajero era un verdadero hijo de puta, pensó Wade al alcanzar al adolescente. Tenía que sacarle de ese mundo a como diera lugar, pero no tenía idea de cómo. Sus muy atentos ojos notaron algo en la distancia, sujetando un codo del joven Stark-Rogers.

-¡¿Qué fregados piensas que estás haciendo?!

-¡Debo...! –Peter se soltó.

-¡No, nos vamos ya! ¡YA! –el mercenario estiró un brazo para tirar de vuelta de Peter.

-¡Loki!

-¡Ahora no! ¡Francis, que enciendan las naves! –ordenó con un bramido Deadpool. El diminuto dios de la muerte voló enseguida de vuelta con los demás.

-¡Wade, tengo que alcanzar a Loki! ¡No puede...!

-Puede y lo hará, me vale pito lo que le suceda. ¡A ti te tengo que proteger!

Viendo la negativa en el chico, Wade lo cargó sobre su hombro, corriendo con todas las fuerzas que tuvo hacia el Sanctum Sanctorum. No era vano su temor. Peter en su posición vio aparecer de entre las dunas, no a zombies, sino a un ejército de criaturas en armaduras oscuras con máscaras de dragón y espadas translúcidas que humeaban fuego violáceo. Pretores. Unos Pretores increíblemente veloces que les alcanzaron, rodeándoles. El muchacho no tuvo oportunidad de hacer algo, pues el mercenario lo tumbó al suelo, lanzándole a la pelea. No eran muchos, apenas una veintena más hirieron a Deadpool cuya voluntad no se menguó, abriendo un paso al cortar de tajo varios guerreros.

-¡LÁRGATE DE AQUÍ AHORA MISMO!

Peter no discutió esta vez, saliendo disparado del círculo de pelea con lágrimas en los ojos. Corrió veloz llamando a Skyfall para que trajera el Quinjet y ayudar a Wade con los Pretores. La IA le escuchó al acto, enviando la nave que desplegó la plataforma de ascenso para él sin tocar las arenas sobre las que voló. Peter se giró, jalando aire para ver la pelea y gritarle al mercenario que resistiera pero en su lugar lo único que hizo fue contener el aliento.

No había nada.

Deadpool estaba parado y tranquilo sobre las dunas, mirándole con una sonrisa quieta. No estaba herido ni tampoco había Pretores alrededor. La plataforma se cerró de golpe y fue entonces que Peter se percató que la nave donde estaba no era el Quinjet. Jadeó confundido, escuchando el inigualable sonido de motores de propulsión encendiéndose a la par que las paredes, suelo y techo de aquella nave tomaban su forma original, desapareciendo la ilusión que las había envuelto para engañar al joven que ahora sintió que la sangre le abandonaba el rostro. La voz tan querida de Skyfall sonó en el pasillo de entrada donde se encontraba.

-"Lo siento, Peter."

-NO, NO, NO... NONONONONONONONONONO SKYFALL ¡NOOOOOOOOOOOOOOO!

El Serenity hizo retumbar sus cañones en el aire, saliendo despedido a velocidad luz, estremeciendo la atmósfera que vibró uno segundos antes de volver a la calma. Wade tomó aire, sintiendo que sus ojos se humedecieron pero sonrió. Estaba hecho, había salvado a Peter. Que los Pendragón llegaran ahora, no encontrarían el botín que estaban buscando. Avalon era un refugio inexpugnable cuya ubicación únicamente la sabía Skyfall, que la había encontrado durante esos tiempos en que al joven Stark-Rogers se le ocurrió buscar aquel reino mágico perteneciente a los Pendragón. Se volvió a un costado, sacudiendo su cabeza y levantando un dedo acusador a un Jotun que se acercó a él a paso tranquilo, imitando la sonrisa de complicidad que el mercenario le ofreció.

-Gracias, Loki. Nunca hubiera podido engañar a Peter para subir a esa nave.

Por respuesta tuvo unas garras negras que se alargaron, atravesando su pecho al tiempo que un hielo mortal fue envolviendo su cuerpo hasta dejarlo completamente cubierto con tal rapidez que no pudo mover un solo músculo para defenderse. El Embustero torció aquella amistosa sonrisa que había mostrado, sacando la mano de aquél féretro congelado bien enterrado en la arena, admirando el rostro atónito de Wade. Bufó despectivo, girándose sobre sus talones para dirigirse hacia el Sanctum Sanctorum.

-Fue un placer.